Universidad de Puerto Rico - Recinto de Río Piedras Proyecto de Evaluación de Programas Académicos 2003 EL PERFIL DEL EGRESADO Punto de partida para la revisión curricular Por: Diana Rivera Viera, Ed. D. VERSION REVISADA (1ro octubre 2003) © Diana Rivera Viera, Ed. Ed. D. (septiembre 2003) EL PERFIL DEL EGRESADO: PUNTO DE PARTIDA PARA LA REVISIÓN CURRICULAR El presente trabajo tiene como propósito guiar a los programas de bachillerato que se están evaluando en: ¾ la elaboración o revisión de su perfil de egresados ¾ el análisis y la revisión de su oferta curricular ¾ la revisión de sus prontuarios conforme al perfil propuesto Los procesos de evaluación de programas: Contextualización y un poco de historia Este trabajo surgió como resultado de la asesoría que brindara a los programas de bachillerato en proceso de evaluación en el año académico 2002-2003, con el apoyo del Comité Institucional para la Evaluación de Programas Académicos (CIEPA), adscrito a la Oficina de Planificación Académica (OPA), bajo el Decanato de Asuntos Académicos del Recinto de Río Piedras. Los programas fueron: Química, Física, Matemáticas y el Programa General de la Facultad de Ciencias Naturales; Psicología, Geografía y Cooperativismo de la Facultad de Ciencias Sociales; Comunicación Pública; Finanzas, Contabilidad y Gerencia de la Facultad de Administración de Empresas; el Programa Experimental de Educación Continua a Adultos (PEECA), adscrito a la División de Educación Continua y Estudios Profesionales (DECEP); el Programa de Bachillerato y los Departamentos de Ciencias Biológicas y Ciencias Físicas de la Facultad de Estudios Generales; Español de Secundaria y Educación Industrial y Vocacional de la Facultad de Educación; y los programas de Lenguas Extranjeras y Literatura Comparada de la Facultad de Humanidades. O 1 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) La etapa en que se encuentra cada programa es distinta, según se resume en el Informe del CIEPA.1 Los equipos, compuestos por docentes y en algunos casos estudiantes activos y egresados, están inmersos en un proceso de reflexión y análisis muy estimulante. Para algunos, es la primera vez que se involucran en una tarea de esta magnitud. El apoyo y compromiso de los miembros de los equipos y del personal del CIEPA ha sido instrumental para adelantar los trabajos, según se desprende de la evaluación. Informan, además, que tienen mayor dominio de los aspectos relacionados al perfil del egresado, debido principalmente a los talleres y a la información recibida. Mencionan como dato relevante que han podido establecer la conexión entre cada aspecto del perfil y los componentes del currículo que contribuyen a lograrlo.2 Este documento trata de plasmar el proceso de reflexión, análisis y discusión que se llevó a cabo en los talleres. Si bien no puede sustituir el encuentro personal en que se atienden las necesidades, las interrogantes y la realidad de cada grupo, espero les sea útil para dirigir inicialmente los trabajos. La asesoría que ofreceremos este año (2003-2004) pondrá a prueba el documento con los programas que se inician en la evaluación y servirá para hacer las modificaciones que los participantes tengan a bien recomendar. También, quisiéramos integrar ejemplos basados en el trabajo de los programas, si éstos lo autorizan. La evaluación curricular en los programas: ¿por qué y para qué? La evaluación curricular es parte integral de la evaluación más amplia de los programas. Ésta a su vez es un componente de la evaluación institucional de nuestro Recinto, requerida por la agencia acreditadora Middle States Association (MSA) y el Consejo de Educación Superior 1 Oficina de Planificación Académica, Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras (mayo 2003). Resumen de los informes de progreso Número 5 de los programas académicos participantes en el Proyecto de Evaluación de Programas Académicos de bachillerato, CIEPA. 2 Íbid. O 2 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) (CES). Somos conscientes de que la evaluación es un campo minado por las emociones de quienes participan en ella; de sus expectativas, creencias, experiencias previas y las motivaciones que le atribuyen a quienes la solicitan. Para promover una cultura auténtica de evaluación en el Recinto de Río Piedras, necesitamos consignar claramente los objetivos, el alcance y el uso de la evaluación. Así se reduce la incertidumbre, la ansiedad y la suspicacia que provoca en algunos. Una evaluación puede tener múltiples objetivos. El Plan de Evaluación de Programas Académicos Subgraduados, preparado por la Oficina de Planificación Académica del Recinto (mayo, 2002) es un documento fundamental para ubicarse en el contexto institucional de la evaluación. El plan recoge los principios sobre los cuales se estructura la evaluación de programas en el Recinto de Río Piedras y su base reglamentaria. Esta reglamentación incluye los siguientes documentos: ¾ Certificación 93-113, CES, Enmiendas a las normas y guías para la consideración, estudio y trámite de propuestas (Junta de Síndicos) ¾ Plan Estratégico Sistémico (Presidencia) ¾ Los siguientes documentos del Recinto de Río Piedras: 1. Certificación 67, Senado Académico 1989-1990 2. Misión del Recinto Riopedrense, 1990 3. Certificación 146, Senado Académico 2000-20013 4. Nuevo Bachillerato del Recinto de Río Piedras, mayo 20014 3 4 El Senado Académico, en reunión extraordinaria celebrada el 9 de septiembre de 2003, tuvo ante su consideración el Punto Número 1 (Continuación de la discusión en torno a: Un Nuevo Bachillerato para el Recinto de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico). Mediante la Certificación 11, del 2003-04, se acordó, entre otras cosas, detener la implantación del esquema del nuevo bachillerato (Certificación 146, Senado Académico 2000-01). Debe examinarse la Certificación 11 completa para más detalles sobre el proceso de revisión curricular. Íbid. O 3 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) 5. Hacia una comunidad de aprendizaje, 1999 6. Plan de Estrategias de Acción, 1997 7. Certificación 63, Senado Académico 1990-1991, Guía para inactivar, activar, eliminar programas 8. Certificación 64, Senado evaluación de programas Académico 1989-1990, Guía 9. Plan y Guía para la Evaluación de Programas (OPA, Decanato de Asuntos Académicos, Recinto de Río Piedras) ¾ Los siguientes documentos de agencias externas: 1. Characteristics of Excellence (MSA) 2. Certificación 97-143, Licencia de Renovación UPR (CES) 3. Reglamento para Otorgar Licencia a Instituciones (CES) 4. Classification of Institutions of Higher Education, 2000 (Carnegie Foundation for the Advancement of Teaching) La meta del Decanato de Asuntos Académicos y de la OPA es "diseñar e implantar un plan de evaluación sistémica de los programas académicos de bachillerato del Recinto. Se espera que, transcurridos cinco años, el 75% de los programas haya completado su evaluación o se encuentre en proceso de completarla".5 La estructura administrativa para la implantación de la evaluación se basó en grupos de trabajo, armonizando así su concepción como proyecto abarcador y participativo. La Figura 1 ilustra la estructura que le permite a los participantes ubicarse en el esquema más amplio del Recinto.6 5 Oficina de Planificación Académica, Plan de Evaluación de Programas Académicos Subgraduados (UPR, Recinto de Río Piedras: mayo 2002), pág. 13. 6 Íbid., pág. 14. O 4 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Decanato de Asuntos Académicos Senado Académico Oficina de Planificación Académica Comité Coordinador Comite institucional de evaluación de programas académicos (CIEPA) Equipo evaluador de programas Organismos facultad Figura 1. Estructura para implantar la evaluación de programas de bachillerato. La documentación que revisamos para este trabajo, la literatura que estudiamos continuamente para los cursos de evaluación del aprendizaje que ofrecemos, junto a las experiencias de asesoría pedagógica a escuelas y universidades, confirman una tendencia general hacia la evaluación auténtica de programas y servicios en las instituciones. Sin embargo, esa concepción dista bastante de la que comparten muchos universitarios que carecen de formación pedagógica formal. El paradigma actual del aprendizaje en que los alumnos construyen el conocimiento incide en las formas de enseñar y evaluar. Los pedagogos están expuestos a estas nuevas corrientes desde hace varias décadas, pero su impacto en las instituciones de educación superior es reciente; particularmente por las exigencias de agencias acreditadoras cuyos criterios de evaluación han cambiado. El ejemplo más contundente son los criterios con énfasis en el outcomes assessment que exige se demuestre el aprendizaje estudiantil. O 5 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) El cambio se origina en las investigaciones y en otras fuerzas que recoge sucintamente la agencia acreditadora MSA. Actualmente, hay un mayor énfasis y presión para que las instituciones de educación superior demuestren su eficiencia, su efectividad y rindan cuentas por los dineros que le asigna el gobierno federal y estatal. Son el resultado de un mayor escrutinio público y gubernamental al uso de los fondos. Hemos visto desde hace algunos años cómo el Departamento de Educación Federal impuso criterios más rigurosos de progreso académico para asignar a los estudiantes la asistencia económica bajo el Título IV del Higher Education Act (HEA). La inversión que hace el gobierno en la educación es considerable y, en tiempos de estrechez, aumenta el interés porque las instituciones "demuestren que la enseñanza, la investigación y los servicios se conducen de manera costo-efectiva".7 Un ejemplo aún más dramático es el caso del National Council for Accreditation of Teacher Education (NCATE), agencia que acredita a la Facultad de Educación, cuyos criterios más recientes requieren que en un periodo próximo se demuestre la efectividad de nuestros egresados en lograr un mayor aprendizaje de sus alumnos en las escuelas del país. Pero, como señalara anteriormente, también hay nuevas tendencias en el campo de la evaluación que hacen pertinente y deseable la evaluación de resultados. El proceso de aprender se concibe hoy como una transacción compleja, en la cual el docente es un mediador; su rol más diverso le exige crear condiciones en el salón para que el aprendizaje ocurra. La visión del profesor como ente transmisor de conocimiento frente a un estudiante pasivo se superó en la pedagogía hace algún tiempo, aunque persiste en el contexto universitario. Para los pedagogos, la transformación del paradigma del aprendizaje como actividad transaccional compleja conduce lógicamente a incorporar otros enfoques instruccionales y evaluativos. 7 Middle States Commission on Higher Education, Framework for Outcomes Assessment (Pennsylvania, USA: 1996). O 6 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) En el taller del perfil del egresado (2002) observamos cómo muchos participantes comenzaron a cuestionarse la adecuacidad de sus estrategias instruccionales para desarrollar las competencias del perfil en sus alumnos. Estas reflexiones importantísimas pueden provocar cambios en la manera de enseñar y evaluar. Al elaborar el Perfil del Egresado del Programa (PEP), los profesores centran su atención en el aprendizaje estudiantil y no en los contenidos curriculares exclusivamente. Examinan más críticamente las estrategias instruccionales y sus métodos de evaluación. La evaluación curricular a partir de las metas, los objetivos y el PEP facilita el análisis lógico y coherente que conduce a oportunidades más auténticas de aprendizaje y evaluación. Ésta ha sido la experiencia con los participantes que ya están en la revisión de sus prontuarios. Aunque no es la estructura lógica, para algunos resultó más fácil elaborar las metas y los objetivos después de trabajar el PEP. Sospecho que se debe a las múltiples acepciones de estos términos, que hace más difícil su concreción. Las estrategias del taller tienen que facilitar el trabajo de los equipos. Por lo tanto, nuestro acercamiento a las actividades tiene que reconocer, valorar y utilizar las diversas maneras en que los seres humanos aprenden. Este es un principio fundamental del paradigma transaccional del aprendizaje que tratamos de modelar en el taller. Así adelantamos la evaluación curricular, a la vez que modelamos distintas estrategias para abordar la experiencia. Los universitarios necesitamos reconocer que para ser parte de una comunidad de aprendizaje tenemos que ampliar nuestro repertorio de acercamientos al aprendizaje y a su evaluación. Esta amplitud posibilita un mayor y más profundo desarrollo intelectual en nuestros alumnos. Los talleres que ofrece el Centro de Excelencia Académica son una gran oportunidad para la capacitación profesional docente. La investigación en la sala de clases y la mentoría (coaching), también, son herramientas poderosas con un valor añadido, el trabajo en equipo entre colegas. Estas alternativas se deben considerar y apoyar gerencialmente. O 7 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) En resumen, el PEP es uno de los puntos de partida más importante para la revisión curricular. El análisis del contenido, las estrategias instruccionales y las evaluativas que conforman el prontuario de los cursos se fundamentan primordialmente en el PEP. Este documento propone una serie de preguntas y ejercicios como estrategia de trabajo para que los participantes se inicien en el análisis curricular de su programa e incorporen las modificaciones que estimen pertinentes. La evidencia curricular sobre el aprendizaje estudiantil que nos requieren hoy distintas instancias de evaluación interna y externa estará disponible sin necesidad de esfuerzos adicionales si llevamos a cabo la evaluación curricular concienzudamente. Desde la perspectiva institucional, la evaluación curricular y programática permite tomar decisiones fundamentadas sobre los programas y el uso más inteligente y eficiente de los recursos humanos y fiscales disponibles. ¿Qué es la evaluación? La evaluación es un proceso recursivo8 que invita a la reflexión, el aprendizaje y la toma de decisiones. En el caso que nos ocupa, el eje central de la evaluación curricular es el aprendizaje del estudiante. A esos efectos, adoptamos la definición de Angelo.9 Assessment is an ongoing process aimed at understanding and improving student learning. It involves making our expectations explicit and public; setting appropriate criteria and high standard for learning quality; systematically gathering, analyzing, and interpreting evidence to determine how well performance matches those expectations and standards; and using the resulting information to document, explain, and improve performance. 8 A la luz del Diccionario Santillana del Español (1993), el término recursivo se “dice de lo que puede repetirse indefinidamente”. 9 Thomas A. Angelo, “Reassessing (and defining) assessment”, AAHE Bulletin (November 1995), Vol. 48, Núm. 2, págs. 7-9. O 8 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) El Perfil del Egresado del Recinto (PER) y el de cada programa de estudio (PEP) es un compromiso institucional con los estudiantes. En estos perfiles establecemos nuestras expectativas y estándares sobre las ejecutorias de los egresados. Es la expresión pública y explícita de las competencias que proponemos éstos desarrollen a través de sus estudios en nuestra institución. El perfil es el punto de referencia para determinar las experiencias que le ofreceremos e incluye las actividades, los servicios y el programa de estudios. Delinea las competencias que el estudiante debe demostrar como resultado de su transitar por los estudios de bachillerato. El currículo viene a ser el marco amplio de oportunidades de aprendizaje, recursos, estrategias y servicios que le permite a los estudiantes apropiarse de las competencias personales y profesionales que hemos definido en el PER y PEP. Frecuentemente, se utiliza el término currículo para referirse únicamente a los contenidos particulares de las disciplinas, como se observa en algunos documentos recientes del Recinto.10 La propuesta de trabajo: Niveles, preguntas y actividades Nuestro objetivo es acompañar a los docentes en la elaboración o revisión del PEP y el examen de su relación con el esquema curricular y los prontuarios. En este transitar procuramos que no se pierda de vista el aprendizaje de los estudiantes. Se presentan tres niveles, y algunas preguntas de reflexión y actividades para trabajar colectivamente. La discusión grupal debe llevar al consenso de la facultad del programa. Cada nivel subsiguiente parte del consenso anterior. Estas actividades resultaron muy dinámicas 10 Universidad de Puerto Rico, Nuevo Bachillerato para el Recinto de Río Piedras, (UPR, Recinto de Río Piedras: mayo 2001), pág. 1. Se utiliza el término currículo de manera muy restrictiva. O 9 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) y participativas. Los grupos aportan el contenido y se apropian de la evaluación. El encuentro con equipos de otras facultades enriqueció la experiencia, particularmente cuando se trabajó con los prontuarios en el tercer nivel. Partimos de la premisa que al iniciar estos ejercicios el equipo tiene aprobados, o bastante refinados en un borrador, la misión, las metas y los objetivos del programa. Para algunos, que han batallado mucho tiempo con estos documentos, les resultó más práctico involucrarse en el perfil y retomar los documentos previos más adelante. o ecint El R 1 Perfil Egresado de Bachillerato ama ro g r El P 2 M E T A S Experiencias Cursos Perfil Egresado del Programa rios ntua o r P L os 3 Actividades (Ej. Mentoría) Otras O B J E T I V O S Relación con comunidad de aprendizaje Examinar componentes que van a conformar el programa de todos los estudiantes de un programa Determinar qué competencias puede desarrollar a través de la libre selección COHERENCIA Experiencias Cursos COMPETENCIAS ¿Qué debe saber? ¿Qué debe ser capaz de hacer? ¿Qué actitudes o valores debe tener? ESTRATEGIAS INSTRUCCIONALES ¿Qué experiencias o actividades debe proveer para que desarrolle esas competencias? EVALUACION ¿Cómo debe evidenciar su aprendizaje o desarrollo? Figura 2. De la aspiración a la concreción: Tres niveles de trabajo. La segunda figura presenta los tres niveles con los que trabajaremos para elaborar y revisar los documentos sistemática y coherentemente. Ilustra la relación entre los componentes de la evaluación curricular que nos ocupa, desde el perfil del egresado del Recinto de Río Piedras (PER) hasta los elementos medulares de los prontuarios. O 10 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Existe una base de datos institucionales que provee información cuantitativa pertinente para evaluar el éxito de un programa; pero, desde el punto de vista pedagógico, la evidencia esencial del aprendizaje estudiantil está en la relación que logremos demostrar entre el perfil del egresado y cuán efectivamente nuestros ofrecimientos facilitan el desarrollo de las competencias. Perfil Egresado de Bachillerato Examinar componentes Experiencias que van a Cursos conformar el programa de todos los estudiantes de un programa Determinar qué competencias puede desarrollar a través de la libre selección Actividades (Ej. Mentoría) Otras Figura 3. Primer Nivel: El Perfil del Egresado y su bachillerato. En el primer nivel encontramos el Perfil del Egresado de Bachillerato que aparece en el documento Nuevo Bachillerato del Recinto de Río Piedras.10 La Certificación Número 11, Año 2003‐2004 del Senado Académico, detuvo la implantación del esquema del Nuevo Bachillerato y devolvió ʺla discusión de la revisión curricular a las facultades, escuelas y los diversos sectores universitarios para que, en el término de un año, sometan sus recomendaciones sobre el particular al Senado Académico…ʺ Entre las recomendaciones se solicita que se expresen en torno al perfil del egresado de la institución. Por lo tanto, 10 Como hicimos constar en la nota al calce número 3, el documento titulado Nuevo Bachillerato del Recinto de Río Piedras es el que se aprobó mediante la Certificación Número 146, Año Académico 2000-2001. En septiembre del 2003, el Senado Académico, mediante la Certificación 11 del año académico 2003-2004, acordó "detener la implantación del esquema del nuevo bachillerato aprobado por el Senado Académico el 21 de mayo de 2001, según consta en la Certificación Núm. 146, Año 20002001. O 11 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) el Perfil del Egresado del Recinto que estamos presentando se usará como un ejemplo para efecto de las actividades en este documento, toda vez que puede surgir un perfil distinto como resultado de los trabajos en las facultades que se consignan en la Certificación Número 11. Hecha esta aclaración, continuaremos utilizando el Perfil para llevar a cabo los ejercicios propuestos. Según se menciona en el documento antes citado, ʺel Perfil del Egresado expresa las metas del nuevo bachillerato del Recinto de Río Piedras comprendidas en términos de valores, actitudes, conocimientos y destrezas que deben caracterizar a nuestros egresados. Se puede concebir como un retrato del estudiante al cabo de sus estudios de bachilleratoʺ.11 Independientemente de las decisiones a las que llegue el Recinto de Río Piedras sobre el perfil del egresado, lo fundamental es que debe consignarse un Perfil para el Recinto de Río Piedras. Las competencias del Perfil del Egresado del Nuevo Bachillerato incluye las siguientes competencias12: 1. Cultive y desarrolle valores éticos, cívicos y estéticos que enriquezcan su vida y que le permitan contribuir positivamente al bienestar de nuestra sociedad. 2. Cultive y desarrolle el conocimiento de sí mismo, así como la salud integral y el buen uso del ocio. 3. Posea el conocimiento en las artes y las ciencias que le permita reflexionar críticamente sobre la naturaleza, la sociedad y el ser humano, así como sobre las tradiciones culturales de la humanidad. 11 Universidad de Puerto Rico, Nuevo Bachillerato para el Recinto de Río Piedras, (UPR, Recinto de Río Piedras: mayo 2001), pág. 2. 12 Íbid., págs. 1-8. Después de cada competencia se incluye una explicación en el documento. O 12 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) 4. Valore, critique y renueve el conocimiento, y desarrolle la capacidad para obtener, manejar y evaluar la información como parte del aprendizaje de por vida. 5. Conozca y aprecie la sociedad y la cultura puertorriqueñas con sus diversas raíces y en su continua interrelación con otras sociedades y culturas. 6. Conozca profunda y ampliamente por lo menos un campo, disciplina o área de estudios. 7. Cultive la imaginación, creatividad e iniciativa y desarrolle la aptitud emprendedora que lo capaciten para realizar proyectos de investigación, creación y aplicación del conocimiento en iniciativas de alcance económico, social y cultural. 8. Aprecie el español como vernáculo y demuestre dominio de sus aspectos oral y escrito, así como sensibilidad hacia las posibilidades comunicativas y estéticas de la lengua española. 9. Posea las destrezas lingüísticas necesarias para desempeñarse competentemente en inglés e idealmente en una tercera lengua. 10. Domine las competencias de razonamiento cuantitativo necesarias para el manejo de la información matemática y estadística. 11. Desarrolle las capacidades de interacción necesarias para la colaboración y el trabajo en equipo, tanto a nivel nacional como internacional y las destrezas de solución de problemas y toma de decisiones. 12. Conozca y utilice los sistemas y tecnologías de la información, particularmente en su campo de estudios. O 13 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Estas competencias armonizan con la misión, las metas y los objetivos del Recinto. Además, atienden las expectativas que se pueden tener en la formación de un egresado de una institución de educación superior. ∀ Primera actividad: Preguntas de reflexión El grupo debe discutir las siguientes preguntas 1. ¿Cómo vamos a diseñar las experiencias que necesitarán los estudiantes para desarrollar las competencias incluidas en el Perfil del Egresado del Recinto?13 2. ¿Cuáles de esas experiencias serán parte de los cursos en el esquema curricular del bachillerato? 3. ¿Serán parte de los cursos de educación general? ¿de los requisitos de la facultad o del programa? 4. ¿Qué competencias se atenderán a través de actividades o servicios que no son parte de los cursos? Por ejemplo, la competencia número 12 del PER señala que el egresado "conozca y utilice los sistemas y tecnologías de la información, particularmente en su campo de estudios". Esta competencia podría atenderse en algunos cursos y talleres de tecnología disponibles en distintos centros en el Recinto. Lo particular al campo de estudios se incorporaría en los ofrecimientos de la concentración. Miremos la competencia número 8 del PER: "Aprecie el español como vernáculo y demuestre dominio de sus aspectos oral y escrito, así 13 En sustitución al Perfil presentado, la Facultad puede proponer otro (Ver Certificación 11, Senado Académico 2003-04). O 14 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) como sensibilidad hacia las posibilidades comunicativas y estéticas de la lengua española". Puede requerirse que el estudiante apruebe cursos previamente identificados por el programa. También, pueden evaluarse las competencias lingüísticas del estudiante mediante exámenes y diversificar los requisitos de lenguas a partir de los niveles de ejecución. La asistencia a centros de competencias lingüísticas en el Recinto es otra opción que aumenta las alternativas disponibles. Es evidente que se necesita conocer el perfil de entrada de los estudiantes para establecer un puente entre su nivel de ejecución inicial y el esperado al concluir sus estudios. La OPA ha preparado el perfil de los estudiantes de nuevo ingreso por facultades. Sin embargo, necesitamos elaborar instrumentos que evalúen ciertas competencias más detalladamente. Hay estudios muy pertinentes preparados por profesores de inglés en las facultades de Estudios Generales y Humanidades que son de utilidad para este análisis. Perfil Egresado de Bachillerato M E T A S O B J E T I V O S Experiencias Cursos Perfil Egresado del Programa Experiencias Cursos Figura 4. Segundo Nivel: El Programa de Estudios. El PER incide en el PEP. El primero articula la aspiración de la institución para todo egresado o egresada del Recinto de Río Piedras. O 15 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) El segundo establece las competencias que deben demostrar los que egresan de nuestro programa. Un egresado de maestro en Educación Secundaria con especialidad en Historia; un egresado del Bachillerato de la Facultad de Estudios Generales o de Geografía de la Facultad de Ciencias Sociales tiene su particular perfil. Habrá competencias del perfil general del Recinto que necesitarán un énfasis y desarrollo más profundo en nuestro programa. Tomaremos como ejemplo lo relativo a las competencias lingüísticas. En el caso del vernáculo se requiere un esfuerzo institucional amplio, ya que todas las facultades expresan gran preocupación con la ejecución de los estudiantes. Para el año académico 2005-2006, la Facultad de Educación le requerirá un ensayo a todos los candidatos interesados en ingresar a sus bachilleratos. Mediante una rúbrica, se evaluarán sus ejecutorias en redacción. Simultáneamente, se diseñarán cursos o talleres que se requerirán a algunos estudiantes como parte de su programa. Estarán advertidos, desde la admisión, que antes de iniciarse en la práctica docente tendrán que demostrar un nivel de ejecución adecuada en redacción. El ensayo inicial tendrá niveles de aprobación en los cuales se entiende que mediante las oportunidades que se le ofrecerán al estudiante en el transcurso de sus estudios universitarios es razonable pensar que logrará el nivel esperado. En aquellos casos en que los resultados del ensayo no presenten esa posibilidad, la Facultad de Educación le denegará la admisión al estudiante. Este ejemplo ilustra cómo una facultad ha decidido enfrentar la brecha entre la ejecutoria estudiantil al admitirse y la esperada al egresar. Veamos la relación entre el PER y el PEP. Utilizaré como ejemplo el PEP del Programa Graduado de Educación con concentración en Educación Especial del cual formo parte. En el Perfil del Egresado Propuesto se incluye la siguiente competencia: "Se comunica O 16 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) efectivamente, tanto en la dimensión oral como escrita".14 Aunque el PER es para los estudios de bachillerato, todo graduado de esta institución necesita contar con un buen manejo del vernáculo, conforme su nivel profesional. Para nuestro programa, este asunto reviste mucha importancia y se consigna en el PEP. Como se observará más adelante, esta competencia del PEP sigue apareciendo más específicamente en los prontuarios de los cursos. También, es un criterio a considerar en la entrevista a los estudiantes para admisión. Para la admisión al Programa, también se requiere escribir un ensayo que ofrece una impresión general de la redacción del candidato. En el examen de grado, la redacción también se evalúa. Como resultado de las experiencias en las clases y la información que compartimos en las reuniones del Área de Educación Especial, utilizamos la asesoría académica para recomendarle cursos graduados en redacción a quienes lo necesitan. Esta necesidad, también, se identificó en otros programas graduados y condujo a la creación de un curso graduado de redacción en la Facultad, basado en temas potenciales de investigación. El análisis, fundamentado en nuestro PEP, dirige la revisión curricular, creando ofrecimientos y servicios nuevos para los estudiantes. El fin es asegurar que el programa le provee al estudiante una variedad de oportunidades para desarrollar las competencias propuestas en el PEP. Ese es el compromiso institucional que contraemos con nuestros estudiantes al admitirlos. A través de nuestros criterios de admisión y graduación, se hace énfasis en la importancia de las competencias, en este caso, la comunicación escrita. Elaborando el perfil del egresado del programa 14 Departamento de Estudios Graduados de Educación, Facultad de Educación, Propuesta de revisión curricular de la Maestría en Educación con concentración en Educación Especial (UPR, Recinto de Río Piedras: 2001), pág. 14. O 17 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) El perfil del egresado no es otra cosa que el retrato de las competencias que debe ser capaz de demostrar un estudiante al concluir nuestro programa de estudio. Las competencias del bachillerato, del programa o las que se incluyen en un prontuario consignan nuestras respuestas a las siguientes interrogantes. O 18 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) ∀ Segunda actividad: Preguntas de reflexión El grupo debe ponderar y contestarse las siguientes preguntas. Al concluir esta experiencia (bachillerato, programa, curso): 1. ¿Qué debe conocer este estudiante? Éstas son las competencias de conocimiento en su campo de estudio. 2. ¿Qué debe ser capaz de hacer? Éstas son las competencias de ejecución. 3. ¿Qué debe valorar, apreciar? Éstas son las competencias de actitudes y valores. Las competencias del perfil deben ser lo suficientemente específicas para presentar un cuadro del estudiante que fue parte de nuestro programa. Lo particularizado del contenido curricular se observará en los objetivos de los prontuarios más adelante. Usualmente, el perfil del egresado se inicia con una aseveración como la siguiente: Al concluir el programa de estudios, el estudiante será capaz de demostrar las siguientes competencias: Veamos algunos ejemplos tomados del PEP del citado programa.15 ¾ "Reconoce al educando como eje central para establecer prioridades y tomar decisiones en su labor educativa" (competencia valorativa). ¾ "Hace uso de la investigación y la labor creadora para propiciar cambios en el campo educativo" (competencia de ejecución). 15 Íbid., pág. 14. O 19 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) ¾ "Incorpora -crítica y creativamente- teorías, tendencias y enfoques en su práctica pedagógica" (competencia de conocimiento y ejecución). ¾ "Adopta y adapta la tecnología de manera informada para beneficio de los estudiantes" (competencia de conocimiento y de ejecución). Las competencias deben redactarse de manera que presenten claramente qué debe demostrar el estudiante para evidenciar su aprendizaje. El uso de los verbos es importante. Las competencias se orientan al aprendizaje del estudiante y, como veremos en el tercer nivel, amplían nuestro repertorio de estrategias instruccionales y de evaluación, conforme a las tendencias en la pedagogía moderna. Es en ese nivel que formularemos preguntas relacionando las competencias con las oportunidades de aprendizaje que le ofreceremos a nuestros estudiantes. Estas oportunidades se plasman en el esquema curricular y los prontuarios. M E T A S O B J E T I V O S Perfil Egresado del Programa Identifique una o dos competencias del programa a partir de las metas y objetivos Metas: Objetivos: Competencias: Se comunica efectivamente, tanto en la dimensión oral como escrita. Figura 5. Relación entre metas, objetivos y competencias del PEP. O 20 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Las metas y los objetivos del Programa ahora se traducen en el Perfil del Egresado. Si entre nuestras metas está: "capacitar profesionales idóneos para servir al país en [disciplina o área]..." entonces tenemos que plantearnos, ¿cómo es ese personal idóneo que egresa de nuestro programa en el Recinto de Río Piedras? No todo lo que se incluye en las metas y los objetivos está relacionado con los estudiantes; por lo tanto, nos corresponde examinar esos documentos y determinar cuáles se traducen en competencias del perfil. ∀ Tercera actividad: Elaborar las competencias del PEP Este es el momento para que los equipos elaboren su borrador del perfil a partir de las preguntas guías que presentamos previamente. En síntesis, tenemos que contestar: ¿Cuál es el retrato de lo que deben conocer, ser capaces de hacer y valorar los egresados de este programa? El grupo puede elaborar por lo menos una competencia de ejecución, una de conocimiento y una de actitudes como parte de la actividad grupal. Pueden, también, discutir los lineamientos generales de lo que debe contener, y dividirse para redactarlas y presentarlas al grupo en una reunión próxima. Sugerimos el uso del correo electrónico para un manejo más efectivo del tiempo. El perfil es el punto de partida más importante. Debe ser objeto de reflexión, discusión, ponderación y consenso antes de continuar con los niveles subsiguientes. Nuestra asesoría en esta etapa puede consistir en proveer retroalimentación a los borradores que se produzcan. O 21 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Perfil Egresado de Bachillerato Experiencias Cursos Perfil Egresado del Programa Identifique una o dos competencias del Perfil del Egresado de Bachillerato (PER) que, también, se incluye en el Perfil del Egresado del Programa (PEP). 8. Aprecie el español como vernáculo y demuestre dominio de sus aspectos oral y escrito, así como sensibilidad hacia las posibilidades comunicativas y estéticas de la lengua española Figura 6. Relación de las competencias del PER y el PEP. Una vez completado el PEP lo comparamos con el PER para ver qué competencias comparten. Este análisis nos ayuda a ver qué aspectos deben atenderse en los cursos del programa y en los cursos generales. La importancia que le asignamos a cada competencia debe reflejarse en la frecuencia con que se identifica en distintos cursos o experiencias. En la evaluación final del programa, del cual esta evaluación curricular es parte, será más fácil identificar dónde y cuántos recursos humanos y fiscales se necesitan para que los estudiantes tengan las oportunidades adecuadas de aprendizaje y desarrollo, como ilustramos con la competencia sobre la redacción de los estudiantes en el Programa Graduado de Educación Especial. En nuestro caso, usamos varias estrategias: ¾ Incluir la redacción como un componente de la admisión al programa. ¾ Incluir actividades específicas de redacción en cursos de la especialidad. O 22 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) ¾ Evaluar la redacción de los estudiantes en los cursos, compartir la información con los colegas y recomendarles cursos de redacción como parte del programa de estudios cuando les asesoramos académicamente. ¾ Incluir la redacción como criterio de evaluación en el examen de grado. ¾ Promover la creación de cursos de Departamento de Estudios Graduados. redacción en el ¾ Ofrecer ayuda individualizada a estudiantes. Las competencias lingüísticas y el aprecio del vernáculo son objeto de constante preocupación para casi todas las facultades.16 Como ya indicara se necesitan esfuerzos institucionales amplios para conocer las ejecutorias de los estudiantes que ingresan, establecer rutas alternas para lograr el nivel esperado y proveer varios puntos de evaluación a través de los estudios de bachillerato. Por otra parte, los programas tienen distintas expectativas sobre los niveles de ejecución aceptables y las necesidades particulares privativas de sus programas. Por ejemplo, la Facultad de Educación necesita que sus egresados tengan una formación más sólida en lenguas, que digamos un artista gráfico. La Facultad de Administración de Empresas requiere un manejo del lenguaje y estilos de redacción particulares a ciertas áreas de estudio que atienden en sus cursos medulares. Por lo tanto, el PER y el PEP nos guía en los énfasis y la atención que le daremos a distintas competencias. 16 Este asunto se discutió en casi todos los programas con los que trabajamos en el año académico 20022003. Sobre todo, se planteó la gran disparidad entre la competencia que se expresa en el PER y las ejecutorias que demuestran los estudiantes que se admiten a los programas. Muchos reconocen que hay que hacer esfuerzos institucionales generales y asignar recursos para estos fines si pretendemos lograr lo propuesto. O 23 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Concluida la elaboración del PEP, la facultad determinará cuáles son las experiencias y los cursos que componen el programa de estudios; es decir, el esquema curricular. O 24 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) ∀ Cuarta actividad: Tabla de competencias y cursos Los participantes enumerarán las competencias del perfil en la columna izquierda e indicarán en la columna derecha los cursos del programa particular que atienden a cada una de éstas. Competencias del PEP Cursos que atienden las competencias Figura 7. Formato de tabla. Recomendamos que sólo incluyan los cursos requisitos porque es a través de ellos que podemos ejercer control de las oportunidades para desarrollar las competencias del PEP. Las evidencias sobre el aprendizaje estudiantil que se requieran en una evaluación pueden documentarse sistemáticamente si los cursos están bajo nuestra tutela. A modo de ilustración, incluimos la tabla del Programa Graduado de Educación Especial.17 17 Íbid., págs. 29-30. O 25 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Competencias Perfil de la egresada y egresado 1. Propicia el desarrollo óptimo de las potencialidades y necesidades de todas las poblaciones reconociendo su dignidad y su diversidad. 2. Hace uso de la investigación y la labor creadora para propiciar cambios en el campo educativo. 3. Participa en la planificación y transformación de la política pública vigente. 4. Asume liderato en el proceso de cambio educativo en su escenario de trabajo. 5. Trabaja en equipo dentro del campo con una visión integrada del educando y de la educación. 6. Promueve el diálogo, la reflexión y el cambio mediante la comunicación efectiva, la colaboración y la consultoría en su contexto educativo. 7. Se comunica efectivamente tanto en la dimensión oral como escrita. 8. Reconoce la riqueza de los contextos familiares y comunitarios como componente esencial en la educación y facilita su incorporación al proceso educativo. 9. Adopta y adapta la tecnología de manera informada para beneficio de los estudiantes. Cursos de Educación Especial que abordan las competencias EDUC 6578, 6755, 6807, 6835, 6855, 6809, 6805, 6035, 6067 EDUC 6578, 6755, 6807, 6835, 6855, 6805, 6809, 6511-6512, 6035, 6800 EDUC 6807, 6835, 6809, 6037, 6800, 6578, 6855 EDUC 6807, 6855, 6809, 6035, 6800, 6835, 6410 EDUC 6807, 6855, 6805, 6578, 6835, 6755, 6809 EDUC 6855, 6809, 6807, 6835, 6578, 6800 EDUC 6809, 6511- 6512, 6855, 6807, 6835 EDUC 6809, 6805, 6807, 6835, 6067, 6855 EDUC 6807, 6835, 6855 Figura 8. Tabla de competencias y cursos de Educación Especial. (Fragmento tomado del documento Ejemplo: Perfil del Egresado y otros aspectos del Programa Propuesto de Maestría en Educación con centración en Educación Especial). El ejercicio nos hace conscientes de que todas las competencias se están abordando o, si por el contrario, hay alguna sin atender. Obsérvese que éstas se atienden en más de un curso. Aunque esto varía, es difícil pretender que se desarrollen con algún nivel de profundidad si sólo son objeto de trabajo en un curso o experiencia del bachillerato. Esta actividad es esencial para producir la evidencia evaluativa de un programa. En más de una ocasión nos percatamos de que en ningún curso se atendía explícitamente una competencia del perfil. Eso conduce a la discusión de cómo y dónde incorporarla y a la revisión subsiguiente de algunos prontuarios. O 26 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) 1 Perfil Egresado de Bachillerato 2 Perfil Egresado del Programa 3 Relación con comunidad de aprendizaje COMPETENCIAS COHERENCIA ESTRATEGIAS INSTRUCCIONALES EVALUACIÓN Figura 9. Tercer Nivel: Los prontuarios. Elaborada la tabla, procedemos al tercer y último nivel. Aquí trabajaremos con los prontuarios de los cursos medulares o requisitos del programa particular de estudios. En este nivel puede que incluyamos los requisitos de facultad. Si la facultad tiene un perfil de los egresados de la facultad (PEF) ya los ejercicios previos se hubiesen completado, incluyendo el análisis y la revisión de los prontuarios para los cursos requisitos de facultad. En ese caso, el programa sólo completa el ejercicio para los cursos medulares de la especialidad y todos aquellos cuyo ofrecimiento controla. Por ejemplo, si el estudiante puede optar entre tres (3) cursos disponibles hay un grado de selección, pero el curso no constituye una electiva "libre". Si existen opciones de esta naturaleza, los tres cursos se incluyen en la tabla y se analizan sus prontuarios. Este es un momento oportuno para considerar algunos principios pertinentes consignados en la publicación Hacia una comunidad de O 27 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) aprendizaje.18 Destacamos (en rojo) aquellos que sirven de base a la revisión de los prontuarios. • Estimular el uso de estrategias pedagógicas que propicien el aprendizaje y la reflexión sobre el mismo. • Apoyar programas de desarrollo continuo de los estudiantes. • Apoyar programas de desarrollo continuo de los profesores. • Integrar la investigación a los procesos de enseñanza- aprendizaje. • Facilitar el uso de los recursos del aprendizaje, incluyendo las tecnologías de información y telecomunicaciones, en los diversos escenarios de enseñanza-aprendizaje. • Estimular el vínculo entre la universidad y la comunidad no universitaria. • Desarrollar un sistema de evaluación continua. Figura 10. Principios que rigen la política de una comunidad de aprendizaje en el Recinto de Río Piedras. Estos principios deben reflejarse en los cursos. El prontuario es el documento que recoge oficialmente la experiencia de un curso. Los objetivos de cada curso tienen que guardar relación con el perfil y ser coherentes con las estrategias instruccionales y evaluativas que recoge. “Assessment is the monitoring of student learning; it is not the evaluation of professors’ teaching.” [Douglas J. Eder (1995). Assessment quality and accreditation. AAHE Conference on Assessment & Quality, Boston.] 18 Universidad de Puerto Rico, Hacia una comunidad de aprendizaje: Reflexiones y recomendaciones en torno a los procesos de enseñanza-aprendizaje en el Recinto de Río Piedras (UPR: Recinto de Río Piedras: 1999). O 28 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Hacemos un paréntesis para discutir esta aseveración que aparece en la publicación Hacia una comunidad de aprendizaje. También aparece entre los documentos sobre Avalúo y Evaluación de Programas Académicos de Douglas Eder19. Aunque coincidimos que la evaluación es la documentación del aprendizaje estudiantil, la realidad es que ésta no puede desvincularse de la evaluación de los profesores y su docencia. Ciertamente, los profesores no podemos garantizar un buen aprovechamiento estudiantil, pero la planificación de las experiencias a las que expondremos a los estudiantes y cómo los evaluamos está estrechamente vinculado con el aprendizaje estudiantil. Ésta es una de las áreas en que más capacitación necesitamos los profesores universitarios si concebimos a la institución como una comunidad de aprendizaje. El análisis y la revisión de nuestros prontuarios es el mejor punto para iniciar la transformación de la enseñanza y la evaluación del aprendizaje en la Universidad. En los ejercicios que siguen a continuación trabajaremos con tres componentes del Formato para la elaboración del prontuario de un curso20. Específicamente los componentes II.G, II.I y II.K que corresponden a los objetivos, las estrategias instruccionales y las estrategias de evaluación, respectivamente. Los objetivos del curso se expresan en términos de lo que esperamos el estudiante aprenda. Con frecuencia, los objetivos del curso se redactan en función del profesor o la profesora, o de los temas. Es decir, lo que va a hacer el profesor y el contenido temático del curso. Recomendamos que los objetivos se redacten de la misma manera que las competencias. Los objetivos son las competencias que el estudiante va a desarrollar. Se pueden comenzar con una frase como: Al concluir 19 Centro de Excelencia Académica, Avalúó y Evaluación de Programas Académicos (UPR, Recinto de Río Piedras: 2003). Se trata de una recopilación de documentos de trabajo preparados para el Instituto de Verano 2003 que ofreció el Dr. Douglas J. Eder, bajo el auspicio del Centro de Excelencia Académica del Decanato de Asuntos Académicos. 20 Universidad de Puerto Rico, Junta de Síndicos, Formato para la elaboración del prontuario de un curso [Certificación Número 130 (1999-2000)]. O 29 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) este curso, los estudiantes serán capaces de, podrán, demostrarán" o alguna frase similar. Los objetivos tienen que incluir las competencias del perfil que ya identificamos en la Figura 7 (ejemplo, Cuarta actividad: Tabla de competencias y cursos de Educación Especial, página 24). El lenguaje puede variar, como veremos en el ejemplo más adelante, pero el objetivo debe retener su esencia. Usualmente es más específico y contextualizado. Nuevamente hacemos énfasis en las preguntas que dirigen la elaboración de los objetivos del curso (las competencias del estudiante). PREGUNTAS • Al concluir esta experiencia bachillerato, programa, curso), qué debe este estudiante: 9conocer 9valorar, apreciar 9ser capaz de hacer • ¿Qué relación guardan las estrategias instruccionales con las competencias? • ¿Qué relación guardan las estrategias de avalúo con las competencias? Figura 11. Preguntas relacionadas con las competencias. El curso EDUC 6809, Evaluación auténtica del aprendizaje, es un requisito medular para los estudiantes del Programa de Maestría en Educación Especial. Lo utilizaré para ilustrar la relación entre una competencia del PER, del PEP y el prontuario de un curso. O 30 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Competencia del PER ¾ Aprecie el español como vernáculo y demuestre dominio de sus aspectos oral y escrito, así como sensibilidad hacia las posibilidades comunicativas y estéticas de la lengua española. Competencia del PEP ¾ Se comunica efectivamente, tanto en la dimensión oral como escrita. Competencias EDUC 6809 ¾ ¾ Es capaz de integrar la información obtenida a través de un proceso de evaluación en un informe que conteste las preguntas que se formuló inicialmente. Es capaz de comunicarse efectivamente, tanto oralmente como por escrito, con otros profesionales involucrados en el proceso de evaluación estudiantil y con los padres de estos. Figura 12. Ejemplo de la relación entre competencia del PER, del PEP y el prontuario de curso. Puede observarse que las competencias relacionadas al manejo del vernáculo se atienden en el curso en su contexto particular. La capacidad para comunicarse efectivamente en el campo de la educación especial trasciende los aspectos generales de una redacción apropiada. En el caso de un curso de evaluación requiere seleccionar, interpretar e integrar información de diversas fuentes en un informe con determinados requisitos de organización, coherencia, fundamentación de conclusiones y recomendaciones, y una comunicación clara y precisa para distintos lectores. Perfil Egresado del Programa Relación con comunidad COHERENCIA de aprendizaje Experiencias Cursos COMPETENCIAS ¿Qué debe saber? ¿Qué debe ser capaz de hacer? ¿Qué actitudes o valores debe tener? ESTRATEGIAS INSTRUCCIONALES ¿Qué experiencias o actividades debe proveer para que desarrolle esas competencias? EVALUACION ¿Cómo debe evidenciar su aprendizaje o desarrollo? O 31 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Figura 13. Relación del segundo y tercer nivel. ∀ Quinta actividad: Objetivos del prontuario Elabore o revise uno o dos objetivos de su prontuario a base de lo que el estudiante va a demostrar. ∀ Sexta actividad: Estrategias instruccionales Partiendo de esos objetivos, examine las estrategias instruccionales que se propone utilizar para ese o esos objetivos. ¾ ¿Qué relación guardan las estrategias instruccionales con las competencias? Éstas son preguntas pedagógicas fundamentales, porque las estrategias son una parte importante de lo que llamamos oportunidades para aprender o desarrollar las competencias. Uno de los problemas mayores con la enseñanza es que nuestros acercamientos a la enseñanza no promueven el aprendizaje que nos proponemos. Es aquí que necesitamos ampliar el conocimiento y uso de nuevas formas de enseñar. No significa que abandonemos lo que hacemos, simplemente que lo ampliemos ajustándolo a nuestros objetivos. Un caso extremo es el problema de redacción en los estudiantes. La realidad es que en el mejor de los casos, los maestros y profesores corrigen la redacción, pero rara vez enseñan cómo escribir. La escritura y la lectura están muy vinculadas. El estudiante que lee y se expone a diferentes estilos y organización de textos acumula unas experiencias que le son útiles al momento de escribir. Hay estrategias que nos capacitan para apoyar el desarrollo de la escritura en nuestros estudiantes. En la medida en que incorporemos un nivel mínimo de ayuda en más cursos podremos reducir la brecha entre las ejecutorias de los estudiantes al ingresar y egresar del bachillerato. O 32 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Regresemos al ejemplo que nos ocupa. Según se expuso en el ejemplo previo, para que un estudiante sea capaz de integrar información y preparar un informe tengo que pensar en qué experiencias y actividades voy a propiciar en la clase para que el estudiante pueda desarrollarla. Retomando la aseveración de Eder, la evaluación de mi enseñanza no se examina exclusivamente a base de lo que aprenda el estudiante, pero soy responsable de crear las condiciones y oportunidades para que el aprendizaje ocurra. Si la mayoría de mis estudiantes no están aprendiendo, estoy obligada a examinar mis estrategias de enseñanza y evaluación, y cómo contribuyen a esta situación. Algunas de las estrategias que utilizo son las siguientes: 1. Selecciono lecturas que expliquen los elementos de un buen informe. 2. Diseño ejercicios en que los estudiantes tienen que seleccionar la información que es pertinente para contestar la pregunta que condujo a la evaluación, organizar la información seleccionada y redactar colectivamente el texto del informe. 3. Presento informes reales de evaluación para que los estudiantes identifiquen los elementos del informe, tanto en su contenido como en su redacción, y los analicen críticamente usando preguntas guías. Los estudiantes resumen su análisis en clase y reciben retroalimentación de sus pares y de la profesora. 4. Efectuamos ejercicios grupales para mejorar los informes. 5. Los estudiantes entregan tareas donde redactan informes, utilizando las lecturas y los ejercicios que se hacen en clase. 6. Los estudiantes preparan el informe del caso que seleccionaron para evaluar. Pueden optar por entregar borradores para recibir mis recomendaciones y comentarios. Estos borradores O 33 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) se incluyen junto al documento final en el portafolio que entregan. ∀ Séptima actividad: Estrategias de evaluación A partir del objetivo, examine las estrategias o los instrumentos que va a utilizar para evaluar la competencia contestando la siguiente pregunta. ¾ ¿Qué relación guardan las estrategias de avalúo o evaluación con las competencias? La manera en que evaluamos afecta y, a veces, determina cómo los estudiantes estudian para el curso. Todos sabemos que a partir del primer examen (si utilizamos exámenes) los estudiantes cambian su manera de acercarse al material. Si el énfasis del profesor o de la profesora está en la memorización y en un tipo de examen particular, los estudiantes ajustan su modo de estudiar a ese énfasis o modalidad. Es necesario asegurarnos que la evidencia que recogemos del aprendizaje estudiantil en las estrategias evaluativas guarden relación con la competencia. En el ejemplo anterior, se observa que la documentación para evaluar al estudiante en esta competencia se compone de varias actividades, todas relacionadas con el objetivo de integrar información y producir un informe cuya redacción cumpla con criterios que el estudiante conoce de antemano. La evidencia requiere demostrar la competencia. Cuando hablamos de evaluación auténtica significamos que es pertinente al contenido y a las expectativas de la competencia. Un estudiante que puede contestar las preguntas de un examen sobre los elementos de un buen informe no me ha demostrado que puede integrar la información y producir un informe. Ciertamente necesita conocer los elementos, pero el conocimiento es insuficiente cuando el fin es la aplicación. Las actividades previas al informe y su evaluación me permiten aquilatar el desarrollo de la competencia en los O 34 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) estudiantes. También, me ayuda a hacer un juicio al momento de calificar su nivel de ejecución. Algunos estudiantes logran la capacitación esperada y otros no. En las estrategias de evaluación, le asignamos el peso relativo que tendrá cada actividad de evaluación. Por otra parte, soy fiel creyente de que en la evaluación del estudiante necesitamos validar tanto el proceso como el producto. Por eso le doy la oportunidad de someter sus borradores y asigno la calificación cuando entregan su trabajo final. Si un estudiante está dispuesto a invertir tiempo en hacer revisiones, esto es parte del proceso de aprendizaje. En la mayoría de los cursos que requieren adquirir competencias complejas, los estudiantes logran una aproximación al nivel de ejecución esperado. Los cursos tienen un tiempo limitado al cabo del cual tenemos que calificar. No siempre se cuenta con tiempo suficiente para ampliar las oportunidades. En algunos casos mi objetivo es que el estudiante se exponga y sea capaz de examinar su ejecución a partir de los criterios. En estos casos, la autoevaluación es tan importante como el producto. Por ejemplo, en el curso EDUC 6809, los estudiantes tienen que llevar a cabo entrevistas para recopilar información. Los resultados de éstas no son siempre los esperados, pero a través de la autoevaluación observo si puede identificar los errores que cometió e indicarme cómo lo manejaría en una próxima ocasión. Al calificar, tengo que tomar esto en cuenta porque es un indicador de su nivel de desarrollo, a pesar de que no logró el nivel esperado en la competencia. En eso radica la diferencia en la calificación entre los estudiantes en esta competencia particular. O 35 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) CURSO: COMPETENCIAS ¿Qué debe saber? ¿Qué debe ser capaz de hacer? ¿Qué actitudes o valores debe tener? _____________________ _____________________ Sean capaces de integrar la información obtenida a través de un proceso de evaluación en un informe que conteste las interrogantes que se plantearon al iniciar el proceso _____________________ Sean capaces de comunicarse efectivamente tanto oralmente como por escrito con otros profesionales involucrados en el proceso de evaluación de los estudiantes y con los padres de estos ESTRATEGIAS INSTRUCCIONALES ¿Qué experiencias o actividades debe proveer para que desarrolle esas competencias? EVALUACION ¿Cómo debe evidenciar su aprendizaje o desarrollo? Figura 14. Tercer Nivel: Elaborando las competencias, estrategias y evaluación. ∀ Octava actividad: Mirando las estrategias en el colectivo Los docentes que ofrecen un mismo curso deben reunirse. Partiendo de una competencia del prontuario examinen, amplíen o modifiquen las estrategias de enseñanza y evaluación para ésta, si es necesario compartiendo el trabajo que hicieron individualmente. Esta actividad puede obviarse si el equipo optó por hacer los ejercicios anteriores grupalmente. O 36 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Esta actividad no significa que los prontuarios serán iguales, pero deben garantizar que hay oportunidad para el desarrollo y la evaluación apropiada de las competencias del curso y que incluye las pertinentes del PEP previamente identificadas en la Figura 7 de la página 23. Creando una comunidad de aprendizaje El perfil de los estudiantes que ingresan al Recinto de Río Piedras ha cambiado y seguirá cambiando. Para lograr los objetivos que consignamos en el PER y el PEP, necesitamos ampliar el repertorio de estrategias de enseñanza y evaluación. Los estudiantes se apropian de su aprendizaje continuo si se les incorpora activamente y hacemos explícitas nuestras expectativas. Las preguntas que nos formulamos en torno a la docencia son fundamentales. En mi desarrollo profesional, he observado que cada vez dedico más tiempo a preguntarme, ¿cómo creo las condiciones para que mis estudiantes aprendan? ¿cómo hago la clase más participativa? Esto aplica tanto al salón de clases como a un taller o una conferencia. La experiencia en el aula debe ser más personalizada. Los profesores tenemos que insertarnos responsable y más activamente en la creación de una comunidad de aprendizaje en el salón de clases. La gerencia debe dar los pasos que faciliten y promuevan ese ambiente. Se requieren nuevos acercamientos y énfasis en la enseñanza, en los servicios estudiantiles y en el apoyo a la docencia. SAGA 21 es una base de datos institucionales que provee información cuantitativa pertinente y valiosa para evaluar el éxito de los programas pero, desde la perspectiva curricular, pedagógica y del llamado "outcomes assessment", la evidencia esencial, auténtica y pertinente del aprendizaje estudiantil está en la calidad de nuestros 21 Se refiere al Sistema de Apoyo Gerencial Académico-administrativo desarrollado en la Oficina de Planificación Académica del Recinto de Río Piedras como parte del Proyecto de Título V. O 37 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) cursos, sus objetivos, sus estrategias instruccionales y de evaluación. Es aquí que se documenta el aprendizaje de los estudiantes. Las agencias acreditadoras nos indican que ya es insuficiente afirmar que preparamos bien a nuestros egresados. Requieren que lo demostremos utilizando información recopilada sistemáticamente y que se utiliza para tomar decisiones informadas que resulten en cambios reales. El PEP es el punto de partida para establecer la relación entre nuestros ofrecimientos, las formas que enfrentamos la enseñanza y la evaluación. Es aquí que los programas documentan una parte sustancial de la evidencia necesaria sobre las ejecutorias estudiantiles. Confiamos en que este documento les ayude en este transitar curricular para concretar las aspiraciones del perfil en acción docente. 1 2 Perfil Nuevo Bachillerato M E T A S Experiencias Cursos O B J E T I V O S Perfil Egresado del Programa Experiencias Cursos COMPETENCIAS 3 Relación con comunidad de aprendizaje ESTRATEGIAS INSTRUCCIONALES EVALUACIÓN Figura 15. Transitando por la experiencia de la revisión curricular y la evaluación como proceso recursivo. O 38 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003) Sus sugerencias y comentarios son bienvenidos dirivera@prtc.net. O 39 © Diana Rivera Viera, Ed. D. (septiembre 2003) VERSIÓN REVISADA (1ro octubre 2003)