Obstrucción nasal en los trastornos respiratorios del sueño Nasal obstruction in sleep respiratory disorders Jorge Espinosa, MD* RESUMEN Los trastornos respiratorios del sueño tienen consecuencias importantes en la salud de los pacientes y en la calidad de vida. A largo plazo, también pueden ser generadores de problemas pulmonares y cardiovasculares severos. La obstrucción nasal es uno de los factores que empeoran este cuadro clínico y limitan el uso de posibilidades terapéuticas importantes como la presión continua de la vía aérea (C-PAP). Aquí se pretende hacer una descripción de los principales métodos para mejorar el flujo de aire de la nariz haciendo énfasis en la obstrucción producida por la incompetencia de las válvulas nasales. Palabras clave: Obstrucción nasal, manejo quirúrgico, SAHOS. ABSTRACT The sleep respiratory disorders have an important impact in patient health and their quality of life. Lately, they may produce severe pulmanary and cardiovascular problems. Nasal obstruction is one of these factors that may gets worse this clinical entity and may limits the use of important therapeutic posibilities such as the continued positive airway pressure (CPAP). In this review a description of the main methods to improve the nasal airflow is pretend. A special interest is make in the obstruction produced by the incompetence of the nasal valves. Key words: Nasal obstruction, surgical management, OSAH. Correspondencia: * Otorrinolaringólogo. Cirujano Plástico Facial. Docente de posgrado en el área de Cirugía Plástica Facial de la Universidad Militar Nueva Granada. Jorge Espinosa Av. 7# 119- 14 Cons. 211 - jorgespinosa@gmail.com Recibido: 1-VIII-2011 Aceptado: 15-VIII-2011 39(3)-Suplemento, 79-87, septiembre de 2011 Volumen 39 Número 3 septiembre de 2011 - suplemento INTRODUCCIÓN Los trastornos respiratorios del sueño pueden ser producidos por una infinidad de causas que van desde trastornos en el sistema nervioso central que alteran la arquitectura del sueño hasta factores anatómicos que obstruyen las vías respiratorias. Alergias, cambios en el peso, consumo de fármacos o alcohol y trastornos pulmonares también pueden estar implicados en este cuadro clínico. El síndrome de apnea obstructiva del sueño (SAOS) afecta a cerca del 4% de los hombres adultos y a un 2% de las mujeres adultas (7). Este síndrome se caracteriza por episodios repetitivos de obstrucción parcial o completa de la vía respiratoria superior durante el sueño llevando a una disminución de la saturación de oxígeno, a una fragmentación del sueño y a síntomas diurnos como la hipersomnia. El uso de presión positiva continua en la vía aérea (C-PAP) es uno de los principales tratamientos puesto que disminuye la obstrucción y mejora la oxigenación sanguínea y los síntomas del paciente y disminuye las complicaciones a largo plazo de la apnea obstructiva del sueño. Sin embargo, el CPAP tiene un apego pobre al tratamiento por parte de los pacientes a pesar de ser un tratamiento altamente efectivo (7). Hay que recordar que cuando el paciente se rehúsa a usar los dispositivos de CPAP, la mejoría es 0. Una cirugía de la vía aérea superior puede mejorar el apego de los pacientes al tratamiento con CPAP y disminuir la obstrucción de la vía aérea superior (7). Entre más alta la presión del CPAP, disminuye la tolerancia del paciente al dispositivo. Una cirugía multinivel en la vía aérea superior tratando nariz, paladar e hipofaringe puede disminuir la presión necesaria en el CPAP y de esta manera mejorar la adherencia al tratamiento. Cuando hay obstrucción mecánica diagnosticada, los procedimientos quirúrgicos para aliviarla se convierten en protagonistas de primer nivel. Debe evaluarse desde la nariz hasta la faringe con sumo cuidado para tratar de identificar dónde está la mayor obstrucción y en qué sitio una intervención quirúrgica tendrá más efecto en el mejoramiento de los síntomas de los trastornos respiratorios del sueño. (Tabla 1). Con mucha frecuencia el sitio donde se ubica la obstrucción de las vías respiratorias es la nariz requiriendo una intervención para mejorarla. Una intervención en la nariz puede mejorar de una manera importante la adherencia del paciente al tratamiento disminuyendo la respiración oral nocturna y la resequedad nasal y faríngea. En algunas circunstancias es posible que el beneficio de la cirugía nasal no sea mejorar directamente el SAOS, sino facilitar el apego del paciente al CPAP y de esta manera influir directamente -80- Obstrucción nasal en los trastornos respiratorios del sueño en la calidad de vida del paciente y en la disminución de las complicaciones a largo plazo (7). Tabla 1: Causas más frecuentes de obstrucción en la nariz y en la faringe relacionados con la apnea obstructiva del sueño Causas de obstrucción en trastornos respiratorios del sueño Nariz Faringe Desviación septal Hipertrofia de cornetes Rinitis alérgica Rinosinusitis crónica Insuficiencia valvular nasal externa Insuficiencia valvular nasal interna Neoplasias Trastornos de la anatomía y/o movilidad de las paredes faríngeas Trastornos del paladar blando Trastornos de las amígdalas y de los pilares amigdalinos Trastornos de la base de la lengua y de la hipofaringe Neoplasias EXAMEN El examen debe realizarse de una manera sistemática (8). El examen nasal es en su mayoría visual con un rinoscopio y lámpara frontal. La rinoscopia anterior debe realizarse ayudado con el uso de medicamentos vasoconstrictores para evaluar la arquitectura nasal sin la influencia de los cambios mucosos producidos por alergia o por cambios vasomotores. La búsqueda de desviaciones del tabique y de hipertrofia de cornetes debe ser parte del examen y debe quedar registrado en la historia clínica. No debe olvidarse el examen de la válvula nasal externa y de la válvula nasal interna, pues en muchos casos el problema obstructivo puede yacer en estos lugares. El uso de la rinomanometría en estudios de investigación provee una información importante sobre el flujo nasal (2). Es también importante el registro cuidadoso de los antecedentes de cirugías en la nariz. Después de una rinoplastia, la realización de osteotomías (13), la modificación del borde caudal de los cartílagos laterales superiores y su separación del cartílago del tabique por la resección de la giba osteocartilaginosa y el recorte de los alares pueden Acta de Otorrinolaringología & Cirugía de Cabeza y Cuello Jorge Espinosa ejercer un efecto lesivo en el flujo de aire. (Gráfica 1). Esto también puede ser empeorado cuando el paciente tiene huesos propios cortos o el tercio medio nasal estrecho. También se ha propuesto como mecanismo de la obstrucción nasal después de una cirugía de nariz la denervación, desvascularización o la fibrosis de los músculos nasales 13 (52), 11 como la que se produce en pacientes con parálisis del VII par. (Gráfica 1). suceso dentro de las que se encuentran la posibilidad de una hipertrofia de cornetes compensadora, la presencia de alergia o la sola existencia del ciclo nasal normal, incluso se ha llegado a sugerir que la sintomatología no refleja el sitio de la obstrucción, es decir, que el paciente no es capaz de identificar cuál es el lado de la nariz que respira mejor. Otra probable explicación es que el lado de mayor flujo de aire (el lado contralateral a la desviación) va a tener mayor presión negativa sobre la pared nasal y de esta manera se va a colapsar más que el lado con menor flujo respiratorio, esto basado en el principio de Bernoulli (13, 12). Lo anterior nos lleva a recalcar la importancia de evaluar la nariz completamente, puesto que en algunas ocasiones la corrección del septum va a ser insuficiente y es necesario tratar la válvula nasal. La válvula nasal a b Procerus m. Transverse nasalis m. Levator labis superioris alaeque nasi m. Alar nasalis m. Dilator naris anterior m. Depressor septi. m Orbicularis oris. m c Gráfica 1. a) estenosis valvular posoperatoria b) deformidad en “v” invertida por colapso de los cartílagos laterales superiores. c) Músculos nasales relacionados con el funcionamiento nasal y los movimientos valvulares. Desviación septal La pared lateral caudal a la apertura piriforme, que incluye la válvula nasal externa y la interna puede ser causante de la obstrucción nasal en un porcentaje importante de los pacientes (13). (Gráfica 2). El tamaño de la vía aérea no depende solo de la posición del septum nasal y del tamaño de los cornetes sino también de la estabilidad de las válvulas nasales durante la ventilación. El compromiso de la válvula nasal puede ser producido por colapso de la pared nasal lateral, de la narina, de la parte cartilaginosa del dorso nasal, de una desviación septal, de un cornete inferior hipertrófico, una punta nasal severamente caída, una columnela ancha, una desviación septal caudal, (12) o por divergencia de los pies de crura media (6). La válvula nasal interna está formada por la unión del Es claro que cuando las desviaciones septales se presentan en el área de la válvula nasal externa o interna ejercen un papel obstructivo mucho mayor que cuando estas son más posteriores. Una pequeña alteración de la forma de la válvula nasal puede llevar a disminuir el flujo de la vía respiratoria superior (hay que recordar que el área seccional de la válvula nasal es la menor de toda la vía aérea superior). En pacientes con hipertrofia severa de cornetes o degeneración polipoide de la mucosa, la cirugía de cornetes puede adicionar para la consecución de un mejor flujo de aire. La desviación septal está presente hasta en el 80% de la población (13). La septoplastia es el primer escalón de tratamiento para aliviar la obstrucción nasal. Es importante un adecuado examen de la fosa nasal puesto que en algunas ocasiones el lado de la nariz que el paciente siente obstruido es el lado contrario a donde se presenta la desviación septal. Muchas explicaciones se dan para explicar este Gráfica 2. Imagen de la pared nasal lateral donde se observa el sitio anatómico de la válvula nasal externa e interna. borde caudal de los cartílagos laterales superiores con el borde cefálico de los cartílagos alares, el borde caudal del septum nasal, la cabeza del cornete inferior y el piso de la fosa nasal. -81- Volumen 39 Número 3 septiembre de 2011 - suplemento Obstrucción nasal en los trastornos respiratorios del sueño El ángulo entre el septum cartilaginoso y el borde caudal del cartílago triangular tradicionalmente se ha descrito como de 15 grados en la nariz caucásica y un poco más obtuso en narices asiáticas o afroamericanas (10). (Gráfica 3). la pared nasal, producida por el flujo del aire (10). Es decir que las estructuras valvulares tienen una forma normal, pero su consistencia y rigidez no son suficientes y entonces se colapsan por la presión negativa dentro de la fosa nasal con el flujo inspiratorio. Las causas de la obstrucción estática de la válvula nasal interna pueden ser el desplazamiento inferomedial del cartílago alar, una apertura piriforme estrecha, un septum nasal desviado, o la hipertrofia de la cabeza del cornete inferior. Las causas estáticas de la disfunción de la válvula nasal externa también incluyen la ptosis de la punta nasal, las desviaciones septales caudales y la debilidad el cartílago alar. La desestabilización de la unión del cartílago nasal superior con el septum nasal, las sobrerresecciones del alar o el exceso de cicatriz después de una cirugía también pueden ser causas de la disfunción valvular (10). a b Gráfica 3. a) La válvula nasal interna está formada por el septum nasal, el piso de la fosa nasal, la cabeza del cornete inferior y la pared nasal lateral con la unión del cartílago lateral inferior y el superior. El ángulo entre el septum y la pared nasal lateral es de alrededor de 15 grados. b) la válvula nasal es el sitio con menor área seccional de la vía aérea. Cualquier modificación producirá un efecto importante el flujo de aire. La válvula nasal interna es el sitio de la vía aérea con menor área seccional haciendo que sea también el de mayor resistencia al flujo de aire. El área seccional de la válvula nasal es entre 55 y 83 mm cuadrados (10). De acuerdo a la ley de Poiseuille, la resistencia nasal es inversamente proporcional al radio a la cuarta potencia (resistencia = viscosidad* longitud/radio a la cuarta potencia). Es decir, que una pequeña disminución en el radio produce un incremento considerable en la resistencia y por ende en el flujo de aire. Además, de acuerdo al principio de Bernoully, a medida que la velocidad del flujo de aire aumenta, disminuye la presión en la pared nasal lateral y se produce una fuerza perpendicular al flujo del aire hacia la cavidad nasal dando como resultado una alteración de la posición de la válvula nasal. La rigidez de la válvula nasal debe ser suficiente para evitar el colapso durante la respiración en reposo y durante el ejercicio (3, 11, 10). Esta misma ley de Poiseuille es la que explica que pequeñas intervenciones en la válvula nasal tienen un efecto importante en el aumento del flujo de la nariz. La obstrucción de la válvula nasal puede ser dinámica o estática. La disfunción estática se presenta por deformidad o alteraciones esqueléticas de la cabeza del cornete, de los cartílagos alares o del septum nasal. Es decir, que existe una obstrucción mecánica fija del flujo nasal y su corrección requiere modificar la forma de alguna de las estructuras de -82- La válvula nasal externa es el espacio caudal a la válvula nasal interna, en el vestíbulo, formado por el borde caudal de la crura lateral y los tejidos blandos que la cubren, la crura media, el septum nasal, la narina y el piso nasal. (13) (Gráfica 2). En algunos estudios (13) se muestra cómo, una corrección de la incompetencia valvular externa tiene un efecto de duplicar el flujo nasal. La válvula nasal externa se puede corregir rotando caudalmente una crura lateral mal posicionada, retrodesplazando una punta sobreproyectada, colocando injertos ferulizadores en la crura lateral y reconstruyendo una crura lateral sobrerresecada en una cirugía previa. Los músculos que se relacionan con la permeabilidad de la válvula nasal externa incluyen los nasales y el dilator nariz (10-11) (Gráfica 1 c). La evaluación de la válvula nasal se hace con observación directa sin especulo nasal durante la respiración normal y durante la inspiración forzada. La piel, los cartílagos subyacentes y los cambios dinámicos de la forma son evaluados cuidadosamente. Palpando la nariz es posible determinar la fuerza de los cartílagos alares y el grosor de la piel. Se puede traccionar con el pulgar la nariz hacia arriba para examinar las narinas y las válvulas nasales externas e internas. (Gráfica 4). Un método para evaluar qué tanto la corrección de la válvula va a incrementar el flujo de aire es colocar una cureta de cerumen dentro de la nariz elevando el sitio de la válvula nasal y determinar si el paciente siente mejoría de la respiración. Hay que anotar que esta maniobra, igual que la maniobra de Cottle (traccionar la mejilla hacia lateral y determinar si esto mejora o no la función nasal) va a ser positiva en la mayoría de las personas (con o sin insuficiencia valvular). Por eso debe evaluarse con cuidado (14). (Gráficas 5 y 6). Acta de Otorrinolaringología & Cirugía de Cabeza y Cuello Jorge Espinosa nasal. También se ha descrito la inyección de rellenos en la unión del dorso con el cartílago lateral superior para aumentar la rigidez y evitar el colapso durante la inspiración (10). Gráfica 4. Con la tracción de la punta nasal hacia arriba para el examen de las narinas. Dentro de los tratamientos quirúrgicos está la colocación de injertos de espaciamiento (spreader grafts) (1) fijos al septum nasal y a los cartílagos laterales superiores. Los injertos pueden ser tomados del septum nasal o de la concha auricular. Este procedimiento puede ser realizado por vía endonasal o ayudado con una incisión trascolumnelar. Una de las claves de la técnica quirúrgica es la fijación de estos injertos con suturas para evitar el desplazamiento y la presencia de deformidades posoperatorias en el dorso nasal, este tipo de injertos también se puede usar para mejorar la laterorrinia cartilaginosa en donde actúa como relleno del lado cartilaginoso deprimido y también para mejorar la deformidad en v invertida, (10) (Gráfica 7). Gráfica 5. Examen de la válvula nasal con cureta de cerumen para determinar si hay mejoría o no del flujo con la movilización de la pared nasal lateral. a b Gráfica 6. Maniobra de Cottle: con el pulgar se tracciona la mejilla hacia lateral y se eleva la pared nasal lateral, se considera positiva si hay una mejoría en el flujo del aire. La rinomamnometría puede usarse para medir la resistencia de la vía aérea y la rinomanometría acústica puede ser usada para obtener el sitio de la obstrucción. Existen varios métodos que pueden ayudar a mejorar la válvula nasal que incluso pueden llegar a duplicar el flujo nasal después de la corrección de su insuficiencia. (13). Algunos métodos no quirúrgicos como son los dilatadores nasales valvulares (Breathe-Right strips, CNS Inc., Minneapolis, Minnesota) que funcionan adhiriéndose a la piel y traccionándola en el sitio de la válvula para aumentar el flujo c Gráfica 7. a) Injertos espaciadores entre el cartílago septal y los cartílagos laterales superiores; b) la fijación de los injertos de espaciamiento es fundamental para evitar desplazamiento de los mismos; c) fotografía intraquirúrgica que muestra cartílagos espaciadores a cada lado del septum fijos con agujas hipodérmicas mientras se suturan para evitar su movilización. -83- Volumen 39 Número 3 septiembre de 2011 - suplemento La colocación de suturas de suspensión desde el reborde orbitario hasta el cartílago lateral inferior y/o superior también ha sido descrita como técnica para mejorar la insuficiencia valvular (10). Para esto se realiza una incisión en la piel a nivel de reborde orbitario o trasconjuntival y se asegura una sutura al periostio. Esta sutura se pasa hasta el área de la válvula tunelizándola por debajo de la piel y del smas, se ancla el sitio del colapso de la válvula y se devuelve por la misma vía para anudarla a nivel del reborde orbitario y se cierra la piel (15, 6). (Gráfica 8). Obstrucción nasal en los trastornos respiratorios del sueño El uso de injertos o implantes de soporte también ayudan a soportar las paredes cartilaginosas de la válvula pues de colocan sobre el septum nasal y por debajo de la unión entre el cartílago alar y el cartílago lateral superior (16). (Gráfica 10). Gráfica 10. Injertos de soporte colocados sobre el septum nasal y por debajo del reborde cefálico de los alares y de los cartílagos laterales superiores. Gráfica 8. Gráfica que ilustra la colocación de suturas de suspensión desde el reborde orbitario para elevar la pared nasal lateral y aumentar el flujo de aire trasnasal. También se pueden usar suturas que unen la cara dorsal de los cartílagos nasales superiores el uno al otro soportándose en el dorso nasal y evitando que los cartílagos se colapsen con la inspiración (10). (Gráfica 9). El injerto en mariposa se coloca por encima del septum y de los cartílagos triangulares fijándose a los mismos con suturas para evitar su colapso con la inspiración (17). Como este injerto es colocado sobre el septum puede generar deformidades en el dorso si no se coloca adecuadamente. (Gráfica 11). a Gráfica 11. Injertos de mariposa colocados sobre el septum nasal, de los cartílagos laterales superiores y de los alares. b Gráfica 9. a) Cartílagos alares con pobre soporte colapsados por la inspiración. b) después de la colocación de templar la sutura se elevan aumentando el área de la válvula nasal. -84- Algunos autores hablan de la resección de 2 a 3 mm del borde caudal de los cartílagos laterales superiores y del tratamiento con radiofrecuencia de los tejidos blandos de la apertura piriforme en el afán de conseguir que la cicatrización Acta de Otorrinolaringología & Cirugía de Cabeza y Cuello Jorge Espinosa de esta área haga más rígida la válvula e impida el colapso durante al inspiración (4, 9). (Gráfica 12). a) b) c) d) Gráfica 12. Resección del borde caudal de los cartílagos laterales superiores. Dentro de las opciones quirúrgicas para manejar el área de la válvula nasal externa es el uso de injertos ferulizadores de los cartílagos laterales inferiores (batten) (10). Este injerto se cola en un bolsillo sobre el cartílago alar en el sitio de mayor colapso inspiratorio y se soporta en la apertura piriforme, y luego se sutura a la crura lateral subyacente para aumentar la rigidez del cartílago y evitar el colapso inspiratorio (3). También se puede colocar un injerto ferulizador de la crura lateral por debajo de la crura, entre esta y la mucosa nasal con el objetivo de enderezar una cura lateral convexa hacia la fosa nasal, y mejorar el soporte (10). (Gráfica 13). Gráfica 14. a) Crura lateral paradójica con la convexidad hacia la luz nasal disminuyendo el paso de aire por la válvula nasal; b) recorte de la crura lateral; c) inversión de la curvatura de la crura; d) sutura de la crura lateral con la convexidad hacia la luz nasal. Otro de los injertos que se pueden utilizar es el injerto de soporte de la pared lateral. Este se coloca por encima del borde caudal de los cartílagos laterales superiores y por encima del borde cefálico de los cartílagos nasales inferiores de tal manera que se impide el colapso con la inspiración. (Gráfica 15). Gráfica 13. Injertos ferulizadores de la crura lateral. a) Por encima de la crura, b) por debajo de la crura entre el cartílago de la misma y la mucosa. En algunas ocasiones la crura lateral tiene invertida su curvatura haciéndose prominente hacia la luz nasal y no hacia la parte exterior como es usual, esto se conoce como crura lateral paradójica y se puede corregir cortando la crura lateral e invirtiéndola y suturándola de nuevo (10). (Gráfica 14). Gráfica 15. Injerto de soporte de la pared lateral. -85- Volumen 39 Número 3 septiembre de 2011 - suplemento Obstrucción nasal en los trastornos respiratorios del sueño Si la crura lateral de los cartílagos laterales inferiores está ubicada muy cefálicamente, la carencia de soporte de la pared lateral facilitará el colapso con la inspiración. Una de las formas de corregir esto es rotando caudalmente la crura lateral para aumentar la rigidez de la válvula nasal facilitar el flujo de aire nasal. (Gráfica 16). CONCLUSIÓN En los trastornos respiratorios del sueño, el examen de la vía respiratoria es de primordial importancia. La identificación de los sitios de obstrucción es el primer paso para plantear un plan de tratamiento lógico y ordenado. La nariz es un órgano complejo en donde con mucha frecuencia se encuentra la obstrucción. La evaluación de la función nasal no se debe limitar solo al examen de los cornetes y del septum, las válvulas nasales deben ser examinadas cuidadosamente. Una vez identificado el sitio de la obstrucción nasal se debe corregir con una de las múltiples técnicas existentes. Aun si la cirugía para mejorar la obstrucción nasal no es curativa para el SAOS, la mejoría del flujo incide directamente en la tolerancia del paciente a los dispositivos de CPAP disminuyendo los síntomas y las complicaciones a largo plazo. a) Gráfica 16. a) Gráfica donde se observa la posición cefálica de las cruras laterales de los cartílagos nasales inferiores afectando el soporte de la pared nasal lateral durante la inspiración; b) después de reinsertar las cruras laterales más inferiormente se obtiene mayor soporte de las válvulas nasales. Una de las formas de mejorar de una manera considerable el soporte de la válvula nasal externa e interna es la utilización del injerto Pedroza o de alas de gaviota. Con injerto de concha auricular se fabrican dos cartílagos similares a los cartílagos alares y se colocan sobre los cartílagos originales de la punta nasal. Con esta técnica se puede obtener el mismo efecto de la ferulización de las cruras laterales de los cartílagos laterales inferiores y recuperar el ángulo de la válvula nasal. Se puede usar en reconstrucción nasal o septorrinoplastia secundaria o en cirugía de nariz en pacientes con cartílagos alares con pobre rigidez y soporte. (Gráfica 17). Gráfica 17. a) Se observa en la gráfica la colocación de los nuevos cartílagos de la punta nasal para aumentar el soporte de la válvula y reconstruir la punta nasal; b) fotografía de una paciente con deformidad de la punta y estenosis valvular después de dos cirugías de nariz; c) fotografía de la misma paciente 2 meses después de reconstrucción de la punta nasal con el injerto Pedroza de alas de gaviota. -86- Agradecimiento al señor Alfredo Orjuela, ilustrador. b) BIBLIOGRAFÍA 1. Sheen JH. Spreader graft: a method of reconstructing the roof of the middle nasal vault following rhinoplasty. Plast Reconstr Surg. 1984; 73: 230-239. 2. Ricci E, Palonta F. Role of nasal valve in the surgically corrected nasal respiratory obstruction: evaluation through rhinomanometry. American Journal of Rhinology. 2001 Sep-Oct; 15 (5): 307-310. 3. Paccoci P, Di Peco V. Septal cartilage graft for nasal valve incompetence associated with deviated septum. American Journal of Rhinology. 2007 oct; 51 (5): 622-625. 4. Dolan R. Minimally invasive nasal valve repair. Arch Otolaryngol Head Neck Surg. 2010 mar; 136 (3): 292-295. 5. Apaydin F. Nasal valve surgery. Facial Plastic Surgery. 2011; 27 (2). 6. Fisher H, Gubish W. Nasal valves -importance and surgical devices. Facial Plastic Sur. 2006; 22 (4): 266-280. 7. Bican A, Kahraman A. What is the efficacy of nasal surgery in patients with obstructive sleep apnea syndrome? Journal of Craniofacial Sur. 2010 nov; 21 (6): 1801-1806. 8. Fattahi T. Internal nasal valve: significance in nasal airflow. Fattahi T. J Oralmaxillofac Sur. 2008; 66: 1921-1926. 9. Kantas I, Balatsouras D. Management of inner nasal valve insufficiency. J Otolaryngology Head y Neck Surgery, 2008; 37 (2): 212-218. 10. Lee J, White M, Constantinides M. Surgical and nosurgical treatments of nasal valves. Otolaryngol Clin N Am. 2009; 42: 495-511. 11. Aksoy F, Veyseller B. Role of nasal muscles in nasal valve collapse. Otholaryngology and Head and Neck Surgery, 2010; 142: 365-369. 12. Rhee J, Weaber E. Clinical consensus statement: diagnosis and management of nasal valve compromise. Otholaryngology and Head and Neck Surgery. 2010; 143: 48-59. 13. Constantian M, Clardy B. The relative importance of septal anad nasal valvular surgery inorrecting airway obstruction in primary and Acta de Otorrinolaringología & Cirugía de Cabeza y Cuello Jorge Espinosa 14. 15. secondary rhinoplasty. Plastic and Reconstructive Surgery. 1996 jul; 98(1): 38-54. 16. Guyuron B, Michelow BJ, Englebardt C. Upper lateral splay, graft. Plast Reconstr Surg. 1998; 102: 2169–2177. Toriumi D. the relative importance of septal and nasal valvular surgery inorrecting airway obstruction in primary and secondary rhinoplasty (discussion). Plastic and Reconstructive Surgery. 1996 jul; 98 (1): 55-58. 17. Clark JM, Cook TA. The ‘butterfly’ graft in functional secondary rhinoplasty. Laryngoscope. 2002; 112: 1917-1925. 18. Pedroza F. A 20 years review of the “new domes” technique for refining the drooping nasal tip. Arch Facial Plast Surg. 2002 july-sep; 4: 157-163. Soler Z, Ronsethal E. Immediate valve reconstruction after facial nerve resection. Arch Facial Plast Surg. 2008; 10 (5): 312-315. -87- Volumen 39 Número 3 septiembre de 2011 - suplemento -88- Obstrucción nasal en los trastornos respiratorios del sueño