Senado de la Nación Secretaria Parlamentaria Dirección General de Publicaciones (S-0764/12) PROYECTO DE COMUNICACIÓN El Senado de la Nación Solicita al Poder Ejecutivo, a través de los organismos que corresponda, declare Espacio de Interés para la Conservación de la Biodiversidad (ENIC) al predio de dominio privado de la Nación denominado “Complejo Turístico Ascochinga”, bajo uso de la Guarnición Aérea Córdoba, en los términos establecidos en el Convenio Marco de Cooperación N° 100/07 suscripto por el Ministerio de Defensa y la Administración de Parques Nacionales. Norma Morandini. FUNDAMENTOS Señor Presidente: El 14 de mayo de 2007 el Ministerio de Defensa celebró un convenio de cooperación con la Administración de Parques Nacionales (APN) en el cual se propone ".... relevar e identificar los sitios de interés para la conservación de la biodiversidad (ENIC), en las áreas marinas y tierras bajo jurisdicción federal, pertenecientes al dominio privado de la Nación y asignadas en uso a la administración de las FFAA a fin de propiciar nuevos espacios protegidos sin que su formulación necesariamente altere sus condiciones de dominio ni su afectación originaria, y bajo condiciones de cooperación y coordinación que las partes acordarán para cada proyecto en particular". Cada una de estas áreas queda a cargo de un comité conjunto, con un plan de manejo y otro estratégico, no sólo para la utilización de los recursos sino también para el uso militar y el público. Ese Convenio tiene su origen en los compromisos internacionales asumidos por nuestro país en materia ambiental. En el año 1994 la Argentina aprobó mediante la Ley 24375 el Convenio sobre la Diversidad Biológica, que en su artículo 8 establece: "Cada Parte Contratante, en la medida de lo posible y según proceda: a) Establecerá un sistema de áreas protegidas o áreas donde haya que tomar medidas especiales para conservar la diversidad biológica; b) Cuando sea necesario, elaborará directrices para la selección, el establecimiento y la ordenación de áreas protegidas o áreas donde haya que tomar medidas especiales para conservar la diversidad biológica; c) Reglamentará o administrará los recursos biológicos importantes para la conservación de la diversidad biológica, ya sea dentro o fuera de las áreas protegidas, para garantizar su conservación y utilización sostenible." Asimismo, como miembro de Naciones Unidas, nuestro país también suscribió la "Declaración del Milenio", que establece ocho objetivos de desarrollo para el período 2000-2015 en materia de reducción de la pobreza, educación, salud y protección del ambiente. El objetivo 7 dispone: "Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente". Y en la meta 9: "Incorporar los principios del desarrollo sostenible en las políticas y los programas nacionales e invertir la pérdida de recursos del medio ambiente", cuyo indicador número 26 es "la relación entre zonas protegidas para mantener la diversidad biológica y la superficie total de cada país". Argentina construyó los indicadores en conjunto con el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) en el marco del compromiso asumido en la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sostenible (Johannesburgo 2002) para evaluar los progresos alcanzados en esta materia. Al suscribir la Convención de Biodiversidad, Argentina se comprometió a alcanzar para el 2015 un 10% de su territorio protegido, pero es necesario seguir incorporando predios toda vez que aún no se ha cubierto el 7 % del territorio con algún grado de protección ambiental. Los objetivos y lineamientos generales del convenio firmado por el Ministerio de Defensa y la Administración de Parques Nacionales han sido promovidos por reconocidos expertos en la materia y resultan tan significativos para la preservación de nuestros hábitats naturales que hemos presentado un proyecto de ley para otorgarle mayor jerarquía jurídica y así garantizar su autonomía de la voluntad política cuando se retrae de sus propios objetivos y trunca, por diferentes razones, procesos que requieren continuidad y estabilidad para ser realmente efectivos. Consideramos, en nuestra iniciativa, la necesidad de incorporar las tierras que cumplan con las características mencionadas a mejores prácticas de manejo de los recursos, a su planificación y estructuración como áreas protegidas y que se transfiera al dominio público las superficies que deban retirarse del mercado inmobiliario como consecuencia del valor superior de los recursos que allí se localizan. En tanto no se ha debatido aún el régimen jurídico propuesto y estando en vigencia el Convenio N° 100/07 corresponde solicitar al Poder Ejecutivo la incorporación de áreas que, por sus características, deban ser consideradas como un nuevo Espacio Natural de Interés para la Conservación de la Biodiversidad (ENIC), tal como lo hicimos en el año 2007 al requerir la inclusión del predio que ocupa el Tercer Cuerpo de Ejército, finalmente declarado “Reserva Natural Militar” en 2009. En el caso del predio bajo uso de la Guarnición Aérea Córdoba, conocido como “Complejo Turístico Ascochinga”, se trata de una superficie es de 3457 ha -50ª -93d -1189m2, localizado en la Provincia de Córdoba - Departamento Colón - Pedanía San Vicente, sobre el faldeo este y norte del cordón de las Sierras Chicas entre las Rutas Provinciales N° E53 (al este) y E66 (al norte) y las estancias “Cárcano”, “La Patricia” y “La Primavera” al sur y oeste, en una región que concentra recursos naturales cuya defensa es prioritaria para asegurar la biodiversidad. La Asociación Civil Ecosistemas Argentinos, una agrupación de reconocidos profesionales, docentes e investigadores de Córdoba, cuyos objetivos son los de difundir el conocimiento y sensibilizar acerca de los problemas de conservación, estudiar y realizar acciones de protección y/o preservación de los ecosistemas argentinos, han expresado en el siguiente informe las razones que sustentan la necesidad de declarar ENIC al terreno que nos ocupa y que hacemos propios por la calificación técnica de sus integrantes y su compromiso en la defensa del ambiente como un derecho humano 1 : “La Asociación Civil Ecosistemas Argentinos, y los investigadores abajo firmantes, integrantes de distintas instituciones académicas, apoyamos tal propuesta, sobre la base de las razones que resumimos a continuación: • El estatus de ENIC proveerá mayor seguridad a largo plazo para la conservación y manejo de este espacio natural de interés para la conservación. • La administración de Parques Nacionales es una fuente probada de esparcimiento y educación ambiental: la cercanía del predio a todo el cordón de pueblos de las Sierras Chicas y del Valle de Punilla proveerán oportunidades únicas en tal sentido, contribuyendo así a conformar una población con cultura ambiental. • El Parque detendrá el crecimiento urbanístico hacia el oeste de Ascochinga. Muchas ciudades del mundo impulsan la creación de reservas naturales en sus proximidades para reducir el impacto de una urbanización desmedida, así como propiciar un mejoramiento de la calidad de vida de sus habitantes al contar con estos reservorios naturales. • Los bosques y suelos cumplirán una importante función en la regulación hídrica proveyendo de un importante reservorio de aguas subterráneas limpias y aptas para el consumo humano. • Los dos ambientes naturales representados en el predio (bosque 1 Informe Asociación Ecosistemas Argentinos 23/08/11. chaqueño serrano en el sector serrano y espinal de algarrobo en la llanura), tanto como el ecotono entre ambos, presentan serios problemas de conservación en toda su distribución nacional, a la vez que están pobremente representados en el Sistema Federal de Áreas Protegidas (SIB-APN-SIFAP). • El área de bosque serrano en cuestión presenta una gran biodiversidad (tanto de flora como de fauna), y a su vez cumple un rol fundamental en la protección de los recursos hídricos. • La zona de transición (el ecotono) entre el bosque serrano y el espinal de llanura está ampliamente representada en el predio. Esta zona, en lomas pedregosas bajas en el pedemonte de las sierras, es de alto interés ecológico porque en ella se encuentran coexistiendo las especies características de ambos ambientes. • El ecosistema del espinal es endémico de la Argentina y, por lo tanto, su conservación es enteramente nuestra responsabilidad. • El área del espinal ha sido casi completamente modificada por cultivos, y hoy tiene menos del 0.1 % de su extensión original, representada en numerosos fragmentos aislados (Zak et al. 2008). Por ello la restauración ecológica (recuperación de ecosistemas naturales a partir de sitios que han sido muy modificados, por ejemplo con cultivos) es cada vez más necesaria, de manera que experiencias de restauración que puedan generarse en el área serán importantes, no sólo para otras áreas del espinal sino también para el país y el mundo. • Nuestro país muestra las mayores tasas de pérdida de bosques nativos entre los países no tropicales del mundo (Zak et al. 2002, 2004, Gavier & Bucher 2004), lo cual indica que debemos protegerlos activamente. • Por último, los bosques son ecosistemas que fijan grandes cantidades de carbono, ayudando a atenuar los efectos del cambio climático global.” En particular, la Asociación Civil Ecosistemas Argentinos advierte la imperiosa necesidad de preservar los siguientes recursos naturales, amenazados tanto por el uso agrícola, la invasión de especies exóticas y la creciente urbanización de la zona: “El Complejo Turístico está localizado en el faldeo oriental de las sierras chicas, entre los 670 y los 1000 msnm., al sur y oeste de la localidad de Ascochinga, sobre la porción norte del cordón de las Sierras Chicas, con estribaciones escarpadas hacia el oeste y, más suaves y dilatadas hacia el este, las que terminan en una zona de llanura. Así, aproximadamente el 90 % de su superficie corresponden al relieve serrano y pedemonte, con altitudes desde los 480 metros sobre el nivel del mar en la zona de llanura hasta los 1050 metros en la parte más alta de las sierras, mientras que el 10 % corresponde a la zona de llanura. El sector serrano y el ecotono han tenido, y aún tienen, uso ganadero extensivo de baja carga. Por su parte, en el sector de llanura se hace uso agrícola. Los sectores edificados (Hotel, casas de personal y otros) ocupan áreas acotadas y perimetrales, por lo que el área silvestre-agrícola no pierde continuidad. En el predio existe una cancha de golf que ocupa alrededor de 100 has y un hotel, por lo que el predio presenta un uso turístico-deportivo, lo cual es compatible con actividades de conservación. Tal como se indicó anteriormente, el predio incluye un área de bosque chaqueño serrano (provincia Chaqueña, distrito Serrano) en la zona de sierras, un ecotono o zona de transición, y un área que antiguamente estuvo cubierta por bosques de algarrobo (provincia del Espinal, distrito del Algarrobo, Cabrera 1976) en la llanura, cuya superficie está casi totalmente modificada por el uso agrícola. Bosque Serrano El distrito Chaqueño Serrano se extiende de norte a sur en los faldeos de las Sierras Pampeanas y Subandinas, con algunas discontinuidades, desde el sur de Bolivia hasta las provincias de Córdoba y San Luis (Cabrera 1976). En la provincia de Córdoba, este distrito se ubica entre los 500 y 2800 metros sobre el nivel del mar, dividido en dos pisos altitudinales: el bosque serrano, entre los 500 y 1700 metros, y el piso de pastizales y bosquecillos de altura, por encima de los 1700 metros. (Giorgis et al. 2011). El área serrana del predio, con una altitud máxima de alrededor de 900msnm metros, bien podría entonces estar completamente cubierta de bosques. Sin embargo, en la actualidad, la vegetación de esta zona es un mosaico de bosques, matorrales, pastizales y herbazales, resultado principalmente de la dinámica de fuegos y pastoreo de la región. Este mosaico es característico de todas las áreas serranas de Córdoba, y es muy diverso en términos de flora y fauna; pero actualmente, y debido al incremento desmedido de los incendios provocados y la tala anterior, quedan muy pocos bosques propiamente dichos (Gavier & Bucher 2004, Zak & Cabido 2002, Zak et al. 2004, Verzino et al. 2005, Gurvich et al. 2005, Giorgis 2008). Por otro lado, todas las comunidades que conforman el mosaico antes mencionado se encuentran al presente fuertemente amenazadas por la urbanización y la invasión de especies exóticas (Gavier & Bucher 2004, Tecco et al. 2007 Hoyos et al. 2010). (…) Un relevamiento reciente de toda el área serrana de la provincia indica que el bosque serrano de la Provincia de Córdoba alberga alrededor de 900 especies vegetales (Giorgis et al. 2011), de las cuales más de 500 se encontrarían en el predio. (…) En el predio han perdurado relictos muy pequeños de vegetación silvestre en cañadas, bordes de alambrados y lomas, identificados como bosques del Espinal. Afortunadamente, a pesar del notable deterioro, la experiencia indica que, en campos que han sido transitoriamente abandonados, se observa un proceso espontáneo de revegetación de las especies leñosas del Espinal, que depende de las características del entorno y de la disponibilidad de cercanas fuentes de semillas (Mascó et al. 2006). Por lo tanto, la protección de los escasos remanentes del Espinal como semilleros para la recuperación de la vegetación nativa es altamente prioritaria; la alternativa es perder el legado natural para siempre. Entre las grandes eco-regiones de la Argentina, el Espinal de llanura es la menos representada en áreas protegidas de todos los tipos: sólo 0,03% de la superficie total del Espinal está incluido en áreas protegidas (Fundación Vida Silvestre 2006). La conservación y la restauración ecológica de este ecosistema nativo en el predio configura como una oportunidad real para contar con casi 3460 has bajo protección ambiental, con los consiguientes beneficios naturales y sociales. (…) Toda el área, tanto el bosque serrano como el espinal, presenta una rica diversidad de fauna, y una gran potencialidad para la recuperación de especies que están en peligro de extinción. Dentro de los grupos más diversos están los insectos, cuya riqueza está relacionada a los diferentes tipos de vegetación. Hay una gran diversidad de aves (al menos unas 110 especies), desde grandes especies rapaces como el condor (Vultur gryphus) y el águila mora (Geranoetus melanoleucus), hasta los pequeños colibríes, de los cuales destaca el colibrí coludo (Sappho sparganura). La Charata o pava de monte (Ortalis canicollis), especie conspicua de los bosques del norte de la provincia ha colonizado en los últimos tiempos los bosques de las Sierras Chicas. Dentro de los mamíferos cabe destacar la presencia del puma (Felis concolor) y de la corzuela (Mazama gouazoubira). Ambas especies, si bien están protegidas por la ley, son muy perseguidas en la provincia. La fauna de mamíferos también está representada por zorros, gatos monteses, hurones, quirquinchos, murciégalos y un gran número de roedores. También se destaca un alta diversidad de reptiles (lagartos, serpientes) y anfibios. Hay que destacar que hay ciertas especies que son muy dependientes de la presencia de bosques maduros. Por ejemplo, la presencia del pájaro carpintero negro (Dryocopus schulzi) y de la corzuela, especies en retroceso en la provincia, dependen de bosques maduros tanto para conseguir alimento como refugio y sitios de nidificación.” La relevancia del área que nos ocupa también ha sido reconocida en la Ley 9814/10 de Ordenamiento Territorial de los Bosques Nativos de la Provincia de Córdoba, que la cataloga como zona roja, es decir, de máxima protección. Si bien la norma provincial, dictada a instancias de la Ley Nacional Nº 26.331 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos, ha sido denunciada por su presunta inconstitucionalidad por universidades y organizaciones ambientalistas, existe un significativo y alto consenso en relación a la zonificación dispuesta y a la necesidad de incrementar las medidas de protección para evitar la disminución y degradación de nuestros bosques. La presión de la urbanización sobre los recursos naturales. Además de estos factores que hacen a la conservación de nuestros recursos naturales y a la exigencia de un manejo adecuado para su potencial incremento es necesario analizar los efectos que está generando la expansión de tierras para la urbanización, que restringe la captación de agua en las cuencas e incrementa su demanda en los pueblos. El proceso de conurbación creciente de la ciudad de Córdoba hacia el noroeste se está acelerando como resultado de la construcción de la autovía a Río Ceballos y la nueva traza del camino de El Cuadrado, obras recientes que generan gran conectividad con la región de Sierras Chicas y que han provocado una importante ampliación de las áreas urbanas, por acción de las empresas inversoras que ven en esta transformación una oportunidad de negocios, no siempre constreñida por una regulación eficaz sino más bien alentada por su carencia. La magnitud del problema se verifica al comparar datos demográficos de los últimos censos nacionales de población publicados por la Dirección de Estadísticas y Censos de la Provincia: Departamento Capital Colón Provincia Población 2001 1284582 171067 3066801 Población 2010 1329604 225151 3308876 % crecimiento 1,54 31,61 7,89 La gran superficie de sierras y pie de sierras en las nacientes de arroyos de la cuenca del Río Ascochinga presenta un ambiente de alta fragilidad, con pronunciadas pendientes y un uso potencial del territorio que pone en riesgo la preservación de las actuales condiciones ambientales. Como define la Comisión Centroamericana de Ambiente y Desarrollo (CCAD) el desarrollo sustentable implica "un proceso evolutivo sustentado en el equilibrio ecológico y el soporte vital de la región, a través del crecimiento económico y la transformación de los métodos de producción y patrones de consumo, con respeto pleno a la integridad étnica y cultural regional, nacional y local, así como en el fortalecimiento de la participación democrática de la sociedad civil en convivencia pacífica y armonía con la naturaleza, sin comprometer y garantizando la calidad de vida de las generaciones futuras". Apelamos, entonces, a la necesidad de desarrollar políticas de planificación urbana consolidadas en estos principios, que alientan la preservación de los procesos ambientales esenciales y la singularidad de nuestros ecosistemas naturales. El turismo como recurso cultural asociado a un área protegida. Ascochinga era un poblado entre estancias de las serranías, una de las cuales dio origen al Complejo Turístico a principios del siglo pasado cuando la tuberculosis hacía estragos en las grandes ciudades y el aire serrano se impuso como método curativo. En aquella época surgieron grandes establecimientos sanitarios para la atención de “enfermos de pecho” y hoteles para alojar a sus familiares, por lo que la tuberculosis, paradójicamente, dio origen a prósperos negocios turísticos en la Provincia. “En ese contexto, en mayo de 1925, una sociedad denominada “Establecimientos Médicos Argentinos” solicitaba al gobierno de la provincia de Córdoba la autorización para la ‘iniciación, construcción y organización’ de una estación climatérica modelo, eufemismo con el que se denominaba a los sanatorios, que estaría ubicada en un predio de tres mil quinientas hectáreas lindante con el pueblo de Ascochinga ubicada hacia el este de las Sierras Chicas. En esta zona no se habían instalado aún sanatorios destinados al tratamiento y cura de la tuberculosis. Su establecimiento llevó a una serie de disputas en el cual el centro era el miedo al contagio”. 2 Con el descubrimiento de la penicilina desapareció la motivación turística vinculada a la salud, pero el sector se recreó al amparo de las políticas sociales del peronismo y fueron las obras sociales que prestaban servicios a sus afiliados y contaban con recursos para mantener la infraestructura hotelera instalada las nuevas promotoras de la actividad. Por esos años, ante la necesidad de asignarlas al uso militar, se produjo la expropiación del predio que hoy vuelve a vincularse con las modernas motivaciones del turismo cordobés, estrechamente vinculadas por razones históricas y geográficas a las Estancias Jesuíticas, declaradas Patrimonio de la Humanidad en el año 2000 por UNESCO. La población actual de Ascochinga constituye un núcleo urbano separado del municipio de La Granja al que pertenece, aunque preserva tradiciones, acervos propios y sigue dependiendo del turismo como fuente de empleo y desarrollo, toda vez que la agricultura y la ganadería no son actividades rentables en la zona y no existen otras actividades que generen crecimiento y fuentes de trabajo significativos. Disputas y tensiones en torno a la creación del sanatorio Ascochinga para tuberculosos. Adrián Carlos Carbonetti Parola, Córdoba (Argentina) - XIV Congreso de la Sociedad Española de Historia de la Medicina, Granada, 11-14 de junio de 2008. 2 En el predio funciona hoy el Hotel Parque Ascochinga, con capacidad para 120 huéspedes, restaurante, piscina, solarium y todos los servicios que requiere un establecimiento de este tipo, con 15 hectáreas de parques que lindan con una cancha de golf de 18 hoyos. Hacia el interior, en la zona conocida como Barrio Parque, se localizan los edificios que prestaban servicios para la atención de enfermos de tuberculosis, viviendas para empleados y médicos y otros equipamientos que forman otro conjunto edilicio, parte del cual no tiene actualmente usos específicos. Todo el complejo está administrado por el Círculo de la Fuerza Aérea Argentina y ocupa aproximadamente un 3% de la superficie total del predio, el que sólo se utiliza parcialmente para la ganadería de cría. La creación de nuevas áreas protegidas ha sido frecuentemente asociada por pobladores y pueblos originarios a un cambio de reglas que harían peligrar su sustentabilidad, pero la Administración de Parques Nacionales, creada como una institución vinculada a la defensa de la soberanía nacional, ha liderado desde entonces procesos de integración entre el visitante y el lugareño, que a lo largo del tiempo han logrado encarnar como valor en nuestra conciencia ambiental gracias a la preservación de esos recursos naturales, culturales y humanos. La Provincia de Córdoba es una de las principales afectadas por el corrimiento de la barrera agropecuaria en desmedro de los bosques nativos y depende de éstos no sólo para el mantenimiento de la biodiversidad, sino que son precisamente los bosques serranos los agentes de captación y regulación del escurrimiento de las precipitaciones, que en regiones mediterráneas y sin nieves eternas los transforma en fuente de vida. El Estado Nacional tiene aquí una gran oportunidad para llevar a la práctica los objetivos de la Ley Nacional Nº 26.331 -Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos- mediante la incorporación de tierras bajo su dominio y administración, aceptando la categorización del predio de Ascochinga como ENIC y generando las condiciones de área protegida tal como las prevé el Convenio N° 100/07 entre el Ministerio de Defensa y la Administración de Parques Nacionales. Finalmente reiteramos nuestra convicción de que este convenio debería tener rango de ley, de acuerdo a lo expresado en el proyecto N° 4160/10 que presentamos oportunamente, advirtiendo que el mismo es el resultado de muchos años de dedicación y continuos estudios de investigadores no siempre reconocidos, cuyos logros, sin embargo, han sentado las bases para que iniciemos un camino de transformación en la defensa de la soberanía nacional a través del cuidado y el uso sustentable de nuestros recursos. La mejor manera de honrar ese trabajo es vigorizar aquel compromiso con la acción decidida de quienes tienen la responsabilidad de trascender la contingencia, con sus desencuentros, y garantizar para todos la preservación del patrimonio natural que nos pertenece y al que debemos defender a tiempo. Es por estas razones, que solicito a mis pares la aprobación del presente proyecto de comunicación. Norma Morandini.