Respuesta a Hakiri Saburo [Fuente: Los escritos de Nichiren Daishonin, Tokio, Soka Gakkai, 2008, págs. 426-432.] En Kamakura, hay unos humildes sacerdotes llamados Chikugo-bo, Acharya Ben y Acharya Daishin.1 Por favor, solicite su presencia, trátelos con respeto y dialogue con ellos. Yo le explicaré, en rasgos generales, las enseñanzas importantes. Pero como ellos tres poseen cierto conocimiento de la gran Ley que aún no ha sido propagada en el Japón, continúe estudiando bajo su supervisión. En su misiva, escribe lo siguiente: “En cuanto llegó su carta, desaparecieron las dudas que venía abrigando, así como un vendaval disipa la capa de nubes y abre paso a la luna resplandeciente. Sin embargo, para la gente de nuestra época, de alta o de baja condición, estas son enseñanzas difíciles de creer. Y es así porque el Sutra del loto promete que quienes practiquen las enseñanzas budistas “disfrutarán de paz y de seguridad en esta existencia y de buenas circunstancias en existencias futuras”.2 En tal caso, ¿por qué el sacerdote Nichiren, pese a llamarse “devoto del Sutra del loto”, debe enfrentar tantas persecuciones? La gente lo atribuye a que él no es fiel a la voluntad del Buda”. No obstante, con respecto a esas injustas críticas, las persecuciones que he debido afrontar se deben a mi karma de existencias pasadas.3 No es de sorprender que la ira de las autoridades haya recaído sobre mí. A modo de explicación, si usted examina lo que establece el texto del Sutra del loto, verá que en el Último Día de la Ley, las personas que practiquen el Sutra del loto tal como este enseña deberán enfrentar numerosas persecuciones. Está perfectamente claro en el texto, y salta a la vista de cualquiera que tenga ojos para verlo. Así, por ejemplo, en el cuarto volumen del Sutra del loto se explica: “Puesto que el odio y los celos hacia este sutra abundan incluso durante la vida de El Que Así Llega, ¡cuánto pero será después de su muerte!”.4 Y en el quinto volumen se lee: “Provocará mucha hostilidad en el mundo y será difícil creer en él”.5 Ese mismo capítulo expresa también: “Habrá muchas personas ignorantes que nos maldecirán y hablarán mal de nosotros, y nos atacarán con palos y espadas, con piedras y lajas”.6 Y aun expresa: “En esa época corrupta, habrá monjes [de sabiduría perversa] […]. O habrá monjes que vivirán retirados en los bosques, vestidos con andrajos […], predicarán la Ley a laicos de túnicas blancas y serán respetados y venerados por el mundo como si fuesen arhats dueños de los seis poderes trascendentales […]. Como en medio de la gran multitud 1 continuamente tratan de difamarnos, se dirigirán a los gobernantes, sumos ministros, brahmanes y jefes de familia, así como a otros monjes, para calumniarnos y hablar mal de nosotros […]. Demonios malignos tomarán posesión de los demás y, por medio de ellos, nos maldecirán, difamarán y cubrirán de escarnio […]; una y otra vez seremos expulsados”.7 En el Sutra del nirvana leemos: “Hay icchantikas o personas de incredulidad incorregible, que fingen ser arhats, viven en lugares despoblados hablan mal de los sutras iguales y correctos del gran vehículo. Cuando la gente común ve a estas personas, cree que son arhats genuinos y hablan de ellos como si se tratara de grandes bodhisattvas”. También se advierte en el mismo sutra: “Cuando haya terminado el Primer Día de la Ley y comience el Día Medio, habrá monjes que darán la impresión de respetar las reglas de la disciplina monástica. Pero apenas leerán o recitarán los sutras y, en cambio, ansiarán toda clase de bebidas y manjares con que nutrir su cuerpo […]. A pesar de ir ataviados como monjes, deambularán al acecho de limosnas como cazadores de mirada furtiva y andar sigiloso. Serán como gatos agazapados frente a un ratón”. El Sutra del parinirvana establece: ·”También hay icchantikas que parecen arhats pero comenten malas acciones”. Ahora bien, cuando sostengo el brillante espejo de los textos del sutra y lo oriento hacia el país del Japón, todo se refleja en él sin la más mínima sombra. ¿Quiénes son los monjes que viven “retirados en los bosques, vestidos con andrajos”? ¿Quiénes son “respetados y venerados por el mundo como si fuesen arhats dueños de los seis poderes trascendentales”? ¿A quiénes hace referencia la frase “cuando la gente común ve a estas personas, cree que son arhats genuinos y hablan de ellos como si se tratara de grandes bodhisttvas”? ¿Quiénes son los que “darán la impresión de respetar las reglas de la disciplina monástica, pero apenas leerán o recitarán los sutras”? Como podemos ver en estos pasajes de las escrituras, el buda Shakyamuni observó con su ojo de Buda la situación que prevalecería a comienzos del Último Día de la Ley. Si en la época actual no hubiera personas como las que describió, el Honrado por el Mundo sería culpable de haber dicho palabras falsas e infundadas. [Y, en tal caso,] ¿quién creería en las enseñanzas teórica y esencial del Sutra del loto, y en la doctrina sobre la naturaleza de Buda eternamente inherente, predicada en el bosque de árboles sal?8 Ahora bien, cuando leo esas citas del sutra para probar que las palabras del Buda son veraces y los aplico a este país, esto es lo que interpreto: el pasaje sobre los “monjes que vivirán retirados en los bosques” o “en lugares despoblados” se refiere a [los sacerdotes de los templos] Kencho-ji, Jufuku-ji, Gokuraku-ji, Kennnin-ji, Tofuku-ji y otros de las escuelas Zen, Preceptos y Nembutsu, en el Japón. Esos templos diabólicos han aparecido en nuestro mundo para causar destrucción en los templos budistas de la escuela del Loto o Tendai, del monte Hiei y de otros lugares. 2 Los que van “vestidos con andrajos” y dan “la impresión de respetar las reglas de la disciplina monástica” son los que hoy observan los preceptos, con sus sobrepellices confeccionadas con cinco, siete o nueve piezas de tela. 9 Los que son “respetados y venerados por el mundo”, y de quienes se habla “como si fueran grandes bodhisattvas”, son individuos como Doryu, Ryokan y Shoichi. El “mundo” que los honra se refiere al gobernante de la nación y a otros como él, en la época actual. Y las “personas ignorantes” y la “gente común” son todo el pueblo del Japón, tanto de alta como de baja estirpe. Dado que soy un hombre común y corriente, no tengo capacidad de creer en las enseñanzas del Buda. Pero, con respecto a esto que digo, conozco la situación de manera inconfundible, tal como cualquiera podría reconocer el fuego o el agua al tocarlos con la mano. De acuerdo con la escritura,10 cuando aparezca un devoto del Sutra del loto será maldecido y vilipendiado, atacado con palos y espadas, y expuesto al destierro. Pero, si aplicamos ese pasaje del sutra a la época actual, no encontramos ni una sola persona que se ajuste a esta descripción. Entonces, ¿a quién considerar devoto del Sutra del loto? ¿Podría ser que hubiesen aparecido los enemigos del Sutra del loto, y que no hubiera nadie dispuesto a proteger este sutra? Eso sería como decir que existe el Este sin el Oeste, o que existe el cielo sin la tierra. En tal caso, las palabras del Buda serían puras mentiras, ¿no es cierto? Aunque parezca que hablo así por vanidad, al cabo de ponderar el asunto he decidido creer en las palabras del Buda: yo, el sacerdote Nichiren, soy el devoto que la escritura menciona. Más aún, el Buda, al hablar de los sucesos de una existencia anterior, dice en el capítulo “Jamás Despreciar”: “En esa época, hubo un bodhisattva llamado Jamás Despreciar […]. Hablaron mal de él y lo maldijeron […]. Algunos en el grupo tomaron palos de madera, o piedras y lajas, y lo azotaron y apedrearon”. Como vemos, el buda Shakyamuni citó su propia práctica de bodhisattva en el pasado para alentar y dar ánimos [al devoto del Sutra del loto] a comienzos del Último Día de la Ley. En el pasado, el bodhisattva Jamás Despreciar fue golpeado con palos y varas en bien del Sutra del loto, y pudo lograr de inmediato el supremo estado de la perfecta iluminación. Yo, Nichiren, en bien del mismo sutra he sido atacado en esta existencia con palos y espadas, y desterrado dos veces a lugares remotos. ¿Cómo dudar, entonces, de que en el futuro lograré el maravilloso fruto de la Budeidad? 3 Después de la muerte de El Que Así Llega Shakyamuni, en los días Primero y Medio de la Ley, aparecieron cuatro grupos de bodhisattvas que trabajaron para propagar el Sutra del loto; pero incluso en esa época, debieron afrontar numerosas persecuciones. El vigésimo sucesor de Shakyamuni, el bodhisattva Aryadeva, murió asesinado; y el vigésimo quinto, el honorable Aryasimha, fue decapitado. El octavo sucesor, Buddhamitra, y el decimotercero, el bodhisattva Nagarjuna, se plantaron con una bandera roja a las puertas del palacio del gobernante [con la esperanza de atraer su atención]. El primero, durante doce años; el segundo, durante siete. Chu Tao-sheng fue desterrado a una montaña en Su-chou; el sacerdote Fa-tsu pereció asesinado; el maestro del Tripitaka Fa-tao fue herrado en el rostro, y el maestro del Dharma Hui-yüan, zaherido y acusado. El gran maestro T’ien-t’ai desafió a debatir a las autoridades de las diez escuelas del norte y del sur de la China, y el gran maestro Dengyo refutó las ideas erróneas de las seis escuelas de Nara. Los conceptos de estos hombres fueron aceptados o rechazados, según la sabiduría o la estupidez de los gobernantes de su época. Pero ninguno de ellos fue desleal al propósito del Buda. Si se presentaron dificultades incluso durante los días Primero y Medio de la Ley, ¡cuánto más probable, entonces, será que encontremos hostigamientos el Último Día! Ya he tenido que soportar la ira de las autoridades en nombre del Sutra del loto, pero esto ha sido mi mayor buena fortuna: para mí, ha sido como cambiar piedras y escombros por oro y plata. Y sin embargo, no puedo reprimir mi aflicción al leer en el Sutra de los reyes benevolentes: “Cuando los venerables se marchan, los siete desastres se abaten sin falta”. Los siete desastres incluyen devastadoras sequías y grandes alzamientos militares. El Sutra de los reyes soberanos establece: “Como las malas personas son respetadas y favorecidas, y a las personas de bien se les somete a castigo, las estrellas y constelaciones, así como los vientos y las lluvias, dejan de acaecer en las estaciones apropiadas”. Veamos ahora, ¿a quién se refiere la expresión “malas personas respetadas y favorecidas”? A los hombres que he mencionado antes. ¿Y quién es la “persona de bien a la que somete a castigo”? Aquel que he nombrado antes y que “una y otra vez ha sido expulsado”. Y el pasaje sobre las “estrellas y constelaciones” indica los acontecimientos extraños y ominosos que vienen produciéndose en los cielos y en la tierra durante los últimos veinte años o más. Si esas frases de los sutras son veraces, el destierro de Nichiren es un portento que vaticina la caída de la nación. Yo ya había previsto que todo eso sucedería, aun antes de que la cólera de las autoridades recayera sobre mí, y señalé las razones en mi tesis Sobre el establecimiento de la enseñanza correcta para 4 asegurar la paz en la tierra. ¿Quién se atrevería a dudar de mis palabras? Pero por ese mismo motivo me conduelo. Ya han transcurrido dos mil doscientos veintidós años desde la muerte del Buda. Durante los mil años del Primer Día de la Ley, Nagarjuna, Vasubandhu y otros actuaron como enviados del Buda y propagaron sus enseñanzas. Sin embargo, dieron a conocer las dos enseñanzas del Hiniyana y del Mahayana provisional, pero no hicieron lo mismo con las enseñanzas del Mahayana verdadero. Habiendo transcurrido quinientos años del Día Medio de la Ley, en la China apareció el gran maestro T’ien-t’ai, quien refutó las ideas erradas de las escuelas del norte y del sur, y estableció la enseñanza correcta. En el terreno del estudio doctrinal, postuló la teoría de los cinco períodos; y, en el área de las prácticas meditativas,11 estableció el concepto de los tres mil aspectos contenidos en cada instante vital. Toda la China coincidió en alabarlo como a un “Pequeño Shakyamuni”. No obstante, aunque expuso la perfecta meditación y la perfecta sabiduría,12 no propagó los preceptos perfectos. Luego, mil ochocientos años después de la muerte del Buda, el gran maestro Dengyo apareció en el Japón y refutó las ideas erróneas que habían sostenido las seis escuelas budistas durante más de doscientos años, desde los tiempos del emperador Kimmei. Además, expuso los preceptos de la iluminación perfecta e inmediata que T’ien-t’ai todavía no había propagado. Esos son los grandes preceptos de la iluminación perfecta e inmediata administrados en la plataforma de ordenación del monte Hiei. Sin embargo, en más de dos mil años transcurridos desde la muerte del buda, aunque hubo templos por decenas de miles en las tres tierras de la India, la China y el Japón, no ha habido templos o pagodas dedicados al señor de la enseñanza esencial, y nadie ha propagado aún los cinco caracteres de Myoho-renge-kyo, específicamente encomendados a los bodhisattvas que irrumpieron de la tierra, numerosos como las partículas de polvo de mil mundos. Y aunque hay pasajes de las escrituras que indican que [dichos caracteres] deberán ser propagados, no se los encuentra en ningún lugar. ¿Será, acaso, que el tiempo y la capacidad de las personas no son los adecuados todavía? El Buda dijo acerca del futuro: “Cuando y o haya pasado a la extinción, en el último período de quinientos años, debéis propagar [el Sutra del loto] en todas partes ampliamente, en todo Jambudvipa, y jamás dejar que se extinga”.13 El gran maestro T’ien-t’ai predijo: “En el último período de quinientos años, el Camino místico se propagará y beneficiará a la humanidad hasta el lejano futuro”.14 Y el gran maestro Dengyo escribió: “Los días Primero y Medio ya casi han terminado, y el Último Día se aproxima. Esta, sin duda, es la época en que el vehículo único del Sutra del loto demostrará adecuarse perfectamente a la capacidad de todas las personas”.15 Estos pasajes del sutra y sus comentarios apuntan al comienzo del Último Día de la Ley. 5 Por otro lado, una persona no budista [de la India] dijo una vez: “Cien años después de mi muerte, el Buda aparecerá en el mundo”.16 Y un erudito confuciano vaticinó: “Dentro de mil años, contados a partir de ahora, la enseñanza del Buda se trasmitirá a la China”.17 Esto nos muestra que hasta las predicciones de personas comunes se ajustan a la verdad. ¡Cuánto más dignas de confianza, entonces, serán las declaraciones de personas como Dengyo y T’ien-t’ai, por no mencionar las predicciones explícitas que salieron de la boca de oro de los budas Shakyamuni y Muchos Tesoros! Comprenda lo siguiente. Ha llegado la hora de que haga su advenimiento el señor de la enseñanza esencial, que hasta ahora nunca se había manifestado; es hora de que se difundan en todo Jambudvipa los cinco caracteres de Myoho-renge-kyo, que jamás habían sido propagados. ¿Podría existir alguna duda? Así y todo, hay quienes han oído al sacerdote Nichiren hablar muchas veces de estas cuestiones y, pese a ello, ahora que me acosan semejantes dificultades tornan a abandonar la fe. A diferencia de ellos, usted ha escuchado mis enseñanzas sólo un par de veces, y nunca durante más de una hora o dos. Aun así, me han dicho que, lejos de abandonar la fe, sigue practicándola. Algo así no puede deberse sólo un par de veces, y nunca durante más de una hora o dos. Aun así, me han dicho que, lejos de abandonar la fe, sigue practicándola. Algo así no puede deberse sólo a causas formadas en esta existencia. El gran maestro Miao-lo aseveró: “Por lo tanto, sabemos que si uno puede escuchar la Ley, aunque sea un instante, y abrazar la fe en ella después de escucharla, es gracias a las semillas plantadas en existencias anteriores”.18 También dijo: “Ya que nací a fines del Día Medio de la Ley, he podido contemplar estas palabras veraces del sutra. Pero para el que no ha plantado la causa mística en una existencia anterior, ellas son realmente difíciles de hallar”.19 El Sutra del loto dice, en esencia, que las personas que en existencias pasadas hayan hecho ofrendas a cien mil millones de budas renacerán en el mundo humano y abrazarán la fe en este Sutra del loto.20 El Sutra del nirvana afirma, en esencia, que las personas que hayan dado ofrendas a budas numerosos como los granos de arena de los ríos Hiranyavati y Ganges renacerán en la última era malvada y creerán en este sutra. El rey Ajatashatru fue un ser depravado que mató a su padre y encarceló a su madre. Sin embargo, cuando acudió a la asamblea donde el Buda predicaba el Sutra del nirvana y escuchó las enseñanzas del Sutra del loto,21 no sólo se libró de las llagas que infestaban su cuerpo en esa existencia [producto de sus malas acciones], sino que, además, prologó su vida cuarenta años más; y, aunque en forma inicial no poseía las raíces de la fe, al final llegó al primer nivel de seguridad. Y recibió del Buda una profecía referida al logro de su Budeidad. 6 Devadatta fue u nombre de incredulidad incorregible, el peor de toda la tierra de Jambudvipa. En todos los sutras anteriores predicados durante la vida del Buda, a Devadatta se lo descartaba como un caso perdido. Pero conoció el Sutra del loto, y supo, mediante una predicción, que llegaría a ser un buda llamado El Que Así Llega Rey Celestial. A juzgar por estos ejemplos, podemos concluir que, para la gente malvada que vive en la última época, lograr la Budeidad no depende de la gravedad o ligereza de sus faltas, sino únicamente de que crean o no en este sutra. En su caso, usted pertenece a un clan guerrero; es un hombre entregado al mal, dedicado día y noche al oficio de matar. Dado que no ha renunciado al hogar [para entrar en el camino del sacerdocio] y hasta el día de hoy sigue siendo guerrero, ¿cómo podrá escapar de los tres malos caminos? ¿No debería pensar en ello con toda seriedad? La esencia del Sutra del loto yace en revelar que cada uno puede lograr la iluminación suprema con la forma que posee, sin tener que modificar su condición de persona común. Es decir que uno puede alcanzar el Camino del Buda sin necesidad de descartar sus impedimentos kármicos. Así pues, T’ien-t’ai dijo: “Los demás sutras sólo predicen la Budeidad […] a la gente buena, mas no a las malas personas […]. Este Sutra [del loto] predice la Budeidad a todos”.22 Y Miao-lo dijo: “El significado de la enseñanza perfecta yace únicamente en que puede salvar tanto a aquellos que se le oponen como a quienes la siguen. En las otras tres enseñanzas23 el destino de estas dos clases de personas está preestablecido”.24 Debería agregar algo para explicarle en qué medida, de acuerdo con los sutras predicados antes que el del Loto, se puede o no ingresar en el Camino del Buda. Pero es un tema que requiere ser tratado con personas versadas en los términos y categorías budistas. No obstante, hay discípulos a quienes he instruido sobre los fundamentos de este punto; mándelos llamar para que le expliquen la esencia de la cuestión. Entonces, volveré a escribirle más sobre el tema. Con mi profundo respeto, Nichiren En el tercer día del octavo mes, décimo año de Bun’ei (1273), con el signo cíclico mizunoto-tori. Respuesta a Nambu Rokuro Saburo, de la provincia de Kai Antecedentes 7 Esta carta fue escrita al octavo mes de 1273, en Ichinosawa, Sado, en respuesta a las dudas que abrigaba Hakiri Rokuro Saburo, también conocido como Nambu Rokuro Saburo. Se piens que Hakiri Saburo probablemente haya sido hijo de Hakiri Sanenaga, el administrador de Minobu, donde el Daishonin pasó sus últimos años. Saburo había preguntado por qué el Daishonin, que se llamaba a sí mismo “devoto del Sutra del loto”, debía soportar tantas adversidades en lugar de estar disfrutando de paz y de seguridad, tal como prometía el Sutra del loto. Pero no era el único en plantear esta clase de duda: numerosos discípulos del Daishonin se habían sentido muy afectados por la persecución de Tatsunokuchi y el destierro a Sado. Saburo también había preguntado si uno podía entrar en el Camino del Buda, hasta cierto punto, mediante las enseñanzas anteriores al Sutra del loto. El Daishonin responde la primera pregunta recurriendo a pasajes del Sutra del loto y del Sutra del nirvana, que vaticinan cuán difícil será propagar la enseñanza correcta, y mediante ejemplos históricos de personas que debieron enfrentar persecuciones en bien del budismo. El propio Buda predijo que los devotos del Sutra del loto encontrarían oposición y hostilidad. Su padecimiento, declara el Daishonin, demuestran que él es, sin lugar a dudas, el devoto del Sutra del loto del Último Día de la Ley. Luego, recapitula brevemente la secuencia de la propagación de las enseñanzas budistas en el Primer Día, el Día Medio y el Último Día de la Ley, y declara que ha llegado el tiempo de que Nam-myoho-renge-kyo, la Ley suprema oculta en las profundidades de la enseñanza esencial del Sutra del loto, se propague en todo el mundo. En cuanto a la segunda pregunta, dice que requiere un buen conocimiento de los términos budistas y, por eso, insta a Saburo a plantear sus preguntas a los sacerdotes discípulos del Daishonin, para que estos lo ayuden a resolver sus dudas. Notas 1 2 3 4 5 Chikugo-bo era otro nombre de Nichiro (1245-1320), uno de los seis sacerdotes principales discípulos de Nichiren Daishonin; Acharya Ben es el nombre con que se conocía a Nissho (1221-1323), otro de los seis, y primer prelado que se convirtió a las enseñanzas del Daishonin. Acharya Daishin fue un sacerdote discípulo. Sutra del loto, cap. 5. Otra copia del manuscrito dice: “En cuanto a esas críticas injustas, no obstante, me he preparado para ellas desde el mismísimo comienzo”. Esa variación en el significado surge de una diferencia entre dos caracteres chinos de una frase de cuatro caracteres. Sutra del loto, cap. 10. Ib., cap. 14. 8 6 Ib., cap. 13. En el Sutra del loto, sin embargo, la frase “con piedras y lajas” no aparece en este capítulo. Es una transposición del capítulo “Jamás Despreciar”. 7 Ib., cap. 13. 8 Se refiere al Sutra del nirvana, expuesto por Shakyamuni en un bosque de árboles sal inmediatamente antes de ingresar en el nirvana. 9 Las “sobrepellices confeccionadas con cinco, siete o nueve piezas de tela” aluden a las “tres túnicas”, unas de las pocas pertenencias que los monjes tenían permitido poseer. 10 Sutra del loto, cap. 13. 11 “Práctica meditativa” se refiere a la observación de la vida, una forma de meditación desarrollada por T’ien-t’ai en la cual uno se concentra en la verdadera naturaleza de la vida, en lugar de enfocarse en un objeto externo. En Gran concentración e introspección, T’ien-t’ai enseña una clase de meditación para percibir la unificación de las tres verdades en un solo pensamiento y los tres mil aspectos contenidos en cada instante vital. 12 “Perfecta meditación” indica una meditación para percibir los tres mil aspectos contenidos en cada instante vital, y “perfecta sabiduría” es la sabiduría que se alcanza al comprender los tres mil aspectos contenidos en cada instante vital. 13 Sutra del loto, cap. 23. 14 Palabras y frases del “Sutra del loto”. 15 Ensayo sobre la protección del país. 16 Se desconoce la fuente. 17 Según un pasaje del Registro del linaje del Buda y de los patriarcas, atribuido al Registro de los prodigios mencionados en el libro de Chou, el octavo día del cuarto mes del vigésimo cuarto año (fecha tradicional, 1029 a.C.) durante el reinado del rey Chao, cuarto soberano de la dinastía Chou, el cielo se vio atravesado por rayos de luz de cinco colores; la tierra se sacudió, y los ríos, arroyos, pozos y lagunas se desbordaron. El gran historiador Su Yu dijo: “Ha nacido un venerable en la región occidental. Dentro de mil años, las palabras de ese venerable serán traídas a este país”. De acuerdo con la tradición, el budismo se introdujo en la China, tal como el historiador había predicho, mil quince años después de la muerte del Buda, durante el reinado del emperador Ming, el décimo año de la era Yung-p’ing (67 d.C.). 18 Comentario sobre “Palabras y frases del “Sutra del loto””. 19 Comentario sobre “Gran concentración e introspección”. 20 Otra alusión a una frase del capítulo décimo del Sutra del loto. 21 El Sutra del nirvana replantea principios esenciales del Sutra del loto, como la naturaleza de Buda eternamente inherente. 22 Palabras y frase del “Sutra del loto”. 23 Las “otras tres enseñanzas” son el Tripitaka, la enseñanza de conexión y la enseñanza específica, y se refieren en forma conjunta a las doctrinas anteriores al Sutra del loto. 24 Comentario sobre “Palabras y frases del “Sutra del loto””. 9