PALABRA QUE DA VIDA -Reflexionemos- CON OTRA MIRADA SER SANTOS… SER FELICES… COMO SAN MARTÍN DE PORRES MARTÍN NOS PONEMOS EN UN ESCALÓN JERÁRQUICO SUPERIOR, Y EN REALIDAD NO VEMOS AL OTRO TAL CUAL ES, SINO A TRAVÉS DEL CRISTAL EMPAÑADO DE NUESTROS OJOS ESCASOS. LUNES 23 DE JUNIO DE 2014 Del Evangelio según san Mateo 7, 1-5 Dijo Jesús a sus discípulos: -«No juzguen y no los juzgarán; porque los van a juzgar como juzguen ustedes, y la medida que usen, la usarán con ustedes. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: "Déjame que te saque la mota del ojo", teniendo una viga en el tuyo? Hipócrita; sácate primero la viga del ojo; entonces verás claro y podrás sacar la mota del ojo de tu hermano.» LECTURAS COMPLEMENTARIAS: 2REYES 17, 5-8. 13-15. 18 - EL SEÑOR ARROJÓ A ISRAEL Y TRIBU DE JUDÁ. SALMO 59 - QUE TU MANO SALVADORA, SEÑOR, NOS RESPONDA SÓLO QUEDÓ LA PARA VER MEJOR - Para la gente que camina teniendo al Señor a su lado no hay lugar para complejos de superioridad. No podemos mirar con desdén y desprecio a las personas de nuestro entorno, solo con el fin de condenarlas. Todos hemos recibido el mismo llamado en Cristo. ¿Acaso no juzgamos con frecuencia y condenamos en otros lo que, consciente o inconscientemente, no condenamos en nosotros mismos? A veces incluso hasta secretamente nos alegramos de que nuestro hermano o hermana adolezcan de nuestros mismos defectos, pero en grado superior al nuestro. Si aplicamos la ley a otros, Dios nos va a medir con la misma severidad de la ley. Miremos dentro de nosotros mismos y saquemos la viga de nuestros propios ojos antes de descubrir la mota en los ojos de los demás. PARA REFLEXIONAR CRISTALES EMPAÑADOS Vivir la Buena Noticia no admite tibiezas ni términos medios. Es lo totalmente distinto a lo que presuponemos y a los esquemas que nos establecemos, una propuesta y exigencia de radicalidad de vida, una transformación total de la existencia. Sin embargo, el Maestro hoy nos plantea mirar desde otra luz el centro de nuestra propia existencia, el saber qué somos y cómo somos con nosotros mismos y con los demás. Es que -lo sabemos aunque no lo admitamos- nos resulta muy conveniente volvernos jueces y fiscales de los demás, señaladores consecuentes de faltas y pecados ajenos. En cierto modo, en los altares de nuestros egos sacrificamos al prójimo, porque prevalece nuestro interés como único y valedero. Quizás, se trata una ruptura de la fraternidad; cuando juzgamos al otro -por buenas que aparezcan las razones que nos motiven a ello- ese otro deja de ser hermano, y renegamos como hija o hijo de Dios. Nos ponemos en un escalón jerárquico superior, y en realidad no vemos al otro tal cual es, sino a través del cristal empañado de nuestros ojos escasos. Aún no tenemos la mirada de Jesús de Nazareth, que vé y mira a todos como hermanas y hermanos, todos hijos del mismo Padre, así hayan cometido acciones abyectas, la misma mirada bondadosa que mira la realidad presente e imagina la posibilidad de lo que podemos llegar a ser. PARA ORAR Señor Jesús, Tú nos dijiste: No condenen a los demás y no serán condenados. Dichosos los misericordiosos que excusan, comprenden y aceptan al hermano tal como es, porque así es el proceder de Dios con nosotros. Cúranos radicalmente de nuestra hipocresía que ve la mota del prójimo y traga la viga propia. Danos, Señor, ojos limpios para ver lo bueno, es decir, tu imagen, en el rostro del hermano, para creer en los demás y para amar la vida con un corazón grande como el tuyo. Amén. PARA ACTUAR – Jesús nos enseña a ser tolerantes, a no estar siempre criticando a los demás, a saber cerrar un ojo ante los defectos de nuestros familiares y vecinos, porque también ellos seguramente nos perdonan a nosotros los que tenemos y no nos los están echando en cara cada día. TE HAS DADO CUENTA QUE… Cuando otro actúa de esa manera, decimos que tiene mal genio; pero cuando tú lo haces, son los nervios. Cuando el otro se apega a sus métodos, es obstinado; pero cuando tú lo haces, es firmeza. Cuando al otro no le gusta tu amigo, tiene prejuicios; pero cuando a ti no te gusta su amigo, sencillamente muestras ser un buen juez de la naturaleza humana. Cuando el otro hace las cosas con calma, es una tortuga; pero cuando tú lo haces despacio es porque te gusta pensar las cosas. Cuando el otro gasta mucho, es un despilfarro; pero cuando tú lo haces, eres generoso. Cuando el otro encuentra defectos en las cosas, es maniático; pero cuando tú lo haces, es porque sabes discernir. Cuando el otro tiene modales suaves, es débil; cuando tú lo haces, eres cortés. Cuando el otro rompe algo, es torpe; cuando tú lo haces eres enérgico. ¿PORQUÉ TE FIJAS EN LA ASTILLA QUE TIENE TU HERMANO EN EL OJO, Y NO TE FIJAS EN LA VIGA QUE TIENES EN EL TUYO? Veamos las virtudes de los demás, y dejemos de juzgar, que conforme a nuestro juicio, seremos juzgados. «Sácate primero la viga del ojo» Escribe un ranking de prioridades. Si lo primero que escribiste es trabajo, algo anda mal, vuelve a redactarlo. El trabajo es importante y debemos hacerlo, pero medita y notarás que no es lo más importante de tu vida. Carl Honoré