COMBINATORIA Y MISTERIO EN DOS SONETOS A un hombre de gran nariz Érase un hombre a una nariz pegado, érase una nariz superlativa, érase una alquitara medio viva, érase un peje espada mal barbado; era un reloj de sol mal encarado, érase un elefante boca arriba, érase una nariz sayón y escriba, un Ovidio nasón mal narigado. Érase el espolón de una galera, érase una pirámide de Egito, las doce tribus de narices era; érase un naricísimo infinito, frisón archinariz, caratulera, sabañón garrafal, morado y frito. Este popular poema satírico de Francisco de Quevedo puede ser un ejemplo de combinatoria. A través de una formulación reiterativa in crescendo, el soneto ofrece una sucesión de imágenes hiperbólicas referidas a una gran nariz. Las imágenes para describir una gran nariz pueden ser infinitas pero no ilimitadas, puesto que son concretas. El número de imágenes puede quizá ser infinito, hasta donde alcance a llegar la imaginación del poeta, pero el objeto referido es una enorme pero única nariz, aunque esa gran nariz aparezca evocada, lógicamente, con diferentes matices en la mente de cada lector. Amor constante más allá de la muerte Cerrar podrá mis ojos la postrera sombra que me llevare el blanco día, y podrá desatar esta alma mía hora a su afán ansioso lisonjera; mas no, de esotra parte, en la ribera, dejará la memoria, en donde ardía; nadar sabe mi llama la agua fría, y perder el respeto a ley severa. Alma a quien todo un dios prisión ha sido, venas que humor a tanto fuego han dado, medulas que han gloriosamente ardido, su cuerpo dejará, mas no su cuidado; serán ceniza, mas tendrá sentido; polvo serán, mas polvo enamorado. Otro conocido soneto de Quevedo, en este caso lleno de misterio. Cargado de términos abstractos, su misterio quizá resida en que, por medio de paradojas y metáforas complejas, consigue evocar infinitas resonancias en torno a esa realidad también abstracta que denominamos el alma humana. El tema, por otra parte, es asimismo infinito y abstracto: el eterno deseo de eternidad del hombre, atrapado aquí a través del amor en relación con la muerte.