M UJ E RE S J ÓVE NES: ACT IVIDADE S DE AP RE NDIZ A J E Actividades de aprendizaje Actividades para las clases de las Mujeres Jóvenes E S C UD R I Ñ A R la s E SC RI TU RA S Uno de sus principales objetivos como maestra de las Mujeres Jóvenes es instar a las jóvenes a acudir a las Escrituras y las palabras de los profetas modernos, leerlas y desarrollar el hábito de estudiarlas. En la medida en que lo hagan, las jóvenes experimentarán por sí mismas el poder de la palabra de Dios. Aprenderán a acudir a las Escrituras para encontrar ayuda y guía. El Espíritu Santo les enseñará y testificará de su veracidad. Saldrán fortalecidas y convertidas. Son muchas las maneras en que usted puede lograr que las jóvenes escudriñen la palabra de Dios. Al considerar las ideas que se incluyen aquí, recuerde que las mejores ideas vendrán cuando piense en las necesidades de las jóvenes a quienes enseña. Tal vez quiera determinar cómo podría llevarse a cabo cada actividad para crear mayor interés y participación en las miembros de la clase. Cada una de estas actividades se puede realizar en forma individual, en grupos pequeños o como clase. Buscar respuestas a preguntas Pida a las jóvenes que lean las Escrituras y las enseñanzas de los profetas modernos para encontrar respuestas a preguntas acerca de la doctrina y que hablen acerca de lo que hayan encontrado. Ejemplo: “¿Soy importante para Dios?” Las jóvenes podrían leer alguna de las tres parábolas que se encuentran en Lucas 15 y pensar en preguntas como las siguientes: ¿Qué nos enseña la parábola acerca del valor de las almas? ¿Qué semejanzas hay entre nosotros y una oveja, una moneda de plata o el hijo pródigo? Luego, en grupos pequeños, podrían analizar sus respuestas. Buscar palabras y frases importantes Invite a las jóvenes a escudriñar las Escrituras y las enseñan­ zas de los profetas modernos a fin de encontrar las palabras y frases que más las ayuden a comprender la doctrina. Invíte­ las a hablar acerca del significado de esas palabras y frases. Ejemplo: “¿Cuáles son las bendiciones que obtengo gracias a la Expiación?” Las jóvenes podrían leer pasajes de las Escrituras acerca de la Expiación y buscar palabras y frases que les den esperanza en que pueden arrepentirse y obtener el perdón. Podrían compartir las palabras y frases que encuentren y explicar por qué son importantes para ellas. Resumir usando pocas palabras Pida a las jóvenes que resuman los versículos o enseñanzas de las Escrituras usando pocas palabras. Ejemplo: “¿Qué es el sacerdocio?” Las jóvenes podrían estudiar pasajes de las Escrituras y citas de los profetas modernos que traten sobre el sacer­ docio y hacer un resumen de lo que lean a fin de contestar la pregunta “¿Qué es el sacerdocio?”. Luego podrían compartir sus respuesta entre los miembros de la clase. Para hacerlo más interesante, podrían esforzarse para resumirlo en siete palabras o menos. Hacer una lista Pida a las jóvenes que escudriñen los pasajes de las Escrituras y las enseñanzas de los profetas modernos y luego hagan una lista de puntos clave que hayan aprendido acerca de la doc­ trina. Invítelas a compartir lo que hayan encontrado. Ejemplo: “¿Qué influencia tienen en mí los medios de comunicación?” Las jóvenes podrían leer “La diversión y los medios de comu­ nicación”, en Para la Fortaleza de la Juventud, y hacer una lista de puntos clave que hayan aprendido acerca de la influen­ cia que los medios de comunicación tienen en ellas (tanto positiva como negativa). Podrían compartir sus listas unas con otras y combinarlas para convertirlas en una sola. También podrían hacer un análisis de qué puntos de la lista son los más importantes para ellas. Actividad de concordancia En la pizarra, escriba frases que resuman los pasajes de las Escrituras y las enseñanzas. Las jóvenes deberán asociar los pasajes y las enseñanzas con las frases. Invítelas a compartir lo que hayan encontrado. Ejemplo: “¿Por qué se nos pide que seamos reverentes?” A un lado de la pizarra, haga una lista con los siguientes pasa­ jes de las Escrituras: Alma 37:14–17; Salmos 89:6–7; y Doctrina y Convenios 63:60–64. Del otro lado de la pizarra, haga una lista de las siguientes frases de los pasajes pero ordenados de manera diferente: Cuidar las cosas sagradas; el nombre de Dios es sagrado; debemos mostrar reverencia hacia Dios. Luego las jóvenes podrían asociar los pasajes de las Escrituras con las frases y explicar de qué manera se relacionan. MUJ ERES J ÓVENE S: ACT IVIDADE S DE AP RE NDIZ A J E Concordancia de láminas Las jóvenes deberán concordar láminas con los pasajes de las Escrituras. Invítelas a analizar por qué creen que deter­ minado pasaje de las Escrituras se relaciona con la lámina. Ejemplo: “¿Qué puedo hacer para ayudar a mi familia a ser más feliz?” Muestre láminas de familias haciendo actividades que les brinden felicidad (por ejemplo, las láminas 115, 108 y 112 del libro Las bellas artes del Evangelio). Junto a las láminas, escriba los siguientes pasajes de las Escrituras: Mosíah 4:15; Doctrina y Convenios 121:41–46; y 1 Nefi 1:1. Las jóvenes podrían leer los pasajes, elegir la lámina que mejor re­ presente los pasajes y mencionar otras cosas que brinden felicidad a las familias. Completar los espacios en blanco Escriba en la pizarra una frase incompleta acerca de la doctrina. Invite a las jóvenes a buscar palabras o frases importantes en los pasajes de las Escrituras y las citas con los que se podría completar la frase. Luego pídales que analicen la frase. Ejemplo: “¿Qué puedo hacer para compartir el Evangelio con los demás?” En la pizarra escriba la siguiente declaración: No intentes __________________, sino primero procura _____________________. Las jóvenes podrían leer Doctrina y Convenios 11:21 a fin de encontrar frases para completar la afirmación. Podrían hablar acerca del significado de las palabras y de la forma en que pueden “obtener” y luego “declarar” la palabra de Dios. Memorizar un versículo Invite a las jóvenes a memorizar un pasaje importante de las Escrituras o una cita que enseñe acerca de la doctrina. Ejemplo: “¿Qué bendiciones reciben otras personas debido a mi diezmo y mis ofrendas de ayuno?” En la pizarra, escriba el versículo 10 de Malaquías 3. Las jóvenes podrían repetirlo varias veces. Borre una o dos palabras y pídales que vuelvan a repetir el pasaje. Siga bo­ r­rando dos o tres palabras a medida que las jóvenes repiten el pasaje, hasta que haya borrado todas las palabras. Las jóvenes podrían mencionar varias maneras en que han sido bendecidas por pagar el diezmo. MUJ ERES J ÓVENE S: ACT IVIDADE S DE AP RE NDIZ A J E L A C O N V E R S I ÓN P E RS O N A L A usted se le ha llamado para ayudar a las jóvenes a convertirse al evangelio de Jesucristo. Las jóvenes se convierten al vivir diligentemente el Evangelio cada día. La conversión no ocurre en una sola reunión, clase o actividad. Al final de cuentas, las jóvenes se convierten por lo que hacen cuando están solas. Parte de su función como maestra o asesora es instarlas a conver­ tirse en “hacedoras” de la palabra y no sólo “oidoras” (véase Santiago 1:22). Son muchas las maneras en que puede animar a las jóvenes a poner en práctica lo que aprenden. Al considerar las ideas que se incluyen aquí, recuerde que las mejores ideas vendrán cuando piense en las necesidades de las jóvenes a quienes enseña. Considere de qué maneras puede usar las actividades a fin de que les resulten interesantes a las miembros de la clase y participen más. Asegúrese de dar oportunidades a las jóvenes de compartir sus experiencias durante las semanas siguientes. Fijar una meta Invite a las jóvenes a ponerse la meta de vivir de acuerdo con lo que hayan aprendido. Compartir con otra persona Invite a las jóvenes a compartir lo que hayan aprendido con un amigo o con un familiar. Planificar una actividad Invite a las jóvenes a planificar una actividad de clase relacio­ nada con lo que hayan aprendido. Orar Invite a las jóvenes a meditar y orar acerca de lo que hayan aprendido a fin de obtener un testimonio más firme. Estudiar Invite a las jóvenes a centrar su estudio de las Escrituras en aprender más acerca de la doctrina. Escribir en un diario Invite a las jóvenes a escribir en su diario algo que hayan aprendido acerca de la doctrina y la manera en que planean vivirla. El Progreso Personal Invite a las jóvenes a cumplir con una experiencia del Progreso Personal que se relacione con la doctrina. M UJ E RE S J ÓVE NES: ACT IVIDADE S DE AP RE NDIZ A J E V E R E J E M PLO S CUANDO las jóvenes ven ejemplos de la doctrina en su vida cotidiana, reconocen la manera de vivir el Evangelio. Como maestra, tiene la oportunidad de ayudar a las jóvenes a quienes enseña a que asocien lo que están aprendiendo con las expe­ riencias que tienen. Son muchas las formas en que puede lograr que las jóvenes vean el Evangelio en su propia vida. Al considerar las ideas que se incluyen aquí, recuerde que las mejores ideas vendrán cuando piense en las necesidades de las jóvenes a quienes enseña. Tal vez quiera determinar cómo podría llevarse a cabo cada actividad para crear mayor interés y participación en las miem­ bros de la clase. Cada una de estas actividades se puede realizar en forma individual, en grupos pequeños o como clase. Explicar una lámina o un objeto Ejemplo: “¿Cómo bendice el sacerdocio a mi familia?” Pregunte a las jóvenes de qué manera la lámina o el objeto ilustra la doctrina. Un orador invitado podría visitar la clase y compartir una experiencia en la que el sacerdocio lo ha bendecido ya sea de forma individual o a su familia. Podría invitar a las jóvenes a compartir experiencias personales. Ejemplo: “¿Qué es la expiación de Jesucristo?” Podría mostrar a las jóvenes láminas del Salvador (a) en el jardín de Getsemaní, (b) en la cruz, (c) en el sepulcro, y (d) mostrando Su cuerpo resucitado a Sus discípulos. Podrían analizar la lámina por su cuenta y leer los pasajes de las Escrituras relacionados. Después de hacerlo, podrían usar la lámina para explicar de qué acontecimiento se trata y por qué es importante para ellas. Hacer un dibujo Pida a cada joven que haga un dibujo o un diagrama que represente o explique la doctrina. Pida a las jóvenes que expliquen qué relación hay entre el dibujo o diagrama y la doctrina. Ejemplo: “¿Qué significa tener fe en Cristo?” Las jóvenes podrían hacer un dibujo de un acontecimiento en su vida en el que hayan demostrado tener fe en Jesucristo. Otra opción sería hacer un diagrama sencillo de la relación que hay entre la fe en Jesucristo y las decisiones que toman en su vida (positiva y negativa). Ver ejemplos de las Escrituras Las jóvenes deberán leer o escuchar acerca de personas de las Escrituras que hayan vivido la doctrina. Ejemplo: “¿Cómo me arrepiento?” Las jóvenes podrían buscar ejemplos de las Escrituras de personas que se hayan arrepentido (como Pablo, Alma hijo o Enós). Podrían compartir el ejemplo que hayan encontrado, incluso qué hizo la persona a fin de arrepentirse y qué dife­ rencia hubo en la vida de esa persona y en la de los demás gracias al arrepentimiento. Ver ejemplos de Santos de los Últimos Días Los jóvenes deberán leer o escuchar acerca de Santos de los Últimos Días que vivan la doctrina. Escuchar experiencias personales Comparta sus propios ejemplos de personas que vivan la doctrina y pida a las jóvenes que compartan sus propios ejemplos. Ejemplo: “¿Por qué Dios nos da mandamientos?” Las jóvenes podrían escribir acerca de una experiencia en la que hayan sido bendecidas por haber guardado un manda­ miento. Podrían compartir su experiencia con otra miembro de la clase; después varias jóvenes podrían compartirla con toda la clase. Visualizar Pida a las jóvenes que imaginen a alguien que viva la doctrina. Ejemplo: “¿Cómo puedo ser una buena miembro de mi clase?” Las jóvenes podrían explicar cómo sería una clase ideal y hablar acerca de qué podrían hacer para incorporar esos ideales a su clase. Dramatización Divida a las jóvenes en grupos pequeños. Pida a cada grupo que dramatice una situación que ilustre la forma de vivir la doctrina. Luego cada grupo deberá compartir su ejemplo con la clase. Ejemplo: “¿Qué es el sacerdocio?” Las jóvenes podrían dramatizar una charla en la que un amigo de otra religión les pregunte qué es el sacerdocio. ¿Cómo podrían explicar qué es el sacerdocio? ¿Qué pasajes de las Escrituras usarían? ¿Qué experiencias compartirían? ¿Cómo influye en su vida el poseer el sacerdocio? MUJ ERES J ÓVENE S: ACT IVIDADE S DE AP RE NDIZ A J E Multimedia Análisis de grupo El usar los materiales producidos por la Iglesia, como DVDs, video clips de LDS.org, CDs de música de la Primaria, etc. mejora el aprendizaje. Invite a una persona (o personas) aprobada(s) a la clase para contestar preguntas o analizar algún tema con la clase. Ejemplo: “¿Cuál es la norma del Señor en cuanto a la pureza sexual?” Las jóvenes podrían mirar “La castidad: ¿Cuáles son los lími­ tes?” y compartir las respuestas a las siguientes preguntas: • ¿Cuáles son algunas de las consecuencias de quebrantar la ley de castidad? ¿Cuáles son algunas de las bendiciones de cumplir con ella? • ¿Cuáles son algunas de las normas que el Señor ha establecido con el fin de ayudarnos a cumplir con la ley de castidad? Ejemplo: ¿De qué manera la ropa que uso y mi apariencia influyen en mí y en las personas que me rodean? Invite a cuatro o cinco miembros del barrio (jóvenes adultos, adultos y miembros mayores) para que asistan a la clase y respondan preguntas como las siguientes (o las jóvenes podrían proponer las respuestas): • ¿Qué tipo de vestimenta era popular cuando usted era adolescente? • ¿Qué ha aprendido acerca de la importancia de vestirse de manera apropiada? • ¿Cómo influye nuestra vestimenta y apariencia en nosotras mismas y en las personas que nos rodean? M UJ E RE S J ÓVE NES: ACT IVIDADE S DE AP RE NDIZ A J E F O R TA LE C E R SE M U TU A M E N TE Uno de los objetivos principales al enseñar a las jóvenes es instarlas a que expresen las verdades del Evangelio y lograr que lo hagan. Al prepararse para enseñar verdades, las jóvenes reciben la confirmación de las mismas en su corazón y su mente mediante el poder del Espíritu Santo. Compartir el Evangelio con otras personas también les permite fortalecerse mutua­ mente. El escuchar a una persona de la misma edad hablar acerca de una verdad del Evangelio puede ser tan importante, o incluso más, que escucharla de una líder o maestra. Son muchas las formas en que puede lograr que las jóvenes compartan lo que piensan y sienten en cuanto al Evangelio. Al considerar las ideas que se incluyen aquí, recuerde que las mejores ideas vendrán cuando piense en las necesidades de las jóvenes a quienes enseña. Tal vez quiera determinar cómo podría llevarse a cabo cada actividad para crear mayor interés y participación en las miembros de la clase. Cada una de estas actividades se puede realizar en forma individual, en grupos pequeños o como clase. Explicar el significado Pregunte a las jóvenes qué significa la doctrina para ellas Ejemplo: “¿Qué es la gracia?” Las jóvenes podrían explicar qué significa “gracia” para ellas. Podrían analizar preguntas como: ¿Qué es la gracia? ¿Qué significa salvarnos por la gracia? ¿Por qué necesitamos la gracia? Podrían compartir sus ideas como clase, en grupos pequeños o en un análisis de grupo. Preguntas para el análisis Invite a las jóvenes a analizar preguntas en parejas o en grupos pequeños. Ejemplo: “¿Por qué para Dios es importante la forma en que trato mi cuerpo?” Podría dividir a las jóvenes en grupos de tres y a cada joven podría entregarle una de tres preguntas: ¿De qué forma mi cuerpo es como un templo? ¿Por qué mi cuerpo es indispen­ sable para la exaltación? ¿Qué pautas ha dado el Señor para el beneficio de mi cuerpo y mi espíritu? Luego las jóvenes podrían tomarse un tiempo para estudiar pasajes de las Escrituras y citas que les ayuden a responder su pregunta. Después de eso, podrían tomar turnos para compartir su pregunta y sus respuestas. Hacer preguntas Pídales a los jóvenes que piensen en la doctrina y hágales preguntas al respecto. Ejemplo: “¿En qué forma puede ayudarme la bendición patriarcal?” A cada joven de la la clase podría entregarle una tarjetita y le podría pedir que anotara una pregunta que desee hacer acerca de las bendiciones patriarcales. Las jóvenes podrían trabajar juntas en grupos pequeños para encontrar pasajes de las Escrituras, citas de discursos de conferencia o in­ formación de Leales a la fe que les ayude a responder sus preguntas. Un integrante de cada grupo podría informar a la clase cuál era su pregunta y qué encontraron que les sirvió de ayuda para contestarla. Enseñar a alguien Las jóvenes deberán proponer ideas sobre cómo podrían enseñar la doctrina a otra persona. Ejemplo: “¿Por qué es importante la familia?” Las jóvenes podrían elegir una doctrina sobre la familia que les gustaría enseñar a alguien (como: “La familia es una parte central del plan de Dios”, “La familia es el mejor lugar para aprender y vivir el Evangelio” o “Las familias tienen el propó­ sito de ser eternas”). Podrían escribir algunos puntos clave que enseñarían acerca de esta doctrina. Podrían practicar enseñándosela a otra joven de la clase. Testificar de la doctrina Invite a las miembros de la clase a compartir su testimonio de la doctrina. Ejemplo: “¿De qué manera mi diezmo y mis ofrendas de ayuno bendicen a otras personas?” Las jóvenes podrían escribir en forma anónima su testimonio de las bendiciones que vienen por pagar el diezmo. Luego podría recolectar sus testimonios y compartirlos con toda la clase. Escribir acerca de la doctrina Pida a las miembros de la clase que escriban lo que piensan y sienten acerca de la doctrina. Ejemplo: “¿Qué puedo hacer para que la Santa Cena sea más significativa para mí?” Las jóvenes podrían escribir una carta dirigida a una persona ficticia que no sea miembro de la Iglesia. En la carta podrían compartir lo que piensan y sienten en cuanto a por qué la Santa Cena es importante para ellas. Luego podría recolectar las cartas y leérselas a toda la clase.