ENTREVISTA A JORGE MACRI
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ENTREVISTA DESDE EL DESPACHO DE JORGE MACRI, EL INTENDENTE GANADOR DEL 2013. “LA GENTE te vota SI ES FELIZ” El Intendente de Vicente López brindó una larga y cordial charla a dos días de la victoria del Frente Renovador con el 49% a nivel municipal. Además de su análisis sobre los resultados obtenidos, opinó sobre la el rol del político en la escena sociopolítica actual, la figura de Sergio Massa, el kirchnerismo, la importancia de la familia en su labor cotidiana y sus proyectos para el 2015. L uego de esperarlo varias horas, la puerta de la sala de reuniones que posee la Municipalidad de Vicente López se abre y una decena de personas se retiran exaltados y hablando entre sí. Detrás de ellos se distingue la figura de Jorge Macri quien nos llama y nos invita a pasar a su despacho. Luce cansado pero, aun así, nos recibe con una sonrisa y con ganas de hablar. No es para menos: ganar con un amplio porcentaje de los votos es un logro que marcará un antes y después en su vida. Él es protagonista de esta victoria y por ello decidimos sentarnos cara a cara, encender el grabador y comenzar con la primera pregunta. A pesar de ser reconocido en la esfera sociopolítica argentina, nos gustaría que se presente, no solo como intendente, sino como persona. Soy Jorge Macri, tengo 48 años, tres hijos de quince, trece y nueve años, me gusta mucho cocinar...comer mucho también desgraciadamente (risas). Disfruto escuchar música, por eso fui Disc Jockey. Sigo jugando al tenis, menos de lo que me gustaría, y estoy como intendente hace 21 meses. Anteriormente fui seis años diputado provincial y hace más o menos ocho años que empecé en la política. Nunca pensé que iba a hacer política. La verdad creo que encontré mi vocación. De grande, pero la encontré. ¿Y de chico qué quería ser? Hay un momento en el que querés ser cualquier cosa parecida a un héroe. Pero nunca político… No, no era el típico chiquito que quería ser Presidente, como Horario Rodriguez Larreta que de chico decía “¡quiero ser Presidente!”. Nunca en mi vida pensé eso a esa edad. Lo más normal en mí era el camino que terminé eligiendo cuando terminé el colegio que era algo vinculado a la construcción. Mi padre y mi tío tenían empresas constructoras y por eso estudié Arquitectura, sumado a mi inclinación más al arte. Evidentemente no era mi vocación. ¿A qué edad empezaste a sentir que tenías que estar en este despacho? En el 2001 y 2002 con la crisis empecé a pensar si me tenía que ir del país. Esa fue una situación muy angustiante. Casi una sensación de guerra civil: argentinos peleándose con otros argentinos por el hambre. En ese momento, mi padre ya estaba bastante enfermo, entonces sentí que si yo me iba justo cuando él estaba cerrando su vida, sería un fracaso para él porque mi padre, junto con mi tío y mi tía vinieron cuando eran muy chicos. Entonces él podía sentir que se esforzó toda su vida y al fin de su ciclo, sus hijos y nietos terminan repitiendo su historia”. Justo ahí me llama Mauricio Macri y me invita a hacer política y me terminé quedando. ¿Qué le diría a aquellos que se fueron del país? Desde el deseo les pediría que vuelvan, pero para muchos esto pasó hace tanto tiempo que su vida está en otro lado. En realidad, les preguntaría si extrañan más que decirles. Tengo amigos que se han ido: algunos volvieron, otros no. Me resulta raro imaginarme fuera de mi país. Del chico de Tandil al hombre que está hablando en este despacho, ¿cómo ve el camino recorrido? Yo tiendo a no trazarme planes de a muy largo plazo: siempre estoy atento a lo que la vida me va planteando. Yo soy un tipo feliz, la verdad que estoy agradecido a la vida porque me dio unos hijos maravillosos y una mujer que me acompañó muchos años, amigos bárbaros del colegio, del rugby y del ambiente político. Yo hago un balance muy positivo de este camino recorrido, inclusive más allá de los logros políticos que son un reconocimiento. Acabo de tener una elección que es histórica en Vicente López: nunca un intendente sacó tantos votos en una elección intermedia. Pero yo siento que estoy feliz y que los que me quieren se sienten razonablemente orgullosos de mí, lo que es fundamental porque la mirada del otro siempre fue importante para mí. Estos 21 meses fueron los mejores meses profesionales de mi vida porque nunca hice nada que me llene más que esto. “(...) no era el típico chiquito que quería ser Presidente (...)” ¿Qué significa para Usted ser intendente? Ser intendente significa una gran responsabilidad porque todos los días te vas a dormir pensando que hay 300.000 personas que, de alguna manera, dependen de vos y que podés hacerlos más felices o infelices si hacés bien las cosas o te equivocás. Al mismo tiempo, más allá de tener esa escala tan monumental de personas, es un trabajo que tiene una escala personal donde podés conocer gente con nombre y apellido que te conocen a vos y que te cuentan sus historias de vida. Así que es muy lindo. A pesar de ser un laburo muy demandante, lo que hace falta para llevarlo bien es tener una filosofía de rescatar todos los días aspectos positivos, porque el 90% de las cosas son duras y difíciles. Pero si lográs abrazar ese 10% de las cosas buenas que suceden, lo vas llevando con felicidad. Hasta ahora me fue funcionando, ojalá dure. ¿Por qué dice que la política es un rubro desprestigiado? Porque no le ha dado respuestas a la gente y porque la política está en deuda con el vecino. Yo me meto a este ambiente por eso: yo veía que los que estaban tenían muy poco que ver con lo que a mi me gustaría ver en la política argentina. Yo creo que terminé haciendo lo que a mi me hubiese encantado que hagan por mí. Me parece que en la Argentina hubo, por mucho tiempo, gente que tenía la capacidad y "Ser intendente significa una gran responsabilidad porque todos los días te vas a dormir pensando que hay 300.000 personas que de alguna manera dependen de vos..." ¿Se dejan cosas de lado al hacer política? Sí. En realidad en cualquier actividad o trabajo que te lleve mucho tiempo dejás cosas de lado. Lo que tiene esta profesión es una cosa muy extraña: es muy raro ser exitoso en un rubro desprestigiado y es muy difícil para tu familia porque quizás hiciste una gran elección, te quiere la mitad de la gente que lo manifestó en voto, tenés muy buena imagen pública, aun en aquel sector que no te votó. Pero por ahí el 20 o 30% de la gente que no te quiere inundan las redes sociales y tus hijos ven eso. Después volvés a casa y te dicen: “Pa, ¿viste lo que dicen de vos?”. Es negativo el impacto que tiene la política en la familia, es complejo, no es fácil. Hay que explicarles mucho, que ellos vean la importancia del trabajo que se realiza pero es difícil. formación para meterse a la política y no lo hizo. La gente está enojada y tiene razón. Lo que tenemos que hacer es lograr que el desprestigio baje para que buena gente se meta en la política. Yo todos los viernes almuerzo con chicos de los últimos dos años de colegio y les digo: “si la peor noticia que pueden dar a su familia es que en un futuro quieren hacer política, estamos en un problema”. Nuestra suerte depende mucho de lo que los políticos que están que en la Argentina hubo, por mucho tiempo, gente que tenía la capacidad y formación para meterse a la política y no lo hizo. La gente está enojada y tiene razón. Lo que tenemos que hacer es lograr que el desprestigio baje para que buena gente se meta en la política. Yo todos los viernes almuerzo con chicos de los últimos dos años de colegio y les digo: “si la peor noticia que pueden dar a su familia es que en un futuro quieren hacer política, estamos en un problema”. Nuestra suerte depende mucho de lo que los políti- cos que están en cargos hagan, porque son los que deciden sobre nuestra vida. Mauricio (Macri) siempre dice: “No terciaricemos ni deleguemos en cualquiera nuestra vida”, y tiene razón. ¿Hay algún error en el que hay que evitar caer todos los días? El peor error es aislarte y creerte que los que están alrededor tuyo pueden reemplazar el vínculo con la gente común. Yo no dejo que eso me pase pero no sé cuánto tiempo lo podés hacer porque es muy demandante. Yo rompo el protocolo todo el tiempo. Por ejemplo, ahora tengo una reunión y antes decido tomarme diez minutos e irme a un café. Cuando me siento el vecino primero te mira y se cuestiona: “¿será o no será?” o “si me acerco, ¿me matan?”, entonces yo les digo que sí, que soy el intendente y al segundo se acercan y nos ponemos a hablar. Obviamente, los primeros cinco minutos empiezan los reclamos pero luego te felicitan por las actividades y proyectos llevados a cabo. Por eso yo pienso que el error común de la política es el entorno, el quedarte aislado y no ver la realidad. Eso es con lo que hay que luchar en todos los niveles. El ámbito político argentino es muy competitivo y confrontativo, ¿es difícil manejar y administrar un municipio siendo perteneciente a partidos políticos opositores al Gobierno de la Provincia? Hay muchos obstáculos debido que el Gobierno Nacional ha instalado una lógica caracterizada no por la competencia, porque competencia es natural: uno quiere ser y el otro también, entonces competís. Pero esta situación es como una carrera de cien metros llanos donde un participante empuja al de al lado y encima no lo descalifican porque como no hay Justicia no hay “Cuando la Presidenta señala y se pelea, ella lo plantea desde lo discursivo, pero en las bases, en los grupos de gente con menos estudios o menos formación y que está más angustiada, eso se resuelve con violencia. “ réferi. La gente mira ese espectáculo y dice: “¿se acuerdan que estamos nosotros acá y que necesitamos que ustedes nos den soluciones?”. A mí no me gusta esa lógica. Yo no creo que la gente con la que compito sean enemigos a los que tengo que destruir. Nadie tiene el patrimonio de la verdad y hay que bajar dos cambios. Cuando la Presidenta señala y se pelea, ella lo plantea desde lo discursivo, pero en las bases, en los grupos de gente con menos estudios o menos formación y que está más angustiada, eso se resuelve con violencia. Entonces se debe entender que a veces a uno le toca ganar, y otras perder. Yo participé de varias elecciones y solo en tres gané; y no se me acabó el mundo cuando me tocó perder ni me sentí superior en el momento que gané. No me gusta esta lógica de señalar y dividir. Usted decía que la gente ve esta situación, pero el domingo la sociedad habló con el voto. ¿Qué análisis hace sobre los resultados? Primero siento que hicimos lo que tuvimos que hacer: cuando yo planteé que debía9 debíamos generar una reunión de muchos, aunque vinieramos de distintos orígenes porque había una gran cantidad de gente en la provincia de Buenos Aires que quería votar una alternativa ganadora al Kirchnerismo, no me equivoqué. Ni tampoco lo hice cuando afirmé que no había lugar para dividir, por eso a Francisco De Narváez le fue así, con el 5% de los votos. Espero que esto sirva para que el Gobierno Nacional escuche un poco más y que entienda que hay cosas que están mal que se deben corregir. Creo que con estos resultados logramos el primer objetivo: evitar cualquier intento de Re-reelección o Reforma Constitucional. Ahora hay que trabajar de cara al 2015. ¿Por qué la alianza con Sergio Massa?¿Qué aspectos de él lo atrajeron para llevar a cabo esta decisión? Porque traté de unir a todos los que pensábamos parecido y que quisieran reunirse. Tratamos que Francisco (De Narváez) esté con nosotros pero él dijo que no, que él estaba “solo o nada”, que quería encabezar la lista. Así que decidimos seguir sin él y reunimos veinte intendentes de distintas ideologías: radicales, peronistas, del Pro, vecinalistas, entre otros. Justo en este momento Mauricio y Sergio (Massa) parecerían alejarse y cerrar puertas entre uno y otro, pero yo voy a tratar de abrir esas puertas. Yo me considero un “abrepuertas”. Para cerrar puertas hay otros, por eso yo voy a tratar de mantener los canales de diálogo porque puede ser que compitan uno con otro o que estén juntos en un futuro. No lo sé porque falta mucho pero aún si compiten deben tener una buena relación. En los medios se menciona el fenómeno de la “jovencracia”, ¿usted cree que es el momento en el cual los dirigentes jóvenes deben avanzar en el panorama político? Sí, creo dos cosas: primero que hace falta un cambio generacional. Es muy bueno que los que hoy estemos haciendo política no nos hayamos enfrentado tanto en los setenta ni en los ochenta, que no tengamos muertos de un lado ni del otro porque eso baja el nivel de odio y de resentimiento. Ahora hay una camada de esa época que dicen “Yo nunca voy a estar con aquel porque me persiguió o mató a un compañero”, y uno lo respeta porque fueron épocas muy dolorosas y sangrientas. Entonces cuando pertenecés al rango etario de los cuarenta aproximadamente, a pesar de haber estado estudiando en la secundaria con la dictadura, luego pudimos votar por ende uno se convierte en un joven de la democracia. Ese cambio de generación es muy positivo. Además es muy bueno que los 1500 intendentes que gestionamos en el país tengan esa responsabilidad porque, al fin del día, la gente nos ve a nosotros, pueden acceder a los intendentes. Tenemos una sensibilidad con lo que pasa al vecino que es muy distinta a la que tiene un ministro de la Nación al que no ve nadie porque se baja o sube a un helicóptero y está siempre en ámbitos controlados. Así que me parecen esas dos cosas: es bueno el cambio generacional y es positivo que los intendentes asuman otra responsabilidad. Ya que nos hacemos cargo de los problemas, hagámonos cargo de las decisiones y definiciones. Hablando de tener sensibilidad con la gente, ¿qué significa para usted recorrer las calles? Recorrer las calles significa aprender, escuchar y entender que a veces hay distintos caminos para un mismo objetivo. Cuando uno dice “la gente está preocupada por la seguridad”, se piensa que la solución a la inseguridad es siempre la misma: una cámara o más patrulleros. Pero cuando caminás, el vecino quizás te dice que lo único que necesitan es que las veredas se puedan caminar bien y que haya buena iluminación, o que a una plaza se le saque una cantidad de arbustos que impiden la visión. Entonces es la generalidad que caracteriza a nuestro país es que a todos los habitantes les pasa lo mismo, pero en cada barrio, en cada manzana y cuadra se resuelve de maneras distintas y me parece que esa es la tarea que uno tiene como intendente: entender que hay un problema grande que tiene soluciones particulares. Eso es lo que más me llevo de caminar los barrios; además del cariño de los vecinos. Especialmente de las señoras de sesenta que me adoran (risas). Ese es un segmento donde tengo un 80% de imagen positiva y está bueno que te encariñes porque vos atravesás de un día complicado y viene una señora y te grita “¡Dale! ¡Seguí que vas bien y yo te quiero!” (risas) y eso te motiva. ¿Qué fue lo mejor que le dijo un vecino? Hay cosas que no se pueden repetir (risas). Bueno, las que sí se puedan… Me acuerdo de un día que fui al Centro de la Tercera Edad donde tenemos un Polideportivo para la gente mayor y una señora se me acercó y me dijo: “Si tuviera treinta años menos no te me escapás” (risas) y fue muy gracioso. Además a esa edad es como que tienen menos vergüenza y lo gritan frente a todos. Otro día, en un bingo a beneficio en La Lucila, una mujer me dice: “¿Qué perfume usás?” y yo le dije que no recordaba y me dice “Qué sugestivo…” (risas). Son momentos alegres que lo divierten y distienden a uno. Básicamente lo que te llevás de los barrios es mucho cariño. ¿Y lo peor que le dijeron? Una vez que me agredieron mucho gente de la política y yo estaba con mis hijos. La verdad que fue un momento feo porque estábamos haciendo un mural muy lindo con unos artistas y llegó una agrupación política, chicos de La Cámpora, que empezaron a agredir y estaba lleno de chicos. Entonces lamentablemente me fui para que no siguieran pasando ese mal momento. La verdad que la sensación de tener que irte cuando no tenés la culpa de nada es desagradable. ¿Por qué decide que sus hijos lo acompañen en sus actividades con los vecinos? Para verlos (risas) y para que entiendan que hay cosas buenas en este rubro porque si no ellos piensan otra cosa. El domingo gané con el 48% de los votos y ayer ya estaba enojado porque había dos o tres cosas que no las estábamos haciendo. Hablaba con un amigo que me decía “¡yo pensé que te iba a encontrar contento por lo de ayer!” y le dije: “Si, pero eso fue ayer”. Mi madre ya me decía de chiquito que soy el eterno disconforme y sigo siéndolo. ¿Quiénes lo inspiran? Mi padre es el modelo de hombre que me gustaría tratar de ser. Una persona emprendedora, sensible que además terminó siendo muy sabio. Nunca reclamó Además mis hijos deben saber que la realidad no es virtual: lo que hago no solo está en Facebook si no que está bueno que lo vivan. Que vean una plaza donde hay chicos que ahora se pueden subir a una hamaca y antes no podía, o que hay gente mayor haciendo ejercicios y eso son cosas que ellos se lo llevan como un regalo. Quiero que mis hijos tengan esa sensación de entender por qué hago esto y que se sientan orgullosos de lo que hace su padre. Es la contracara de entrar a las redes sociales y ver gente anónima que publica barbaridades para obstaculizar el trabajo de uno. Por eso me los llevo: para que vean que hay una parte linda de este trabajo. ¿Qué significa la familia en la vida de un político? Es lo más importante. Soy muy familiero. Lo viví mucho en mi casa “tana”: la familia reunida, la mesa, la comida. Ese momento de reunión, mesas de veinte, lío, vasos que se caen y comida que no alcanza. Es bárbaro. La verdad que la familia es el lugar donde todo está bien. ¿Qué lo motiva día a día a seguir cambiando y mejorando el municipio? Tengo un nivel de autoexigencia muy grande. Soy un eterno disconforme. "Quiero que mis hijos tengan esa sensación de entender por qué hago esto y que se sientan orgullosos de lo que hace su padre" cariño, lo que generaba que siempre tenía ganas de dárselo. Él tenía la capacidad de llamarte y decirte: “Hola negrito, ¿cómo estás? Bueno, te mando un beso”. Entonces en el momento que cortaba tenías ganas de ir a verlo e ibas. Lo más parecido a un modelo en mi vida es mi padre. Después hay un montón de cosas que uno rescata de un montón de líderes distintos como Martin Luther King por el concepto de “aunque supiera que mañana me voy a morir, plantaría un árbol”. Esa cosa de entender que uno es más allá del hoy y cómo podés influir en el mañana de alguien, es hermosa. ¿Qué sueños tiene para este municipio? Mi sueño para Vicente López es que sea el mejor lugar para vivir. La verdad, si tengo que resumir la labor de un intendente es lograr que la gente sea feliz. Ser feliz tiene mil formas: para uno, es conseguir trabajo, entonces la prioridad es el empleo joven y la bolsa de trabajo que es central. Para otros la felicidad es una plaza, que es el hospital esté bien. Como tiene mil formas, es un trabajo muy amplio pero lo simplifico al afirmar que la gente te vota si es feliz. Qué planes y proyectos tiene para los próximos dos años? Uno de los planes para el próximo año es seguir trabajando en la seguridad, porque es la principal angustia; en el espacio público, especialmente en plazas, paseos y en el vial costero que es bárbaro; y salud, donde hay un plan muy fuerte. Somos un municipio con un sector de salud muy importante. Es nuestro principal presupuesto porque siempre hay cosas para seguir haciendo ya que teníamos un servicio muy bueno pero se había deteriorado. 900 mil jóvenes no estudian ni trabajan en la Argentina, ¿cómo se afronta ese problema en Vicente López? Lo afrontamos desde varios lugares. Primero, invirtiendo mucho en la educación municipal porque es muy importante. Nosotros somos uno de los municipios con más presupuesto en educación y con más área, lo que ayuda a tener un sistema muy avanzado. También generamos mucha formación laboral porque es el segundo paso: que el joven encuentre rápido ayuda para conseguir trabajo. Ahí se inserta la Bolsa de Empleo Joven, una medida que empezamos en abril de este año y que logró conseguirle trabajo a 600 jóvenes en las empresas que están instaladas en el municipio. “Mi sueño para Vicente López es que sea el mejor lugar para vivir. La verdad, si tengo que resumir la labor de un intendente es lograr que la gente sea feliz.” Para mi es fundamental que el joven pueda trabajar cerca del lugar donde vive porque transformarse en un lugar donde ellos puedan expresarse y donde la mayor canti- eso le ahorra plata y tiempo para poder estudiar, por ende hay que crear un puente dad de gente pueda trabajar. rápido entre la salida del estudio secundario al trabajo, y si es cerca al lugar donde vivís, mucho mejor. “Nunca pensé que iba a Esto está muy relacionado con un tema estratégico para Vicente López. El municipio se consideró mucho tiempo un provee- que encontré mi vocación. De dor de gente para la Ciudad: las personas venían a dormir acá y de día se iba a trabajar o a pasarlo bien allá. De esta forma, el desafío es generar desarrollo local para que los jóvenes se queden porque son quienes realizan jornadas deportivas y culturales, emprenden y le dan un cambio de perfil a la sociedad. Vicente López tiene ese desafío: hacer política. La verdad creo grande, pero la encontré.” ¿Cómo se ve en el 2015? Espero que más flaco porque engordé como cuatro kilos en esta campaña (risas). Ojalá me encuentre feliz en el cargo que sea, pero me gustaría ser intendente. Abierto y dispuesto a hablar, Jorge se sometió sin vueltas a nuestro ping pong picante. - ¿Cristina o Néstor? Néstor - ¿Un líder político? Mauricio (Macri) - ¿Un héroe futbolístico? Enzo Francescoli - ¿Ramón Díaz o Matías Almeyda? El “Pelado” (Matías Almeyda) - ¿Univerisidad arancelada o gratuita? Gratuita ¿César Milani: a cargo del ejército o a juicio? Me falta información para contestarla - ¿Aerolíneas Argentinas privada o del Estado? Administrada por quien sea pero eficiente. 14 A pesar de ya haber apagado el grabador, la sonrisa y el buen humor de Jorge Macri se mantuvieron intactos. Se disculpa por la tardanza y nos contó la cantidad de reuniones de presupuesto que debe seguir presenciando. "Hay que seguir esforzándose para seguir mejorando el municipio", afirmó. El intendente nos saludó amablemente y volvió a su despacho a prepararse para las próximas jornadas y reuniones, a las cuales definió como "arduas y cansadoras", pero fundamentales para seguir avanzando en este camino, cuyo objetivo es otra victoria electoral. Esta vez, en el 2015. "Estos 21 meses fueron los - ¿Moreno debe continuar en su función o renunciar? Tiene que renunciar porque ha demostrado ser incapaz. - ¿Cepo al dólar o desdoblamiento cambiario? En realidad ninguna de las dos porque me parece que es sincerar una realidad: la gente quiere tener dólares y desagraciadamente no quiere tener pesos. Hay que darle libertad al mercado. - Tandil o Buenos Aires? Vicente López. - ¿Justicia provincial o nacional? Justicia nacional o provincial pero descentralizada. Necesitamos que esté más cerca de la gente y que haya más fiscalías. - ¿Qué fue peor: el "me quiero ir" o "se come por $6 por día"? “Me quiero ir” - ¿Policía municipal o provincial? Policía municipal. - ¿Su peor defecto y mayor virtud? Son las mismas: ser un eterno disconforme. - ¿Deporte al que peor juega? No juego ningún juego en el que sea malo (risas). Trato de evitar los “papelones”. - ¿Cómo es en la cocina? Un grande. - ¿Su mejor plato? Cualquiera, me encanta inventar. Pero compiten asado y pastas. - ¿Su mejor y peor recuerdo? El mejor, el nacimiento de mis hijos y el peor, despedirme de mi viejo. - ¿Un lugar en el mundo? Tandil. mejores meses profesionales de mi vida, porque nunca hicenada que me llene más que esto"
