18 Jueves 18.02.16 EL CORREO CIUDADANOS VARIAS ALEGACIONES DE LAS EMPRESAS Principio de confianza legí- tima. La Administración genera signos externos que resultan lo suficientemente concluyentes como para inducir razonablemente a un particular a confiar en la legalidad de la actuación administrativa. Competencia lo rechaza y recuerda que Educación les pedía por carta que pujaran por los lotes. Prescrito. La supuesta infracción estaría prescrita, al menos sobre los contratos entre 2003 y 2012. Competencia recuerda que el último contrato finalizó el curso 2010-2011, en junio de 2011. Por ello debemos concluir que el plazo de 4 años de prescripción finalizaría en junio de 2015 y el expediente sancionador se incoó en agosto de 2014. Territorio de actuación. El montante por las adjudicaciones de los comedores en una década supera los 850 millones de euros. :: MICHELENA Las firmas de catering alegan que el Gobierno vasco les hizo creer que todo estaba en regla También argumentan que el supuesto reparto de mercado entre 2003 y 2012 estaría «prescrito», justificaciones que Competencia rechaza :: DAVID TABERNA SAN SEBASTIÁN. Las ocho empresas de catering sancionadas con 18 millones de euros por repartirse el mercado de los comedores escolares públicos no han estado calladas durante el año y medio que ha durado la investigación de la Autoridad Vasca de la Competencia (AVC). En sus diferentes alegaciones presentadas ante la AVC, las ocho firmas exponen argumentos técnicos y jurídicos para negar la existencia de un pacto. Entre ellos, rechazan la multa al amparar su comportamiento entre 2003 y 2015 en el principio de confianza legítima. En otra palabras, que dado que los diferentes departamentos de Educación nunca pusieron pegas a su modus operandi –llevarse siempre los mismo lotes ofreciendo los precios más altos–, entendieron la legalidad de su actuación administrativa, confiando en que contaban con el visto bueno del Ejecutivo vasco. Tal y como recoge la resolución de la AVC, de acuerdo con la jurisprudencia del Tribunal Supremo, el principio de confianza legítima debe aplicarse cuando la Administración genera signos externos que resulten lo suficientemente concluyentes como para inducir razonablemente a un particular a confiar en la legalidad de actuación administrativa. Bajo este principio, las empresas rechazan la existencia de ningún pacto y para ello argumentan que el propio Gobierno vasco ha validado año tras año las adjudicacio- nes, que les ha permitido llevarse los mismos lotes, valorados en cerca de 850 millones de euros. En resumen, las empresas recuerdan a Competencia que si el laboratorio elegido por el Ejecutivo ha considerado que solo ellas cumplían los requisitos para aspirar al contrato, y una vez elegidas, el Gobierno vasco aceptaba sus ofertas, el resultado desde 2003 es una «consecuencia natural e inevitable». Sus argumentos no les han valido de mucho. La AVC rechaza la justificación de la confianza legítima. Así, recuerda que año tras año desde 2003 hasta 2012, el Departamento de Educación remitía cartas a las empresas solicitando sus ofertas para los lotes en que hubiesen recibido homologación, por lo que supuestamente ya había competencia entre ellas. La AVC advierte que el Ejecutivo vasco –más allá de que su falta de control ha provocado sobrecostes– no ha dado ningún paso ELA pide que se revisen los precios de los comedores escolares tras reducirse su coste :: M. F. V. BILBAO. El sindicato ELA reclamó ayer que se revisen los precios de los menús de los comedores escolares teniendo en cuenta «la bajada del coste del servicio» como consecuencia del nuevo sistema de adjudicaciones tras la sanción por fraude a las ocho firmas de catering. La central dijo, además, que «no va a permitir» que la multa de 18 millones de la Autoridad Vasca de la Competencia a las firmas gestoras de los comedores escolares públicos «repercuta en la calidad del servicio ni en las condiciones laborales». ELA resaltó que la multa solo supone entre el 3% y el 7% del total del negocio de esas firmas. Y recordó que el sobrecoste que durante diez años se han llevado las empresas a su bolsillo «ha sido de más del 35%». La central asegura en este sentido que en diciembre de 2015 ya denunció que hubiese podido llevar a las empresas a no presentar ofertas competitivas en los diferentes lotes. Fecha del expediente Siempre aspiran a los mismos lotes –distribuidos por zonas– porque forman parte de su ámbito de actuación. Competencia recuerda que un volumen importante de sus contratos en colegios privados corresponde a lotes públicos a los que pueden aspirar y no pujan. El principio de confianza legítima figura en una larga lista de justificaciones desplegadas por las compañías, donde también se advierte de que el supuesto delito contra la libre competencia estaría prescrito, al menos sobre los contratos entre 2003 y 2012. Las cuentas de AVC son bien diferentes. Así, señala que el cómputo del plazo de la prescripción debe comenzar el día de cese de la actividad. «En nuestro caso – argumenta– como mínimo, el ‘dies a quo’ es la finalización del curso 2010-2011 en junio de 2011 (la multa comprende el periodo 2003-2012 y 2013-2015). Por ello debemos concluir que el plazo de 4 años de prescripción finalizaría en junio de 2015 y el expediente sancionador se incoó en agosto de 2014. Por ello no puede considerarse que concurre la prescripción alegada por algunas empresas», zanja la AVC. Lo cierto es que Competencia va echando por tierra todos los argumentos de las empresas. Y lo hace con datos, en algunos momentos llegando a sacar los colores. Las compañías sancionadas justifican que siempre aspiran a los mismos lotes –distribuidos por zonas geográficas– porque forman parte de su ám- bito de actuación. En el caso de Auzo Lagun, aspiraría a los lotes de Gipuzkoa porque se trata de una firma con gran penetración en el territorio. Lo mismos sucedería con empresas como Tamar, Eurest, Goñi, Basca y Gasca, con cocinas en Bizkaia. Sin embargo, la AVC abre el ángulo de la foto y llega a otra conclusión observando el mercado de las empresas en los centros privados. Así, apunta que más del 40% de los clientes privados de Tamar, Eurest, Tamar, Goñi y Baska se ubican en zonas en las que estas empresas han renunciado a presentar ofertas. Algunos casos son de libro, como el de Gasca, recuerda AVC, cuyo porcentaje llega al 93%, mientras que el de Tamar alcanza el 100%. Lo mismo ocurre, aunque en menor medida, con Auzo Lagun, que se lleva cada año los mismos tres lotes. «Alrededor del 25% de los centros escolares privados a los que sirve la firma guipuzcoana están ubicados en zonas que se corresponden con lotes a los que esta empresa no ha presentado ofertas en los contratos públicos», concluye la AVC para desmontar los argumentos de las firmas sancionadas. las irregularidades. «Señalábamos que la situación era muy grave. Denunciábamos la mala gestión del dinero público que el Departamento de Educación estaba realizando, permitiendo que empresas privadas se embolsaran grandes cantidades de dinero público de manera irregular». El colectivo de trabajadoras, recordaron ayer los portavoces de ELA, protagonizó una huelga en demanda de mejoras salariales. Con ese conflicto encima de la mesa, el Departamento de Educación autorizó el incremento en el precio del menú. «Se daba a entender que el sobrecoste de las mejoras salariales no podía ser asumido por las empresas. Ahora ha quedado demostrado que las firmas tenían margen más que suficiente», dijo ayer la central. ELA opinó que ni los trabajadores ni las familias son responsables de «la dejación que el Gobierno vasco ha hecho de la gestión del dinero público y del control de la privatización del servicio». Por ese motivo el sindicato apuesta por «defender el convenio, las condiciones laborales y la calidad del servicio».