P art cip ! Selecciones del Reader’s Digest Compilación : Rogelio Carrillo Penso ¡Participe! Selecciones del Reader’s Digest Durante una visita que se nos ofenda o desaire, nos maban a mi puerta para que- hizo a una ciudad distante del cohíbe a dar cabida en nuestra jarse de lo insuficiente de la pueblo en que vive, a una amiga existencia a los semejantes. Y calefacción o para pedirme mía le tocó en suerte ser el úni- sin embargo, en un mundo que mandase a arreglar ense- co testigo de un accidente de como el actual, día a día más guida una cañería. carretera, en el cual un auto- grande y complicado, el indivi- móvil repleto de adolescentes duo necesita más desespera- Así y todo, al echar la se le fue encima a un camión. damente que nunca salir de su cuenta de esos dos años, vi Los muchachos culparon del aislamiento y participar en la choque al camionero, pero mi vida si aspira a vivirla con ple- mi favor. Aprendí bastante amiga se ofreció a declarar en nitud. acerca de negocios, de leyes y de la naturaleza humana, to- favor de él. A pesar de las molestias que le ocasionaría la ne- Hace años compré un cesidad de viajar varias veces a pequeño apartamento en cier- ese lugar, ella deseaba ante todo que se hiciera justicia. que dejó considerable saldo a to edificio en condominio. Poco después de esto, la ideas do lo cual ha sido muy útil. Igualmente aprendí a conocerme a mi mismo, para que expuse en la primera reu- saber, entre otras cosas, que Cuando le contó lo suce- nión general de copropietarios no soy muy buen administra- dido a la señora de la casa don- movieron a uno de ellos a pro- de se hospedaba, recibió el con- poner que nombraran admi- porta más: de mis relaciones sabido comentario: “Pero, ¡por nistrador del edificio. Acepté, con los copropietarios nació amor de Dios, muchacha! ¿Por aunque con alguna renuencia. qué se ha metido en semejante Mis lío? había cometido una tontería. amigos opinaron que “¿Para qué buscarte quebradeFrecuentemente oímos a ros de cabeza?” “Eso te traerá personas bien intencionadas y mucho trabajo y poco o ningún estimables escudarse en frases agradecimiento”, me decían. Y hechas, tales como: “No quiero no anduvieron descaminados. buscarme Durante los dos años en que complicaciones”, “Eso no es asunto mío”, u otras desempeñé el cargo de admi- semejantes, que recuerdan la de nistrador sin sueldo, no falta- Caín: “¿Soy yo acaso guarda de ron preocupaciones ni moles- mi hermano?”. Tales expresio- tias: el problema de equilibrar nes reflejan en cierto modo la el presupuesto; las iracundas época en que vivimos. El temor, reclamaciones de los que lla- bastante generalizado, de que dor que digamos. Lo que im- la amistad que me une a alguno de ellos y ha embellecido mi vida. En varias ocasiones me ha sorprendido lo mucho que salimos ganado al intervenir en los asuntos humanos, bien sea tomándonos la molestia de ayudar a un extraño, asumiendo con valor cívico una responsabilidad o protestando ante una injusticia. Pequeñeces, actos al parecer insignificantes, son sumandos del total que todos podemos __________________________________________________________________________________ Gotas de Conocimiento © 24/11/2006 09:00:43 a.m. Pag. 2 ¡Participe! Selecciones del Reader’s Digest aportar al mejoramiento del peto como lo están ustedes No hay que negar que mundo en que vivimos y, con haciendo con esta señora? No interesarnos por los demás ello, al de nuestra propia vida. sin sorpresa de mi parte, baja- supone riesgos de nuestra Cuanto hagamos animado del ron la cabeza avergonzados y aparte. La persona de quien sincero propósito de tomar par- de ese momento en adelante nos enamoramos tal vez nos te activa en nuestra común guardaron compostura” hiera cruelmente; bien podrá suceder que, si tratamos de existencia, nos llevará ciertamente a engrandecer nuestro ¿Verdad que es curioso reconciliar a dos individuos yo en ese nosotros en que se en- que, al tender la vista al pasa- enemistados entre sí, ambos treteje el hilo de una vida con do, sean los momentos en los se vuelvan contra nosotros; los de otra vida, para que el in- que nos relacionamos más es- quien se arroja al agua a sal- dividuo no sea hebra aislada en trechamente con el prójimo los var a quien se está ahogando el mundo, sino como parte in- que nos parecen más libres de pudiera verse arrastrado al tegrante de la urdimbre huma- temores, de aburrimiento, de fondo con él. Pero también na. pesimismo? es cierto que vivir siempre a Broschmann en and Georg su obra la defensiva contra desenga- Happiness ños, desdenes o ingratitudes, viajaba un amigo mío iba tam- (“Humanidad y Felicidad”) que acaba volviéndonos insensi- bién una pandilla de jovencitos los desventurados años en que alborotadores, que empezaron Noruega, su patria, gemía bajo a mofarse de una señora ya en- la ocupación de los nazis, fue- Dice el escritor inglés trada en años porque les pidió ron, por extraño que parezca, C. S. Lewis en su obra Four que dejaran de empujar. “todas la época en que él se sintió más Loves (“Los cuatro amores”): las personas que allí estaban”, feliz, más lleno de vibrante “si quieres conservar incólu- me contaba mi amigo, “se hicie- energía. En aquellos días, pese me tu corazón, no lo entre- ron las desentendidas, unas mi- a la amargura, las penalidades gues a nadie, ni siquiera a un rando por la ventanilla, otras y el constante peligro, él y animal. Rehuye todo vínculo hacia el frente, como si ningu- otros patriotas de la Resisten- de cariño, encierra el corazón na tuviese ojos para ver ni oídos cia estaban hermanados por lo en el ataúd de tu egoísmo. para oír la falta de respeto de noble del ideal que los anima- Pero, hasta dentro de ese los muchachos. En principio yo ba y por la confianza que cada ataúd (oscuro, seguro, inmó- hice lo mismo que los demás, uno de ellos tenía en sus com- vil, hermético) ha de cambiar pero de repente me dije: ¿seré pañeros. Muchos hombres que tu corazón. No se romperá: se capaz de estarme sin hacer na- han luchado hombro a hombro volverá insensible, impene- da? Esto forma parte del mun- en días difíciles recuerdan con trable, irredimible”. do en que vivo. Inmediatamen- nostalgia cómo en aquel tiem- te les grité: ¿les gustaría que a po se sintieron más unidos que sus madres les faltasen el res- nunca a sus compatriotas. En el autobús en el que Humanity Cuenta bles e inhumanos. Hoy nos inspira lástima la persona que esquiva el __________________________________________________________________________________ Gotas de Conocimiento © 24/11/2006 09:00:43 a.m. Pag. 3 ¡Participe! Selecciones del Reader’s Digest trato humano y se recluye entre Poco a poco empezó a intere- ¿Cómo haremos para las cuatro paredes de su casa a sarle la suerte de los demás. ajustar nuestra conducta a vivir rodeada de chucherías o “Hombre dichoso”, leemos en esa filosofía? A mí entender, de tesoros; vemos en ese volun- una de sus páginas, “es aquel hemos de comenzar atenién- tario aislamiento el síntoma de que, siendo liberal en el afecto donos a estas normas, que no una perturbación e inclinado a ampliar el campo necesitan justificación: No emocional. En efecto, la mayo- de sus simpatías, halla en cul- pasemos de largo frente al ría de los enfermos mentales tivar afectos y simpatías su necesitado de ayuda: arries- internados en los hospitales re- propia dicha, así como en la guémonos ayudar al extraño. huyeron las relaciones que im- circunstancia de que esto lo No eludamos los temas de pone normalmente la sociedad hace a él objeto de la simpatía conversación penosos o que a los seres humanos. y el afecto de los demás” nos afectan profundamente: profunda pongámonos en el lugar de Lo que la mayor parte de Tenemos, pues, que el nuestros interlocutores. No nosotros no sospechamos es gran secreto de lo que vale pa- busquemos pretextos para que todos incurrimos a menudo ra el hombre entregarse a la en igual equivocación, aunque vida y solidarizarse con los del vecino, conocidos de ne- en un grado menor. El viudo o demás es que en ello reside li- gocios o parientes lejanos: la viuda siempre encuentran teralmente su misma vida. Ne- pretextos para vivir de puertas garnos a remos entenderlos mejor. No adentro y no cultivar nuevas compartir nos sitúa al margen nos conformemos con rehuir amistades, o el ciudadano que de la existencia, genera el vacío desaprueba el modo como se en torno de nosotros. sistemáticamente están ese caso. Todo propósito La vida y el amor son partes de un todo; mientras de desentendernos de los de- que el aislamiento, el no com- más, de no comprometernos, prometerse, limita nuestro desarrollo emo- equivale cultivemos su trato y procu- la responsabilidad, cualquiera que sea; hagamos algo por administra la cosa pública, pero en nada concurre remediarlo, justificar nuestro alejamiento a la muerte. Fichte, filósofo alemán cional y nuestro bienestar gene- del siglo XVIII, comprendió ral. esta verdad en nueve palabras: nuestro hogar, por nuestra ciudad, por nuestra patria. En suma, no seamos perpetuamente cautelosos y pusilánimes. Por el contrario: ¡Participemos! “el yo no es un hecho sino un El filósofo y matemático acto”. John Donne, poeta in- inglés Lord Bertrand Russell glés del siglo XVI, había dicho relata que en su juventud fue más melancólico y propenso a con- hombre es isla contenida ente- siderarse desdichado, porque ramente en sí mismo”. llanamente: “ningún vivía encerrado en sí mismo. __________________________________________________________________________________ Gotas de Conocimiento © 24/11/2006 09:00:43 a.m. Pag. 4