E .-+7" L_E H_A_C_H_A L Podro Plaza Martínez (INEI) luis Oporto Ordoñez (OLA. ) "Ama manchachikinkichu, sumax maxt'a; yawar mayupipis rikukuy. Ama manchachikunkichu, sumax maxt'a; ayrampu yakuchá nillanki" c Nó vayas a asustarte, bravo joven; aunque te veas en un río de sangre. No vayas a asustarte, bravo joven; haciendo de cuenta que es agua de ayrampu' ( CARPIO} 1979) El tinku de Macha es una manifestación cultural alrededor de la cual giran diversas prácticas de diferentes características: rituales, sociales, económicas, religiosas, y aún el modo de vida. En fecha 3 de mayo a nivel nacional se festeja la "fiesta de la Cruz", del calendario católico, que sin embargo, sufre una serie de meadas con elementos de la elisión ancestral nativa, como es, precisamente el 'Tinku". En esta ocasión visitamos la zona del Norte de Potosí, concretamente la localidad de Macha, ubicada a 95 Km. del Centro Minero de Siglo XX. ^El cantón Macha, es uno de los 9 que conforman la.jurisdicción de la primera sección de la provincia Chayanta, cuya capital es el centro minero de Colquencha. Esta provincia fué creada en base a la antigua provincia colonial del mismo nobre, ratificada en enero de 1826, hasta que, durante la presidencia del general Hilarión laza (1877), se divide "en Ñor Chayanta y Sur Chayanta, Finalmente en 1880 (23--IX), una ley del general Narciso Campero, a la sazón presidente de Bolivia, crea la Provincia Charcas y denominó a la otra Chayanta. (AYAIA, 1979).' Macha desarrolla una economía netamente agrícola, Está vinculada por carretera a los centros mineros de Colquencha, Siglo XTj Catavi, y las localidades civiles de Uncía, y Lia ,11a gua. Se nota claramente que Macha ha sido perjudicada enorme meri te por efectos de la contaminación de las aguas de su río prinDipal, (colquencha), que trae consigo residuos minerales provenientes de la explotación minera en el cercano centro minero de Colquencha. Existe otro río (Jatun Mayu) que provee agua pota— ble para satisfacer las necesidades de la población; ambas c o — rrientes confluen "encontrándose"-: En la primera indicación de un "encuentro, un tinku" Los vecinos que residen permanentemente en el pueblo se dedican a la agricultra y al comercio y sirven de intermediarios en la compra de los productos agrícolas producidos en la región. La carretera principal, aparte Se comunicar a los centros mencio nados, conecta a Sucre y Potosí.. Publicada .inioialmente en; NOTAS Y NOTICIAS LINGÜISTICAS ( 4 ) : 4 INEL (Bolivia) 1931 p. 8-18. La Importancia de Macha durante la historia de Bolivia se puede demostrar con un breve'esbozo. Durante la época precolom bina, en opinión de los cronistas españoles, ya se explotaba oro en la región vecina de Aullagas* Durante la colonia Macha ha si do la cuna del cacique Tomás Catarii , quién pasó a la historia, como uno de los proceres de la liberación del quechua, pues, per sonalmente, venciendo 600 leguas (1778) se dirigió a "reclamar ror los naturales" ante el Virreynato del Río de la Plata (Buenos Airea), sin lograr mayores resultados: posteriormente continuo su peregrinación en busca de justicia social, hasta Charcas, o Chuquisaca, sede de la Real Audiencia de Charcas. La negativa de ías autoridades españolas, dio como resultado directo, una insurrección de vastos alcances, que precipitó el levantamiento ie un otro cácique en el Perú: José -úabriel Condorcanqui, caci qué de lunfasuca, ^que puso sitio al Oukco con un ejercito de 100 mil hombres. (lewin, 197?)r Durante la época repuolicctna y hasta nuestros días, se La mantenido como' provisionador de los alimentos y productos agrícolas de los principales centros mineros así como de vínculo C O X J . las regiones de Chuquisaca y Potos:!» El linku es una práctica ritual que se mantiene desde época-, remotas. En ella intervienen todas las comunidades y ayllus de la región, que se dirigen en grupos que fluctúan "entre 20 hasta 200 combatientes, en este grupo se pueden encontrar niños (12-13 años); jóvenes y ancianos, mujeres e incluso impedidos (mancos, tuertes), qué se dirigen con premeditad 'n a entablar una serie de com ates con contendientes de ayllus y comunidades contrariase Sobre su origen existen varia versiones e hipótesis, s.n en bargo no exite un trabajo de Investigación desde el punto de ta antropológico que haya dado a luz su génesis, su desarrollo histórico y otras carácterísticas Una de las causas del tinku ha sido y es, el litigio por te_ rrenos ( P I a T T , . 1 9 7 6 ) , donde se desarrollaban, los combates de acuci do a las épocas en que se presentaba el conflicto. Sin embargo, actualmente se ha establecido una fecha fija en esta región para la práctica, ya ritualizada, ^del tinku, Otra costumbre muy exten dida es el "rito de iniciación de los jóvenes a la edad madura";""" la prueba de : "hombría" del combatiente; el rito del combate por el matrimonio con una j'ven doncella, Indudablemente el atuendo no es el que originalmente utili zaban los habitantes de Solivia en la época preoolonial. La ve_s timenta del guerrero con una montera (casco de cuero curtido),-'"*' ocasionalmente los "ñucus" (guantaletes de cuero), la chaquetilla, lo s calzones y pantalones, fueron impuestos por las autori dades españolas luego de las grandes sublevaciones indígenas de 1 7 3 0 - 8 2 . son: i Los principales ayllus que intervienen en el tinku de Macha C A B I L D O S 1. 2. 3. 4. 5. 6. D E A L A S A Y A Oscoria)Takisa Fisichua (Plato del gato) (sic) Cas tilluma-Taramarca Bomburi Choque Cayara Yocoma C A B I L D O S 1i. D E <* iluacoata San Lázaro 3. Viscachiri 4. Humagila 5. Uluchi 6. Kella Kasa 2. M A J A S A Y A 7. '8. 9. 10. 11. 12. 13. - 19 Salina Alta Salina Baja Chalviri Kariporco Canta Canta Titiri Palcoyo 14- n1 n 8c 9c 10. 11. 12. 13 c Kotañizo Chacarani Lucas Kahua Turahui Kayarani Miiluri Llustaki (A MOTETA, 1980) El sincretismo religioso se manifiesta en forma clara en las diferentes ceremonias que' se llevan a cabo, durante las vis. peras de la fiesta de la Cruz» Una semana antes el pasante o alférez. debe cuidar de proveer las bebidas y comidas que se consumirán a lo largo de la fiesta, que consiste en la preparación do la chicha en base a cereales. En la región de Macha se utilizan el maíz como materia prima. En esta ocasión se faena un cordero, el que servirá para satisfacer las necesidades de sus invitados, tanto antes del tinku, como a lo largo dol desarrollo de la festividad. Hasta este momento al Cristo de la Cruz, 'Pachaqa', se encuentra en el domicilio del alférez, que se ociipa do que se encuentre en un lugar adecuado. Ge procede a su vereración y se mantiene encendida una velac Con este proceaituien-jo se asegura a la familia del alférez la bendición del Dios cristiano. Entre tanto los invitados del alf'rez, que a esta altura son los vecinos y familiares m's allegados a su familia, empiezan a beber y a festejar el evento religioso, intercalando la libación con las comidas preparadas por las mujeres de la familia H¡n casa del Mayura la situación es similor, pues también prepara y dispone de alguna comida paz-a sus propios invitados, . Sjl -rayará realiza ur.-. Siria ib a les- común arios rerJlMmff 'Vf llu, ínfiíárdtítes a : 1 si;ir de riiM Wir&ri-iKn, arí" . • « 1 8 fiar, ta Vira sucir s. : _v=ri •. ?c*UaJo lo que salga., er 1-: : • ••• alfé:-Jr . - " ' *" - sí = ;. 1 vv..-; '**&xS!c ! .. ' 'vio-.- y mayor. i ta, ar.un Él' día 2 áe -ayo so ,v " , . ' <u o-; < cro, n •^rfirMSe7 3? i? roche, festejan con bebida la ocasión pape :araa¡¡íj¡®e 1". s . „s-\ . ii.', es. -o . .. . 3 ene as nt ra si •" varié del avq~ " y --5et~~ ^ ^ ~ * ^v • - ^ ^ ^ ^ y * ^s o**^ _ -llSfBtS ¿Z. _ . £ I". . ; -TMIl. .3 ll- COIIE XrUiClüIi 6Sl rma dfe vivienda pequeña ( 2 x 2,50 mt»), con techo de paja y paredes de adobe y en algunos casos de piedra sobrepuesta sin la utilización de argamaza, Tiene un ingreso c„e forma trapezoidal ( P L - ' í I T : Espejos y Maíz), que sin duda en un elemento precolombi no. Al fondo del calvario se encuentra ccro pachaqa, que carece de vestimenta y de una dimensi'n más pequeña que les pachaqas de los. pasantes. Esta pequeña construcción tiene otros elementos^, completan su comprosici 'm tiene una especie de mesa de plfedra " donde se colocarán las velas y las "mesas" preparadas con objetos de saumar el lugar» A las doce de la noche los comunarios, al mando de su alfé rez y los m's viejos de la comunidad inician la ceremonia de la ^ch'alla^en el calvario. Se traslada el Pachaqa del domicilio del alfárez hasta la cima de la montaña (250 mt£).. donde se ha- .. ¿o lia el Cristo da -la Cruz de la comunidad. Se procede a elevar las oracionés -ele rigor y a vestir al Pachaqa del. calvario, los jilacatas y curacas efectúan los ritos, Al tiempo de elevar ora clone,'"* y plegarias a las deidades pro ias de su rasa, las cum brera'a, la pachamama., brindan ele manera especial por las saygatas \ (terrenoo) crue cu producción sea abunda te j en una mezcla n ligiysa con suna fé; representada en su -generación por la cruz y teda ru significado* Les enanas" ¡, ''señores de la cruz * > engalado con herno ses ejemplos de arte textil nativo se encuentran listos para la fiesta que acaba de iniciarse. Muchos de estos llevan valiosos por. too, listados ron chalinas y faja,1, multicolores., la sitúa -• cica seoio-^eonómi-eá determina en algunos casos el uro de prendas de vestir már. costosas qus son costeadas por' los parantes, diferencian '.-eje del rosto per su valor monetariot En algún-ca^os , granos de pat. antes y comunarios influenciados por la "civilizacic; occidental51 degisten de utilizar atavías nativos, con el persamiento conciente ce que "nosotros ya no somos indiosiT 0 rosta el amanecer del día domingo 0 mayo) muchos continúan bebiendo, v.dro poco a ppco van retornando a hogares o quedando.?'. a lo de Jes amigos o parientes para lescans n. por el res*o del día.. x,n no re de le tarde, la actividad, vuelve a, renacer en ~ eraunio vi, i n a: a poco van ievant nidose los hombres y mujerc que a'; ó ene coi* par tiran hacia el j?ae blo- de Macha, iiai'-aa cal en en grupos en sus cesasr _ los hombres empiezan a vestirse para. marehar al l..aku, Algo así como una hora antes de la nu-sea nal sol, empiezan a reunirse en casa (¡.el pesante o alférez, Cada ayl"r o comnnidai. tiene la costumbre de dirigirse a un Irrar <* ? r¿a¡aicn que se encuentra en una. pequeña altura e loma > Allj. Llegar».'c esporádicamente les guerreros,, i medida que cr - oierdb en ttiüoz. o r .5 aligan una serie de can zas de .Inicia ci011 ; ; •.•1 en;f^i ente;' las imillas-«eaevas hacen~su*aparición encauce- ce al les y Ti:, -ente., al círculo ra-- d a n z a r . E n esta oponte 1 .1 po interpretan indis tintamente jas canciones con ,"jul a "i'-'.s v- e-berengos y leo copla.? tienen de "marchas al pueble de^nnan,?, up .-.a ríe lacion de su partida, su llegada, de .indica* clon de e-.i c y l"1 u j/c c cernida!, El alcalde del ayllu se encarga, do pi^ ñor'da dar '1- bebida y de organizar su distribución equitativa, .Lad mujeres y loo jóvenes van camino de Macha porta do en sus espaldan la chicha y los fiambres preparados para los dos -días que dura la fiesta de la Cruz y el Tinku, Luego se produce la salida hacia Macha» Aig^aa ya han par tico por su cuenta, especialmente las mujeres} algunas de ellas" encargadas dp transportar los cántaros de chicha al pueblo.. El grueso de lo£ 'lúa adores1, algunos ya bastante embriagados, parte en eonknnto hacia el pueblo. El grupo se desplaza en masa hay cactos y música, pero sobre todo gritos de coraje ( o uva. c . Khara,..)«, Algunos ayllus, coiro Urna Jila que vimos-, reúnen irnos doscientos 'guerreros1, los cuales de diez o meas en fondo avah zan en ion trotacillo belicoso, llegan do- el camino carretero, la escena es realmente impresionante. La voluntaria japone sa, Nao Nobuoka, que nos acompañó, manifiesta al respecto: "en el camino de regreso me ehcontr'é"con una escena emocionante. Eran las siete, y media, de la noche v estaba muy oscuro. En el - 21 camino frente a nosotros muchos campesinos estaban trotando lia cia Macha. No nos dejaron pasar y nuestro jeep adelante muy de£ pació detrás de ellos. En la oscuridad sus figuras iluminadas por la luz del jeep mostraban afán, entusiasmo y alegría, y me impresionaron mucho". los diferentes ayllus van llegando durante el transcurso de toda la noche; la velada del domingo, y hasta la madrugada del lune s (4 mayo). Ciertos ayllus practican todavía algunos rituales antes de marchar al pueblo. Los de Churiqala, por ejemplo, tiene fama por una práctica harto interesante, luego de reunirse en la ca sa del alférez durante la noche, el grupo parte hacia el río, ca mino a Macha, donde existe un peñasco que sirve de altar para eT sacrificio de un gallo. A las tres de la mañana, según el Alférez, se produce dicho sacrificio. Los 'guerreros1 en actividad febril toman sendos pedazos que luego ingieren, hasta que el ga lio ha desaparecido completamente. La creencia es que de ese mod4» obtendrán la fuerza del gallo para la pelea. Solamente, en tonces parte el grupo hacia Macha. Habiendo llegado a Macha, el grupo se dirige a la Plaza. Encabezados por las imilla-wawas, muchachas jóvenes previamente seleccionadas Dor la comunidad, el grupo ingresa a la plaza, d_i rigiéndose a la esquina de la torre de la iglesia. Las imillawawas ataviadas con sus mejores prendas, hacen flamear sus wipha las (banderas); mientras los hombres tocan sus jula-julas 6 'soqcsos'. grupo de siete cañahuecas de diferentes tamaños (arca 3 Ira. 4) que producen la música al compás de la cuál se mueven los 'bailarines'. Se hace un círculo, por donue 'en fila india' transitan los jula-julas. Frente a la torre de la iglesia se baila al son de los jula-julas. luego se dirigen a la otra' esquina, y luego a la otra, hasta completar una vuelta completa. Inmediatamente, desaparecen los jula-julas y hacen su apari ción los charangos, hábilmente ejecutados por los campesinos. El pasante ha quedado a la custodia del Pachaqa en la puerta de la iglesia, conjuntamente con el resto de los alfereces, en tan to los charangueros rodeados por los comunarios, entonan las "coplas macheñas" interpretando canciones (coplas) de bien veni da y cantos guerreros. Los "guerreros" continúan libando profu sámente bebidas alcohlicas y se encuentran predispuestos al com bate ritual que puede iniciarse en cualquier momento. Las imillawawas acompañan en las tonadas a los charanguistas blandiendo sus látigos, dispuestos a mantener el orden requerido. De una de las esquinas aparece un grupo de más o menos cien 'guerreros', guiados por las imillas (muchachas) que hacen flame_ ar las wiabalas. Vienen corriendo al trotecillo, gritando "campo, campo, luego dan vueltas en círculo en dirección contraria a las agujas del reloj. Luego de unas pocas Sueltas, parten hacia la otra esquina, gritando; "awajo, awajo" (abajo). El número de los grupos varía considerablemente, algunos grupos han dejado de lado los jula-julas y bailan al compás de un c'iarangnito solitario. Un grupo peq eño ingresa a la Plaza. Encabeza la fila_india un 'guerrero' bien ataviado, quien va ser ponteando y ladeándose de un lado a otro y moviendo los brazos en el ejatí'lo de la pelea del tinku. Es media noche, el murmullo de las voces, los gritos, los cantos, los charangos v los zapateos por una parte; las sombras 22 .leí gentío- los movimiento3 de los danzarines, las sombras pro jactadas en la torre, todo converge en un, espectáculo impresio natrce-,. Til may<j>:.a, especie de - jo fe del grupo, va castigando con su o a loa" «iueno laQjn bien o so espirar del grupo, Se hace i 1 CÍ-" ulo luego de taias vuelta;: se zacatea e:i los intermedios de 1 canchones. air "?ao rene i 1? as y empiezan los conatos de pelea» Un .•o ca. henli^,. se desafia con otros y trata de entablar pelea» ** ir.au"tan .y ce pronto unos corren hacia los otros, logrando la . -> "- sta aili-iiosJül mayora ayudado por las imilla-wawas . . v: enen atajando a su gente de Irs contrarios, chicoteándoles a ?•" ; -'. ( : •nai; ;;arte relativamente ¿eeprotegila donde los ' chi "o-'a'oii' tendrán mayor efecto, h'u tarea es manténer a sus hom« tac, a:.Ldos,, paaa evitar que- separados del grupo pueden ser n fcieaicn i ; , atacados por varios rivales a la vez. Tj nalmonte, e 1 cayora conduce a sus guerreros a la casa don penarán la noche„ Si mayor?*. y el alférez han-realizado los •-n a.toe necesarios para comprometer la colaboración de un veci so, a fia de tener la casa de éste a su disposición conformado '"•'•'O:,--..,,fl/.beralde operaciones'c Aquí es donde dejan la chi'ha, los fiafbaes y el alcohol mientras se desarrollan los coa'•a' o denle el guerrero agotado, pueda descansar sin molestias, los diferentes ayllus /an delimitando sus propios territorios", en isa sallas de la cuidad, representando de esta manera a 1 d'.a_ ración realizada-en sus ayllus. ÍTingun grupo o ayllu a. a - o at:ñaTesai estos límites fijados en las calles del ..: la"' ha coir'.onde pelig~o si transgreden esta ' ley'. .. 'au:'r" muy difundida .1 solicitar colaboración (MINK'A) syllna amigos, en caso de ser rebasados por un contendiera u ana^t-'j r.p.yor. la Mink!a os una institución rural extendida y.: '.p':..'.ro y las regiones quechuaymaras de Solivia y el a.. awar»en«ir aura.: (/ mayo ) en Hacha es teríso pero lie de etpacta t iva > - :>: llaradó el día esperado por todos, el " j. -a i ; las piraba;; de ^ e l e n á o y ;alaez de las venganzas y los a.i • . a i¿|niíioac o e .piritual • ár.;1 parantes riai quedado ai cuidado de loe Pachaqas, que al 1 'no '. aa- ar°aan ' a ua conglomerado de cruces que han sido traídas a r o los; ayilus y c o munida des del cantón de Macha. Ahora e_s 'i Ve hasta el medio áxá, cuando el cura del pueblo oficia la misa ¿o celebración y bendición de las cruces que suman arceos;' decenas, teniendo diferentes tamaños. valor artístico s-'. ~ l-a ce'libración "la la misa es parte de la fiesta católica a a Vara Cruz;,, el '-inlru es una práctica ritual que aprovecha es-ta . jasió:.. para realizarse mayura, el corregidor, el alcalde y las imilla-wawas-, han ..a ualo cuidado exclusivo de los guerreros de su comunidad o ají: u.. ellos los que cuidarán que las reglas consuetudinaas que rigen los combates se cumulan y así evitar la desapari e._ón, rte o herida de gravedad de los combatientes que repre serian a su pueblo. Son responsables ante los jilacatas y comu narioe, y c. ellos responderán de sus funciones al retorno. Las mujeres (hermanas, esposas, nijas) ce los combatientes coadyuvan caí esta difícil tarea, controlando a cada uno de sus parientes. Toé hombres da bando rivales se sitúan frente a frente for - 23 - toando una especie de círculo que por el fragor de la lucha y los intentos de embestida de un grupo al otro va cambiando tanto de forma como de lugar constantemente. Los hombres se miran entre sí, y cuando un 'guerrero' encuen tra con la mirada los ojos del rival con quien desea pelear, le grita algo, o más generalmente le desafía con un movimiento de la cabeza, quo se inclina hacia adelante como si le estuviera llamando. El rival desafiado si acepta el reto ingresa al cen» tro del círculo y empieza la pelea, violenta y rápida, terminan do cuando uno de los rivales cae al suelo. Hay veces en que am bos 'peleadores' caen y sus golpes y aún patadas continúan en el suelo. Intervienen los mayuras, las mujeres y los vecinos del pueblo quienes auto-nombrados como arbitros se dan a la tarea de controlar la pelea. Se ve mal que el caído siga siendo' golpeado, o más frecuentemente pateado por el que sigue de pie. Intervienen hombres y mujeres para separarlos': 'Ama Tapaychu' Lit: 'No le aumentes' (Ya no le golpees más). Todos entran a la pelea. los niños (doce, trece años), los jóvenes, los adultos, y hasta los viejos. Vimos a un mando, mo£ trar a un posible contendiente su muñón vendado como diciéndole: 'Mira, yo pele contigo aún así mando'. El otro acepta y se tren zan en pelea. En el tumulto perdimos la vista final. Los chicos que desean pelear se aproximan al ruedo y ya ar mados de valor le piden al vecino que sirve de control: ''Orqhori puway11'Lit: 'Sacámelo (uno)", Axllaripuway' Lit: 'escógemelo -**" (uno)'. A veces las mujeres también se trenzan en la pelea, general mente iniciada por la discusión con las otras mujeres al proteger a sus respectivos maridos. Se sacan algunas prendas con determi nación y se enfrenta decididamente, se dan de golpes, pero más frecuentemente se agarran de los cabellos, cuando son separadas mantienen en la mano un. puñado de pelo de la otra persona. Los tinkus 'encuentros' se desarrollan con todo vigor hasta media mañana, cuando los bríos' amainan, y se inicia un receso en las peleas. Algunos descansan. Otros siguen bebiendo. Un poco después del medio día se reinician los desafíos y los ruedos adquieren nuevamente excitación. Hay momentos en que el 'encuentro' degenera, especialmente en las calles aledañas a la plaza, donde dos grupos rivales se encuentran y se produce una batalla campal caracterizada por una lluvia de piedras. A medida que termina la tarde, los varios ayllus van retirán dose de la plaza del pueblo, otros 3e preparan para partir a sus"" comunidades. Los que han decidido emprender el retorno a la co munidad se reúnen en las afueras del nuebio, o en la plaza del"" río. Se descansa, se bebe, se curan las heridas, se masca coca, y algunos se alimentan un poco. La rivalidad entre ayllus, sin embargo, se mantiene inalterable y no faltan los incidentes, La playa del río puede convertirse en cual uier momento en un verdadero campo de batalla, donde las piedras se convierten en proyectiles en muchos casos mortíferos. Helaremos brevemente uno de estos enfrentamientos. Habíamos salido a la playa del río, camino hacia Poccata, para tomar algunas escenas de la salida de los ayllus hacia sus comunidades. De pronto el griterío y las desbandadas de la gente que escapaba de las piedras. Nosotros fuimos obligados a correr a una lo „ 24 ~ lema adyacente, de donde podíamos observar el curso de las accio nes. Desde allí logramos cubrir la totalidad del enfrentamiento campal. Por momento atacaba un bando, todos los atacantes lanzaban diestramente las piedras hacia el otro bando que retrocedía. Algunos utilizaban warak'as (hondas) y 'disparaban' las piedras casi al ras del suelo. De pronto el ataque y la retira da se invierten: los atacantes retroceden y los atacados avanzan. De pronto, un 'luchador' que había estado participando en la pe lea sin usar montera, cae. Una piedra le ha cogido en la cabeza la sangre mana y el 'luchador' pierde el conocimiento. Los pro yectiles se suceden en una y otra dirección. Los partidarios del caído intentan hacer retroceder a los otros, su tarea no es fácil. Por cerca de 20 minutos se intenta el rescate. Aparecen los vecinos que intentan calmar los ánimos, e interrumpir la pe lea. Algunos han cambiado sus chicotes por palos y persiguen a aquellos que continúan lanzando piedras. Finalmente los atacantes de ambos bandos retroceden. Se recupera al cáído y en andas (wantu) se lo recoge nara darle asistencia. Se dice que han habido dos muertos ( El centro de salud de Mac a certificó el deceso de dos hombres a causa del combate en el tinku), otros hablan de tres y cuatro. Algunos ayllus continúan retirándose. la tarde llega a su fin, el sol ya se ha escondido y la pe_ numbra se acentúa. La retirada del a^llu- del pueblo de Macha- se efectúa de acuerdo a la distancia donde lugar de residencia, así, los más cercanos parten al día siguiente, en cambio los que tienen que andar más camino se marchan en la tarde del lunes 4 de mayo.' Una de las responsabilidades del 'mayura' es reunir a toda su gente, para lo cual va buscando uno por uno a los componentes del grupo. Si alguien se queda atrás y pasa algo la responsabi_ lidad recae sobre el mayura. Todos los componentes del grupo deben partir en conjunto, pues el regreso a la comunidad no está libre de peligros: la ri validad entre ayllus no termina con el Tinku de Macha. Si dos jgrupos rivales se encuentran en el camino puede pro ducirse enfrentamientos que fuera del pueblo escapan a todo con trol. En a'gunos casos se producen emboscados, cuyas consecuen cias solamente sirven para ahondar los odios y las rivalidades"." Si un hombre solitario 'cae' en manos de un grupo rival, co rre serio peligro. Por eso es que el mayura debe reunir a todos" los miembros de su grupo y conducirlos hasta su comunidad. La mañajna del martes es algo diferente, los ánimos parecen aplacados. Apenas rompe el alba, antes de las 6 de la mañana, se escuchan jlos primeros charangueros. Un grupo solitario irrum pe en la plaza e inicia su periplo de esquina a esquina, luego "awajo" (abajo) y se desplazan en desbandada, de ocho a nueve en fondo, en untrotecillo agresivo de guerrero, a conquistar 1 a otra esquina. Las coplas que interpretan en esta ocasión, se caracterizan por su temática, predominan notablemente los cantos de despedida y de retorno. Muchos ya no están marcados. Sin em bargo la salida del pueblo todavía es problemática, pues los gru pos en pugna vuelven a encontrarse y so producen amontonamientos' y algunas peleas; pero al parecer la tregua ya ha sido declarada. - - I Loa últimos grupos se van retirando poco a poco. Pronto el pueblo de Macha volverá a- su estado habitual, El "tinku, no cabe duda, es en general una práctica ritual y religiosa;pero también incluye elementos do caracter socio-eco nómico (disputas por terrenos) y aun de carácter relaciona! (pe leas entre individuos) que se conjuncionan en la 'fiesta'. Algunos enfatizan el caracter religios o(sincretismo) del evento (pedidos a los espíritus nativos y a Dios para mejores cosechas); mientras que otros usan la oportunidad para demostrar su hombría Todo hombre que desea ser reconocido como tal debe haber peleado, y mejor vencido, en el Tinku. "Nosotros hemos ganadow nos cuentan uros comunarios. "Qhari aitus puni kayku", 'Con seguridad que somos hombrecitos-machitos'. Algunos van al tinku para buscar la pareja. Todos estos elemen tos hacen del tinku una manifestación de primer orden de importan cia. El Tinku, así, es parte de la vida de la comunidad, la gen te vive para el tinku con semanas de anticipación, y la excitación continúa todavía durante las semanas subsiguientes. Se muestran las magulladuras y la sangre seca como demostración de le hombría y se cuentan las aventuras corridas. Se lamentan las perdidas y derrotas; y se ensalzan las victorias. A medida que pasan los días y las semanas la excitación y las historias del tinku van apagándose, 1... vida de la comunidad vuelve a la norma iidad, pero el espíritu del tinku nunca muere, solamente desapa rece de la. superficieT hasta que nuevamente se acerca la fecha" para el nuevo tinku. Otra vez los preparativos, otra vez la exi tación, otro, vez el tinku; las derrotas y las victorias. Otra vea el Tinku. TINKUNAKAMA KACHUN 'Hasta el nuevo encuentro'. AGRADECIMIENTOS: Este trabajo no hubiera sido posible sin la con tribución. de las siguientes personas: Tomás Romero Prudencio Trawel, Rená Martines (San Marcos), Sr. Pita Alfe rez de Churiqala: a las autoridades, Jefe de la DIN Detective Al fredo Santa Cruz, Sgto, José Medrano Ríos Director Provincial de la Guardia Nacional, Celestino Plores Corregidor, Ricardo Arancibia agente cantonal de la municipalidad; a los voluntarios del Centro de Salud de Macha, y al dueño del Hotel "Copacabana" don Saturnino. Agradecemos de manera especial a los cineastas Alfre do Ovando Jr., y Aldo Cardozo por colaborarnos con el transporte. Finalmente, deseamos indicar que este es un trabajo prelimi nar que posteriormente, complementando con el trabajo de campo requerido, será ampliado para su publicación en forma de monogra fía. De esta manera, consideramos que nuestro objetivo principal es contribuir a la revalorización de las expresiones culturales del pueblo quechua, al cual dedicamos estos'esfuerzos. BIBLIOGRAFIA ARRTj.ETA, Walter 1980 AYA TA, Alfredr 1979 CARPIO, Luzmila 1979 El^Tinku, La Paz., Escuela de Folklore (IBC), inédito. Geografía General de Bolivia. Estudios'físico político y económico de Bolivia. La Paz, Ed, G-isbert, Thinkus. La Paz, Musilandia. Placa discográ fica Larga Duración, - LEWIN Boleslao 1972 PLATT, Tristán 1976 La insurreción de Tupac Amara. Buenos Aires. EUDEBA.. - Espejos y Mafaz: temas de la estructura V%>'¿irabQlica andina. La Paz, Centro de Inves . " tigación y Promoción del campesinado VCIPCA). . . ..I-I f, !:JpflJIÍÍf 1 ijíf;I 41 S U % 1 • • lí X "i: "i¡M^tr-i'% á f| 26 - ®¡IP§ rl •