Iglesia Lomas Oeste – www. iglesialomas.com CLASE Nº 43.12 Serie Éxodo 17: Dios quiere ser el centro de nuestras vidas Éxodo 29:42-46 Del 02.12 al 08.12 Lectura para clase 44: Éxodo 38 a 40 INTRODUCCION: Aunque Dios está en todos los lados, les propuso a los hebreos construir un lugar para encontrarse con El: El tabernáculo. Ahí Dios moraba como rey de su pueblo y recibía el culto que merecía. Este lugar representaba el deseo de Dios para nosotros hoy: vivir dentro de nosotros y con nosotros y recibir culto y adoración, por medio del sacrificio de Jesús (el Cordero). 1. UN POCO DE HISTORIA: El Tabernáculo con sus detalles (medidas, materiales, cómo hacerlo) fueron revelados a Moisés en el Monte Sinaí (Éxodo 25:8-9, entre el tiempo en que Moisés subió al monte y los hebreos hicieron el becerro). Era una tienda (carpa) en dónde se encontrarían con Dios. El tabernáculo tenía varios nombres: tienda o Tabernáculo , tienda del testimonio, tabernáculo de reunión , santuario. El tabernáculo tenía varias partes, una exterior, donde podían entrar todos, otra intermedia (el lugar Santo) dónde entraban los sacerdotes y realizaban las tareas del culto diario y, separado por una cortina, un lugar interno llamado Lugar Santísimo, dónde sólo entraba el Sumo Sacerdote (o sacerdote principal) y una vez al año llevaba dentro la ofrenda de sangre para limpiar el pecado del pueblo. 2. ¿PARA QUÉ QUERÍA DIOS UN TABERNÁCULO DE REUNIÓN? Ex.25:8 a. Tener un lugar en dónde los hebreos reconocieran su presencia y lo adoraran (un “domicilio legal” le podríamos decir) y hablar con su siervo Moisés (Núm. 7:89, Dios le hablaba desde el lugar santísimo, sobre una caja cubierta de oro llamada “El Arca del Pacto”). Hoy, Dios también quiere tener un domicilio en donde nos encontremos con El y lo busquemos cada día. El está dentro nuestro, esperando encontrarnos y que le adoremos. b. Tener el lugar central en las vidas de su pueblo: El tabernáculo se ubicaba en el centro del campamento y era el centro de todas las actividades de culto del pueblo. Ese lugar central es el que El quiere ocupar en nuestra vida. Los hebreos eran un pueblo especial porque Dios estaba en medio de ellos y nosotros somos también especiales porque Dios está en medio de nosotros, dentro de nosotros. c. Simbolizar el sacrificio que Jesús iba a hacer por nosotros: Cada año, al ir el Sumo Sacerdote a llevar la sangre del cordero delante de la presencia de Dios (lugar santísimo) y perdonar el pecado, Dios les simbolizaba lo que iba a hacer por nosotros miles de años después (Jesús es el Cordero de Dios que dio Su sangre por nosotros). 3. Y HOY ,DIOS TAMBIÉN TIENE UN “DOMICILIO LEGAL” EN LA TIERRA: Después que Jesús (nuestro Sumo Sacerdote, Hebreos 4:14-16) ofreció su sangre una sola vez en sacrificio, ya Dios no vive más en edificios construidos por hombres, sino que ahora decidió vivir y habitar dentro de cada uno que le pertenece (nosotros, 1º Co.6:19), es decir, que somos el “Lugar Santísimo” en donde está Dios. El también nos designó como sacerdotes suyos. ¡Qué responsabilidad tan grande! Somos la casa de Dios! Mantengamos limpia y cuidada Su casa! 4.HOY, TAMBIÉN TENEMOS SÍMBOLOS QUE NOS RECUERDAN VERDADES DIVINAS: Todavía hoy, aunque Dios nos provee de símbolos que nos ayudan a recordar lo que El hizo y hace y va a hacer: a. El bautismo: Es un acto simbólico que Dios nos ordena dar luego de aceptar a Jesús como Señor y Salvador. Jesús mismo se bautizó (Mateo 3:13-15) para obedecer a Dios. Su significado es sencillo: El bautismo no salva (ya estamos salvados) El bautismo representa nuestro cambio de vida (Ga.3:27), es decir, dejar lo que éramos (vida antigua) y renacer a una nueva identidad (la nueva vida en Cristo, sepultados y renacidos, Romanos 6:4). No hay que esperar un tiempo para bautizarse: Dice en la Palabra que creemos y como segunda acción nos bautizamos (¿alguno no está bautizado y ya es salvo? Es tiempo para hacerlo! Marcos 16:16) b. La cena del Señor: Marcos 14:22-25, 1º Corintios 11:23-26. Dios nos dejó otro símbolo para recordar lo que Jesús hizo por nosotros. Lo hizo Jesús por primera vez antes de irse y nos lo dejó como legado a nosotros. Porque tenemos la tendencia a olvidarnos de lo bueno que Dios hace Porque nos enfrenta a la necesidad de depender de Jesús cada día y hacerlo el centro de nuestra vida. CONCLUSIÓN: Dios puso símbolos y preparó un templo para lograr que los hebreos lo buscaran como el centro de sus vidas. Dios nos dio a Su Hijo y puso Su Presencia dentro nuestro y nos transformó en templos vivientes. Como dice Romanos 12:1, presentemos nuestras vidas diariamente delante de El en adoración y para alabanza de Su nombre.