Virtud de abril: OBEDIENCIA DEFINICIÓN Obedecer es aceptar y cumplir la voluntad de otra persona que está por encima de nosotros en una determinada situación. Esa persona puede ser nuestro padre, nuestra madre, nuestro profesor o algún compañero que hayamos elegido como coordinador del juego o actividad. Detrás de todas las órdenes dadas por quienes más nos quieren siempre está la intención de ayudarnos y protegernos, aunque pueda parecernos que no es así OBJETIVO: Fortalecer y motivar a nuestros alumnos en el aprendizaje de la obediencia, como un medio de establecer relaciones responsables en diversos ámbitos de la vida. La obediencia es una actitud responsable de colaboración y participación, importante para las buenas relaciones, la convivencia y el trabajo productivo. Una de las cosas que más trabajo nos cuestan es someter nuestra voluntad a la orden de otra persona. Vivimos en una época donde se rechaza cualquier forma de autoridad, así como las reglas o normas que todos debemos cumplir. La soberbia y el egoísmo nos hacen sentir autosuficientes, superiores, sin rendir nuestro juicio y voluntad ante otros pretextando la defensa de nuestra libertad. Parece claro que el problema no radica en las personas que ejercen una autoridad, tampoco en las normas creadas para mantener el orden, la seguridad y la armonía entre las personas, está dentro de nosotros mismos. Debemos evitar caer en el error de "sentir" que obedeciendo nos convertimos en seres inferiores y sumisos caracterizados por una libertad mutilada. Por el contrario, la obediencia nos lleva a practicar una libertad más plena. PROPÓSITOS Pre básica a 2° básico 3° a 6° básico 7° básico a IV medio Obedezco a la primera Obedezco con alegría Obedezco porque quiero Para bien obedecer, escucharé Respeto mayores a las personas Obedezco porque sé que es para mi bien ¿POR QUÉ NOS CUESTA TANTO TRABAJO OBEDECER? RAZONES Cuando no reconocemos la autoridad de la persona que manda, por considerarla inferior, inepta, molesta o menos inteligente. Cada vez que la actividad a realizar es contraria a nuestro gusto y preferencia Porque catalogamos las cosas como poco importantes, o debemos hacer a un lado nuestra comodidad y descanso. Cualquiera que sea el caso el resultado es el mismo: un actuar mecánico y porque "no nos queda más remedio", lo cual resta mérito a todo lo bueno que pudiéramos lograr. No podemos negar que algunas ocasiones obedecemos gustosamente, pero lo hacemos por la simpatía que tenemos hacia quien lo pide, o definitivamente no nos cuesta trabajo cumplir con lo que nos piden. Entonces cabe preguntarnos si la obediencia en nosotros es un valor o es una postura que tomamos de acuerdo a las circunstancias. CÓMO DEBE SER NUESTRA OBEDIENCIA La obediencia no hace distinciones de personas y situaciones. Para que sea realmente un valor, debe ir acompañada de nuestra voluntad de hacer las cosas, agregando nuestro ingenio y capacidad para obtener un resultado igual o mejor de lo esperado. Por tanto, el obedecer es un acto consciente, producto del razonamiento. La obediencia requiere docilidad, traducida en seguir fielmente las indicaciones dadas. Si consideramos que algo no es correcto podemos expresar nuestro punto de vista, pero nunca hacer algo distinto o contrario a lo que se nos ha solicitado. Además de ser dóciles debemos tener iniciativa, que consiste en poner de nuestra parte "lo que haga falta" para cumplir mejor con nuestra tarea. Ese toque personal y final que ponemos a las cosas complementa nuestra obediencia, porque es una manera de identificarnos plenamente con el deseo de quien lo ha pedido, En algunos casos y circunstancias, las personas que tienen autoridad pueden solicitar acciones contrarias a la dignidad de las personas y ajenas a los principios morales, como mentir, calumniar, robar... en estos y otros casos, no estamos obligados a obedecer porque nos convertimos en cómplices de acciones reprobables, de las cuales no nos gustaría ser los afectados. PROPÓSITOS PARA VIVIR ESTA VIRTUD 1. La obediencia no se determina por el afecto que puedas tener hacia la persona que manda, concéntrate en realizar de la tarea o cumplir el encargo que se te encomienda. Tu sentir en nada cambia el contenido de la orden. 2. Ejecuta las peticiones u órdenes sin calificar si son de tu agrado o no. 3. Toda indicación es importante. Si es aparentemente simple, evita pensar que no corresponde "a tu categoría". Si no cumples con las cosas pequeñas, jamás cumplirás con las cosas que consideras como "grandes". 4. No te quejes por los continuos encargos que recibes. 5. Obedece con alegría, con buena cara. 6. Obedece a la primera Obedezco y acato normas, siguiendo reglas y normas de buen comportamiento Aprendo a ser obediente cuando me explican las razones para serlo Sabiendo lo que mis padres y profesores quieren Conociendo la satisfacción que mi obediencia producirá en los demás Conociendo el valor y el porqué de cada orden. Teniendo claro mis obligaciones y deberes EL NIÑO PUEDE APRENDER A SER OBEDIENTE Sabiendo qué es lo que sus padres o profesores quieren Conociendo la satisfacción que su obediencia producirá Sabiendo el por qué y el valor de cada orden Teniendo claras sus obligaciones y deberes Con una enseñanza sistemática de todas sus actividades Teniendo reglas en casa y en la escuela Cuando siente la aprobación de sus padres cuando es obediente Con las experiencias de sus padres Cuando siente que con la desobediencia no consigue lo que quiere. BENEFICIOS DE LA OBEDIENCIA PARA EL NIÑO - Satisfacción constante del deber cumplido. - Relaciones armónicas y de confianza con sus padres. - Competencias sociales adecuadas en su entorno educativo, social, cultural, deportivo. - Respeto y tolerancia por las instituciones diversas. - Adaptación social. - Respeto por Dios, mediante sus propios comportamientos - Cumplimiento de sus diversos deberes por mínimos que le sean prescritos