África en clave de candombe Extraído de la Revista Quilombo nº 44 (febrero de 2009) Es innegable la herencia africana en el candombe. Pero esta afirmación nos lleva a varias preguntas en relación con el presente: ¿Se sostiene en la actualidad ese legado afro? ¿O solo ha quedado en un hecho histórico? ¿De que formas se hace visible? ¿Cómo lo viven quienes son parte del candombe? Algunos dirán que solo son resabios de un misticismo que ya no puede palparse en la realidad. Otros contarán que a través de los tambores y la danza se produce una comunicación con un mundo sobrenatural que llega a sentirse. En medio de esta reflexión nos llega el artículo de Luís Ferreira* “Dimensiones afrocéntricas en la cultura performática uruguaya", publicado en el libro Cultura y sociedad afro-rioplatense (2008), compilado por Gustavo Goldman, en el que también se encuentran textos de Pablo Cirio y Alejandro Frigerio, entre otros autores. La investigación de Ferreira parte de los grupos de candombe afro-montevideanos y presenta la importancia de los detalles del movimiento corporal en el toque de los tambores y una interpretación de los significados que le son atribuidos por algunos expertos del tamboreo. Para la interpretación y el análisis de esta información se basa en principios culturales afro–centrados y en la cosmovisión y filosofía del África Bantú del Congo y de la Yoruba de Nigeria. Utiliza el aporte de varios autores expertos en investigar respecto de las invariantes y continuidades de las “estructuras profundas” que se siguen sosteniendo y se dan, respecto del estilo musical africano, entre los afroamericanos. El candombe y su relación con los principios africanos Los grupos de tambores y comparsas responden a un código secreto, que sería la base de cada ritmo y de cada movimiento del cuerpo, de un África que esta viva y “es a través de este código que se inscribe la experiencia étnica acumulada y las estrategias de resistencia, estos son el mas consistente indicador de la presencia de una matriz africana en la cultura de los afrodescendientes en el Uruguay” expresa el texto de Ferreira. Otra cuestión interesante de resaltar, que se da en la organización de los grupos africanos, y también en los de tamboreo de candombe, son dos principios estructurales de organización social: el de la jerarquía expresado en la senioridad y en la jefatura del primer hombre y el de la igualdad de todos los miembros. Todos tiene el potencial a la senioridad y a la posición de autoridad, todos van hacer “mayores” algún día y todos tiene el potencial del primer hombre, el iniciador o fundador de un grupo o un estilo personalizado de tocar. Un aspecto común que se destaca en África y en la diáspora afro –atlántica es el carácter participativo de la comunidad a la performance. Se trata de un aspecto notorio en la “salida de los tambores” y en el espacio de 1/3 África en clave de candombe los ensayos de las comparsas. Se involucra el movimiento del cuerpo en el individuo como un todo y dentro de un todo colectivo en movimiento, dándose una totalidad integradora de las partes. luz de lo africano Los principios culturales en el movimiento y su interpretación a la El movimiento/música generado por el candombe responde a varios principios que se encuentran en la danza africana occidental: la polirritmicidad, la policentralidad energética, la forma circular del movimiento, el sentido de un todo y la intensificación por la repetición. Estos rigen la estructura interna, la forma del movimiento y del sonido-música como elementos que conforman una unidad. Se produce una relación muy interesante entre las formas espaciales del movimiento en cada tambor, los significados dados por algunos “maestros del candombe” y su interpretación a través de la cosmovisión Yoruba y Congo. {mosgoogle} Los tambores Tambor chico: Se produce un movimiento cíclico vertical con impulso de arriba a abajo de la mano que “pega” y se levanta con el mismo impulso. Movimiento ordenado y reiterativo. Todos hacen el mismo toque. Se hace referencia a la energía del aire, del cosmos: “Los chicos traen la energía de arriba”, indica Jorge Da luz, que se produce constantemente. Hacen referencia al colectivo como fuerza indiferenciada ”los chicos van a la guerra”. En relación con lo yoruba se lo asocia con el punto superior del Ifá, asociado con el aire y con el arquetipo de los guerreros, en especial con Ogún. Con el Congo se lo asocia al mediodía asociado al movimiento ascendente, al mundo cotidiano simbolizado por el sol. Tambor piano: Movimiento cíclico que enfatiza el eje horizontal, la mano “amasa” presionando el parche desde el brazo. Movimiento ordenado pero no único. Se encuentra el principio de generación de energía complementaria, expresada como “tierra” o “base” de acuerdo a Washington Rosas. Ciertos golpes de mano son pozo en el que el sonido es absorbido y la energía se descarga al suelo los “mayores” alternan toques llamando y respondiendo. Se hace referencia también a los ancestrales del grupo: “a través de uno va tocando un negro viejo”, cuenta M. A. García. Desde la cosmovisión yoruba se lo relaciona con el punto inferior del Ifá, asociado con la tierra y especialmente con el orixa Obatalá, creador de la forma humana a través del barro. Desde la visión Bantú Congo, con el punto inferior del cosmograma, punto cardinal sur, media noche. Con la existencia en el otro mundo. La tierra de los ancestros simbolizado por la luna. Tambor repique: Se da una alternancia en el tiempo del toque entre 2/3 África en clave de candombe movimientos cíclicos verticales de la mano que pega (inicio del repicado) y cíclicos horizontales, cuando se hace la “madera” o clave. Se produce un eje diagonal cuando el músico “repica” y cuando “habla” con alternancia entre los ejes verticales y horizontales. El repique regula la energía de la totalidad, entre la expansión y la contención. “Llama a subir a los chicos con el repicado” indica Fernando Nuñez y “ordena a los pianos con la madera” agrega Benjamín Arrascaeta. También refiere al ancestral del individuo en el grupo. “Cuando toco es él, que toca conmigo” dice P. Gularte. Desde lo yoruba con con los puntos derecho y izquierdo del tablero del Ifá, asociados al agua y al fuego. Y con el arquetipo del orixa Elegbara, el mensajero. Es el Orixa de las encrucijadas y detentor del saber que permite descifrar el tablero del oráculo del Ifá. Desde el Congo con la derecha, el este naciente, el principio o nuevo desarrollo. Izquierda, el oeste, la trasmisión, muerte y transformación. El tambor repique actúa como principio regulador de los contrarios, entre la energía de los tambores chicos y los pianos. Se personifica en el principio de individualización, de mediación y regulación energética del todo. Resulta interesante destacar la aclaración del autor respecto de que su investigación no contiene las interpretaciones de quienes dentro de los mismos grupos o comparsas no le atribuyen un significado mítico al toque de tambores y sostienen una opinión del “sentido común”. Relacionada con los discursos atravesados por el orden de lo racional y del proyecto de la modernidad en contraposición a quienes sostiene un legado cultural alternativo, resultando una resistencia por parte de los afrodescendientes, que se organizan más allá del control social dominante. Ferreira con su investigación deja claro que el Candombe es un dominio cultural alternativo en que el propio cuerpo ofrece un espacio de resistencia. En donde existe la posibilidad de la experiencia de una dimensión mítica. El tiempo heroico de los guerreros y el tiempo mítico de los ancestrales. El ritual se vuelve sagrado, en cuanto guerreros y ancestros se hacen presentes a través del sonido de los tambores. Llega la energía de arriba, Los guerreros avanzan Tocando va un negro viejo, Un negro viejo. Uniendo al cielo y a la tierra El toca conmigo Va trayendo el agua y el fuego Tocando va un negro viejo Un negro viejo. Luis Ferreira. Doctor en Antropología Social y Lic. en Interpretación Musical. Docente e investigador en la Universidad de Brasilia. Fue músico integrante del grupo Bantú y de comparsas de candombe de Ansina y Buceo. 3/3