En primer lugar desearles a todos ustedes un feliz año 2015, en donde como pueden comprobar, estamos a pleno rendimiento tras todos los informes de mercados que estamos enviando tras el inicio de año tan volátil que estamos experimentando. Independientemente de todo lo que acontece que les resumiré a continuación brevemente, como datos anecdóticos, ningún año acabado en cinco ha sido bajista y debemos tener todos presentes, que el tercer año presidencial americano suele ser alcista si miramos el comportamiento histórico de la bolsa americana. La realidad es que nos encontramos con la misma tónica del último trimestre del 2014, con volatilidad en los mercados tras la situación geopolítica que marca el día a día con Grecia y el petróleo. No nos debe coger a todos por sorpresa esta circunstancia, ya que venimos avisando en todo el año 2014, que descontábamos más nerviosismo en los mercados para el 2015, ante el QE europeo y la subida de tipos de interés en Estados Unidos. Teniendo en cuenta cómo se encuentran los tipos de interés, es complicado ganar rentabilidad si no asumimos riesgos sabiendo que debemos aguantar movimientos bruscos arriba y abajo. La caída del precio del petróleo, afectando sobre todo a Rusia dentro de los países emergentes, está originando correcciones significativas. La posibe salida de Grecia del euro, por la posible victoria de extrema izquierda de Syryza, está aportando aún si cabe más nerviosismo, sobre todo por las decisiones políticas que se deben adoptar. Si a todo lo mencionado, añadimos la ralentización del crecimiento en China y lo acontecido en Japón, vemos lógico ese comportamiento tan herrático de los mercados Con bandazos arriba y abajo. Desde nuestro punto de vista, consideramos que para este año 2015, el activo que saldrá vencedor es la renta variable, ya que no existe alternativa de inversión en renta fija por el ajuste de los precios. Nuestro asset allocation sigue con mucha diversificación geográfica en donde hemos ido incrementando el peso en dólares en todas las carteras de inversión, hecho que hemos ido afrontado en todo el año 2014 y que sin duda, está maximizando la rentabilidad de nuestras carteras. Iremos poco a poco cambiando nuestro asset class, en función se produzca el QE, ya que siempre decimos que nuestra principal función es saber escoger los mercados en donde debemos de entrar y para eso es mejor posicionarse con buenos fundamentales trasladando nuestras carteras por zona geográfica en función de la tendencia. Muchas veces digo que podemos siempre ver el vaso medio lleno o medio vacío, y tras todo lo que se está hablando de Grecia y el Petróleo, analizándolo fríamente, vemos poco probable que no se flexibilicen las posiciones con Alemania junto con el impacto positivo que también tiene la bajada del precio petróleo. En el peor de las casos, si Grecia saliera del euro (no lo contemplamos) la UNIÓN EUROPEA cuenta con defensas importantes instrumentalizadas por el MEDE, OMT y el QE tan esperado.El mayor de los riesgos reside en que no sean concluyente los comicios del 25 de enero teniendo que volverse a celebrar elecciones en el país heleno el mes de febrero. Respecto al petróleo, los temores deflacionistas por el nuevo mínimo del brent por debajo de 50 USD con una tasa de inflación del -0,2 en la Eurozona, no nos debe no dejar ver el fondo ya que seguimos viendo los PMI por encima de 50. El riesgo de una deflación , es el mayor riesgo al que nos enfrentamos ya que perjudicaría fuertemente a las economías muy endeudadas. Desde nuestra visión, a medida que vayamos avanzando en este año 2015, mejorarán los datos en donde consideramos que es coyuntural aunque estaremos pendientes de todos los aconteceres que se produzcan. Todo de lo que estamos hablando, sin duda va a obligar en cierto modo, a una actuación rotunda del BCE aunque se habla que dicho plan no superará los 500.000 millones Con todo lo expuesto, lo dicho, año con mucho nerviosismo en donde para poder ganar rentabilidades que superen a la renta fija, tendremos que saber convivir con la volatilidad ya que vamos a depender muy mucho de decisiones políticas en tiempo y forma.