Gobierno Corporativo #UMPLIMIENTO2EGULATORIO 4 Desarrollo Sustentable EL CAMBIO CLIMÁTICO AFECTA A LOS NEGOCIOS: RIESGOS Y OPORTUNIDADES Por: Jesús González Uno de los mayores problemas para entender el cambio climático es que suele observarse únicamente como un problema ambiental. La realidad es que el calentamiento global y sus consecuencias tienen un efecto significativo e irreversible en las sociedades, las economías y las empresas de todo el mundo. Planear la mejor acción para combatir las consecuencias del cambio climático no es algo sencillo. El primer reto es tener conciencia de que los efectos son reales y que afectan por igual a las personas y a las organizaciones: inundaciones y catástrofes naturales; cambios en las cosechas o la producción agropecuaria; aumentos en las materias primas, el agua, los seguros y los energéticos. Lo saben los hoteleros del Caribe afectados por los huracanes, los granjeros estadounidenses cuyas tierras se inundaron debido a las intensas lluvias, las aerolíneas y las compañías de seguros. A muchas industrias ya les duele en sus resultados económicos y les hace temer por el futuro. Frente al cambio climático, una pregunta madura es ¿por dónde empezar? El problema inicial es entender los hechos. Los científicos concuerdan en que el cambio climático es real y que la actividad humana es una causa importante del calentamiento global. Los políticos y las instituciones normativas, sin embargo, no pueden alcanzar una posición coherente que responda a las evidencias. Como resultado, las políticas y la reglamentación no resultan congruentes y es difícil anticipar la forma en que irán evolucionando en el futuro. Estos conflictos representan un reto para los directores de las empresas, que necesitan una guía más clara para planificar una estrategia consistente con el futuro de cada industria y de sus negocios en particular. Por ejemplo, ¿cómo pueden tomar decisiones sensatas respecto a las ventajas, retos o costos que ofrecen las diferentes formas de reducir las emisiones de carbono? O en su caso, ¿cuál es el efecto de no tomar ninguna decisión o acción al respecto? Un buen principio es el reconocimiento básico de que las compañías deben actuar para proteger y garantizar su propia viabilidad y crecimiento, cumplir con las expectativas de sus inversionistas, clientes y empleados, y proteger el medio ambiente. Aun desde una perspectiva dura, y dependiendo de la empresa e industria de que se trate, se podría decir que lo esencial es mantener “el negocio en marcha”. Independientemente de lo que hagan o dejen de hacer los gobiernos y las organizaciones internacionales, las empresas tendrán que hacer frente a las consecuencias del cambio climático. A algunas industrias ya les pegó en su economía y hasta en su sustentabilidad; otras están amenazadas. No todos los problemas se pueden resolver solicitando subsidios y deducciones fiscales. Hay un hecho evidente. Las organizaciones que actúen ahora tendrán ventajas en la imagen que de ellas tenga el resto de la sociedad, y mitigarán el impacto de futuras regulaciones o penalizaciones más onerosas; harán inversiones mejor planeadas y administradas, y podrán afinar tecnologías y cadenas de abasto; podrán incluso realizar importantes ganancias en eficiencia y ahorros y diferenciarse de su competencia. Muchas industrias y empresas ya saben por dónde empezar y están trabajando en materializarlo. Pero no todos van a la misma velocidad. “Climate Changes Your Business” (El Clima Cambia los Negocios), una investigación llevada a cabo por KPMG, indica que muchas empresas apenas han empezado a estudiar las implicaciones que tiene el cambio climático en sus estrategias corporativas, y la mayoría apreciaría que los gobiernos -y sobre todo sus asesores de negocios- les dieran una mejor orientación para planificar y actuar en el mediano y corto plazo. El 86% de los líderes de negocio entrevistados no ha implantado una estrategia para responder al cambio climático, aunque acepta alguna preocupación por el tema. El estudio realizado por KPMG muestra que los riesgos que las empresas deben considerar son físicos, regulatorios y de reputación, sin descartar la posibilidad de que los litigios se vuelvan más comunes. También observa que todos los sectores industriales subestiman los riesgos y que están pobremente preparados para enfrentarlos. De los 18 sectores que se detallan, seis están en la “zona de peligro” y son vulnerables a riesgos específicos (aviación, cuidado de la salud, turismo, transporte, petróleo y gas, y servicios financieros). Estas industrias obtuvieron una alta puntuación en cuanto a los riesgos que enfrentan y una muy baja puntuación en términos de su grado de preparación para enfrentarlos. Incluso los tres giros que se considera están en la “zona segura” (telecomunicaciones, alimentos y bebidas, y químicos) no están bien preparados para manejar los riesgos. Transportación de Aviación Cuidado de la salud n zo ro lig pe Manufactura Sector financiero a Ventas al Edificios y detalle bienes raíces Alimentos y bebidas Farmacéutico Automotriz ia ed rm te in Telecomunicaciones a Seguros Petróleo y gas Construcción y materiales a ur g se relativamente alto a n zo Turismo n zo Nivel de preparación por sector relativamente bajo Mapa de industrias y sectores: nivel de percepción de riesgos vs. nivel de preparación Minería y metales Químicos relativamente bajo relativamente alto Nivel de percepción de riesgo por sector Fuente: Climate Changes Your Business, KPMG 2008. Servicios públicos COMPRENDIENDO EL DESARROLLO SUSTENTABLE DE MANERA CIRCULAR El cambio climático está obligando a las organizaciones a ver el crecimiento de un modo integral. Es importante entender que únicamente se puede tener crecimiento económico si se comprenden y toman en cuenta los posibles impactos, riesgos y beneficios. Durante mucho tiempo las organizaciones centraron sus estrategias en torno a procesos, evaluaciones, indicadores y otros conceptos internos. Hoy se da una creciente relevancia a los factores externos. Ahora, las cuestiones sociales y ambientales pueden afectar a las organizaciones y repercutir en daños a la imagen pública y el posicionamiento de las marcas, baja preferencia por sus productos, mayores costos para adquirir insumos y materias primas, demandas, etc. Un ejemplo son los llamados Principios de Ecuador, un paquete de normas para evaluar el riesgo social y ambiental de los proyectos de inversión e infraestructura. Los Principios han sido aceptados por los mayores bancos del mundo: un análisis de riesgo negativo significa que el banco rechazará la solicitud de crédito y financiamiento. Como se ve, ya no se puede ignorar el balance de la ecuación entre temas económicos, tecnológicos, ambientales y sociales (seguridad y salud). Cualquier variación en alguno de ellos afectará negativa o positivamente a los demás. Para comprender la relación entre los ahorros sustentables (en costo real, imagen, insumos, etc.) y los beneficios financieros, se necesita entender el panorama de una forma equilibrada. Modelo Cinco Pilares El cambio climático está obligando a las organizaciones a ver el crecimiento de Naturaleza una manera integral. Es importante entender que únicamente se puede Humano tener crecimiento económico para Desperdicios Agua dulce el beneficio de la sociedad si Salud Riqueza entendemos y tomamos en Patentes cuenta un rango más amplio Brecha tecnológica Transporte Biodiversidad Industria de impactos, riesgos y Hambre Empleo pesquera posibles beneficios. Fabricado Para comprender la relación entre los ahorros sustentables en costos y los beneficios financieros, la gente necesita entender el cuadro completo y disminuir la tasa de consumo. Financiero Reducción de ozono El mensaje es muy crudo: si no disminuimos la tasa de consumo, no podremos preservar nuestra calidad de vida de una forma sustentable. Fuente: Foro para el Futuro Vivienda Educación Crecimiento económico Acceso al mercado Inversión Socialmente Responsable Inversión Extranjera Directa Democracia Océanos Corrupción Alfabetización Responsabilidad Social Contaminación Clima Equidad Atmósfera Energía POLÍTICAS PARA HACER FRENTE AL CAMBIO CLIMÁTICO Las Naciones Unidas, el Banco Mundial, gobiernos y otras organizaciones han puesto en marcha acciones para hacer frente al cambio climático a nivel global, regional y nacional. En el marco del décimo aniversario del Protocolo de Kyoto (1997-2007), en diciembre del año pasado se realizó la XIII Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático. Uno de sus objetivos fue negociar un tratado antes de 2009 y seguir combatiendo el calentamiento global después de que concluya el Protocolo de Kyoto en 2012. Este Protocolo establece objetivos obligatorios para la reducción de los seis principales gases de efecto invernadero. La meta para 2012 es reducir las emisiones 5.25% respecto de los niveles de 1990. La Unión Europea (UE) acordó un objetivo inicial de 8%, pero en marzo de 2007 aprobó una nueva propuesta para reducir las emisiones 20% para 2020. Estados Unidos y Australia no han ratificado el Tratado pero también han tomado medidas. La Iniciativa de Clima de Occidente, que abarca seis estados de Estados Unidos y Canadá, se ha comprometido a una reducción de 15% por debajo de los niveles de 2005. Otra iniciativa integra nueve estados al Norte, Este y la parte central del Atlántico. Los países incluidos en el llamado Anexo 1 del Protocolo de Kyoto¹ están obligados a reducir sus emisiones, y en los demás, sobre todo aquellos en vías de desarrollo, es voluntario. México pertenece a este segundo grupo. Para alcanzar las metas al menor costo se diseñaron tres ‘mecanismos flexibles’, algunos de los cuales han estado beneficiando a los países menos desarrollados y a muchas empresas y sectores industriales (incluso mexicanos) decididos a reducir sus propias emisiones. Con estos esquemas se ha creado un dinámico “mercado de carbono” donde se negocian, compran y venden diferentes certificados de reducción de emisiones. Este mercado tiene un valor anual de varios miles de millones de dólares. Algunos de los mecanismos disponibles son los siguientes: • Implantación Conjunta.- Un país invierte en un proyecto para reducir los gases de invernadero en otro país, a fin de generar las llamadas Unidades de Reducción de Emisiones (ERU). •Mecanismo de Desarrollo Limpio.- Un país invierte en un proyecto de reducción de emisiones en una nación subdesarrollada para generar Reducciones de Emisiones Certificadas (CER). Puede realizarse en una industria o en actividades forestales y de agricultura. • Comercialización de Emisiones.Un país puede vender de manera directa sus propios derechos de emisión (Unidades de Monto Asignado, AAU). ¹Alemania, Australia, Austria, Bélgica, Bulgaria, Canadá, Comunidad Europea, Croacia, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, España, Estados Unidos de Norteamérica, Estonia, Federación de Rusia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Islandia, Italia, Japón, Letonia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Mónaco, Noruega, Nueva Zelanda, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte, República Checa, Rumania, Suecia, Suiza y Ucrania. OPORTUNIDADES PARA LAS EMPRESAS MEXICANAS México realiza múltiples actividades relacionadas con el cambio climático. Algunas se encaminan al estudio del problema y otras al diseño de políticas para mitigarlo. Las autoridades han propiciado la colaboración con un sinnúmero de países y organizaciones internacionales. Entre las instituciones involucradas hay que mencionar a Semarnat, Secretaría de Economía, Bancomext, Instituto Nacional de Ecología, Fondo Mexicano de Carbono, etc. Las acciones incluyen el financiamiento de proyectos dirigidos a la reducción de emisiones de gases invernadero. CARBONO Y RECURSOS FRESCOS Si bien el calentamiento global tiene repercusiones negativas en muchos giros, también ofrece oportunidades a quienes las sepan aprovechar. Reducir las emisiones permite obtener bonos de carbono que tienen un valor económico y pueden venderse en el mercado internacional. En concreto significa una nueva forma de ingresos y financiamiento para las empresas. No es una propuesta vacía: México colocó el año pasado certificados por miles de toneladas de carbono. Como ejemplo tenemos a Cydsa, empresa química de Monterrey que ingresó por este concepto millones de dólares. En estos momentos hay alrededor de 200 proyectos de inversión para cogeneración eléctrica, energía eólica, rellenos sanitarios, manejo de granjas y empresas agroindustriales, etc. Si bien estas iniciativas requieren algunas inversiones, el retorno puede ser sustancial y de corto plazo, con la ventaja de que los certificados pueden revalidarse y volverse a vender cada año. La iniciativa no sólo repercute en una mejor imagen pública para la empresa y en un avance tecnológico, sino que genera recursos económicos frescos, financiamiento que puede servir para fondear otros proyectos. Es una extraordinaria oportunidad para empresas medianas y grandes en una multitud de giros industriales. Todavía mejor, existen empresas que requieren los bonos de carbono y desean invertir en otras que tienen el potencial de generar los certificados. De esta manera, un industrial mexicano podría recibir los recursos para materializar su proyecto ambiental, generar bonos de carbono para su socio, y obtener un ingreso adicional sin desembolsar un centavo. La emisión de bonos de carbono es una fuente de financiamiento que está al alcance de las empresas en México Datos relevantes relacionados al cambio climático Población: 6 mil millones de personas que se elevarán a 9 mil millones para 2050, triplicándose en el mundo subdesarrollado, con pocos cambios en los países desarrollados. Consumo: 20% de la población mundial representa el 86% del consumo privado total. Niveles de vida: en 2002, mil 200 millones de personas ganaron menos de 1 dólar al día; 2 mil 500 millones menos de 2 dólares. PIB: Desde 1975, el producto interno bruto per capita se ha incrementado 280% en Asia y ha caído 17% en África. Agua: Para 2050, 54 países tendrán escasez de agua. Electricidad: En 2050 la demanda de electricidad será cuatro veces mayor que en 2002. Costos: El informe Stern, solicitado por el gobierno del Reino Unido, estimó que el costo por estabilizar las emisiones de CO a 500-550 partes por millón (ppm) se puede limitar a un 1% del PIB a nivel mundial para 2050. Dicho informe señaló que el costo por no hacer nada podría ascender a 20% del PIB a nivel mundial². Energía: Para 2050 el mundo tendrá que generar el PIB utilizando únicamente la mitad de la energía que se usó en 2002; sin embargo, el uso de energía se ha incrementado 20% durante los últimos 30 años. Carbono: A fin de minimizar los impactos ocasionados por los incrementos en la temperatura a nivel mundial, es necesario limitar las concentraciones de CO a un rango de 450ppm a 550ppm. Esto debería limitar el incremento de temperatura a 2°C por encima de los niveles preindustriales. Actualmente estamos cerca de 430 ppm³. 2 2 Proyección de aumento de la temperatura global Variación de la Temperatura (˚C) 5 4 3 2 1 0 -1 1950 2000 2050 Fuente: Brohan, P., J.J. Kennedy, I. Harris, S.F.B. Trett, and P.D. Jones. 2006 Estimaciones de incertidumbre en cambios de temperatura observados a nivel regional y global: un nuevo conjunto de datos a partir de 1850. Revista de investigación Geofísica 111: D12106, dol: 10.1029/2003JA009974. 2 Informe Stern sobre la economía del cambio climático, 2006. 3 Agencia Europea del Ambiente, concentraciones de gas invernadero en la atmósfera (CSI 013) Borrador de la Evaluación Nov. 2006. 2100 ¿QUÉ DICE LA CIENCIA? En el continuo debate sobre el cambio climático, los científicos concuerdan sobre la naturaleza del problema, sus causas y sus posibles efectos. A continuación se presentan algunos de los principales puntos de consenso: • En 2007, 3 mil científicos que participaron en el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) señalaron una tendencia creciente en los eventos extremos observados en los pasados 50 años y consideraron probable que las altas temperaturas, olas de calor y fuertes precipitaciones continuarán siendo más frecuentes en el futuro, teniendo consecuencias fatales para la humanidad. • Las actividades humanas como la quema de combustibles fósiles están ocasionando un aumento en la concentración atmosférica de gases de invernadero (GHG). • Entre los principales gases de invernadero figuran: dióxido de carbono, metano, óxido nitroso, hidrofluorocarbono (HFC), perfluorocarbono (PFC) y sulfuro hexafluoruro. • Las posibles consecuencias del cambio climático incluyen: inundaciones, sequías, elevaciones en el nivel del mar, escasez de alimentos, pérdidas de los bosques tropicales y propagación de enfermedades. • De acuerdo con el IPCC, el calentamiento del sistema climático es inequívoco. La temperatura de la superficie de la tierra se elevó al menos 0.7°C en el último siglo. Para el 2100 las estimaciones indican una elevación entre 1.8° C y 4.0° C con base en una gama de diferentes escenarios de crecimiento tecnológico y económico4 . Mercados de carbono - estadísticas clave • 26,400 millones de toneladas de CO2 se emiten a nivel mundial cada año (2000-2005) principalmente debido a la quema de carbón, petróleo y gas para obtener energía5 . • En 2006 se comercializaron bonos de carbono y sus equivalentes por un monto de 29,800 millones de dólares6. • El mercado para productos de energía de carbono bajo probablemente alcance un valor de 500,000 millones de dólares por año para 20507. Cuarto Informe de Evaluación del IPCC. Informe del Grupo de Trabajo 1 “La Base de la Ciencia Física”. Feb. 2007 Washington DC: Instituto de Recursos Mundiales, 2005 Estado y Tendencias del Mercado Global de Carbono, El Banco Mundial, 2007 7 Revisión sobre la economía del cambio climático Stern. 2006 4 5 6 Historia de Éxito CASAS VERDES El cambio climático no es solamente un tema de riesgo y posible impacto económico, sino una oportunidad de financiamiento, permanencia y estrategia de negocio que puede servir como diferenciador de la competencia. La industria de la construcción es un ejemplo claro de esto, en específico las residencias o casas “verdes”. Para quien las habita, las casas verdes aparentemente no tienen diferencias en comparación con una casa o residencia regular. La diferencia radica en sus materiales, acabados, sistemas de generación y retención de energía, recolección de agua, entre otras. Temas como energía solar, recolección de agua para uso de baños, sistemas de gestión de temperatura en la vivienda, eliminación de contaminantes en sus acabados y otros similares, son los cambios que han dado grandes oportunidades a esta industria. Actualmente en México están disponibles aproximadamente $10,000 millones de pesos para proveedores de ecotecnologías que apoyen al desarrollo de casas verdes. Organismos como el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) y el propio Gobierno Federal, están impulsando, a través de financiamientos y permisos, este tipo de construcciones, ya que les otorga ventajas a futuro tanto a nivel bienestar público como reducción de compromisos de cumplimiento en diversos servicios y commodities específicos (ej. uso de gas y electricidad en residencias). Infonavit tiene planeado financiar al menos 20% de sus créditos en casas verdes el próximo año, pero este número puede incrementarse. Este instituto recientemente puso en marcha el programa Hipoteca Verde, con el que los trabajadores recibieron un préstamo adicional de hasta $16,000 pesos (10 salarios mínimos) para financiar la adquisición e instalación de estas tecnologías (denominadas ecotecnias). Este incremento en la línea de crédito no afectará la cantidad mensual que tenían prevista para el pago de su crédito. La incorporación de estas ecotecnias les significará, por el contrario, ahorros cercanos a los $300 pesos mensuales por conceptos de pago de agua y luz. Los consumidores, por conveniencia del gasto familiar propio, buscan este tipo de residencias ya que en el corto plazo les representan ahorros sustanciales en sus bolsillos. Todas las facturas relacionadas a servicios básicos como agua, luz y gas se reducen significativamente. Los costos de tener una casa verde no se comparan con el ahorro que se recibe en el corto plazo. Gracias al cambio climático esta industria se encuentra frente a nuevos desafíos y oportunidades como: A. Abrir nuevos mercados. B. Ser un diferenciador frente a la competencia. C. Acelerar procesos. Facilita ciertos trámites y servicios adicionales (financiamientos a los posibles compradores) tanto a nivel industria privada como a nivel gobierno D. Ofrecer nuevos y diferentes productos indirectos, como por ejemplo calentadores solares, recolectores de agua, energía solar entre otros, con costos accesibles. Tener un producto o elemento que nos diferencie de la competencia, contar con financiamiento para éste y tener compradores ansiosos de adquirir nuestros productos, es el sueño (y en ocasiones la diferencia entre vivir y morir) de muchas empresas mexicanas. Queda demostrado que el cambio climático puede abrir puertas a nuevos mercados así como brindar nuevas oportunidades a las diferentes industrias y sectores. CONCLUSIONES El cambio climático es más que un problema ambiental y debe ser un detonador clave en materia económica. Puesto que en ocasiones afecta de manera radical los resultados, incluso la viabilidad del negocio, es un tema prioritario en la agenda de la Alta Dirección. A nivel global y nacional se han tomado muchas iniciativas entre las que destacan el Protocolo de Kyoto, el Esquema de Comercialización de Emisiones (desarrollado por la Unión Europea) y, en nuestro país, la Estrategia Nacional de Cambio Climático, creada por la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático. Sin embargo, pocos directivos asumen los desafíos que presenta el cambio climático, por lo que es necesario hacer una evaluación cuidadosa y profunda sobre los impactos que tendrá no sólo en sus negocios sino también en los mercados en los que participan. A pesar de que pudiera resultar un ejercicio complejo, esta tarea permitirá a los empresarios diseñar estrategias que aseguren la supervivencia de su negocio, y sobre todo su prosperidad. Por lo pronto, participar en el mercado de bonos de carbono es una excelente oportunidad que los empresarios mexicanos pueden aprovechar: no sólo consiguen dar un salto cualitativo en materia tecnológica y de imagen pública, sino que generan un financiamiento de bajo costo que puede convertirse en un ingreso periódico de dinero fresco. kpmg.com.mx 01 800 292 5764 Sobre el autor: Jesús González es Socio de la Práctica de Servicios de Asesoría en Riesgos de KPMG en México. Jesús participó dos años en la oficina de KPMG en Nueva York y ha liderado proyectos en España, Cuba y Chile. Ha asesorado a empresas de diversas industrias en mejora de procesos, reducción de tiempos y costos, implementación de sistemas de eficiencia y control, todos éstos con un enfoque tanto en la cadena de valor como en la generación de información financiera. Ha asistido a un gran número de compañías en Reingeniería de Procesos, Administración de Riesgos, Control Interno, Procesos de Autocontrol, Sarbanes Oxley, Gobierno Corporativo, Desarrollo Sustentable y Diseño e Implementación de Sistemas BPM (Admistración de Procesos de Negocio), entre otros. Si le interesa contactar al autor de este artículo o desea información adicional, favor de dirigirse al 01 800 292 KPMG, o si lo desea escríbanos a delineandoestrategias@kpmg.com.mx. 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