96 REAL SOCIEDAD ESPAÑOLA D E HISTORIA NATURAL canias de Tarancón, Huete y Palomares del Campo (Cuenca). Los cerros de Aranjuez (Madrid), los de Granada, etc. La forma minor vive en el Valle de Tejadilla (Segovia), monte de El Pardo y Chamartín (Madrid), Níjar y Sorbas (Almería), etc. La forma major habita en el monte de La Marañosa (Vaciamadrid), Boadilla del Monte, Cristo de Ribas y Moncloa (Madrid), Salinas y cerros de Belinchón (Cuenca), Mancha Real (Jaén), Guadix y Benalúa (Granada), etc. Las formas genuina y minor son propias de terrenos arenosoarcilloso-yesosos. La forma major se encuentra en los arenoso-yesoso-salinos. Gran parte de los tejidos de las raíces de esta planta se esclerifican extraordinariamente, y no le sirve la raíz más que de órgano de sostén. En cambio, durante la antesis de las inflorescencias y en el transcurso de la fructificación se agotan los depósitos amiláceos del tallo y hojas, siendo estas últimas, sobre todo, las que, arrugándose y secándose, dan sus elementos nutritivos al vegetal. Es curioso que en la planta adulta las hojas vengan a desempeñar el papel fisiológico de los cotiledones. La viscosidad del tallo, hojas, y sobre todo de las flores, de la Pistorinia Hispánica D. C. obedece a pelos glandulíferos en el ápice, que recubren la parte aérea del cuerpo de la planta. Muchas veces, insectos de pequeño tamaño se encuentran adheridos al vegetal, y abundan los pelos glandulíferos, que se encorvan, como sujetando los insectos, sobre la superficie de la planta. Deberá considerarse a la Pistorinia Hispánica D. C. como insectívora en mayor o menor grado. Los estambres de tan preciosa crasulácea ofrecen particularidades no citadas hasta ahora. La antera se divide en cuatro cuerpos; los filamentos, en la parte no unida a la corola, que emerge fuera de ella, son rollizos, ensanchados en la base y recubiertos de pelos. Cinco estambres son más cortos y cinco más largos. Los granos de polen son de color blanco, y tienen tres estrías de dehiscencia. Los carpelos, aguzados en larga punta, son acrescentes después de la fecundación y salen por la garganta de la corola, estando recubiertos en la base por ella. Los cinco folículos encierran semillas diminutas, cuya superficie está recubierta de surcos longitudinales.