Solemnidad de la Asunción de la Virgen María EDICION REDUCIDA DURANTE EL VERANO Nº 221 - SOLEMNIDAD DE LA ASUNCIÓN DE LA VIRGEN MARÍA - Ciclo C - 15 de agosto de 2016 El Poderoso ha hecho obras grandes por mí; enaltece a los humildes MONICIÓN DE ENTRADA Celebramos hoy la solemnidad de la Asunción de la Virgen María. La gloria de María refleja la de Jesús, su Hijo y nuestro Señor. Gracias a su resurrección, la Madre participa, como primicia de todos los vivientes que creen en el Hijo, de la gloria de la resurrección. Jesús, que habiendo muerto por nosotros vive para siempre, está con nosotros. Su resurrección es vida eterna y gozo sin límites, que Él ha preparado para nosotros. María, ya en el cielo con el Hijo, nos guíe en nuestro camino y nos enseñe a dar gracias a Dios por lo que hace en nosotros. Animados por estos sentimientos, celebremos la Eucaristía. ACTO PENITENCIAL (Fórmula 3ª) — Tú, que naciendo de María la Virgen, te has hecho nuestro hermano, semejante en todo a nosotros, excepto el pecado: Señor, ten piedad. R. Señor, ten piedad. — Tú, primicia de quienes han de resucitar, que has querido que tu Madre compartiese la gloria de la resurrección, y nos das a nosotros la esperanza de la vida eterna:: Cristo, ten piedad. R. Cristo, ten piedad. — Tú, que en María, signo de consuelo y de segura esperanza, nos haces contemplar el premio celeste prometido a los servidores buenos y fieles:: Señor, ten piedad. R. Señor, ten piedad. MONICIÓN A LAS LECTURAS (Vigilia) La Virgen Madre de Dios es el arca santa de la nueva y eterna alianza, de la que el arca construida por Moisés y cantada por David era el signo. Escuchemos con atención la Palabra de Dios, y como María, dispongámonos a custodiarla y vivirla. (Día) Las grandes obras de Dios cantadas por María son también las obras de Dios por su Iglesia, llamada, como Ella, a engendrar a Jesucristo, como escucharemos en el libro del Apocalipsis. Pablo nos recuerda que la victoria de la Pascua de Cristo es también nuestra victoria sobre la muerte. Solemnidad de la Asunción de María ORACIÓN DE LOS FIELES Hermanos y hermanas, unidos a toda la Iglesia, que celebra la Asunción a la gloria celeste de María, la Madre de Dios, elevemos con confianza nuestra plegaria a Dios, diciendo: María, madre de Dios, intercede por nosotros ante tu Hijo. • Para que la Iglesia pueda ser en nuestro tiempo signo de la presencia del Señor, que sostiene a los débiles y ensalza a los humildes. Oremos. • Para que en nuestra vida, especialmente en este tiempo de vacaciones, prestemos especial atención a la Palabra de Dios, y la pongamos en práctica en nuestras decisiones cotidianas. Oremos. • Para que el encuentro con el Señor suscite también nuestros gestos de acogida y caridad que nos muestra la vida de María Santísima. Oremos. • Para que aquellos que buscan el sentido de su vida puedan descubrir la salvación y el sentido de la existencia como dones de Dios. Oremos. • Para que los jóvenes, mirando a la Virgen María, entiendan su vida como un don para gastar por el Señor y por los hermanos. Oremos. • Para que en nuestro obrar cotidiano prestemos atención a las situaciones de pobreza y miseria presentes cerca de nosotros, y también en los pueblos golpeados por las calamidades naturales, los desastres humanos, la carestía y el hambre. Oremos. • Para que quienes se encuentran cerca de la muerte sean confortados con la esperanza suscitada por la resurrección de Cristo. Oremos. • Para que nuestros seres queridos difuntos puedan gozar de la alegría sin fin en la comunión con Dios, con María Santísima y todos los santos. Oremos. Acoge, Señor, nuestras invocaciones, por intercesión de María Santísima. Haznos capaces de obrar de acuerdo con tu diseño de amor. Danos siempre energías nuevas para que reconozcamos los signos de tu presencia y nos convirtamos, como María, en signo de consolación y de segura esperanza. Por Jesucristo, nuestro Señor. MONICIÓN AL PADRENUESTRO Pidamos a Dios padre que, como en María, se realice su voluntad en nosotros, tanto en esta vida como en el encuentro luminoso con Él en la eternidad. Fieles a la enseñanza del Maestro, digamos: Padre nuestro... ORIENTACIONES PARA LA CELEBRACIÓN Ornamentos de color blanco. Misa y oraciones propias. Se dice “Gloria” y “Credo”. Prefacio propio de la solemnidad. Es recomendable utilizar el Canon Romano. No se puede utilizar la Plegaria Eucarística IV. No se permiten celebraciones de difuntos -oraciones, lecturas...-, ni siquiera en caso de Misa exequial -que, si se celebra, ha de ser celebrada con el formulario y las lecturas de la Asunción de la Virgen-. La tarde del 14 de agosto, después de la hora nona, ya se celebra la Solemnidad de la Asunción, con la misa de la Vigilia. Esa tarde no se celebra, por tanto, la misa del domingo XX del Tiempo Ordinario. Solemnidad de la Asunción de María