Martes, 8 de marzo de 2016 www.expansion.com/catalunya CATALUNYA ENTRE PREGUNTA Y PREGUNTA “La política no es meterse en un convento” CARLES GASÒLIBA Presidente del Cidob/ El exeurodiputado de CiU apuesta por aprovechar el talento de los cargos públicos “si hay transparencia” y pide cambios en la ley de mecenazgo para que las empresas apoyen más a los centros de investigación. Proyectos propios, la base de la financiación Tras una larga carrera política como diputado, eurodiputado y senador por CiU, Carles Gasòliba (Barcelona, 1945) preside desde 2012 el Barcelona Centre for International Affairs (Cidob), que es, junto con el Instituto Elcano, uno de los think tank de referencia en España en política. – ¿Es preocupante que sólo haya dos centros como el Cidob en toda España? Las cosas son como son. Nosotros nos hemos sabido adaptar a unas exigencias de competencia internacional que nos hace ser el think tank más importante del Sur de Europa. En la UE, en cada Estado normalmente existe sólo un centro de referencia así. – Nadie diría que España es una referencia en pensamiento político… Los partidos cuentan con centros de análisis y las universidades, con buenos especialistas. Si contásemos todos los centros de la UE, seríamos comparables a EEUU. – ¿Cuáles son sus fuentes de financiación, además de las administraciones? A los patrones institucionales se añadieron representantes de entidades y organizaciones para abrirnos a la sociedad. Hemos incorporado la representación empresarial: es bueno que conozcan nuestro análisis objetivo. – Pero ¿se implican suficientemente las empresas? Buscamos patrocinios. ¿Querríamos y esperamos más? Sí, pero hasta hace poco estábamos en recesión... No hay mucha tradición, salvo en la gran empresa. Aquí se espera que las instituciones reciban apoyo de las administraciones públicas; falta una normativa más favorable al patrocinio y al mecenazgo. En EEUU el tratamiento fiscal es muy atractivo. Por desgracia, eso no se da aquí. – Durante la crisis se ha recortado en proporción más en I+D y cooperación. “ Falta una ley más favorable al patrocinio y al mecenazgo; el ejemplo de EEUU, por desgracia, no se da aquí” Fotos: Elena Ramón Artur Zanón. Barcelona Carles Gasòliba espera ser reelegido este año como presidente del Cidob por otros cuatro ejercicios. Para nosotros, los ingresos que más han bajado han sido los del Ministerio de Asuntos Exteriores. Difícilmente, las cantidades públicas subirán más. Estamos en una época difícil, pero queremos crecer e ir bastante más allá a partir de programas en los que participemos y del alza de las aportaciones empresariales. – ¿Qué conflicto de los que trata el Cidob le atrae más? No hablo por mí, que soy un “ Las aportaciones públicas dificilmente subirán; queremos crecer con programas nuevos y con las empresas” “ ¿Refundación de CDC?: dejé la política en 2008; soy un lector atento de la letra pequeña de los periódicos” especialista en UE. La atención la hemos centrado en el Mediterráneo y nos hemos dedicado más a Irán. – Rusia vuelve a hablar de guerra fría… La anexión de Crimea por parte de Rusia no está reconocida, la posición de Rusia en Siria es una fuente de conflictos... Nuestro presidente de honor, Javier Solana, y el exembajador en Rusia Eugeni Bregolat afirmaron que, El peor año para el Cidob fue 2012, cuando se encontró con un recorte de 500.000 euros de las administraciones. “Comenzamos los ajustes y en 2014 ya no teníamos déficit e incluso ese año y en 2015 hemos podido aportar una pequeña cantidad a reservas”, apunta Gasòliba, que ha logrado que “el grueso” del presupuesto de la entidad, que asciende a 2,35 millones de euros en 2016, proceda de programas promovidos por la UE, Naciones Unidas o gobiernos como el noruego. “Un poco más de la mitad de nuestros ingresos están asegurados por ser buenos”, presume. El Cidob tiene una plantilla de treinta personas y quince investigadores asociados más. Salvador Alemany (Abertis), Joaquim Boixareu (Irestal) Sixte Cambra (Puerto de Barcelona), Antoni Esteve (Esteve) y Miquel Nadal (Racc) están entre los patronos individuales. con la desintegración de la antigua Unión Soviética, se aseguró a Rusia que los estados que dejaban la órbita soviética podrían ingresar en la UE, pero no acabarían en la OTAN. Ese acuerdo no se respetó. – Eran países soberanos. Demostraron que lo eran. Y que querían un paraguas protector diferente de la URSS. – Crisis de los refugiados, el Brexit... ¿Europa está cada vez más desunida? Es evidente. La gestión de la inmigración ha sido de los estados, y no de la UE. Jean Monnet dijo que Europa se hacía a golpe de crisis. – ¿Usted también lo cree? Rusia cerró años atrás el grifo del gas en pleno invierno a Ucrania, Hungría y Polonia. Eso causó que se propusiera una política energética común: Rusia podía jugar con un país, pero no con todos. Se avanza muy lentamente. – Tratan la ruptura de países. ¿Cómo ve el encaje de Catalunya en España? No tomaremos posición. Analizamos los procesos de secesión en todo el mundo. – ¿Qué se puede aprender? Quebec, Escocia y Flandes son casos típicos, pero están también la separación de Chequia y Eslovaquia y las exrepúblicas soviéticas... Bélgica cambió cinco veces la Constitución para adaptarse a la realidad y no fue un drama. – ¿Y aquí? No opinamos. – Usted fue político. Desde hace varios años se cuestionan las puertas giratorias… Es un error oponerse, siempre que se actúe con transparencia y según la ley. Todo el mundo tiene derecho a ejercer su profesión y a utilizar sus conocimientos. Hacer política no es meterse en un convento. En EEUU se entiende muy bien. En los países importantes de la UE que conozco nadie se escandaliza. De lo contrario, se empobrece todo. – ¿Cómo debe refundarse Convergència? Dejé la política en 2008. Soy un lector atento de la letra pequeña de los diarios. Diferencias con la Transición “En algunos casos las formaciones tradicionales se considera que no han dado la respuesta adecuada; por ello, se buscan otras opciones políticas pensando que están mejor adaptadas a la situación actual”, explica Gasòliba, en referencia a la crisis del bipartidismo en España. Ciertos partidos, como Podemos, abogan por una segunda Transición, pero existen varias diferencias con respecto a hace 40 años. La primera de ellas es el paro, con una tasa del 20%. “Hasta 2020 no llegaremos a unos niveles aceptables si sigue el crecimiento actual”, indica. La otra es la deuda, de casi el 100% sobre el PIB: “El margen [para aplicar políticas] es muy pequeño”. “La realidad es diferente y las respuestas, también”, concluye el presidente del Cidob, que fue secretario general del antiguo Patronat Català Pro Europa entre 1982 y 2004. Gasòliba, doctor en Ciencias Econòmicas, es también presidente de Axis Consultoría Europea.