URUGUAY Con respecto a la temática que nos ocupa, en primer lugar es importante señalar que Uruguay ha ratificado los principales instrumentos internacionales de derechos humanos relacionados con la violencia hacia las mujeres, niños, niñas y adolescentes: 1-La Convención internacional para la erradicación de todas las formas de discriminación contra la mujer, CEDAW, (ratificada por la Ley 15.164 de 1981); su protocolo facultativo en 2001 (ratificado por la Ley 17,338 de 2001); 2- la Convención de Belem do Para, (ratificada por Ley 16.735 de 1995); y la Convención sobre los Derechos del Niño (ratificada por la Ley 16.137 de 1990). 3- Además el país forma parte y ha incorporado a su legislación otros tratados y declaraciones de derechos humanos, tales como: la Declaración Universal de Derechos Humanos, los Pactos Internacionales de Derechos Civiles y Políticos y de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, y la Declaración y la Convención Americana de Derechos Humanos. En el año 1995 con la ley de seguridad Ciudadana nuestra legislación aborda el tema incorporando el delito de violencia doméstica en nuestro Código Penal (art. 321 bis), cuyo agravante específico es si la víctima fuere mujer .Dicha figura delictiva no es abarcativa de un gran caso de hechos que se producen o se derivan de la violencia doméstica, se lo puede responsabilizar al agresor por otros delitos tales como lesiones, traumatismo, violencia privada, trata de personas, secuestro, etc. En nuestro país se promulgó el 7 de julio del año 2002 la ley de Violencia Doméstica Nº 17514, fruto de la movilización de la sociedad civil organizada que a fines de la década de los 80 y principio de los 90 había comenzado a dar una repuesta sistemática a las víctimas de estas situaciones, desarrollando acciones de sensibilización hacia la sociedad en general y hacia el Estado en particular. El art. 24 de la ley prevee la instalación de un consejo consultivo nacional para luchar contra la violencia doméstica, que funciona con representantes de Ministerios de Estado (Cultura, Interior Salud Pública) del Poder Judicial, INAU, Educacion Pública, Congreso de Intendentes y de Organizaciones no guberamentales. Actualmente en Montevideo (capital de Uruguay) existen 6 Juzgados y 3 Fiscalías Especializadas en Violencia Doméstica. Los juzgados se concentran en un lugar físico en el que funciona además un equipo multidisciplinario de asistentes sociales, psicólogos, médicos forenses y psiquiátras, y tiene su sede también allí la Defensoría de oficio especializada en Violencia doméstica para atender a las personas que carecen de recursos económicos. La ley define a la violencia como todo acto u omisión que por cualquier medio menoscabe el libre ejercicio de los derechos de otra persona, con la que haya tenido una relación de noviazgo o con la que tenga o haya tenido una relación afectiva basada en la cohabitación y originada por parentesco, por matrimonio o unión de hecho”. Esta definición de la violencia de nuestra legislación se asemeja al art. 1 de la Convención de Belem Do Pará que describe la “Violencia contra la mujer” a “cualquier acción o conducta, basada en su género, que cause muerte, daño o sufrimiento físico, sexual o psicológico a la mujer, tanto en el ámbito público como en el privado”. Ambas se refieren tanto a una agresión continua y sistemática como a cualquier agresión esporádica y puntual, pero a diferencia de dicha convención no se limita únicamente a la mujer sino que es a toda persona que sea víctima de violencia doméstica. La práctica indica que la gran mayoría de las víctimas son mujeres contra sus parejas y en segundo lugar madres contra sus hijos alcohólicos o consumidores de droga. Nuestra ley en su art. 1º declara de interés general la prevención, detección temprana, erradicación y atención de la violencia doméstica y agrega luego que la norma es de orden público, proclamando entonces la garantía estatal. Podrá efectuar la denuncia toda persona que conozca un hecho de Violencia Doméstica, y quien la realice no sufrirá ninguna consecuencia. Conviene aquí agregar que si quien conoce el hecho es funcionario público (por ejemplo: policía, personal de salud, maestra, etc.) puede incurrir en un delito si no efectúa la denuncia (Art. 177 del Código Penal). La denuncia se puede efectuar en la Seccional Policial, ante la autoridad judicial (Juez), Defensor Público o Fiscal. Se tramitará ante el Juzgado competente y el juez podrá imponer medidas tanto a la víctima como al agresor. Las medidas tenderán a proteger la vida, la integridad física y emocional de la víctima, la libertad, seguridad personal, asistencia económica e integridad patrimonial del núcleo familiar. El incumplimiento de las medidas adoptadas podrá ocasionar la detención de la persona así como su procesamiento por el delito de desacato. El art. 10 de la ley establece un elenco de medidas cautelares:1-retiro del hogar del agresor, 2-reintegro, 3- no acercamiento a su casa, lugares de trabajo y donde ella frecuente, 4 -no comunicación por ningún medio ,5- incautación de armas, 6- fijar pensión alimenticia para la víctima, 7-disponer asistencia obligatoria del agresor a programas de rehabilitación, 8-resolver sobre pensión alimenticia, visitas, guarda y tenencia si correspondiere. El Juez dispone el alcance y la duración de las medidas que generalmente tienen un radio de exclusión de 200 o 100 metros y un plazo de duración de 90, 120 o 180 días. Si el juez decide no adoptar medidas debe fundamentarlo Esta ley de Violencia Doméstica (Nº 17.514) es aplicada por los Jueces de Familia quienes no tienen la posibilidad de imponer penas, lo que sí se realiza en sede penal (violencia doméstica, lesiones, violencia privada, etc). Recientemente el 26 de noviembre de 2012 por Acordada de la Suprema Corte de Justicia Nº 7755, respondiendo a un derecho de petición de diversas organizaciones respecto a lograr una eficaz control a estas situaciones de violencia doméstica, confiere v a l o r d e Acordada al Protocolo de Actuación para la implementación de tecnologías de verificación de presencia y localización de personas en casos de alto riesgo de violencia doméstica, que serán previamente valoradas por el equipo técnico, correspondiendo la decisión de la colocación a las autoridades competentes(Jueces de familia especializados o penales), resultando altamente conveniente contar con el consentimiento de la víctima en usar dicho dispositivo y ello a efectos de garantizar el uso adecuado y eficaz de la tecnología. La ley de Violencia doméstica es un avance importante en nuestra legislación, ya que al regularla , pasa al ámbito público una situación que hasta el momento se hallaba en el ámbito privado. Es así que se instalan servicios de consulta, orientación y asesoramiento en el plano jurídico, social y psicológico. Se crean los primeros refugios y se sistematiza el trabajo realizado abriendo espacios de formación y capacitación para operadores sociales. En el sistema procesal de la ley de VD, las medidas a adoptar cumplen un fin promocional-protectivo respecto a la presunta víctima. Las medidas tomadas contra el posible agresor tienen carácter precautorio y de contención, no sancionatorio porque no son penas a pesar de que algunas aparentan serlo, tales como el retiro del Hogar o de armas, restricción de acercamiento, que son de corte autosatisfactivo. En el proceso de VD las medidas protectivas o cautelares son de carácter provisional y anticipadas, se adoptan unilateralmente sin noticia de la contraparte y adelantan etapas procesales anticipando un posible resultado de sentencia favorable aunque luego puedan ajustarse o modificarse. Son autosatisfactivas por si mismas porque no castigan a nadie, sino que tienen un fin tutelar o protector y son naturalmente revisables, no entran en autoridad de cosa juzgada. El papel que desempeña el Ministerio Público es tercero interviniente, que puede impugnar las decisiones judiciales, y su intervención es preceptiva porque la ley así lo indica. El Ministerio Público y Fiscal defiende los intereses generales de la sociedad y el Estado, actúa en la órbita judicial civil y penal toda vez que se halle comprometida la causa pública, así como en asuntos relativos a las personas, intereses de los menores, incapaces, ausentes, defensa de medio ambiente, valores culturales o históricos, violencia doméstica, en juicios relativos al estado civil de las personas. Ejerce la titularidad exclusiva de la acción penal que deriva del delito, la acción fiscal en infracciones aduaneras, actúa en las infracciones cometidas por menores así como en los casos en que los mismos se encuentran en estado de abandono, Es el que controla la legalidad de los procesos. Es un cuerpo técnico administrativo, jerarquizado al Poder Ejecutivo por intermedio del Ministerio de Educación y Cultura ,bajo la jefatura directa del Fiscal de Corte y Procurador General de la Nación. Por último, quiero señalar que la Corte Interamericana en su sentencia del 24 de febrero de 2011.Serie C Nº 211 “Gelman c/a Uruguay” que condena al Estado Uruguayo por la desaparición de la Sra. María Claudia García de Gelman en el marco del terrorismo de Estado que se produjo tanto en Uruguay como Argentina entre los años 1973 -|1982, hizo alusión sobre la violencia de género respecto a ella. Es novedoso el planteo. Invoca como fundamento la tortura contraviniendo a la Convención de Belen Do Pará. Dice la Corte “ Los señalados actos cometidos contra María Claudia García pueden ser calificados como una de las más graves y reprochables formas de violencia contra la mujer, que habrían sido perpetrados por agentes estatales argentinos y uruguayos, que afectaron gravemente su integridad personal y estuvieron claramente basados en su género. Los hechos le causaron daños y sufrimientos físicos y psicológicos que, por los sentimientos de grave angustia, desesperación y miedo que pudo experimentar al permanecer con su hija en un centro clandestino de detención, donde usualmente se escuchaban las torturas infligidas a otros detenidos en el SID, y no saber cuál sería el destino de ella cuando fueron separadas, así como haber podido prever su fatal destino, constituyen una afectación de tal magnitud que debe ser calificada como la más grave forma de vulneración de su integridad psíquica”. Nada mas,gracias!!! Guatemala,6 de noviembre de 2013 Dra,Elena Cornalino.Fiscal Adscripto de Fiscalía Especializada de Violencia Doméstica, Ministerio Publico y Fiscal.