RR.HH. DE CINE “Senderos de gloria”, de Stanley Kubrick JAVIER FERNÁNDEZ AGUADO, Socio Director de MindValue. Senderos de gloria, de Stanley Kubrick, es una experiencia cinematográfica fascinante inspirada por situaciones reales ocurridas durante la I Guerra Mundial. En 85 minutos se explica con claridad que con gran frecuencia el mayor peligro no es el enemigo, sino el fuego amigo, concretado en no pocas ocasiones en celos, envidias, discusiones, amenazas, falsas acusaciones, etc. Algo aparentemente incomprensible se daba continuamente: los generales (supuestamente mejor dotados) en vez de demostrar sus capacidades en la dirección de las batallas, preferían quedarse en sus lujosos castillos jugando a dirigir la guerra. No es que el directivo deba implicarse en directo siempre, pero para diseñar buenas estrategias hay que conocer las trincheras desde cerca. De otra forma, la pretendida orientación se convierte en consejos extemporáneos que en nada ayudan a quienes están batiéndose el cobre en la primera línea de fuego, es decir, dando la cara ante los clientes. La ambición de algunos responsables les lleva a proponer metas imposibles. En concreto, en la película que hoy nos ocupa, tomar la “Colina de las Hormigas”. Bien saben de su escasa relevancia estratégica y que más de la mitad de las tropas que participen en el asalto morirán, pero eso poco les importa. Lo que está encima de la mesa es la buena imagen que desean dar ante sus superiores. Para motivar a quien pondría dificultades, la promesa de una promoción si su obediencia es ciega será razón suficiente. Luego, tras el desastre, se niegan en redondo a asumir la responsabilidad Capital Humano 136 de aquella carnicería provocada por sus órdenes. Acuden al cómodo expediente de acusar a los demás de sus propios e intransferibles errores. ¡Qué sencillo resulta señalar con el dedo a quienes están debajo o desembarazarse de ellos como si fueran un klinex usado y ya inútil para un nuevo servicio! Como alguna excusa es precisa para quitarse el “muerto” de encima, en este caso se acogen al hecho de que algunos soldados retornaron a sus trincheras. Eso es valorado como imperdonable pavor que habrán de penar ante un amañado tribunal. LA VIDA MISMA La película muestra la falsedad de muchas decisiones aparentemente colegiadas. Aquí las sentencias están decididas mucho antes de que se inicie el juicio. Da igual lo bueno que sea el abogado defensor ya que a sus argumentos no se le presta prestados ni la más mínima atención. El Coronel Dax, encargado de defender a sus soldados de la horrible acusación de cobardía pone todos los medios para demostrar la inocencia de los soldados y la incoherencia de la orden de atacar la Colina. Sus alegatos son muy convincentes. Sin embargo, no hacen cam- biar la opinión de los jefes. El leguleyo no se da cuenta de que no se trata de personas, sino del mantenimiento de un sistema en sí mismo perverso en el que aquellos pobres soldados son meros fantoches –‘sacrificios humanos’– para que el mecanismo no deje de funcionar. La avaricia y falsedad de los mandos se manifiesta incluso entre ellos mismos: nadie confía en el otro. Todo gira en torno a un cúmulo de rastreras conspiraciones y aquellos que tienen conciencia de su existencia no muestran el más mínimo interés en sacarlas a la luz. En Senderos de Gloria, esto se aprecia cuando el renombrado general Mirabeau, a pesar de conocer el asesinato de un soldado a manos de un oficial, no toma medidas. Además, los chantajes son una práctica habitual –en esa época y en todas-: medallas, ascensos, bonus, etc. llevan a comportamientos que quienes obran saben claramente equivocados. Otro aspecto de la Primera Guerra Mundial que se aprecia en la película: la dureza de la vida en el frente. En invierno, se convertía en una verdadera cloaca, y en verano se sumaba el hedor al calor. Hubo momentos en que la comida escaseaba y eso provocaba desmotivación y desgana. A los jefes esto no les importaba, pues ellos, con Todo gira en torno a un cúmulo de rastreras conspiraciones y aquellos que tienen conciencia de su existencia no muestran el más mínimo interés en sacarlas a la luz Nº 182 • Noviembre • 2004 La hombría de bien ha de conducir a asumir las cargas que puedan suponer las equivocadas dical injusticia que pesará toda la vida sobre la conciencia de quienes así actúan.! percepciones de la realidad frecuencia, hacían la guerra desde los sillones de un estupendo palacete fuera de todo peligro. Ante estas situaciones claramente denunciables, poca gente era capaz de quejarse y proponer alternativas debido al miedo a ser ajusticiado o, cuando menos, degradado. Las actuaciones de denuncia y desacuerdo del Coronel Dax deben ser, por esto, muy valoradas ya que él mismo estaba arriesgando su vida, su puesto y su rango por defender la vida y la inocencia de los hombres que tenía bajo su mando. El mismísimo general Mirbeau le amenaza y le atemoriza diciéndole que todo lo que está diciendo y haciendo va a tener consecuencias claras y cercanas. En este largometraje los directivos pueden aprender que las responsabilidades no pueden ni deben delegarse. Ocultarse cuando las propias decisiones han llevado a un desastre es una manifestación evidente de temor. La hombría de bien ha de conducir a asumir las cargas que puedan suponer las equivocadas percepciones de la realidad. Descargar el peso en quienes no pueden defenderse es una ra- FICHA TÉCNICA Título: Senderos de gloria. Director: Stanley Kubrick. Año: 1957. Intérpretes: Kirk Douglas, Wayne Morris, Adolphe Menjou. Temas: Ambición / Eficiencia / Eficacia / Ética / Iniciativa / Lealtad / Negociación / Compañerismo Líder mundial en METODOLOGÍA y HERRAMIENTAS sobre TRABAJO en EQUIPO • CUESTIONARIOS Belbin. • INFORMES de roles individuales, de equipos y de puestos. • PERFILES sobre roles de equipo online. • CURSOS de Acreditación. • JUEGOS sobre trabajo en equipo. Para más información contacte con: Marian Albaina C/. Músico Guridi, 3, 4º, 1ª pta. 48007 Bilbao • Tel.: 944 460 014 E-mail: belbin@euskalnet.net • Web: www.belbin.com