Unidad 1: grecolatino. Literatura del clasicismo Introducción En esta primera unidad se presentan las características y los temas principales del clasicismo literario de Occidente, principalmente el de la antigua Grecia. En el componente de lengua se recuerdan y completan los conceptos sobre la comunicación humana y sobre las funciones del lenguaje. En expresión se ejercita la comunicación oral, no elaborada, de descripciones y narraciones. Por último, se observa cómo estas mismas formas de expresión se presentan por escrito en la noticia periodística. Literatura Objetivos: Que el alumno o la alumna pueda: 1. Reconocer las principales características del clasicismo literario de Occidente y el sentido de sus principales temas. 2. Crecer en sensibilidad y gusto hacia la lectura de obras literarias del clasicismo occidental. 3. Crecer en la habilidad para analizar y comentar textos literarios, y para producirlos con sentido de creatividad y dominio de la lengua. Contenidos 1. Características de la época clásica. 2. La épica clásica. 3. La tragedia griega. 1. Características de la época clásica. Al hablar de la época clásica nos referimos a una época cuyos fundamentos los encontramos en Grecia y Roma. Los términos clásico y clasicismo se asociaron originalmente con los logros de la cultura griega y romana. En sentido estricto un clásico es cualquier obra literaria de la antigüedad griega o romana que sobresale por su excelencia artística. Son clásicas las obras de Homero (griego), Virgilio (romano), Esquilo (griego). El periodo clásico griego abarca desde el 500 al 320 a.C., mientras que la edad de oro romana se sitúa entre el 70 a.C. y el año 18 de nuestra era. En la literatura griega clásica aparecen algunas características de la forma de pensar y de ver la vida de los griegos. Entre estas características encontramos la Gloria y nobleza. También encontramos la Justicia y sabiduría, pues los héroes griegos se preocupaban por darle a cada uno lo justo. La sabiduría necesaria para impartir justicia era siempre atribuida al anciano, dada su experiencia. También en los griegos encontramos el Respeto por el destino, pues para ellos nada ocurre por suerte: todo tiene una razón de ser. Otra característica es la Moderación y prudencia en todo; pues en la literatura griega los personajes se caracterizan por ser respetuosos, preocupados por el orden y la armonía en todas las cosas. También el Realismo es otra característica: encontramos objetos, costumbres, incluso animales, muy bien descritos, hasta en sus más pequeños detalles. ◩ Mitología (cosmovisión) griega. No cabe duda que la mitología griega es una característica fuerte de la época clásica. La cosmovisión o mitología es la manera de ver e interpretar el mundo. En la Grecia clásica la mitología es una característica muy importante. Los griegos interpretan el mundo a partir de una serie de dioses que crean. Son los dioses los encargados de regir la vida de los mortales. La Ilíada y La Odisea, del poeta Homero, son dos colecciones clásicas de mitos. Los dioses griegos se caracterizan por su semejanza a los seres humanos: se parecen exteriormente a los seres humanos y revelan también sentimientos humanos. Esto no ocurre en otras religiones antiguas como el hinduismo o el judaísmo. Por ejemplo, el Dios de la Biblia judía no tiene esposa, ni se alimenta como los humanos. Los doce dioses del Olimpo. En el En el panteón griego (templo dedicado a todos los dioses) encontramos doce dioses principales. Estos habitaban, junto a los dioses menores, en el monte Olimpo. 1. Zeus. Es el dios más importante del El Olimpo es la montaña más elevada de Grecia (2917 m) Está cerca del mar Egeo. En la antigua mitología griega se creía que era el hogar de los dioses. En la cima se encontraban sus palacios, construidos por Hefesto, dios de la metalurgia. La entrada al Olimpo era una puerta de nubes protegida por las diosas conocidas como las Estaciones. Zeus tenía su trono en el Olimpo, y los dioses festejaban con néctar, ambrosía y las serenatas de las musas. Olimpo, tiene el titulo de padre de los dioses. Zeus es el dios de la luz. Es el símbolo de la lluvia, el viento, las tormentas, del ciclo de las estaciones y de la sucesión de la noche y el día. Tiene como misión mantener el equilibrio del Universo y proteger los privilegios de los dioses. Pero su poder es limitado, pues él también está sometido a las leyes del Destino. La leyenda cuenta que Cronos, padre de Zeus, devoraba a todos Estatua de Zeus de oro y marfil, de 10 metros de altura. Fue sus hijos para que ninguno de ellos la más famosa de la antigua Grecia y está considerada le destronara. Rea, esposa de como una de las siete maravillas del mundo. Se sabe que Cronos y madre de Zeus, para existió por las descripciones que realizaron Platón, Pausania evitar que Zeus fuese devorado, o Plinio. dio a luz en secreto y entregó a su esposo una piedra envuelta en pañales. Engañado, Cronos devoró la piedra. Cuando Zeus creció fue nombrado copero de Cronos, y en una de las bebidas mezcló una pócima que le dio Metis, primera esposa de Zeus. La pócima hizo que Cronos vomitara a todos sus hijos, empezando por la piedra y siguiendo por Hades, Poseidón, Deméter, Hera y Hestia. Entonces se desató la Titanomaquia, una guerra de diez años entre los Titanes por un lado y los Olímpicos, Cíclopes y Hecantoquiros, por el otro. Ganaron los Olímpicos. Entonces Zeus fue nombrado Señor de los dioses, y los Olímpicos se repartieron el Universo. Zeus se quedó con el cielo, Poseidón con el mar, y Hades con la ultratumba. Aunque Zeus tuvo varias esposas y numerosas amantes, su esposa legítima es Hera, una de sus hermanas, que reinó con él en el Olimpo. 2. Hera. Es hija de Cronos y Rea, por lo tanto es hermana de Zeus. Hera es la diosa que preside los matrimonios. Hera se había criado en Arcadia y allí fue a buscarla Zeus transformado en cuco (fantasma). Era invierno y cuando Hera tomó al cuco en sus manos para protegerlo del frío, Zeus recuperó su verdadera forma y la violó. Después de este encuentro Hera y Zeus se casaron y Hera pasa a ser la reina indiscutible del Olimpo. Todos los dioses acudieron a la boda con valiosos presentes. Gea le regaló a Hera un árbol con manzanas de oro que conferían la inmortalidad. Este matrimonio se vio salpicado de numerosos conflictos, debidos casi siempre a las continuas infidelidades de Zeus. En una ocasión, harta de las aventuras de Zeus, lo abandonó y se fue a vivir a la isla de Eubea. Zeus hizo toda clase de intentos para que regresara al Olimpo, pero todo fue en vano. Por fin, conociendo el carácter celoso de Hera, mandó hacer una hermosa estatua, a la que puso un vestido de boda y la colocó en un carro con heraldos que anunciaban su próximo enlace con Zeus. Hera enfurecida, saltó al carro para agredir a su rival y descubrió el engaño, pero tuvo que reconocer sus sentimientos y regresar al Olimpo con Zeus. Hera es madre de Ares, Hebe, Ilitia y Hefesto. Cuando nació Hefesto se sintió tan disgustada por su deformidad que lo arrojó del Olimpo para no verlo. Ya de adulto, para vengarse de su madre, Hefesto construyó un hermoso trono de oro que mandó como presente para Hera. Cuando Hera se sentó en él, quedó apresada por unas cadenas y así permaneció hasta que Dionisio, embriagándolo, consiguió que la soltara. 3. Atenea. Es hija de Zeus y de Metis. Es la diosa de la Sabiduría. Es una diosa guerrera, pero no le gusta la guerra; antes de entrar en combate siempre intenta arreglar los conflictos de manera pacífica. Sin embargo, una vez que entra en batalla nunca es derrotada. También preside las artes, los oficios y el conocimiento en general. Muchas veces era solicitada como jueza. Atenea es la hija primera y favorita de Zeus. Zeus, advertido que el primer vástago que tuviese con Metis sería una niña y que el segundo sería un varón que lo destronaría, se tragó a Metis, que ya estaba embarazada de Atenea. Tiempo más tarde le sobrevino a Zeus un terrible dolor de cabeza, Hefesto le abrió la cabeza de un hachazo y de allí salió Atenea, ya adulta, con un grito de guerra. Hefesto trató de violar a Atenea como pago por unas armas que había construido para ella. La diosa consiguió desasirse a tiempo del abrazo de Hefesto y el semen de éste cayó en la tierra, de aquí nació Erictonio, al que Atenea crió como hijo propio. Se la representa armada con lanza, casco, escudo redondo con la cabeza de la Medusa, la égida y sandalias aladas. 4. Afrodita. Es la diosa del amor, la belleza y el deseo sexual. También se la llama Citerea, la de Citera; Cipris, la chipriota o Anadiomene, la que vino del mar. Fue criada por las Horas y las Gracias. También es una diosa temible, que inspira pasiones monstruosas a los que descuidan su culto o despiertan su antipatía, como es el caso de Fedra o de Pasífae. Posee un ceñidor mágico que tiene el poder de enamorar a mortales y a inmortales. Afrodita tiene un deber divino: hacer el amor. Por esto, en una ocasión Atenea la reprendió al sorprenderla trabajando en un telar, trabajo que estaba incluido en las tareas de Atenea. Afrodita se disculpó y nunca más trabajó con las manos. Zeus la entregó como esposa a Hefesto para castigar su orgullo. La diosa aceptó, pensando que el dios herrero seria fácil de contentar. Sus infidelidades con dioses y hombres son numerosas, pero Hefesto, muy enamorado, siempre la perdonaba. 5. Apolo. Es hijo de Zeus y Leto. Es la personificación del Sol, mientras que su hermana gemela, Artemisa, representa a la luna. También tiene otros atributos como dios de la poesía, de la música, de la medicina y de las artes adivinatorias. Su epíteto de Febo se supone que significa el brillante, el luminoso y hace referencia al calor solar que hace madurar los frutos, pues Apolo es el dios del verano. Apolo se convirtió en el dios más hermoso del Olimpo. Apolo mató a la serpiente Pitón, en Delfos, que ocupaba el oráculo. A partir de entonces pasaría a ser el oráculo de Apolo en Delfos. Para honrar a Pitón, Apolo fundó lo juegos Píticos. Apolo fue arrojado en dos ocasiones del Olimpo. La primera, como castigo por participar en una revuelta contra Zeus. En esta ocasión tuvo que ayudar al rey Laomedonte a construir las murallas de Troya. La segunda, por haber lanzado sus flechas contra los Cíclopes, que eran aliados de Zeus. Fue enviado a cuidar de los rebaños del rey Admeto. 6. Artemisa. Es hija de Zeus y Leto. Es la dama de las fieras. Es la diosa de la caza, de la castidad y también de la luna, en especial de la luz lunar. Es la oponente natural de Afrodita. Es una diosa hermosa y atlética que recorre los bosques cazando. Por ser la diosa de la fuerza vegetativa, a ella se le ofrecen los primeros frutos de la recolección. Nació en la isla de Delos, junto a su hermano gemelo Apolo, a quien ayudó a nacer por ser Artemisa la primogénita, por lo que también se la considera patrona de los partos. Artemisa está equipada con un arco y unas flechas, regalo de Zeus. Va acompañada de ninfas y de una jauría de perros, regalo del dios Pan. 7. Ares. Es hijo de Zeus y Hera. Es el dios guerrero por excelencia, representa la fuerza bruta sobre la inteligencia. Es la antítesis de Atenea, diosa también guerrera, que encarna la fuerza inteligente y la astucia. En los enfrentamientos que tiene con Atenea siempre vence esta, e incluso sale humillado y maltrecho de tales combates. Tampoco en otros enfrentamientos sale siempre vencedor a pesar de que su presencia física es impresionante. 8. Hefesto. Es hijo de Zeus y Hera. Es la personificación del fuego. No representa el fuego domestico, si no al fuego como fuerza creadora. Es el dios de los herreros y del fuego de los volcanes que consiguen doblegar a los metales. Era tan deforme cuando nació, que su madre lo arrojó del Olimpo para que no la avergonzase ante los demás dioses. Hefesto cayó en el mar, donde las Oceanides Tetis y Eurinome lo recogieron y cuidaron durante nueve años. En el noveno año de su vida, Hera descubrió una joya que Tetis llevaba y quiso saber quién la había hecho. Tetis le confesó que la había hecho Hefesto. Hera, entusiasmada con los trabajos de su hijo, le pidió que regresara al Olimpo. Pero Hefesto, resentido con ella, le regaló un hermoso trono que la aprisionó al sentarse en él. La liberó hasta que Dionisio lo convenció emborrachándolo. Fabricaba los rayos de Zeus, la flechas de Artemisa y Apolo, las armas de Aquiles, la coraza de Heracles, las cadenas de Prometeo y modeló el cuerpo de Pandora. 9. Dionisio. Es hijo de Zeus y su amante Sémele. Es el dios del desenfreno y la exuberancia de la naturaleza, especialmente de la viña, que produce el vino y provoca la embriaguez. Hera, celosa de Sémele, la convenció para que se mostrase ante Zeus en todo su esplendor. Zeus apareció rodeado de rayos y truenos. Uno de los rayos fulminó a Sémele. Como ésta estaba embarazada de seis meses, Zeus arrancó al niño, aun vivo, del vientre de su madre y Hermes lo cosió dentro del muslo de Zeus para que completase la gestación. Por este motivo Dionisio es llamado el nacido dos veces. Fueron frecuentes sus viajes y aventuras hasta que encontró a Ariadna, con quien se casó. 10. Hermes. Es hijo de Zeus y Maya. Es el dios mediador. Sus principales cualidades son la astucia y la movilidad. Es un dios inventor y bienhechor, amigo de los hombres y mensajero de los dioses, en especial de Zeus. Fue un muchacho muy despierto desde su nacimiento. Con apenas unas semanas robó las vacas de Apolo y creó la primera lira, que luego cedió a Apolo para reconciliarse con él. Más tarde inventó la siringa o flauta, que también adquirió Apolo a cambio del cayado con el que cuidaba de sus rebaños. Cierto día Hermes separó a dos serpientes que luchaban. Estas, una vez amansadas, se entrelazaron en torno al cayado, lo que dio lugar al caduceo, que en Grecia es el símbolo de los embajadores y los mensajeros. Como emisario divino comunica el ultimátum de Zeus a Prometeo; lleva a Afrodita, Atenea y Hera ante Paris, para que éste emita su juicio. Hermafrodito y el dios Pan son sus hijos más famosos. 11. Poseidón. Es hijo de Cronos y Rea, por lo tanto hermano de Zeus. Después de destronar a Cronos, Poseidón, Zeus y Hades dividieron las posesiones de su padre echándolas a suerte en un yelmo. Zeus se quedó con el cielo, Hades con el mundo de ultratumba (el infierno) y Poseidón con el mar. La tierra pasó a ser propiedad de los tres. Poseidón es el dios del mar y del elemento líquido en general. Es intrigante y pendenciero, iguala a Zeus en dignidad, pero no en poder. Ni siquiera es el primer dios del mar. Antes de él hubo otros como Nereo. Vive en las profundidades del mar Egeo, donde ha construido un hermoso palacio con torres blancas, grandes puertas en forma de arcos e incrustaciones por doquier de conchas y corales. Poseidón es un dios codicioso, frecuentemente intenta agrandar sus posesiones, por lo que a menudo se enfrenta con otros dioses, y sale perdedor. Se le representa como un anciano con barba, desnudo y con un tridente en la mano, suele estar acompañado por un pez. 12. Hades. Es hijo de Cronos y Rea, por lo tanto hermano de Zeus. Al decir Hades nos referimos a este dios y también al lugar donde residen los muertos, todos, ya sean buenos o malos. Es el dios de los muertos. Por ser inflexible, es aborrecido por hombres y dioses, aunque no es injusto, ni malvado. Su nombre da mal augurio, por lo que no se le nombra, o se le llama con otros nombres como Plutón, que significa el rico. Cuando alguien moría, Hermes conducía al muerto hasta el río Estigia, donde el barquero Caronte lo recogía en su barca y lo llevaba al otro lado. Aquí se encontraba Cerbero que, como Caronte, vigilaba que no pasase ningún ser vivo. Los muertos eran juzgados por Minos, Radamantis y Éaco que los mandaban por tres senderos según sus actos. En el primer sendero estaba la llanura de Asfódelos, aquí se quedaban los mediocres. En otro camino se encontraban los Campos Elíseos, donde iban los afortunados. Y por ultimo el Tártaro, lo más parecido al infierno cristiano. Los dioses menores Asclepio. Es hijo de Apolo y Corónide. Es el dios de la medicina. Según la leyenda, fue el centauro Quirón quien lo crió y le enseño el arte de la medicina. Al morir, no fue a parar al Hades: se le concedió la inmortalidad y el rango de dios. Deméter. Es hija de Cronos y Rea. Es la diosa de la agricultura. Deméter es considerada la descubridora del trigo. Enseña a prepararlo y a cocinarlo. Eride. Diosa que personifica la discordia. Originó el juicio de Paris, que desembocó en la guerra de Troya. Eros. Es hijo de Afrodita y de Ares. Dios del amor. Es un ser bisexual, protector de los amores homosexuales. Aunque en principio fue representado como un hermoso adolescente, más tarde se impone la imagen de un niño travieso armado con un arco y unas flechas, que dispara tanto contra dioses como contra hombres. Es cupido en la mitología romana. Hebe. Es la diosa de la juventud. Ejerce las funciones de criada en el Olimpo. Sirve el néctar y la ambrosía, prepara el baño y viste a su hermano Ares. Hécate. Es la diosa de la magia y los encantamientos. Helio. Es hijo de los titanes Hiperión y Tía. Es padre de Eetes, Circe, Calipso y Pasífae. Hestia. Es la diosa del hogar. Himeneo. Es el dios de las bodas. Es la personificación del canto ritual que se efectuaba en los casamientos. Pan. Dios del pastoreo. Tánato. Es hermano gemelo de Hipno. Es la personificación de la muerte. Las ninfas. Personifican la fuerza de la fecundidad en la Naturaleza. Son divinidades secundarias. Pasan la vida cantando y bailando. Forman parte del cortejo de dioses como Artemisa, Dionisio, Pan o incluso de otras ninfas de más alto rango como Calipso. Frecuentemente encontramos a ninfas enredadas en amoríos con dioses y hombres. Se las representa como jóvenes desnudas o semidesnudas, bellas y alegres. Su vida llega a tener una gran longevidad, pero son mortales. Según donde habiten, así son llamadas: las nereidas son las ninfas del mar; las náyades son las ninfas de los ríos; las agrónomos son las ninfas de los campos; las musas son las ninfas protectoras e inspiradoras de todas las manifestaciones de la inteligencia (elocuencia, sabiduría, matemática, historia, arte, etc.); las moiras, o parcas, son las ninfas que personalizan el destino (reparten al azar las dichas y desgracias que le corresponden a cada persona a lo largo de su vida); las horas son las ninfas que rigen el orden social y el orden de la naturaleza, originalmente personifican a la primavera, al verano y al invierno, más tarde evolucionaron hasta ser asociadas con las horas del día; las erinias, o furias, personifican el castigo. Los titanes. Los titanes son doce: seis masculinos y seis femeninos (titánides). El tamaño de los Titanes era gigantesco. Una titánide famosa fue Tetis, quien fue la madre de Aquiles. ◩ Mitología romana. La cultura griega influyó mucho en los romanos. Una vez que éstos conquistaron Grecia en el siglo III a.C., ambas mitologías se fusionaron. Los dioses griegos y romanos que representaban ideas parecidas fueron admitidos indistintamente. El cuadro muestra los dioses y diosas principales y sus cometidos en las mitologías griega y romana. Nombre griego Apolo Ares Artemisa Atenea Afrodita Dionisio Hefesto Hera Nombre latino Febo Marte Diana Minerva Venus Baco Vulcano Juno Hermes Hades Poseidón Zeus Mercurio Plutón Neptuno Júpiter Papel en la mitología Dios de la profecía, la medicina y la arquería Dios de la guerra Diosa de la caza Diosa de las artes y oficios, y de la guerra; auxiliadora de los héroes Diosa del amor y la belleza Dios del vino Dios del fuego; herrero de los dioses Diosa del matrimonio y de la fertilidad; protectora de las mujeres casadas; reina de los dioses Mensajero de los dioses; protector de los viajeros, ladrones y mercaderes Dios de los mundos subterráneos; señor de los muertos Dios de los mares y de los terremotos Soberano de los dioses olímpicos Dos dioses romanos Genio. Este es un dios romano. Es un espíritu protector o guardián. Se creía que cada individuo, familia y ciudad tenía su propio genio. El genio recibía un culto especial como dios del hogar, porque se creía que otorgaba fortuna y dotes intelectuales a sus devotos. Por esta razón, la palabra llegó a designar a una persona con dotes intelectuales no comunes. Fortuna. Es la diosa del azar y de la buena suerte. En un principio fue considerada como una especie de diosa de la fertilidad o portadora de la prosperidad. Luego se le invocaba para solicitarle la buena suerte. A la diosa Fortuna se la representa sosteniendo un timón en una mano y una cornucopia (cuerno de la abundancia) en la otra. El timón significa que ella es guía del destino del mundo; y la cornucopia significa que es proveedora de abundancia. Fundadores de Roma, según la mitología Rómulo y Remo. Hermanos gemelos, hijos de Marte y de Rea Silvia. Se creía que ambos fundaron la ciudad de Roma en el 753 a.C. Al nacer, fueron arrojados en una cesta al río Tíber por Amulio, tío de Rea Silvia, para evitar que en el futuro le quitasen el poder. Pero los gemelos no se ahogaron. Fueron rescatados y amamantados por una loba en las faldas del monte Palatino. Cuando alcanzaron la madurez, los hermanos destituyeron a Amulio y pusieron a su abuelo Numitor en el trono. Con el tiempo, Rómulo asesina a su hermano, convirtiéndose en el único soberano de la ciudad que ambos construyeron. Eneas. Fue hijo de Venus, diosa del amor. Logró escapar de Troya una vez que ésta fue tomada por los griegos. Fue odiado por la diosa Juno, quien quería impedirle que fundara Roma. En su navegación de varios años por llegar a su tierra natal, Eneas alcanzó Italia y la desembocadura del Tíber. Gobernó durante varios años en el Lacio y, casado con Lavinia, fundó el pueblo romano. ◩ Organización sociopolítica Dado el aislamiento geográfico, la Grecia clásica estuvo formada por una serie de ciudades estado (polis) independientes, gobernadas por oligarquías aristocráticas. Sin embargo a menudo se unían en una liga dentro de la cual la más importante acababa por imponerse. Las dos polis más importantes fueron Atenas y Esparta. Esparta se preocupaba por su poderío militar, descuidando el arte y las actividades económicas. En aquella organización social, la guerra era el fin de la educación. Esto significa que los esfuerzos educativos iban dirigidos a formar buenos guerreros. Atenas, carente de militarismo, desarrolló la democracia limitada y puso las bases de la sociedad occidental. Sus habitantes proclamaron la independencia, la libertad y la igualdad. En un principio, los reyes gobernaban las polis de Grecia, pero perdieron el poder a favor de la aristocracia. La aristocracia estaba más capacitada para dirigir, poseía tierras y podía adquirir las armas imprescindibles para defender la ciudad. Los gobernantes eran llamados Arcontes. Al principio el cargo era vitalicio, pero en el siglo VIII a. C. su gobierno se limitó a una década. Antiguos Arcontes de conducta irreprochable formaban el Areópago: un tribunal que juzgaba causas civiles y militares. Con frecuencia las ciudades eran gobernadas por tiranos. Eran llamados tiranos aquellos que llegaban al poder de una forma ilegal, pero no abusaban del mismo. Justamente estos tiranos abrieron el paso hacia la democracia. El tirano más importante fue Pisístrato (560-527 a. C.) Fue durante las tiranías que hubo un florecimiento cultural. Especialmente en Jonia comenzó a surgir la filosofía griega con Tales de Mileto, Anaximandro y Anaxímenes. Gracias a objetivos culturales comunes, la lengua y la religión, se consiguió en Grecia cierta cohesión social. De la democracia se pasaría a la monarquía. Atenas y Esparta, las más fuertes ciudades, absorbieron a sus débiles vecinos. Esparta, estado militarizado, estableció su poder a base de conquistas y gobernó sus estados súbditos con un control muy estricto. No así Atenas, que consiguió una unificación pacífica. El político Dracón codificó la ley ateniense, por la que el poder judicial de los nobles quedaba limitado. Solón suprimió la esclavitud por deudas y terminó la lucha entre los grandes propietarios y la burguesía. Este legislador y político ateniense es considerado el fundador de la democracia de Atenas y uno de los denominados siete sabios de Grecia. Justamente el gobierno democrático supuso el más brillante periodo de la historia de Atenas. Bajo el mando de Pericles, Atenas alcanzó su máximo esplendor. Este político se propuso hacer de Atenas la ciudad más bella del mundo. Se construyeron el Partenón y otros grandes edificios. El teatro griego alcanzó su máxima expresión con las obras trágicas de hombres como Esquilo, Sófocles y Eurípides, y el autor de comedias Aristófanes. Tucídides y Heródoto fueron famosos historiadores, y el filósofo Sócrates fue otra figura de la Atenas de Pericles, quien hizo de la ciudad un centro artístico y cultural sin rival. La democracia ateniense difería mucho de las democracias actuales. Si bien el gobierno estaba representado por la ciudadanía, no todos podían ser ciudadanos. Sólo podían ser ciudadanos los nacidos en una determinada ciudad, siempre que poseyesen bienes de producción: tierra, ganado... Los esclavos, los libertos y los extranjeros no tenían derechos. Ellos, para ser oídos en un tribunal, debían valerse de un ciudadano. Por su parte, la antigua Roma era un reino basado en dos estamentos o clases sociales: los patricios (que era los nobles) y los plebeyos. Los patricios eran miembros de las familias hacendadas de la antigua Roma que formaban un orden social propio definido por la pertenencia a una misma gens (raza o tribu). Se decía que los patricios habían conquistado un pueblo ligur (los antiguos plebeyos) Todos los cargos políticos y religiosos se reservaban para los patricios, y el matrimonio mixto con plebeyos estaba prohibido. Los plebeyos carecían de derechos civiles y políticos, por lo tanto no podían adquirir bienes ni participar en las elecciones. El Senado, o Consejo de Ancianos, elegía a los monarcas y limitaba su poder. Pero una larga lucha entre las dos clases, que comenzó en el siglo VI a.C., terminó con la obtención de igualdad política para los plebeyos y el establecimiento de una nueva aristocracia (los nobles) formada por familias dirigentes de ambas clases. Desde el 300 a.C., las viejas distinciones políticas entre los patricios y los plebeyos ya no tuvieron significado real, excepto que los patricios no podían acceder al tribunato o al consejo de plebeyos. Influencia y permanencia de la cultura clásica en la contemporaneidad . Es indiscutible que la cultura clásica permanece e influye en el modo de vida actual. El gusto por las artes lo tomamos por la Grecia Clásica. La democracia fue una invención griega. En la actualidad, las obras de literatura clásica se siguen leyendo, y las tragedias griegas siguen siendo representadas en las salas de teatro. Muchos escritores basan sus obras en temas de la Grecia clásica. Y en las ciencias, la influencia griega es determinante. El Teorema de Pitágoras es tema de estudio en las ciencias matemáticas. La influencia de Tales de Mileto en la geometría es también permanente. Por su parte, los romanos nos heredaron el derecho. Los códigos de la legislación actual tienen su base en buena parte del derecho que heredamos de los romanos. Nuestro idioma tiene raíces griegas y latinas. Pensemos en palabras como geometría, geología, pedagogía, democracia, magnetismo, átomo... 2. La épica clásica Un poema épico (epopeya) es un poema narrativo extenso, en tono majestuoso, que cuenta las aventuras y proezas de uno o varios héroes sobrehumanos, comprometidos en una gran hazaña (Aquiles, en La ilíada; Ulises, en La odisea; Eneas, en La eneida). En la épica encontramos muchos valores. El héroe (o héroes) se distingue de los demás por su fortaleza física, su valor, su lealtad y sacrificio por una causa o por los demás. De esta manera la épica daba su aporte a la sociedad. El poeta que caminaba por las calles de la antigua Grecia recitando sus poemas, contribuía a mantener el estado de cosas de su sociedad. Al divulgar y pregonar los valores patrios y las normas de conducta aceptadas, enraizaba aún más los sentimientos nacionalistas. Estos sentimientos eran la base sicológica para impulsar al ciudadano hacia el engrandecimiento de la patria (generalmente por medio de las conquistas) Las más famosas epopeyas griegas son los poemas épicos de La líada y La odisea, de Homero. En la antigua Roma tenemos a Virgilio, que escribió La eneida. ◩ Los grandes rapsodas épicos. En la antigua Grecia, un rapsoda era una persona que iba de pueblo en pueblo recitando poemas. Homero. El mejor rapsoda de la Grecia clásica, fue Homero (si es que existió) A él se le atribuyen las dos grandes epopeyas de la antigua Grecia: La ilíada y La odisea. Nada se sabe de su persona, y, de hecho, algunos ponen en duda que estas dos epopeyas sean obras del mismo autor. Para algunos autores, Homero no fue una persona, sino una época: la época Homero. Hesíodo. Otro gran rapsoda fue el griego Hesíodo (siglo VIII a.C.) Ocupa un lugar importante tanto por sus preceptos morales como por su estilo coloquial. En su primera obra Los trabajos y los días, relata sus experiencias durante su época de campesino, y está salpicada de episodios alegóricos y fábulas. En un estilo sencillo y moralizante, Hesíodo subraya la importancia del trabajo y la rectitud. Ofrece consejos prácticos sobre cómo vivir, al tiempo que proporciona recetas y normas agrícolas, e incluye un calendario religioso con los días favorables y desfavorables para ciertas tareas del campo. El tema principal de la obra es la decadencia moral. ◩ Breve estudio sobre La ilíada La obra narra la guerra entre griegos y troyanos. Ocurre que Paris, un príncipe troyano, rapta a la griega Helena, esposa de Menelao, y la lleva a Troya. Los griegos movilizan a todos sus guerreros hacia Troya para sitiarla y recuperar a Helena. Se dice que la obra fue escrita por Homero, pero de su identidad se sabe poco. Hay lingüistas que creen que el nombre Homero viene del cretense omerous, que significa prisionero de guerra, rebelde. Otros dicen que se deriva de homer, que era una medida hebrea de volumen. Para otros, Homero no fue una persona, sino una época. La versión de más peso es que Homero sí existió y que era ciego, de acuerdo con las raíces jónicas del nombre. En cuanto al título, La ilíada significa El poema de Ilos o de Ilión, que es como los troyanos llamaban en su lengua a la ciudad de Troya. De acuerdo con la obra, la causa de la guerra fue el rapto de Helena. Pero esto no es más que mitología. Empecemos por decir que Helena, la mujer más bella de Grecia, era hija de Zeus. Paris, el raptor de Helena, fue abandonado por su padre en el monte Ida porque según una profecía causaría la ruina de Troya. Cierto día estaba cuidando a su oveja, cuando se suscitó una discusión entre las diosas Hera, Atenea y Afrodita acerca de quién era la más bella. Le pidieron que sirviera juez. Cada una de ellas intentó sobornarlo: Hera le prometió que lo haría soberano de Europa y Asia, Atenea que le ayudaría a lograr la victoria de Troya contra los griegos, y Afrodita que le concedería la mujer más hermosa del mundo, Helena. Paris eligió a Afrodita. Su decisión hizo que Hera y Atenea se volvieran enemigas acérrimas de su país (Troya). Este hecho, unido al rapto de Helena en ausencia de Menelao, desató la guerra de Troya. Claro que la mitología es simplemente mitología. Lo cierto es que la verdadera causa de la guerra fue el comercio. Las costas de lo que fue Troya son peñones naturalmente fortificados, lo que permitía controlar totalmente el peaje de naves y actividades mercantiles entre el sur de Rusia y el mundo grecorromano. Por lo tanto controlar tal región era una ventaja mercantil y militar. Y los griegos de la antigüedad invadieron Troya para controlar dicha región. La guerra la ganaron los griegos introduciendo gente en las murallas troyanas utilizando un gigantesco caballo de madera (probablemente es mitología). Esto no aparece en La ilíada, pero se explica en algunas tragedias, y también en La eneida. La verdad es que La ilíada comienza narrando el décimo año de lucha y termina con la muerte de Héctor, el más valiente de los guerreros troyanos, por Aquiles, quien ha vengado así la muerte de su amigo Patroclo. Al terminar la guerra de Troya, Eneas, guerrero troyano, logra escapar con vida y se hace a la mar. Según la mitología, antes de llegar a las costas itálicas y fundar Roma, pasa por Cartago y le pide asilo a la reina Dido. Concedido el asilo, la reina le pide que le narre sus infortunios. Eneas relata el trágico fin de Troya. Narra cómo los griegos logran entrar a la ciudad por medio de un gigantesco caballo lleno de guerreros. Habla del saqueo e incendio de la ciudad, de la muerte de Príamo, rey de Troya y de cómo Helena se salva de morir por él mismo. Narra su huída obligada de Troya, acompañado por su padre Anquises, su esposa Creusa y su hijo Iulo (Julio). Al final da cuenta de la muchedumbre troyana que logró escapar de la ciudad y que se une a él. A Dido le cuenta que se llena de furia al ver a Helena y piensa así: ¡De modo que esta mujer vivirá y volverá a Esparta, y a la patria Micenas con esplendor real, ganada la victoria por los suyos! ¡Volverá a ver su casa y a su esposo, sus padres, sus hijos; y llevará un cortejo de troyanos y de esclavas frigias! ¡Y Príamo habrá perecido, pasado por el hierro! ¡Y habrán consumido las llamas a Ilión, y empapado tantísimas veces oleadas de sangre la dardania ribera! No, no será. Si no es gran mérito castigar a una mujer, si victoria semejante nada tiene de glorioso, me alabarán al menos de haber aniquilado a este monstruo y aplicado a su maldad la pena merecida. Grato ha de serme saciar mi ardentísima venganza y aplacar los manes de los míos. Pero no mata a Helena. Esta retorna con Menelao a Grecia. Del caballo de madera, dice Eneas: Cansados de la guerra y viéndose rechazados por el Destino, perdidos ya tantos años, construyen los caudillos griegos, a persuación y por arte de la divina Palas, un caballo grande como un monte, cuyos costados forman con tablas bien ajustadas de abeto: fingen ser éste un voto para alcanzar feliz viaje de vuelta, y el rumor se divulga. Allí, en aquellos senos tenebrosos, ocultan sigilosamente de la flor de los guerreros los que al efecto la suerte designara: las ondas cavidades del ingenio y los amplios flancos llenan de ministros de la muerte… Resumen de La Ilíada. Se encuentran los griegos ante los muros de la ciudad de Troya, a la que han sitiado para recuperar a Helena, esposa del griego Menelao. Helena fue raptada por Paris, hijo de Príamo, rey de Troya. Crisis, un sacerdote, desea que pongan en libertad a su hija Criseida. Pero Agamenón, el rey de todos los reyes griegos, se niega. Crisis le suplica ayuda a Febo Apolo. Este dios lo escucha y dirige sus saetas contra los griegos. Agobiado por las flechas de Apolo, Agamenón acepta devolver a Criseida, pero piensa tomar a cambio a Briseida, la cautiva del valiente Aquiles, otro rey griego. Aquiles se enfurece y decide abandonar el combate, dejando solos a los griegos. Entonces la diosa Tetis, madre de Aquiles, le suplica a Zeus que socorra a los teucros (troyanos) y perezcan los griegos. Zeus promete complacerla, pero su celosa esposa Hera lo injuria. Los celos de Hera se deben a que supone que Zeus piensa honrar a Aquiles y provocar gran matanza en las naves aqueas (griegas). Hera está de parte de los aqueos (griegos). En el palacio de Zeus los dioses celestiales se indignan. Es así como los dioses en el Olimpo se dividen y toman partido en la querella de los hombres: unos están con los griegos y otros con los troyanos. En la rapsodia tercera, Paris y Menelao luchan por Helena. Menelao habría vencido a Paris, pero la diosa Afrodita, su madre, interviene para protegerlo. La guerra continúa sin que haya un ganador definitivo. A veces son los griegos los que parecen ganar la guerra, mientras en otros momentos son los troyanos. Estos cuentan con el gran guerrero llamado Héctor, el más valiente de los troyanos. Héctor es esposo de Andrómaca. En la rapsodia quinta, ella le suplica así: ¡Desgraciado! Tu valor te perderá. No te apiadas del tierno infante ni de mí, infortunada que pronto seré viuda; pues los aqueos te acometerán todos a una y acabarán contigo... ya no tengo padre ni venerable madre. A mi padre matolo el divino Aquiles... A mis siete hermanos los mató el divino Aquiles... Héctor, ahora tú eres mi padre, mi venerable madre y mi hermano; tú, mi floreciente esposo. Pues, ea, se compasivo, quédate en la torre. ¡No hagas a un niño huérfano y a una mujer viuda! En la octava rapsodia, Zeus, el mayor de los dioses, ordena que los dioses ya no intervengan en la batalla. Zeus dice: El dios que intente separarse de los demás para socorrer a los teucros o a los griegos), como yo le vea, volverá afrentosamente golpeado al Olimpo. Agamenón, desesperado por las adversidades de la guerra, comprende que fue un error haber ofendido a Aquiles. Le suplica que retorne a la guerra. Para lo cual envía una embajada ofreciéndole muchos regalos. El dice: Le daré también siete mujeres lesbias, hábiles en hacer primorosas labores... será mi yerno y tendrá tantos honores como Orestes, mi hijo menor, que se cría con mucho regalo. De las tres hijas que dejé en el alcázar bien construido, Crisotemis, Laodice e Ifianasa, llévese la que quiera... A pesar de las súplicas, Aquiles no regresa a combatir junto a sus compañeros. En la rapsodia decimocuarta, la diosa Hera, en complicidad con el Sueño, engaña a Zeus para apartarlo por algún tiempo del combate y permitirle al dios Poseidón que socorra a los griegos. En la rapsodia decimosexta, Patroclo, el amigo más querido de Aquiles, se halla muy triste por las desgracias que sufren los griegos, y le suplica a Aquiles que le permita combatir. Aquiles cede a las súplicas de su amigo. Así le dice: Cubre tus hombros con mi magnífica armadura, ponte al frente de los mirmidones (son los soldados de Aquiles) y llévalos al frente de la pelea; pues negra nube de teucros cerca ya a las naves con gran ímpetu, y los argivos, acorralados en la orilla del mar, sólo disponen de un corto espacio... Gran matanza hace Patroclo, pero muere a manos de Héctor. Este, después de clavarle la lanza, así le habla: ¡Patroclo! Sin duda esperabas destruir nuestra ciudad, hacer cautivas a las mujeres troyanas y llevártelas en los bajeles a tu patria. ¡Insensato! Los caballos de Héctor vuelan al combate para defenderlas... Responde Patroclo: ¡Héctor! Jáctate ahora con altaneras palabras, ya que te han dado la victoria Zeus Cronida y Apolo... Tampoco tú has de vivir largo tiempo, pues la muerte y el hado cruel se te acercan, y sucumbirás a manos del eximio Aquiles, descendiente de Eaco. Se arma luego una batalla en torno del cadáver de Patroclo. Los troyanos lo desean para intercambiarlo por el de Sarpedón; pero los griegos recuperan el cadáver. Cuando Aquiles se entera de la muerte de Patroclo, se llena de mucha angustia. Decide entonces volver al combate para asesinar a Héctor, y vengar así la muerte de su amigo. La diosa Tetis, madre de Aquiles, le recomienda que no entre en combate hasta que el dios cojo, Hefesto, le fabrique nuevas armaduras. En la rapsodia vigésima, Zeus permite que los dioses combatan entre sí. Al soberano Poseidón le hizo frente Febo Apolo con sus aladas flechas; a Ares, Atenea, la diosa de los brillantes ojos; a Hera, Artemis, que lleva arco de oro, ama el bullicio de la caza, se complace en tirar saetas y es hermana de Apolo; a Leto, el poderoso y benéfico Hermes; y a Hefesto, el gran río de profundos vórtices llamado por los dioses Janto y por los hombres Escamandro. Entre los hombres, Aquiles hace gran matanza mientras anda en busca de Héctor. Tanta era la matanza, que el río Janto llama a otro río, a Simois, para contener juntos la furia de Aquiles. Janto le dice a Simois: ¡Hermano querido! Juntémonos para contener la fuerza de ese hombre, que pronto tomará la ciudad del rey Príamo, pues los teucros no le resistirán en la batalla. En la rapsodia vigésima segunda Aquiles se enfrenta con Héctor. Hécuba, la madre de Héctor, le suplica que no pelee. Ella dice: ¡Héctor! ¡Hijo mío! Respeta este seno y apiádate de mí. Si en otro tiempo te daba el pecho para acallar tu lloro, acuérdate de tu niñez, hijo amado; y penetrando en la muralla, rechaza desde la misma a ese enemigo y no salgas a su encuentro. ¡Cruel! Si te mata, no podré llorarte en tu lecho, querido pimpollo a quien parí. Pero Héctor se enfrenta a Aquiles y muere. Esto dice Aquiles al herirlo: ¡Héctor! Cuando despojaste el cadáver de Patroclo, sin duda te creíste salvado y no me temiste a mí porque me hallaba ausente. ¡Necio! Quedaba yo como vengador. A ti los perros y las aves te despedazarán ignominiosamente, y a Patroclo los aqueos le harán honras fúnebres. Héctor responde: Te lo ruego por tu alma, por tus rodillas y por tus padres: ¡No permitas que los perros me despedacen y devoren junto a las naves aqueas! Acepta el oro y el bronce que en abundancia te darán mi padre y mi veneranda madre, y entrega a los míos el cadáver para que lo lleven a mi casa, y los troyanos y sus esposas lo pongan en la pira. En la rapsodia vigésima tercera se efectúan los juegos en honor de Patroclo. Diomedes gana en la competencia de velocidad con carro. Epeo (quien construirá el caballo) gana en el pugilato. Odiseo gana en la carrera. Para Agamenón no hay rival en el tiro de lanza. La rapsodia vigésima cuarta es la última de la novela. Nos muestra a Príamo pagando un rescate por el cuerpo de su hijo Héctor. Aquiles le devuelve el cuerpo de Héctor y le pregunta cuántos días de tregua necesita para honrar a su hijo. Príamo le contesta: Ya sabes que vivimos encerrados en la ciudad; la leña hay que traerla de lejos, del monte; y los troyanos tienen mucho miedo. Durante nueve días le lloraremos en el palacio, en el décimo le sepultaremos y el pueblo celebrará el banquete fúnebre, en el undécimo erigiremos un túmulo sobre el cadáver y en el duodécimo volveremos a pelear, si necesario fuere. Casandra fue la primera en ver a su padre y al cadáver de Héctor. Dentro de Troya, Andrómaca (esposa de Héctor) dio inicio a las lamentaciones. Luego continúa Hécuba. Fue la tercera Helena. Príamo dijo: Ahora, troyanos, traed leña a la ciudad y no temáis ninguna emboscada por parte de los argivos; pues Aquiles, al despedirme en las negras naves, me prometió no causarnos daño hasta que llegue la duodécima aurora. Se recogió la leña, púsose a Héctor en lo alto de la pira y le prendieron fuego. La odisea. Terminada la guerra de Troya, todos los griegos retornan a su patria. Pero Poseidón les envió una gran tempestad. Pese a ello, muchos héroes griegos llegaron a sus casas sin mayores contratiempos. No fue esta la suerte de Odiseo (Ulises), quien llegaría a Ítaca, su patria, diez años después. La novela épica La odisea relata las desventuras sufridas por Odiseo en su viaje y su llegada a casa. Resumen de La odisea. Se halla Odiseo (Ulises) en una gruta, donde lo retiene la ninfa Calipso. Esta ninfa desea hacerlo su esposo. Pero los dioses deciden que retorne a su patria, Itaca. Atenea se le presenta a Telémaco, hijo de Ulises, y le pide que salga en busca de su padre. Mientras tanto, en Itaca, los pretendientes de Penélope, esposa de Ulises, están acabando con las pertenencias de éste. Ella los había entretenido diciéndoles que al terminar un tejido elegiría a uno; pero lo que en el día tejía, en la noche lo deshacía. Telémaco está muy irritado con la actitud de los pretendientes, a quienes convoca a una reunión. Uno de ellos, Antínoo, le dice a Telémaco: ... y sorprendímosla cuando destejía la espléndida tela. Así fue como, mal de su agrado, se vio en la necesidad de acabarla. Oye, pues, lo que te responden los pretendientes para que lo alcance tu ingenio y lo sepan también los aqueos todos. Haz que tu madre vuelva a su casa y ordénale que tome por esposo a quien su padre le aconseje y a ella le plazca... y nosotros ni volveremos a nuestros negocios, ni nos llegaremos a otra parte, hasta que Penélope no se haya casado con alguno de los aqueos. Los pretendientes dan por muerto a Odiseo, aunque un augurio dice lo contrario. Telémaco parte en busca de su padre, protegido siempre por Atenea, quien le proporciona una embarcación y veinte compañeros para abrirse camino en el ponto. Llega Telémaco a Pilos, a visitar a Néstor e indagar por la suerte de su padre (Ulises). Néstor le brinda caballos y le pide que visite a Menelao. Pisístrato, hijo de Néstor, lo acompaña. Llega Telémaco a Lacedemonia, y visita a Menelao, quien se halla acompañado de la hermosa Helena. Le cuenta lo que ocurre con los pretendientes y le pide información sobre su padre. Menelao le responde que se halla atrapado en una isla. En Itaca, los pretendientes se enteran que Telémaco partió para Pilos. Antínoo dice: De aquí en adelante (Telémaco) comenzará a ser un peligro para nosotros, ojalá que Zeus le aniquile las fuerzas antes de que llegue a la flor de la juventud. Deciden emboscarlo para cuando vuelva. Los dioses deciden que Odiseo abandone el palacio de la ninfa Calipso. Zeus le dice al dios Hermes, su hijo amado: ¡Hermes! Ya que en lo demás eres tú el mensajero, ve a decirle a la ninfa de hermosas trenzas nuestra firme resolución: que el paciente Odiseo torne a su patria. Calipso le dice a Odiseo que corte madera y forme una extensa balsa, pues partirá. Luego le dice: si tu inteligencia conociese los males que habrás de padecer fatalmente antes de llegar a tu patria, te quedarías conmigo, custodiando esta morada, y fueras inmortal, aunque estés deseoso de ver a tu esposa... Yo me jacto de no serle inferior ni en el cuerpo ni en el natural, que no pueden las mortales competir con las diosas ni por su cuerpo ni por su belleza. Cuando Poseidón ve navegando a Ulises, se llena de ira y hace zozobrar su balsa. En una de las tablas logra llegar hasta el país de los feacios, cuyo rey es Alcínoo. Ulises entra a su palacio, y los reyes le dan de comer. Luego Alcínoo le ayuda para que continúe su viaje hasta su patria proporcionándole nave y muchos remeros. También, junto a doce reyes más, le brinda muchas riquezas a Ulises. Antes de partir, Odiseo le cuenta a Alcínoo sus aventuras durante el retorno de Troya. Le habla de Calipso y Circe, quienes quisieron tomarlo por esposo. Esta última convierte a sus compañeros en puercos: pero él revirtió el encanto. Le habla de su encuentro con los lotófagos y los cíclopes. Especialmente del cíclope Polifemo, hijo de Poseidón, quien devora a seis de sus hombres. Cuenta Odiseo que emborrachó a Polifemo y con una gran estaca le vació su único ojo. Le habla también de Eolo, el dios que domina los vientos. Le narra su viaje a la morada de Hades y Perséfone. Allí Ulises consulta el alma de su madre, Anticlea. Ella le dice que su esposa continúa afligida, que su padre vive en la pobreza y que su hijo, Telémaco, cultiva en paz sus heredades. También consulta el alma de Tiresias, el adivino ciego, quien le dice: ¿Por qué, ¡oh, infeliz!, has dejado la luz del sol y vienes a ver a los muertos y esta región desapacible?... Buscas la dulce vuelta, preclaro Odiseo, y un dios te la hará difícil, pues no creo que le pases inadvertido al que sacude la tierra (Poseidón), quien te guarda rencor en su corazón porque se irritó cuando le cegaste el hijo (Polifemo). Le pide que al llegar a la isla Trinacria no debe causarles daño a las vacas y ovejas del Sol, pues perderá su nave y la de sus amigos. Cuenta Odiseo que vio las almas de Agamenón Atrida, Aquiles, Patroclo, Antíloco y Ayante. A Aquiles le dice: ¡Oh, Aquiles!, eres el más dichoso de todos los hombres que nacieron y han de nacer, puesto que antes, cuando vivías, los argivos te honrábamos como a una deidad, y ahora, estando aquí, imperas poderosamente sobre los difuntos. Aquiles responde: No intentes consolarme de la muerte, esclarecido Odiseo: preferiría ser labrador y servir a otro, a un hombre indigente que tuviera poco caudal para mantenerse, a reinar sobre todos los muertos. Habla también Odiseo de Escila y Caribdis (ésta última devora a seis de sus hombres), y de la isla de las vacas y las ovejas del Sol. Aquí sus compañeros cometen el error de devorar unas de las vacas del Sol. Como castigo, Zeus destroza la nave, quedando únicamente Ulises con vida. Después de esto, remando en una tabla, llega a Ogigia, donde vive Calipso. Luego de esta larga conversación con Alcínoo, los remeros feacios llevan a Odiseo a su tierra, Itaca. A su regreso, Poseidón destruye a los remeros. Llega Odiseo a Itaca, siempre protegido por Atenea, quien le ayuda a guardar todas sus riquezas en una cueva y a preparar la venganza de los pretendientes. Atenea le dice: voy a hacerte incognoscible para todos los mortales: arrugaré el hermoso cutis de tus ágiles miembros, raeré de tu cabeza los blondos cabellos, te pondré unos andrajos que causen horror al que te vea y haré sarnosos tus ojos, antes tan lindos, para que les parezcas despreciable a todos los pretendientes y a la esposa y al hijo que dejaste en tu palacio. Convertido en un harapiento, Ulises conversa con su antiguo porquerizo, Eumeo. El le habla de toda su familia, de la ciudad y de los pretendientes. Mientras tanto, Telémaco, por sugerencia de Atenea, ha vuelto a Itaca y se reúne con Eumeo. Aquí Atenea devuelve su aspecto a Odiseo y propicia el encuentro de padre e hijo. Luego del amoroso encuentro, planean la muerte de los pretendientes. Odiseo ha entrado a su palacio como mendigo, y suplica comida a los pretendientes. Algunos se burlan de él; especialmente Antínoo. Luego conversa con Penélope, su esposa. Más tarde, la criada Euriclea reconoce a Odiseo por una cicatriz en el pie. Ella dice: Tu eres ciertamente Odiseo, hijo querido; y yo no te conocí hasta que pude tocar todo mi señor con estas manos. Posteriormente Odiseo les declara su identidad a Eumeo y al Boyero. Esto ocurre poco antes de la matanza. Odiseo les dice: Pues dentro está, aquí lo tenéis, yo soy, que después de pasar muchos trabajos, he vuelto en el vigésimo año a la patria tierra. Conozco que entre mis esclavos tan solamente vosotros deseabais mi vuelta, pues no he oído que ningún otro hiciera votos para que tornara a esta casa. En la rapsodia XXII se efectúa la matanza de los pretendientes. Es Antínoo el primero en morir. Luego muere Eurímaco. Anfínomo muere a manos de Telémaco. Participan en la matanza Eumeo y el boyero; también Atenea, transfigurada. Melantio, quien antes había humillado a Eumeo y a Odiseo, es atado. Luego de la matanza, son ahorcadas las esclavas que tuvieron contacto carnal con los pretendientes. Llega el turno para Melantio, quien sufre una muerte cruel. En la rapsodia XXIII Penélope reconoce a Odiseo después de muchas dudas. Al punto corrió a su encuentro, derramando lágrimas; echole los brazos alrededor del cuello, le besó en la cabeza y le dijo: No te enojes conmigo, Odiseo, ya que eres en todo el más circunspecto de los hombres; y las deidades nos enviaron la desgracia y no quisieron que gozáramos juntos de nuestra mocedad, ni que juntos llegáramos al umbral de la vejez. En la última rapsodia Odiseo visita y se identifica ante su padre. Mientras tanto, algunos intentan tomar venganza por la matanza, pero Zeus impide que se desate una guerra. 3. La tragedia griega ◩ La tragedia y las democracias griegas. En Grecia, el teatro era una de las actividades más importantes. Esta actividad era financiada por los ciudadanos ricos, de manera que ellos podían exigir que se escribieran y representaran obras de acuerdo con sus intereses de clase social. De aquí resulta que el teatro contribuía a mantener el divisionismo social. Como la sociedad griega de aquella época era esclavista, se concluye que el teatro contribuía a mantener la llamada democracia esclavista. Sin embargo, ciertos escritores dieron a sus obras un contenido de crítica. Es decir, reflejaban en ellas las contradicciones de la sociedad. En una palabra, sus obras eran anti-aristocráticas. Naturalmente, con tal actitud, se ganaron el rechazo de la nobleza. Con la llegada de la Democracia, Atenas sentó las bases de profundos cambios sociales y la tragedia fue la conquista artística que representó la armonía política y religiosa entre la aristocracia y el pueblo. Características de la composición trágica. Las composiciones trágicas estaban basadas en su mayoría en mitos o antiguos relatos. Por lo general, eran obras de poca acción y los hechos se relataban a través de diálogos y canciones del coro. Se busca en la tragedia restablecer el orden de una manera dolorosa. En el plano político explica la perturbación latente entre el hombre y el poder. Con las representaciones trágicas se buscaba exaltar la tradición mítica, el patriotismo, aleccionar y conmover. Los personajes más relevantes eran, por lo común, reyes; ya que ellos representaban los blancos más visibles de la sociedad; y, por medio de la tragedia, la vida privada de los monarcas pertenecía a todo el mundo. Los valores trágicos. Al leer las tragedias griegas, encontramos que sus personajes muestran mucha dignidad frente a un destino que les es adverso; así también encontramos en ellos gran templanza. También aparecen en las tragedias valores como los siguientes: exaltación de la grandeza individual, realismo e idealismo moral al mismo tiempo, exaltación de la moral y la religión, etc. ◩ Tres tragedias griegas. A continuación te presento el resumen de 3 tragedias griegas: Edipo rey, de Sófocles; Las troyanas, de Eurípides y Agamenón de Esquilo. Resumen de Edipo Rey. La tragedia se inicia con Edipo, rey de Tebas, recibiendo la noticia de que el dios Febo Apolo desea que se castigue a los matadores de Layo, anterior rey de Tebas, con lo cual tendrá fin la peste. Edipo promete vengar la muerte de Layo. Dice Edipo. El que sepa quién fue el autor de la muerte de Layo, preséntese y declárelo. Para conocer al culpable, Edipo le pregunta a Tiresias, ciego y vidente de la ciudad. Este se niega a dar una respuesta al principio, pero finalmente es obligado a hablar. El dice: Oye ahora, ten atención a lo que digo. Todo lo que tú dices contra el culpable, cae sobre ti. No, ya tú hablar no puedes, ni a estos ni a mí. Sábelo bien. Esta tierra está manchada por la infamia de un culpable. Y el culpable eres tú. Más adelante lanza la siguiente profecía: Fuera de esta tierra habrán de expulsarte. ¡Terrible cosa: hoy miras, un día ya no verás... serán tus ojos perpetuas tinieblas! Más adelante agrega: Se va a ver pronto que es hermano de sus propios hijos, y también su padre. Y de aquella de quien él nació, es al mismo tiempo hijo y consorte, y para su padre usurpador de su esposa y matador suyo. Edipo cree que Tiresias y Creón, hermano de Yocasta (su esposa), se pusieron de acuerdo para atribuirle la muerte de Layo. Yocasta le pide a Edipo que no crea en las profecías, pues suelen ser falsas. Le cuenta que su anterior esposo, Layo, recibió la profecía de que moriría a manos de un hijo suyo, cosa que no ocurrió, pues mandó a matar al niño con un siervo, ensartándole antes los pies con garfios. Pero en realidad el siervo no lo mata, sino que lo entrega a otro siervo. Luego de una charla que mantiene con Yocasta, Edipo llega a la conclusión que él dio muerte a Layo. Comprende, entonces, que Tiresias dijo la verdad. Por estos días muere el rey de Corinto, Pólibo, quien adoptó a Edipo. Este se siente satisfecho de que no se cumplió la profecía de Loxias, que establecía que él (Edipo) le daría muerte a su padre y se uniría en maridaje con su madre. También le confiesa el mensajero que Pólibo era únicamente su padre adoptivo, pues él (Edipo) fue entregado por un pastor en la montaña de Citerón. Es el mensajero quien recibió al niño y lo llevó al rey. El pastor es buscado y llevado ante Edipo, y confiesa que entregó el niño al mensajero, y que tal niño era hijo de Layo y Yocasta. Con esto, Edipo comprende que ha matado a su padre y que Yocasta es su madre. Desesperada, Yocasta se ahorca y Edipo se saca los ojos. Exclama Edipo mientras se vacía los ojos: ¡Ojos, no veréis más ni el mal que sufro, ni el crimen que cometo! Se cumple así la profecía de Tiresias. Ya ciego, Edipo habla con Creón a quien le pide que lo lleve lejos de allí y que cuide de sus hijas. El dice: ¡Ay mis dos infortunadas hijas!... ¡Cuídalas, ámalas, defiéndelas! Ultimo favor pido: deja que yo las toque con mis manos, deja que por vez final las acaricie y que llore sobre ellas por nuestros infortunios. ◩ Las troyanas. En la tragedia griega titulada Las Troyanas se relata la desventura de un grupo de mujeres troyanas cautivas después de la caída de Troya. Resumen de Las Troyanas. Aparecen Hécuba (Hécabe), reina de Troya (esposa de Príamo); Casandra, su hija, y Andrómaca, viuda de Héctor, el héroe troyano que murió a manos de Aquiles, quien vengó así la muerte de Patroclo. El escenario es una llanura frente a Troya, en la que están las tiendas de las cautivas. A lo lejos se perciben los muros de Troya, que arderán al final. Se inicia la tragedia con la voz de Poseidón (Neptuno), quien se lamenta por la desgracia caída sobre Troya, a cuyos ciudadanos él defendió durante la guerra. Dice Poseidón: Un morador del Parnaso, el focio Epeo, construyó un caballo, por instigación de Palas... Han de llamarlo los pósteros “el caballo de madera”... Se perdió Príamo, se perdieron sus hijos. Y esa doncella que Apolo inspiraba en frenesí vehemente, ved cómo Agamenón, desdeñando a los dioses y a los hombres, ha hecho suya a Casandra, y con violencia, la convierte en su concubina. ¡Adiós, ciudad afortunada antaño: yo me despido de vosotras, oh hermosas torres! ¡Si Palas (Atenea), la hija de Zeus, no hubiera anhelado tu ruina, qué gallarda te irguieras desde tus cimientos! Atenea deja escuchar su voz. Le hace saber a Poseidón que está irritada porque Ayante ultrajó su templo al arrebatar con violencia a Casandra. La diosa le ha pedido a su padre Zeus venganza, la cual se efectuará cuando los griegos retornen a Grecia. Atenea dice: Zeus va a enviar contra ellos aguaceros terribles y granizos sin igual. Huracanes, turbiones y procelas y un cielo oscurecido en nubarrones siempre. Mas prometió mi padre darme un rayo fulminante que dé en las naves y las vuelva cenizas. Poseidón se retira y Hécabe (viuda del rey Príamo) se levanta y canta: ¡Ay, ay...! ¡Cómo no llorar yo! ¡Se perdió la patria, se perdieron mis hijos y mi esposo! ¡Se derrumbó la pompa y fama de mis antepasados y al caer dio su oráculo: polvo y nada! Luego aparece el mensajero Taltibio, quien le explica a Hécabe que ya se hizo el reparto de las cautivas. Le dice que Casandra corresponde a Agamenón, y Polixena (la otra hija) ha sido asignada al servicio de la tumba de Aquiles. En cuanto a Andrómaca, la viuda de Héctor, fue preferida por el hijo de Aquiles: Neoptólemo. Le explica que ella (Hécabe) será esclava de Ulises (Odiseo). Luego aparece Casandra haciendo predicciones. Ella dice: Si existe Loxias, mucho más perniciosa que la de Helena va a ser mi boda: esa que va a celebrar conmigo Agamenón, el rey de los aqueos. Por mí y conmigo tiene que perecer y toda su casa vendrá a la ruina. Esa es la venganza por mis padres y por mis hermanos... Y en cuanto a Ulises, ¡hay, infeliz! Ignora los infortunios que le aguardan... Diez años más de los que aquí pasó han de correr antes de que a su casa llegue. Diez años de amarguras. ¡Cuánto habrá de mirar: al angosto estrecho en donde mora la tremenda Caribdis; el cíclope, que en las montañas engulle carne humana; Circe en Liguria, que tiene el don de transformar a los hombres en cerdos... Y al mar salobre irá a dar en naufragios, y al misterioso atractivo de los lotos, y de Helios las sagradas vacas que lanzarán clamores para gritar amargamente contra él. Sale Casandra con Taltibio. Hécuba se derrumba sobre la tierra. Aparece una carroza con Andrómaca y su hijo Astianacte. Le dice a Hécuba que Polixema ha muerto, con lo cual aumenta la angustia de la anciana. Luego le dice Hécuba a Andrómaca: Al nuevo amo venéralo y embelésalo con las dulzuras de tu trato. Darás alegría a todos los que te aman y harás a Troya el gran provecho de educar a ese niño que es su esperanza... ¡Quién sabe si algún día, un brote de él nacido, restaure a Ilión (Troya). Aparece de nuevo Taltibio, quien le dice a Andrómaca que su hijo será arrojado de las torres de Troya. Esto porque Ulises estima que no debe dejarse con vida a hijo de tan valiente padre. Hécuba vuelve a caer por tierra llena de angustia. Aparece Menelao en busca de Helena, que se halla junta con las troyanas, y la hace sacar por sus soldados. Su intención es llevarla a Grecia y darle muerte. Helena se defiende, y acusa a Hécuba de ser culpable de sus males, pues es la madre de Paris. También acusa a la diosa Afrodita por haberla entregado a Paris. Hécuba le hace ver a Menelao que Helena se entregó a Paris por placer y por su riqueza, y lo incita a que le dé muerte. Ella dice: !Lo que pasó es que viste a mi hijo ataviado con galas extrañas a las de tu país, todo resplandeciente de oro, y se te fue el alma en ansias de placer! Helena no logra cambiar la decisión de Menelao. Aparece de nuevo Taltibio. Ahora con el escudo de Héctor y el cadáver de Astianacte, el hijo de Héctor y Andrómaca. Hécuba recibe el escudo y el cadáver, al que le da sepultura. Luego ordena Taltibio que se le dé fuego a la ciudad de Troya, para luego regresar a la patria. Las esclavas son llevadas a las naves. Hécuba, viendo las llamas, dice: ¡Ay, ay, ay! ¡Ilión es ya una flama! Los torreones de Pérgamo, la ciudadela, los muros y fortines abrasados están. ◩ Agamenón. Ulises, al regresar de Troya, enfrenta la tempestad del mar y sus seres extraños. Pero la desgracia no está dispuesta sólo para él. A Agamenón, el rey de los reyes griegos, le espera la muerte a manos de su propia esposa. Esto se narra en la tragedia griega Agamenón, de Esquilo. Resumen de Agamenón. El Vigía (atalaya) habla así: Estoy en guardia esperando la señal de la antorcha, el relucir del fuego que nos dé la nueva de que ha caído Troya. Aparece la antorcha y corre a darle la noticia a Clitemnestra, mujer de Agamenón. El coro dice: Hace diez años que Menelao, gran adversario de Príamo y junto con él Agamenón; gemelos tronos y gemelos cetros de Zeus recibidos, alzaron una armada de mil naves, desde esta tierra argiva, cual militar ayuda. Aparece Clitemnestra. El coro le recuerda que Agamenón sacrificó a su hija Ifigenia para aplacar los vientos y salir hacia Troya, pues así lo requería el oráculo. Clitemnestra le explica al coro que Troya ha sido tomada, y que lo supo por medio de los fuegos de Hefesto. Habla de la angustia de los vencidos: Unos, derribados por tierra, se abrazan a los cuerpos de sus maridos, de sus hermanos, y los niños de los de sus ancianos padres y, ya ellos mismos esclavos, llorando están la muerte de los seres que amaron. Llega un Heraldo y confirma ante el coro la caída de Troya. Clitemnestra, refiriéndose a Agamenón, le dice al Heraldo: Que llegue a hallar en su lugar, tal como lo dejó, a una esposa fiel, perra guardiana de su casa: para él adicta y sumisa; feroz para sus enemigos. La misma totalmente, que ni un ápice ha descuidado durante su larga ausencia los tesoros que se le confiaron, ni roto sello alguno de sus reservados. Cuenta el Heraldo que las naves de Menelao fueron destruidas por el mar, y que nada se sabe del rey Menelao. Entra Agamenón y dice: Ya la ciudad cautiva se conoce solamente por el humo que se alza de sus escombros... El rapto fue duramente castigado y, por una mujer, la ciudad ha quedado reducida a polvo: fue el obrero el monstruo argivo, salido de las entrañas de un caballo con el broquel en los brazos, cuando iban declinando a su ocaso las pléyades. De Ulises dice lo siguiente: Contra su voluntad se alistó en la empresa. Pero, uncido al yugo, fue mi auxilio mejor. ¡Esto digo de él, sea que haya muerto o sea que viva! Le dice Clitemnestra a su marido: No te admire que Orestes no esté aquí. Lo está educando Estrofio el de Fócide. Ella sigue adulándolo. En el reparto, Casandra, la pitonisa, hija del rey Príamo, le ha correspondido a Agamenón, y la lleva consigo. Clitemnestra dice de ella: ¡Loca está y se detiene su mente en malas cavilaciones! Casandra dice: Apolo, Apolo, guía de los caminos: ¡haces gala de tu nombre: destruidor! ¡Tú me destruyes por segunda vez... y no te causa pena! Casandra hace un pronóstico: Un mal sin medida se prepara en este palacio: insoportable para los que aman, sin remedio ninguno... ¡Ay el que pudiera remediarlo está muy lejos!... Ya bañas al esposo que comparte tu lecho. También Casandra vaticina su propia muerte. El coro no logra descifrar sus presagios. Habla que Apolo se enamoró de ella y que ella no le correspondió. Y con claridad afirma que Clitemnestra asesinará a Agamenón. También predice que la asesinará a ella. Dice: Aguza el puñal para asesinar a su marido por haberme traído a mí. Luego dice:¡No, no: los dioses no dejarán impune este crimen: moriremos, sí, pero ha de venir un vengador... un hijo nacido para ser matricida... El cobrará la muerte de su padre. Y Clitemnestra asesina a Casandra y a Agamenón. Ella dice: ¡Cuánto tiempo suspiré por esta hora; al fin llegó; fue mi venganza! Fue como lo tramé. Le di el golpe. No puedo negarlo. No pudo huir, no pudo esquivar la muerte... Una red, como si fuera un pez, puse ante él: ropa de maldición y de infortunio: no pudo salir de ella. Dos golpes le aseste: Dio dos gemidos y sus miembros todos se descoyunturaron... Cayó por tierra al fin y, cuando hubo caído, di la tercera herida. Recuerda el sacrificio de su hija: Cual si fuera una ovejuela tomada del rebaño, mata a su propia hija ¡para acallar los vientos de Tracia! Juro por la justicia que ésta ha sido venganza por mi hija inmolada. Aparece Egisto, amante de Clitemnestra, hijo de Tiestes, hermano de Atreo, padre de Agamenón. Atreo mató a los hijos de Tiestes y se los dio de comer. Dice Egisto: El disputó el poder a mi padre Tiestes... Lo diré claro... Su propio hermano era. De esta ciudad lo expulsó y lo despojó de su hogar... Atreo, el criminal padre de este hombre (Agamenón), finge un festín de grata rememoración y en él ofrece como vianda la carne misma de sus hijos (de Tiestes). Egisto confiesa que él urdió toda la trama. Piensa gobernar la ciudad con el dinero de Agamenón. Como el coro le reprocha su actitud intenta asesinar a uno, pero Clitemnestra lo impide. Ella dice: No te preocupes de sus vanos ladridos. Somos amo tú y yo de este palacio: impondremos el orden. Lengua Objetivos Que el alumno o la alumna pueda: 1. Recordar y completar conceptos sobre la comunicación humana. 2. Recordar las funciones del lenguaje. Contenidos: 1. La comunicación humana. 2. Funciones del lenguaje. 1. La comunicación humana La comunicación es el proceso de transmisión y recepción de ideas, información y mensajes. En los humanos la comunicación se efectúa de diversas maneras: verbal, visual, táctil, corporal, contacto interpersonal... En las personas sordas, el lenguaje corporal y el contacto interpersonal son elementales. Desde luego que la forma de comunicación más usada es la verbal, generalmente se realiza entre dos o más personas paradas frente a frente. Pero la comunicación también se da a larga distancia. En la antigüedad ésta se efectuaba por golpes de tambor, el fuego, las señales de humo o el sonido del cuerno; y en la edad media se utilizaban palomas mensajeras para transmitir mensajes. En la actualidad contamos con el teléfono, la televisión y el Internet. Existen ciertos elementos sin los cuales la comunicación se vuelve imposible. Estos elementos son: emisor, receptor, canal, mensaje, código y contexto. Emisor Canal Mensaje Receptor El emisor es quien habla (emite el mensaje) y el receptor es quien escucha (recibe el mensaje). Esto significa que, en una conversación, cada participante es emisor en algunas ocasiones y receptor en otras. Cuando dos o más tratan de ser emisores a la vez, la comunicación no se consigue plenamente. El canal es el medio físico por el cual el mensaje es enviado al receptor. Cuando conversamos frente a una persona, el medio físico es el aire; cuando hablamos por teléfono, el medio físico es el cable; cuando leemos un periódico, el canal por el que recibimos el mensaje es el papel … En el caso de la lectura ocurre que el emisor es siempre emisor, y el receptor es siempre receptor. Esto también ocurre en la televisión. El mensaje es la información que se transmite: habrá reunión a las 4 de la tarde, el tráfico en la Constitución es intenso, preparémonos para el nuevo año de estudio … El código es el conjunto de símbolos usados para transmitir un mensaje. Cuando hablamos, el código es el lenguaje. En nuestro caso, el código es la lengua española. Cuando leemos un libro, el código es el alfabeto; entre sordos el código es el lenguaje de señas. Puede concluirse que si el código no es conocido, entonces la comunicación no es posible. Una persona que hable en chino, sólo podrá ser comprendida por otra que hable en chino. El contexto es el ambiente dentro del cual se da la comunicación. Algunos contextos pueden ser: estudiantil, deportivo, científico, matemático, laboral… Veamos algunos ejemplos en los que el contexto define la comunicación. 1. Pedro le dice a Fernando: Mañana terminaré la obra. a. En un contexto estudiantil, seguramente se tratará de terminar de leer una obra literaria. b. En un contexto laboral, podría tratarse de terminar una obra de albañilería. c. En un contexto de escultura, seguramente se tratará de terminar un busto u otra obra de escultura. En el caso a, tanto Pedro como Fernando son estudiantes de algún instituto o colegio. En el caso b, tanto Pedro como Fernando son albañiles. En el caso c son escultores. El contexto, aun cuando el código no se use correctamente, posibilita la comunicación. Práctica. Según el contexto, determina a qué se refiere la frase siguiente: Ya terminó la guerra. 1. Un general a otro en una guerra. a. Divorcio b. Partido de fútbol c. La guerra d. Elecciones presidenciales 2. El Presidente del Tribunal Supremo Electoral a un subalterno. a. Divorcio. b. Partido de fútbol. c. La guerr.a d. Elecciones presidenciales. 3. Pelé después del pitazo final del árbitro. a. Divorcio. b. Partido de fútbol. c. La guerra. d. Elecciones presidenciales. 4. El ex esposo a su ex esposa luego de firmada la separación. a. Divorcio. b. Partido de fútbol. c. La guerra. d. Elecciones presidenciales. 2. Funciones del lenguaje Para Jakobson, el lenguaje es un haz de funciones que se refieren a los distintos factores constitutivos de la comunicación. El fin del lenguaje es comunicar. Para logra este fin cuenta con varias funciones. Función referencial (representativa o denotativa) Esta función define las relaciones entre el emisor y el objeto al que hace referencia (emisor-mensaje). Formula información verdadera, es decir, objetiva, observable y verificable. Son enunciados en los que se afirman o niegan realidades objetivas. Esta función es básica; puede no ser la dominante, pero generalmente existirá. Ejemplo: Los pájaros volaron hacia el sur. Se dice algo de algo. Función expresiva o emotiva. Esta función concreta las relaciones entre el mensaje y el emisor (M-E). Expresa la actitud del emisor ante el objeto, su estado emocional. Esta función del lenguaje es también conocida como sintomática porque damos síntomas de muestro estado de ánimo, carácter, origen social, nivel educativo, ideología y más. Ejemplo: ¡En realidad el Modelo Neoliberal es una máquina que hace más pobres a los pobres! ¿Me comprende? Función apelativa o conativa. El lenguaje tiene una función conativa (de conato: intención) porque muchas veces lleva una intención sugestiva (oculta) Determina las relaciones entre el mensaje y el receptor (M-R). Con esta función el emisor pretende obtener del receptor una reacción. Quiero que aprendás a valorarte como persona, que no seás títere de nadie. Función fática o de contacto. Esta función precisa las relaciones entre emisor, receptor y canal. El fin predominante del mensaje es consolidar, detener o mantener la comunicación. Ejemplo: Diga, al responder al teléfono; Claro, sí o es verdad… en el transcurso de diálogos. Función poética o estética. Esta función define las relaciones del mensaje consigo mismo, y es portador de su propia significación. Se seleccionan palabras y expresiones, se buscan valores connotativos, se utilizan relevantes recursos estilísticos… Ejemplo: El tiempo es como una mariposa, cabecita blanca, delgada, nerviosa. Función metalingüística. Esta función establece relaciones entre el código y el mensaje. Se usa el lenguaje para comunicar algo del propio código. Tiene por objeto definir el sentido de los signos que corren el riesgo de no ser comprendidos por el receptor. Es el uso de la lengua para referirse a la lengua misma. Ejemplo: La lingüística es la ciencia del lenguaje. Práctica. Identifica las funciones del lenguaje en los siguientes enunciados. 1. La temperatura ha llegado hasta los 36º. __________________________ 2. Nunca me han convencido las explicaciones de la concepción subjetiva de la historia. __________________ 3. Manzanizo la vida. Tus mañanas sueltan al aire su violín de aromas. Manzanizo la tarde, si la tomas con tus manos que huelen a manzana. ________________________________ 4. Quiero que por favor me dé permiso. __________________________________ 5. Y onde yo me paré ______________________________ 6. Las palabras son _____________________ la sentí herramienta y que la todo materia daba prima gueltas. del 7. ¿Qué quiere decir para toda la vida? _____________________________ poeta. 8. Prohibido pisar la hierba. ________________________________________ 9. ¡Ven inmediatamente! __________________________________ 10. Quien siembra ______________________________ vientos cosecha tempestades. Expresion Objetivos Que el alumno o la alumna pueda: 1. Desarrollar su capacidad de expresarse oralmente, con claridad, propiedad y adecuación a la situación. 2. Ampliar sus conocimientos acerca de la estructura de las noticias periodísticas. 3. Redactar noticias periodísticas. 4. Escribir con precisión, claridad y corrección ortográfica. Contenidos: 1. Expresión oral no elaborada. 2. Descripción y narración en la prensa escrita. 3. Ortografía. 1. Expresión oral no elaborada La expresión oral no elaborada es aquella que surge espontáneamente, sin ninguna planificación. En cambio la expresión oral elaborada requiere de seguir ciertas reglas. La descripción. Una descripción es una representación de alguien o algo por medio del lenguaje, refiriendo o explicando sus distintas partes, cualidades o circunstancias. A continuación se describe la playa Los tuncos. La playa Los tuncos está ubicada en el departamento de La Libertad, a unos 38 kilómetros de San Salvador. Es una playa pequeña y muy tranquila, con varios restaurantes en su entorno, muchas piedrecillas y una arena gris que se vuelve muy caliente con el sol. Se llega a ella por una calle de piedras y bastante estrecha. En Semana Santa es muy visitada por los turistas, tanto nacionales como extranjeros. Lo más atractivo de esta playa es su gigantesca estructura de piedra negra, llena de musgos, en cuyo extremo izquierdo sobresale una estructura que parece la cabeza de un indio que mira fijamente hacia el otro lado del mar. La narración. Una narración, o narrar, es contar, referir o relatar un suceso, real o imaginario. La narración exige cierto orden en su desarrollo. La narración se distingue de la descripción en que permite la fantasía. Por ejemplo, un cuento es una narración porque permite escenas como la de animales que hablan. Narración: Manyula Manyula es la elefanta de nuestro zoológico. Su nombre significa niña bonita. Manyula es tierna, dócil y amigable. Tiene más de cincuenta años y aún conserva la serenidad de una reina. Manyula es fuerte, de muchas toneladas, de patas firmes, de grueso moco y de mirada triste. Es común verla abanicándose con sus grandes orejas o dándose un peculiar baño de polvo con su largo moco. Manyula es la atracción de los niños, pues ellos, muy fascinados, pasan interminables minutos con la mirada fija en aquella visitante del Africa. Esto le agrada a la tierna Manyula quien corresponde a la visita de los niños con una mirada de aliento y de consuelo, consciente de que los niños de El Salvador necesitan de una mirada tierna y bondadosa. Por todo esto, Manyula es la reina del zoológico y la cuadrúpeda más querida por los niños salvadoreños (y también por los adultos). 2. Descripción y narración en la prensa escrita. Ya vimos que describir es representar por medio del lenguaje (verbal o escrito) las cosas tal como son; en cambio en la narración hay un poco más de libertad, pues se permite la fantasía, además del lenguaje poético. En la prensa escrita encontramos tanto la descripción como la narración, aunque ésta es muy poco frecuente. La prensa escrita es la que nos lleva las noticias por medio de los periódicos. Las noticias en los periódicos tienen la ventaja que las podemos leer cuantas veces queramos. Por esto dichas noticias pueden ser no muy breves en comparación con las de la radio o televisión. Además, como no existe la imagen en movimiento, los detalles deben expresarse por escrito. Esto demanda mayor espacio. Una noticia debe ser breve y completa. La brevedad implica utilizar sólo las palabras que sean necesarias y precisas para expresar un pensamiento. Y debe ser completa, de manera que no queden cabos sueltos que induzcan a interrogantes. Para conseguir este propósito, al redactar una noticia, la información debe responder seis preguntas básicas: ¿Quién? Nos referimos al autor (o autores) de la noticia: el ganador del premio, el ganador de la medalla de oro, el que provocó el accidente, el que sufrió las heridas, el fallecido… ¿Qué? Esta pregunta corresponde al hecho o acontecimiento. ¿Cómo? Corresponde a la forma en que ocurrió el hecho ¿Dónde? Corresponde al sitio o lugar en el que se desarrolló el hecho. ¿Cuándo? Corresponde al tiempo en que ocurrió el hecho ¿Por qué? Corresponde a la causa o al elemento fundamental que da la razón de lo que ha sucedido. Una noticia consta de las partes siguientes: titular, introducción o lead, cuerpo y cierre. El titular es una frase breve que encierra lo fundamental de la noticia. La introducción o lead es el primer párrafo, y contiene en forma resumida los datos esenciales de la información. El cuerpo es la parte que explica con mayores detalles la noticia. Y el cierre es el párrafo final. Una noticia típica es la siguiente: Entregan Premio Nacional de Cultura En CONCULTURA entregan Premio Nacional de Cultura a la señorita Karen Guzmán por contribuir a conservar nuestros centros arqueológicos. Ayer, en el centro arqueológico El Tazumal, la señorita Karen Guzmán recibió de manos del presidente de CONCULTURA, Lic. Federico Hernández Aguilar, el Premio Nacional de Cultura. Dicho premio le fue otorgado por su valiosa contribución a la cultura nacional en lo relativo a la conservación de nuestros centros arqueológicos. Afirma la señorita Guzmán que lleva ya más de ocho años dedicándose a la conservación de centros arqueológicos, y que durante dicho período, especialmente en los últimos tres años, ha logrado salvar de la destrucción partes valiosas de la arqueología. Terminó diciendo que continuará dedicándose a tal labor, pues considera que conservar nuestros centros arqueológicos es una necesidad y un deber cultural de todos los salvadoreños. Con esto, CONCULTURA demuestra una vez más que los valores nacionales son reconocidos en nuestro país; demuestra también que existe interés por conservar nuestro patrimonio cultural. Práctica. Lee la siguiente información: Un bus volcó ayer cerca de Olocuilta, dejando 3 muertos y 5 heridos. Redacta una noticia con esta información agregándole datos que estimes conveniente. _______________________________________________________ _____________________________________________________________________ ____ _____________________________________________________________________ ____ _____________________________________________________________________ ____ _____________________________________________________________________ ____ _____________________________________________________________________ ____ _____________________________________________________________________ ____ _____________________________________________________________________ ____ _____________________________________________________________________ ____ _____________________________________________________________________ ____ 3. Ortografía Palabras con h inicial. Se escriben con h inicial las palabras que empiezan con las expresiones ia, ie, io, ue, ui, is, ecto, emi, epta, exa, elio, ema, emo, idr, ipo, iper, osp. Ejemplos: hiato, huelga, hueso, huir, historia, hisopo, hispano, histología, hectolitro, hexágono, hematíes, hemofilia, hemorragia, hidrógeno, hipérbola, hipopótamo, hospedaje. Excepciones: istmo, isla, Isabel, Isaac, Ismael, Israel, isomorfo, isócrono, isómero, Islandia. Tildación de diptongos, triptongos e hiatos. Un diptongo es la unión de una vocal cerrada con una abierta, o dos cerradas: canción, vuelo, viaje, ruido, enciende… La tilde irá sobre la vocal abierta cuando la sílaba tónica contenga un diptongo formado por una vocal cerrada y una abierta: intención, también. La tilde irá sobre la segunda vocal cuando la sílaba tónica contenga un diptongo formado por dos vocales cerradas: destruí, interviú. En cambio destruir no se tilda en la i porque la palabra no va tildada conforme a las reglas ya estudiadas: es aguda que no termina ni en n ni en s. El triptongo es la unión de tres vocales en una misma sílaba: estudiáis, estudiéis. Cuando una palabra con triptongo tónico lleva tilde, ésta se coloca sobre la vocal intermedia: acariciáis, acariciéis. El hiato se forma con dos vocales seguidas y de sílabas distintas. En la palabra maestro hay hiato. En dicha palabra, la a pertenece a una sílaba y la e a otra sílaba: ma – es – tro. Si en un hiato la i o la u es tónica, entonces llevará tilde; y si el hiato está formado por estas vocales, y una de ellas es tónica, entonces la i llevará tilde si le corresponde de acuerdo con las reglas. Ejemplos: continúa, geografía, economía, río, baúl, Raúl, maíz, raíz... Práctica. Escribe 20 palabras con h inicial ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ ________________ Práctica. Coloca la tilde en la vocal que corresponde en las palabras siguientes. Comereis Bebiais Cancion Sancion Mio Distribui Pais Anatomia Baul Contribui Despues Camion Duo Grua Intencion Maiz Distribuiais Veia Oceano Geologo Leia Sensacion Continue Devolucion Descubrio Corolario. A la hora de colocar una tilde, no se tienen en cuenta las reglas anteriores. Lo cierto es que la tildación correcta se consigue auditivamente; para lo cual es necesaria una práctica constante.