Manifestaciones gastrointestinales del VIH Dr. Oscar Lionel Echeverría Orellana RESUMEN Objetivos: Realizar una revisión de la bibliografía acerca de las manifestaciones gastrointestinales en la población afectada por VIH/Sida. Métodos: se realizó una revisión de la literatura en artículos de revista, libros, publicaciones científicas, del año 2010 al 2015. Se tomó en cuenta las revisiones de la bibliografía más recientes y las más importantes. Resultados: Se encontró una amplia gama de literatura con respecto a las manifestaciones gastrointestinales en la infección por VIH, siendo éstas las principales en algunos pacientes; abarcando desde enfermedades orales, como fúngicas o virales; afecciones esofágicas, que son frecuentes en este grupo de pacientes principalmente esofagitis por cándida, la cual indica un estadío avanzado de la misma; diarrea que es una de las manifestaciones causada por un gran número de patógenos como virus, bacterias y parásitos así como afecciones en el sistema hepatobiliar. Los desórdenes anorrectales juegan un rol importante en pacientes con esta afección, especialmente en el grupo de pacientes HSH (hombres que tienen sexo con hombres) encontrando fisuras anales, fístulas, abscesos perirrectales, ulceraciones, proctitis y cáncer. Por último se revisan las principales causas de sangrado gastrointestinal que es poco frecuente en esta población y que puede ser causado tanto por infecciones oportunistas como por patologías no asociadas a Sida. Discusión: Se recomienda realizar una evaluación adecuada de todos los pacientes con afección por VIH/Sida, realizando una anamnesis exhaustiva, un examen físico detallado tomando en cuenta el estado inmunológico del paciente y evaluar si existe una adecuada adherencia al tratamiento para poder orientar el diagnóstico y brindar tratamiento adecuado. SUMMARY Objectives: Conduct a literature review about gastrointestinal manifestations in the population affected by HIV / AIDS. Methods: A review of the literature journal articles, books, scientific publications, from 2010 to 2015 was conducted reviews of the most recent literature and the most important were taken into account. Results: a wide range of literature regarding gastrointestinal manifestations in HIV infection was found, these being the main in some patients; ranging from oral diseases, such as fungal or viral; esophageal diseases, which are common in this group of patients mainly Candida esophagitis, which indicates an advanced stage of the same; diarrhea that is one of the manifestations caused by many pathogens such as viruses, bacteria and parasites and diseases in a hepatobiliary system. Anorectal disorders play an important role in patients with this condition, especially in the group of patients MSM finding anal fissures, fistulas, perirectal abscesses, ulcers, proctitis and cancer. Finally the main cause of gastrointestinal bleeding is rare in this population and therefore can be caused by diseases such as opportunistic infections associated and others infections nonassociated with AIDS. Discussion: It is recommended a proper evaluation of all patients with HIV/AIDS, conducting a thorough medical history, physical examination and considering the immune status of the patient to evaluate whether there is an adequate adherence to the antiretroviral treatment to guide diagnosis and provide appropriate treatment. Keywords: HIV, manifestations, gastrointestinal, AIDS Manifestaciones gastrointestinales del VIH Introducción Desde 1981 que fue descrito el primer caso de síndrome de inmunodeficiencia adquirida (SIDA), se han descrito a nivel mundial múltiples casos de infecciones oportunistas como Pneumocystis. Alrededor de 25 millones de personas han muerto por Sida y se estima que alrededor de 34 millones de personas alrededor del mundo están actualmente viviendo con el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). 1, 2 Las manifestaciones gastrointestinales son comunes en pacientes infectados por el VIH. Sabemos que las manifestaciones gastrointestinales que están causadas en su mayoría por infecciones oportunistas son asociadas con alta mortalidad, desde odinofagia causada por Candida la cual disminuye la ingesta de alimentos por parte del paciente hasta Citomegalovirus (CMV) que disminuyen la absorción de 1 nutrientes. El tratamiento de infecciones oportunistas ha avanzado muy poco en los últimos 30 años, la mortalidad por afecciones gastrointestinales ha disminuido a excepto de las afecciones hepáticas ya que representan la mayor causa de mortalidad en pacientes con VIH. En 1995 nace el concepto de antirretroviral de alta actividad lo cual vino a cambiar totalmente la perspectiva de los pacientes con VIH, ya que con la reducción de la carga de VIH circulante hay una mejoría significativa en la función inmune que se puede medir con el aumento de linfocitos CD4 así como la reducción de las infecciones oportunista y por ende, la mejoría en la sobrevida y calidad de vida de los pacientes. Pasando así al manejo de una enfermedad crónica y no una enfermedad mortal como era conocida antes, por lo que actualmente se tiene problemas con los efectos adversos de los medicamentos, así como también las interacciones de los mismos, haciendo que los pacientes ya no mueran por patologías asociadas a VIH/Sida como hepatopatías crónicas como infección por virus de hepatitis C (HCV). 1, 2 A pesar de que la terapia antirretrovirales (TAR) ha alterado dramáticamente la incidencia de complicaciones gastrointestinales (GI), según la respuesta clínica de cada paciente, el apego a tratamiento así como el aparecimiento de resistencia o reinfección pueden alterar la inmunidad y tener recaídas, con lo que los linfocitos CD4 disminuyen, habiendo manifestaciones clínicas gastrointestinales.3 Evaluación de pacientes con síntomas gastrointestinales La evaluación de los pacientes con infección por VIH, como cualquier otro paciente, requiere una anamnesis correcta, una revisión de la historia clínica de forma detallada así como los medicamentos consumidos por los pacientes y una exploración física exhaustiva. Se deberá tomar en cuenta el estado inmunológico del paciente, el tratamiento actual, su apego al mismo, estado de vacunación y medicamentos para profilaxis. Todo esto ayudará a una orientación diagnóstica correcta y definir si se está ante una manifestación oportunista por el VIH o un efecto secundario del tratamiento.2 La evaluación de los laboratorios es otro tópico importante ya que puede orientar en muchas patologías, como la hipoalbuminemia que es frecuente y puede ser secundaria a diarrea crónica por enteropatía perdedora de proteínas. 2, 4 Enfermedades orales Las afecciones orales muchas veces orientan el diagnóstico hacia VIH ya que en muchas ocasiones las primeras manifestaciones de estos pacientes son en la cavidad oral.1, 2, 4 Los pacientes con VIH pueden tener manifestaciones periodontales como la periodontitis crónica marginal, eritema lineal gingival y la periodontopatía necrosante ulcerativa ya que estos pacientes presentan una progresión rápida de la misma según su estado inmunológico. En estos pacientes también puede existir infección por bacterias, hongos o virus. La candidiasis oral, lesiones por herpes virus tipo 1 o 2 persistentes y la leucoplasia vellosa con de las manifestaciones más frecuentes y sugestivas de VIH. 1, 2, 3, 4 Las lesiones por virus con aftas múltiples, dolorosas y de gran tamaño pueden estar dadas por citomegalovirus, herpes simple e incluso secundario a procesos malignos como linfoma o carcinoma. 2, 3, 5, 6 A B C Imagen 1: A: Candidiasis oral; B: Leucoplasia vellosa; C: Herpes virus (Tomado de http://www.medicinaoral.com) Odinofagia y disfagia La afección más frecuente asociada con la infección por VIH es la infección por Candida albicans. La mayoría de los casos se presentan al inicio del Sida como resultado de inmunosupresión; algunos pacientes pueden presentarse también con candidiasis oral, aunque la ausencia de ésta no excluye el diagnóstico de candidiasis esofágica. El diagnóstico definitivo se establece por endoscopía superior, la cual revela placas focales o difusas asociadas a hiperemia de la mucosa y friabilidad (Imagen 2). Sin embargo si presenta úlceras bien definidas circunscritas sugiere un proceso adicional. 2, 3, 6, 7 CMV es el patógeno frecuentemente identificado en Sida, la asociación con enfermedad esofágica es menos frecuente que cándida, característicamente causa ulceraciones en la mucosa. Los signos y síntomas de este incluyen odinofagia y dolor precordial. La odinofagia es menos común que en candidiasis. El diagnóstico se realiza con endoscopía superior encontrando ulceraciones extensas que pueden ser grandes y profundas, siendo común la coinfección con Candida (Imagen 2). 3, 5, 7 Esofagitis por herpes simple virus (HSV) es infrecuente en pacientes con Sida, sin embargo también afecta a esta población. La presentación es similar a la infección por HSV en otras membranas mucosas, observándose vesículas discretas, úlceras pequeñas y poco profundas que finalmente forman ulceraciones más grandes en estados más avanzados (Imagen 2). En contraste con la infección por CMV, las úlceras tienden a ser poco profundas; es raro que sean grandes y profundas. Para confirmar diagnóstico se pueden tomar biopsias del margen de las biopsias y enviarlas a cultivo viral.2, 4, 6, 7, 8 A B C Imagen 2: A: Esofagitis por Candida; B: Úlceras por CMV; C: Úlceras por HSV (Tomado de Sleisenger and Fordtran’s gastrointestinal and liver disease.) Diarrea Antes de la era de ARV, la diarrea ocurría hasta en un 90% de los pacientes con infección por VIH, sin embargo en la era de ARV este padecimiento es menos frecuente y comprende una etiología que actualmente es inducida por los medicamentos o causados por patologías no relacionadas por la infección por VIH. La infección por VIH resulta en una depleción rápida del recuento de linfocitos T CD4 en el tracto gastrointestinal, así como el aparecimiento de la característica enteropatía con aumento de la inflamación de la lámina propia y daño del epitelio gastrointestinal, lo que se asocia con translocación bacteriana y activación inmune. 1, 2, 3, 6, 7, 8 La diarrea aguda se define como al menos 3 disposiciones líquidas al día y por más o menos dos semanas. La diarrea crónica se diagnóstica cuando los síntomas han estado presentes por más de 4 semanas. 1, 2, 3, 6, 7, 8 En todas las series de pacientes, los protozoos son el patógeno más frecuente en diarrea, especialmente en pacientes que se presentan con diarrea crónica y refractaria a tratamiento. La etiología varía entre las diferentes regiones, en función de los parásitos y enteropatógenos. Mientras que Isospora belli es poco frecuente en Europa, representa del 15-28% de los casos de los pacientes en África. En países como Estados Unidos y Reino Unido, el 44 a 50% de los pacientes con diarrea infecciosa se debe a Criptosporiium parvum y Microspodiria. En viajeros es frecuente la infección por parásitos como Entamoeba histolytica, Cyclospora cayetanis, Giardia lamblia y Blastomyces hominis, aunque infecciones bacterianas por Escherichia coli y Shigella no son poco comunes. 1, 2, 3, 6, 7, 8 La evaluación de estos pacientes debe ser de forma integral, como se ha mencionado previamente con un examen físico y anamnesis adecuada. Los pacientes sin Sida están predispuestos a infecciones intestinales, que pueden ser desde síndrome diarreico agudo hasta infecciones crónicas intratables por microorganismos que usualmente son auto-limitados en individuos inmuno-competentes como Cryptosporidium parvum que a su vez pueden contribuir al aparecimiento de otros afecciones y la infección por otras bacterias como Salmonella, Shigella, Campylobacter species. El lugar de procedencia, aspectos clínicos y socioeconómicos también se asocian con infecciones oportunistas, incluidos recuento bajo de linfocitos T CD4, el mal apego al tratamiento ARV, estrato socioeconómico bajo, consumo de agua no potable y exposición a animales de granja. Se debe caracterizar la diarrea interrogando al paciente acerca del volumen duración y frecuencia así como también los síntomas asociados como náusea, dolor abdominal, sangrado, pérdida de peso, fiebre y otras presentaciones. Se debe tratar de diferenciar el origen de la diarrea entre intestino delgado y grueso. Cuando el paciente se presenta con dolor abdominal superior y abundantes ruidos gastrointestinales sugiere una enteritis o intestino delgado. En cambio cuando el paciente refiere hematoquezia, tenesmo y dolor abdominal superior, sugiere origen de colon. Sin embargo esto no es igual en todos los pacientes pudiendo haber presentaciones atípicas. 1, 2, 5, 7, 10 Se debe interrogar acerca de prácticas sexuales ya que pacientes que tienen sexo con hombres (HSH) y Sida que presentan diarrea, puede identificarse más de 2 patógeno. 1, 2, 5, 7, 10 A los pacientes que se presentan con menos de 5 días de diarrea se debe realizar tres muestras de heces con tinciones para Cryptosporidium y Microsporidium.1, 2, 5, 7, 10 Se debe realizar coprocultivo y dependiendo de la sintomatología se pueden solicitar pruebas especiales como Ziehl-Neesen (ZN) modificado lo que nos puede ayudar a diferencia de quistes de Cryptosporidium, Isospora belli y Cyclospora cayetanensis que se tiñen rosados o rojos de las levaduras y restos alimenticios que se tiñen verdes o azules. 1, 2, 5, 7, 10 Las biopsias de intestino delgado se pueden teñir con Giemsa o hematoxilina y eosina. Cryptosporidium puede ser detectado con tinción de hematoxilina y eosina en biopsias de intestino delgado.1, 2, 5, 7, 10 Tabla 1 Diagnósticos diferenciales de diarrea en pacientes con VIH/Sida Bacterias Protozoos Virus Clostridium difficile Salmonella spp. Shigella spp. Campylobacter jejuni Mycobacterium avium complex Mycobacterium tuberculosis Vibrio spp. Microsporidium Cryptosporidium spp. Isospora belli Toxoplasma spp. Giardia lamblia Entamoeba histolytica Leishmania donovani Blastocystis hominis Cyclospora spp. Pneumocystis jiroveci. Adenovirus Rotavirus spp Herpes simple Picobirnavirus Citomegalovirus VIH Norovirus Neoplasias Idiopáticas Inducido por Drogas Linfoma Sarcoma Kaposi de Enteropatía VIH Diverticulitis Sarcoidosis por Inhibidores proteasa Hongos Histoplasmosis Coccidioidomycosis Cryptococcosis Candidiasis Penicillium marneffei de Pancreático Insuficiencia pancreática Pancreatitis crónica Pancreatitis infecciosa (CMV, MAC) Pancreatitis inducida por drogas Fuente: Adaptado de Mandell El uso de endoscopía en estos pacientes está indicado. La endoscopía superior se utiliza para tomar biopsias e intestino delgado y realizar cultivos, así como tinciones especiales mencionadas previamente. Con la colonoscopía se pueden encontrar lesiones de colitis con ulceras en un 39% de los pacientes, sólo ulceración en 38% y colitis sola en un 21% de los mismos. 1, 2, 5, 7, 10 incidencia de neoplasia intraepitelial de alto grado es más común en esta población. 1, 2, 5, 7, 9, 10 A Imagen B 3: A: Colitis pseudomembranosa; B: Sarcoma de Kaposi; C: Linfoma asociado a SIDA; D: Colitis por CMV. (Tomado de Atlas of colonoscopy, Germany 2006) Desordenes anorrectales Los trastornos anorrectales son un componente importante en pacientes con VIH especialmente en el grupo de HSH. Al igual que otras patologías, estos desordenes también han sido afectados por el inicio de ARV, disminuyendo su incidencia. Entre las patologías que podemos observar se encuentra fisuras anales, fístulas, abscesos perirrectales, ulceraciones, proctitis y cáncer. 1, 2, 8, 10, 11, 12, 13 El virus del papiloma humano (VPH) también es una patología que afecta a gran parte de la población HSH, pudiendo ser estos virus del tipo oncogénico (VPH-16 y VPH-18), lo que puede provocar condiloma anal, lesiones escamosas intraepiteliales y carcinoma escamoso anal. Sin embargo a pesar de no tener VPH en pacientes con VIH/Sida la Por lo anterior algunos expertos recomiendan citología anal de rutina en pacientes con VIH HSH. Si el paciente presenta descarga C purulenta, tenesmo y Ddolor rectal, se debe sospechar infección por Neisseria gonorrhoeae, Chrlamydia trachomatis, herpes simple, Treponema pallidum y CMV. 1, 2, 5, 7, 9, 10 Sangrado gastrointestinal El sangrado gastrointestinal en Sida es poco frecuente, con <1% de la población. Esta entidad es causada tanto por infecciones oportunistas como por patologías no asociadas a Sida. En pacientes inmunocomprometidos, las infecciones y neoplasias vistas exclusivamente en ellos raramente pueden causar sangrado GI. 1, 2, 4, 5, 6, 7, 8, 10 Estudios han mostrado que la etiología más frecuente en estos pacientes es parecida a la población general, con úlcera péptica como principal causa de sangrado gastrointestinal superior, desgarro de Mallory-Weiss entre otros y en contraste la colitis por CMV como causa de sangrado gastrointestinal inferior. 1, 2, 4, 5, 6, 7, 8, 10 Patógenos entéricos como Campylobacter, Shigella, Revista - Clínica de Enfermedades Infecciosas - Número 7 Volumen 4 Salmonella, E. histolytica y Chlamydia pueden causar sangrado rectal por colitis o ulceración. También debe sospecharse otros patógenos como MAC, microsporidia y criptosporidia. 1, 2, 4, 5, 6, 7, 8, 10 Causas neoplásicas como linfoma de Burkitt o Kaposi pueden ulcerarse y en algún momento presentar episodios de sangrado espontáneo. 1, 2, 4, 5, 6, 7, 8, 10 La evaluación y el manejo de estos pacientes no debe diferir del de la población general, indicándose una endoscopía en todos estos pacientes, especialmente los que se presentan con inmunodeficiencia severa para descartar infecciones oportunistas o lesiones neoplásicas así como también evaluar la posibilidad de intervención para parar la hemorragia. 1, 2, 4, 5, 6, 7, 8, 10 Enfermedad hepatobiliar Como se ha mencionado previamente el advenimiento de los ARV ha cambiado drásticamente la historia de la enfermedad en estos pacientes. Básicamente podemos diferenciar estas patologías en 2 grandes grupos: anormalidades del parénquima, anomalías biliares o la combinación de ambas. Se sabe que hasta un tercio de los paciente recibiendo tratamiento ARV, la causa más común de enfermedad hepática es relacionada a hepatitis viral, principalmente por Virus de la hepatitis C (HCV), hepatotoxicidad por medicamentos, hígado graso no alcohólico y por abuso de alcohol. La hepatotoxicidad por drogas es común en pacientes secundario al tratamiento ARV. Entre los diagnósticos diferenciales de hepatomegalia y elevación de enzimas de función hepática encontramos infecciosas como HCV, MAC, Mycobacterium tuberculosis, CMV, Cryptococcus spp, Hepatitis B y D, Pneumocystis y microsporidia. Entro de las causas no infecciosas encontramos linfoma y sarcoma de Kaposi. Al evaluar diagnósticos diferenciales de afección de las vías biliares se mencionan colangitis por CMV, Criptosporidia y microsporidia, también causas neoplásicas como linfoma y sarcoma de Kaposi.2, 5, 7 Páncreas En pacientes con Sida frecuentemente pueden presentar aumento en los niveles de amilasa sérica sin una razón evidente. Un tercio de estos casos se debe al aumento de la producción salivar y el otro tercio asociado a pancreatitis clínica. 1, 2, 3, 4, 5, 8 Las causas de pancreatitis son variadas desde medicamentosas causadas por pentamidina y ddI hasta causadas por infecciones oportunistas como MAC, CMV, Cryptosporidium e incluso por el propio VIH. En estudios postmortem la pancreatitis de origen infeccioso más frecuente es 1, 2, 3, 4, 5, 8 causada por CMV. Revista - Clínica de Enfermedades Infecciosas - Número 7 Volumen 4 La pancreatitis crónica es rara en estos pacientes y generalmente secundaria a colangitis 1, 2, 3, 4, 5, 8 esclerosante. CONCLUSIONES Por último concluimos que los pacientes con diagnóstico de VIH/Sida, presentan un riesgo aumentado de padecer afecciones gastrointestinales desde el inicio de la enfermedad, orientándonos el diagnóstico de la misma en pacientes debutantes y presentando patologías de difícil manejo como lo son las lesiones neoplásicas. También es importante recalcar el papel de los ARV y el cambio drástico en la historia de la enfermedad al reducir la carga viral y mejorar el recuento de linfocitos T CD4, por lo que el tratamiento multidisciplinario de estos pacientes debe implementarse en todas las unidades de atención. Referencias: 1. John E. Bennett, Raphael Dolin, Martin J. Blaser, Mandell, Douglas, and Bennett's Principles and Practice of Infectious Diseases 8, 2015, Elsevier Inc 2. Mark Feldman, Lawrence S. Friedman, Lawrence J. Brandt. Sleisenger and Fordtran’s gastrointestinal and liver disease. 2016 Elsevier In 3. Aznar R. 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