Clama a mí y yo te responderé (Ricardo Marsical 09.06.2013) TEXTO: Jeremías 33 Detrás de los problemas económicos existen problemas estructurales que afectan a lo social, de lo que no se escapa el panorama familiar. Hay que reconocer que la economía afecta y cambia toda la situación, también. Tampoco se escapa la situación espiritual de cada uno. Vemos el pasaje en medio de una situación en que el pueblo había cometido lo malo y Dios promete restauración allí en medio de la situación. Vemos el v. 3, muy conocido pero solemos centrarnos en la primera parte. Pero la segunda parte nos muestra como Dios se revela, y para ello debemos conocerle. No es lo mismo conocer a una persona personalmente que conocerle de oídas. No es lo mismo conocer a Dios de oídas y saber lo que ha hecho a conocerle de corazón y saber qué ha hecho por nosotros y experimentarlo. Nosotros somos relacionales porqué estamos hechos a imagen de un Dios relacional. Y debemos conocerle primero para después clamarle. Clamar, en hebreo, tiene connotación de acosar, insistir a una persona. Más que una oración, es derramar el corazón a un Dios que invita que vengamos a Él confiadamente. Tanto en AT como NT vemos hombre que clamaron y vieron la gloria de Dios (p. ej: Ex. 2:23, Mat. 20:30-31). Y el clamar debe ser con fuerza, sincero y responsable. Pero quizás no siempre se responderá, o no veremos la respuesta a nuestra oración no siempre es concedido por Él. Porqué solo se nos dará lo que en su perfecta voluntad nos da; y esto no esta ligado a cosas temporales, sino a una promesa eterna para el hombre. Dios tiene su respuesta preparada además, e igual esto desagrada al hombre porqué no ve la respuesta que esperaba. Para acercarnos y clamar nos es necesaria la fe. Y con ello Dios nos quiere enseñar cosas grandes y ocultas, que desconocemos. Para ver que Él es el grande, poderoso y auténtico Dios. Y nos mostrará a cada uno en particular. Y serán cosas grandes, sólo para nosotros. Son tiempos difíciles en los que el Señor nos llama a clamar a acercarnos porqué nos quiere mostrar. Porqué Él es fiel, con nosotros, como individuos y cono nosotros como Su iglesia. Y Él nos restaurará.