Documento descargado de http://www.revclinesp.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. tッセQP@ XLII NúMFRO 6 LA RETINOPATIA DIABETICA bacilo de Koch es capaz de potenciar el efecto del citado antibiótico. HEEPE y SANTELMANN ("Dtsch. Med. Wschr.", 76, 1015, 1951) emplean, por vía intralumbar una mezcla que contiene: 0,1 c. c. de una solución al 10 por 100 de estreptomicina, 0,1 c. c. de solución al 10 por 100 de solvotcl:>en (Tb-VI), o2 c. c. de una solución al 5 por 100 de PAS y 1' c. c. de solución salina fisiológica. La dosis empleada se compone de 1-2 mg./kg. de estreptomicina (hasta un máximo de 50 mg.), 1-1,5 mg./ kg. de solvoteben (sin pasar de 50 mg.) y 1-2 mg. / k.g. de PAS (hasta 60 mg. ). La pauta de tratamiento comprende: 1." Inyección diaria 'intramuscular de estreptomicina, en dos veces, en cantidad de 25 mg. / kg., durante los siete primeros meses, sin interrupción. 2." P AS por vía oral, 0,3 gr./ kg. y día, en tres tomas, cinco días seguidos a la semana. 3." Inyección intralumbar de la mezcla de estreptomicina, solvoteben y P AS: una inyección diaria los meses uno, dos, tres, cinco y siete. En los casos de evolución favorable puede no ser necesario inyectar lodo el séptimo mes. En otros casos puede requerirse también tratamiento intralumbar el noveno y aun el undécimo mes. En total, han sido tratados así 20 niños, de los que tres han fallecido y se ha conseguido una curación aparente en 16 casos (el 80 por 100), quedando el otro niño con gra\es secuelas. En general, es preferible el empleo de estreptomicina al de dihidroestreptomicina, por su menor frecuencia de complicaciones por parte del acústico. Experiencia con insulina NPH. - La insulina .:\IPH fué preparada por KRA YENBÜHL y ROSENBERG y sobre su empleo existen ya bastantes publicaciones. Consiste en una s uspensión muy purificada de insulina, protamina y cristales de cinc, con la cantidad de protamina justamente necesaria para combinarse con la insulina (0,5 mg. de protamina por cada 100 unidades). El efecto de la insulina NPH es bastante parecido al de una mezcla 2 : 1 de insulina corriente e insulina-protamina. BAGANZ, CARFAGNO, 423 COWAN y DILLON ("Am. J. Med. Sci.", 222, 1, 1951) han estudiado comparativamente la insulina NPH y otras insulinas-protaminas en 41 enfermos. Se ha demostrado así que el efecto post-prandial es mayor con la NPH que con otras. La regularidad de la glicemia a determinadas horas del día es mayor también en los enfermos que reciben NPH. Un estudio de SHUMAN y FRANCIS ("Am. J. Med. Sci.", 222, 179, 1951) en 33 enfermos diabéticos con diversas complicaciones revela que en tales enfermos, en los que suelen ser poco eficaces las insulinas-protaminas, la NPH es también de suma utilidad. Unicamente a veces no es capaz de evitar la elevación de glicemia que sigue al desayuno, y entonces se requiere disminuir 10 a 15 por 100 de los hidrocarbonados del desayuno o añadir a la insulina NPH una pequeña cantidad de insulina corriente. Metilfenilsuccinimida en el petit mal. -Las medicaciones usadas para combatir el petit mal son poco activas o de considerable toxicidad. ZIMMERMAN ("A. M. A. Arch. Neur. Psych.", 66, 156, 1951) comunica los resultados obtenidos con metilfenilsuccinimida (PM 334), droga que fué elegida en pruebas sobre los accidentes convulsivos experimentales con metrazol y cuya toxicidad es muy escasa. Los estudios de ZL'\11\lERMAN fueron realizados en 50 casos de petit mal. La dosis media del preparado es de 8 cápsulas diarias, cada una de las cuales contiene 0,3 gr. : generalmente se comienza por tres cápsulas diarias y se aumenta gradualmente, según el efecto sobre el número de crisis. Se consiguió así una supresión del 80 al 99 por 100 de los accesos en 15 enfermos. En 16 enfermos se logró una reducción variable entre el 5 y el 79 por 100 y en cuatro no se obtuvo ninguna mejoría por la medicación. En conjunto, la actividad del PM 334 parece superior a la tridiona y su toxicidad es mucho menor; en 11 de los casos se presentaron reacciones desagradables (náuseas, mareos, etc.), las cuales no fueron generalmente muy marcadas. EDITORIALES LA RETIN'OP ATIA DIABETICA La frecuencia de alteración retiniana en la diabetes es muy considerable. En los 1.021 diabéticos estudiados en la Clinica May.::> en 1944, WAGENER halló un 29,6 por 100 con retinopatía. La frecuencia de la lesión retiniana está en directa relación con la duración de la enfermedad: tan sólo la presentaban el 10,7 por 100 de los que tenian una diabetes de menos de un año de duración, en tanto que llegaban al 73 por 100 los pacientes con retinopatia 」オケセ@ diabetes databa de más de veinte a.fios. El tipo de diabetrs tiene menos influencia en 」オセョャッ@ a la proporción de rnfermos que contraen una retmopatia: LA WRENO; no observa diferencias en los dos grupos de diabéticos, insular y extrainsular, sobre ャ ッセ@ .que ha insistido rn los últimos años. Tampoco la ex¡stencia simultánea de otras afecciones vasculares es de imJ?ortancia decisiva para la aparición de lesiones en la relma; en contra de la afirmación de VOLIIARD, de que セッ@ era posible la relinopatia diabética, sino en presenc¡a .de hipertensión arterial, SCOTT observa que no eran h1pertensos 35 de sus 62 enfermos con retinopatla diabética; en lo que se refiere a otras manüestaciones de arterioesclerosis, sólo se encontraban en un tercio de los enfermos de la casuistica de SCOTT. La naturaleza de las alteraciones histológicas en la retinopatia diabética ha sido muy discutida. Las lesiones más frecuentes son aspectos hemorrágicos, puntiformes o en placas, las cuales tienen el aspecto (HA.'WM) de las impresiones hechas con una pequeña esponja. Además, pero sólo en los casos con arterioesclerosis acentuada, aparecen exudados "jabonosos", blanco-amarillentos o en placas blancas. BALL.-1...'\TY::--'E y LOWE:\'STEL'\ demostraron que las aparentes hemorragias puntiform es eran realmente microaneurismas situados profundamente en la retina. FRIEDEXW ALD demostró con el método del ácido peryódico de McManus que tales microaneurismas poseen una basal constituida por un complejo de mucopolisacárido y proteina. Los estudios de ASIITOX han completado nuestro conocimiento de los microaneurismas retinianos. Generalmente tienen un diámetro de 20 a 30 micras, aunque los hay de 75 a 100 micras. Su basal presenta irregularidades, siendo muy gruesa en unos puntos y casi Documento descargado de http://www.revclinesp.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 424 REVISTA CLINJCA ESPA"ÑOLA desaparece en los bordes del aneurisma. Mediante una técnica de inyección, ASHTON ha comprobado la afirmación de BALLA..'ITYXE de que tales microaneurismas se encuentran generalmente en el lado venoso de capilares, especialmente de capilares varicosos. Es probable que las alteraciones metabólicas de la diabetes originen una degeneración de la pared capilar y una debilitación de la basal, con lo que se favorece el desarrollo del aneurisma; quizá con la alteración de la basal se deba relacionar el aumento de glucosamina en el suero de los diabéticos hallado por JACOBS. ASHTOX ha sido incapaz de encontrar alteraciones morfológicas similares de los capilares en otros territorios orgánicos de los diabéticos, si se exceptúa en los glomérulos r enales. P or el contrario, la formación de aneurismas retinianos no es privativa de la diabetes. ashtoセ@ los ha observado en el 29 por 100 de sujetos no diabéticos, ignorándose la causa de esta frecuencia. BIBLIOGRAFIA AsHTOX, :-l".-Br. J. Ophthalm., 33, 407, 1949 ; 35, 189, 1951. ASHTOX, X.-Proc. Roy. Soc. Med., 44, 747, 1951. BALLA...,.-TYXE, A. J.-Trans. Ophthalm. Soc. U. K., 66, 503, 1946. BALL.'-"''TY]).>:, A. J. y LowEXSn:Jx, A.-Trans. Ophthalm. Soc. u. K. , 63, 95, 1943. FR IEDE:-."WAW, S. J.-Trans. Am. Acad. Ophthalm. Otolaryng., 53, 73, 1948. HA..'\<-"M, S.-Acta ophthalm. Suplem., 16, 1938. JACOBS, H. J.-J. Lab. Clin. ::\led., 34, 116, 1949. LAwRE:>"CE, R. D.-Proc. Roy. Soc. Med., 44, 742, 1951. Sc<rrr, G. 1.-Proc. Roy. Soc. Med., 44, 743, 19::i1. WAGE:S"ER, H . P.-Proc. Am. Diabetes Ass., 5, 203. 1945. trombopenia, al lado de la hipoprotrombinemia, y encuentran un parecido con la diátesis hemorrágica por sedormid, en la que ACKROYD ha visto producirse una conglutinación y lisis de las plaquetas. Tanto el salicilato como el sedormid y otras drogas que ocasionalmente producen hemorragias, poseen un anillo bencénico en su molécula. Sería verosímil que interfi riesen en el organismo con metabolitos de constitución similar <le la vitamina K, como el ácido ftálico, lo cual explica que las acciones hemorrágicas de la aspirina sean neutralizadas por la vitamina K. Esta suposición de MAc leaセ@ sセQtゥャ@ y mackiセクッ@ la creen ellos demostrada al observar en un paciente con hemorragias por aspirina, después de extracciones dentarias (en el que se comprobó hipoprotrombinemia y aumento de la fragilidad capilar), que las mismas manif<'staciones se producían en el enfermo por la inyección intravenosa de neosalvarsán. BIBLIOGRAFIA ACKROYD, J. F. Clin. Sci., 7, 249, 1919. ::\10DF:LL, W. y PATTER!-<0:'-ó.-Journ. Am. Mctl. A ss., 147, 124, 1931. MACLEAX sセエゥtiAL@ J. y MACKixxo:-o;, J . Lancet. 2. セaャYN@ 1951. PRE.STOX, H. G. -Trans. Am. Laryng-. Rhin. Oto!. Soc., ::.0, 1, 1947. RIPI'OPORT, A. E .. NlX0:-1, C. E. y BA!!Kf:R, W . A. J. Lab. Clin. Mcd .. 30. 916, 1943. sイセᄋ[erL@ R.- Arch. Otolnryng .. 12. 14, 191'í. sセAithL@ P. K.-J. F hnrrnacol. & Expt·t·. Ther .. 97, 3::;3, 1949. sigZMNGfcaoセ@ HEMORRAGIAS CAUSADAS POR LA aspirAGセ@ Dada la gran difusión del ácido acetilsalicílico, debe tenerse siempre en cuenta la posibilidad de reacciones tóxicas o de hipersensibilidad al mismo, en casos de manifestaciones cutáneas o hemorrágicas, cuya causa no aparezca clara. Aunque la tolerancia al ácido salicilico y sus derivados suele ser muy grande, en los últimos tiempos despertó gran interés la posibilidad de producción de hemorragias por la hipoprotrombin emia que las grandes dosis de salicilatos, cuya relación estructural con la dihidroxicumarina es bien conocida, pueden ocasionar (S;o.nTn). Se ha publicado incluso algún caso de púrpura y muerte por ingestión de salicilatos (RAPPOPORT, NIXON y BARKER), aunque no existe evidencia de que la tendencia hemorrágica se debiese efectivamen te a la ingestión del fármaco. No es precisa la ingestión de grandes cantidades de salicilato o sus derivados para que se produzca una tendencia hemorrágica. SINGER hizo notar que la costumbre de administrar pequefias cantidades de aspirina después de la amigdalectomia aumentaba la frecuencia y la intensidad de la hemorragia a continuación de tal intervención, y un fenómeno similar fué sefialado por PRESTON. La misma observación fué hecha por GROSS y GREEKBERG después de amigdalectomías o extracciones dentarias. El mecanismo de producéión de hemorragia por la aspirina no está aclarado en todos los casos. A este respecto es muy demostrativo un caso publicado por MODELL y PATTERSON de un enfermo con h emorragias intestinales y en el que se descubrieron diversas lesiones digestivas, las cuales fueron consideradas en principio como las causantes de la hemorragia. Sin embargo, las pérdidas sanguíneas no cesaron hasta que el enfermo dejó de tomar aspirina, como hacía de un modo sistemático. En este enfermo no se descubrió nunca un descenso de la protrombinemia y tampoco se observaron cifras bajas de plaquetas, como en un caso de RAPPOPORT y colaboradores. MACLEAN SMITII y MACKINNON sugieren que en la tendencia h emorrágica por aspirina pueda intervenir una disminución de la resistencia capilar y quizá una 30 septiembre 1951 DE LAS HE:\IOPTISIS ESTE::\OSIS .MITHAL eセ@ LA A ¡>f'Sar dL la afirmacrón h Hl 'l 1 \IW dt q r la t t nosrs m1tral es dtsne¡zante, hemopto1zante y embohzante, en la estadística de WOLFF y LEVINE sólo se encuentra hemoptisis en el 10 por 100 de los enfermos de estenosis mitra!. En algunas ocasiones la presencia de sangre viene dada por la aparición de otra complicación en el curso de la afección, como un infarto pulmonar, edema pulmonar o insuficiencia cardíaca aguda; en tales casos, la significación pronóstica de la hemorragia depende de la de la causa afiadida al pro· ceso. Otras veces no es posible descubrir un motivo para la hemorragia, aparte de la propia lesión valvular, y es en estos casos en los que es discutible el mecanismo de producción de la extravasación sanguínea, así como su valoración pronóstica. Los trabajos de FERGUSON, KOB'ILAK y DE!TRICK han hecho resaltar la importancia de las varices de las venas bronquiales en la patogenia de las hemoptisis de la estenosis mitra!. Para comprender su mecanismo, debe r ecordarse qu e la circulación por las arterias bronquiales y pulmonares está íntimamente mezclada, volviendo la sangre al corazón casi en su totalidad por las venas pulmonares. Sólo cuando hay un aumento de presión acentuado en el circulo menor se produce una dilatación de las venas bronquiales, situadas en la pared de los bronquios, estableciéndose una circulación colateral por ellas, al tiempo que se dilatan considerablemente. Un acceso fuerte de tos, una bronquitis erosiva o cualquier aumento de presión en la aurícula izquierda podrían ser fácilmente causa de h emoptis is en tales casos. En tanto que WOLFF y LEVINE consideran necesario que se produzca previamente una esclerosis de Jos vasos pulmonares, en dos de cuatro enfermos ・ウ エオ、ゥ。セウ@ por FERGUSON no se hallaron signos de tal esclerosrs vascular. La explicación de FERGUSON y colaboradores sobre la patogenia de las hemoptisis de los enfermos mitraies n o pasa de ser una hipótesis. TIIOMPSON y STI>:WART han estudiado 168 casos de estenosis mitra!, de Jos que 29 tuvieron hemoptisis; en varios de ellos hicieron broncoscopia, sin observar varicosidades bronquiales. En 10 de los enfermos con hemoptisis, el corazón no se hallaba dilatado y no existían signos de descompensación; en Documento descargado de http://www.revclinesp.es el 20/11/2016. Copia para uso personal, se prohíbe la transmisión de este documento por cualquier medio o formato. 425 INFORMAOION TOMO XLII NúMERO 6 est e grupo de enfermos la existen_cia de ィ ・ ュッーエゥ ウゥセ@ n_o hizo variar el ーセッウエャ」@ セ ョ@ relactón a ・セヲイュッウ@ s tmtlares sin h emopttsJS. L o mi smo puede dectrse en lo que se refiere al grupo de 13 enfermos estudiados por TJIOMPSON y STEWART por padecer h emoptisis y que tenían marcada dilatación de cavidades cardíacas. Por el contrario, el pronóstico, siempre serio, de las estenosis mitrales descompensadas parece ser aún peor cuando en ellas se producen h emoptisis, aunque sólo se estudiaron por los autores citados seis de tales casos. Factores no bien conocidos intervienen indudablemente en la producción de las h emoptisis de los enfermos mitrales. Muy pocos fueron los casos de T JIOMPSON y STEWART en los que la hemorragia siguió a un esfuerzo, como debería ser si sólo interviniese el aumento de presión en el círculo pulmonar. En muchas ocasiones no es posible demostrar ningún factor desencadenante, y el grado de compensación es el mismo en el momento de la h emorragia que lo era con anterioridad. Por lo demás no debe atribuirse a las h emoptisis, como a veces se ha h echo, una mala significación pronóstica, excepto en los casos de intensa descompensaeión circulatoria. BIBLIOGRAFIA F. C., KOBILAK, R. E. y DEITRICK, J. E.-Am. Heart. J., 28, 445, 1944. A. C. y STEWART, W. C.- J. Am. Med. Ass., 147, 21, 1951. WOLFF, L. y L EVINE, H. B.- Am. Heart J ., 21, 163, 1941. feAャNgusoセL@ THOMPSON, CONSULTAS En esta sección se contestará a cuantas consultas nos dirijan los suscriptores sobre casos clínicos, interpretación de hechos clínicos o experimentales, métodos de diagnóstico, tratamientos y bibliografía. G. l\1. A.-Informa<'ión sobre el lisivane, e mpleado para el tratamiento del parltinsonismo. l。「ッイエセゥ@ preparador. El lisivane o etopropazina es el clorhidrato de N(2-dietilamino-n-propil ) f enotiazina. S /"'-/"'-/"'- ¡ ¡ 1 '"/"'-/"'-/ N 1 CH, 1 CH 1 CH, CH,. CH, / N ''- CH,. CH, . HCl Como se ve, su composición es bastante similar a la del f energan y el diparcol, utilizados como antihistaminicos y como antiparkinsonianos. El compuesto ha sido elaborado por la casa May & Baker, en Inglaterra, y han aparecido varios trabajos sobre su empleo. Además del citado ya en esta Revista ("Novedades terapéuticas", Rev. Clín. Esp., 39, 205, 1950), puede consultarse el de GARAI Hl。ョ」セエN@ 1, 429, 1951), en el que se comparan sus efectos con los de artane. La acción de ambos preparados se ejerce más sobre la rigidez que sobr e el temblor, y los efectos de ambos son similares, aunque quizá el artane sea algo menos tóxico y más eficaz que el lisivane.-E. LóPEZ GARCIA. INFORMACION 、セウーッョ・@ MINISTERIO DE LA GOBERN ACION . Orden de 17 de septiembre de 1951 por la que se se proceda con la mayor rapidez a la publicaCtón en el Boletín Oficial del Estado del anuncio de las plazas de la plantilla del Cuerpo Médico de T itulares 0 de Asistencia Pública Domiciliaria que han de ser provtstas en propiedad, cuya vacante se haya producido ar:tes de la f echa de 1 de octubre del corriente año, aJustándose a las normas que se citan. (B. O. del E. de 21 de septiembre de 1951.) Orden de 17 de septiembre de 1951 por la que se aprueba la propuesta del Tribunal calificador del concurso-oposición convocado en 27 de marzo de 1950 para cubrir vacantes de :Médicos de Dispensarios Comarcales del Patronato Nacional Antituberculoso, y se anuncia concurso de destinos para cubrir las plazas que se citan. (B. O. del E. de 22 de septiembre de 1951.) Orden de 14 de septiembre de 1951 por la que se convoca concurso para la provisión de la plaza de Director Médico del Centro Secundario de Higiene Rural de Cabra. (B. O. del E. de 22 de septiembre de 1951.)