Cuarteto Casals Vera Martínez-Mehner violín Abel Tomàs violín Jonathan Brown viola Arnau Tomàs violonchelo I Franz Josef Haydn (1732-1809) Cuarteto de cuerdas en do mayor, op. 33 núm. 3 (Hob. III.39) «El pájaro» (18 min) Allegro moderato Scherzo avec Trio Adagio Finale. Rondo. Presto Wolfgang Amadeus Mozart (1756-1791) Cuarteto de cuerdas en do mayor núm. 19, K 465 «Las disonancias» (28 min) Adagio – Allegro Andante cantabile Menuetto (Allegretto) Allegro molto II Enrique Granados (1867-1916) Pequeña romanza (5 min) Maurice Ravel (1875-1937) Cuarteto de cuerdas en fa mayor (27 min) Allegro: moderato, très doux Assez vif, très rythmé Très lent, modéré Vif et agité Concierto transmitido en directo por RNE-Radio Clásica y por la Unión Europea de Radiodifusión (UER). En conmemoración del centenario de la muerte de Enrique Granados Con la colaboración de Viaje de contrastes con el Cuarteto Casals La historia del cuarteto de cuerda es larga y prolífica. Tradicionalmente campo de experimentación de los grandes compositores, para esta formación se han escrito muchas de las obras más personales y arriesgadas de la historia. El concierto de hoy repasa algunos de los hitos de este género camerístico, desde el considerado padre del cuarteto de cuerda, Haydn, hasta la negación del impresionismo incidiendo en la estructura formal de Ravel. El primer cuarteto de la noche, el op 33 número 3 de Joseph Haydn (17321809), fue escrito dentro de un conjunto de cuartetos (el op. 33) dedicados al duque Pablo de Rusia. De ahí reciben su sobrenombre de Cuartetos rusos, aunque este concretamente está apodado El pájaro por los numerosos ornamentos, similares a gorjeos, que presenta la partitura. Fue escrito en el verano de 1781 y sigue el esquema clásico de cuatro movimientos. En esta obra cabe siempre esperar lo inesperado. Bruscos cambios de armonía, de dinámica, de carácter... El segundo movimiento, marcado Scherzo, tiene en un principio poco de gracioso. Consigue durante un tiempo engañar al oyente, ya que reserva unas divertidas sorpresas más acordes con su título. El último movimiento es un regreso triunfal que toma ciertos elementos de los giros melódicos del primero de manera genial, concluyendo en un brillante do mayor. La publicación de este conjunto de cuartetos coincidió con la llegada de un joven Mozart (1756-1791) a Viena, que, inspirado por Haydn, decidió abordar el género. Hasta seis cuartetos escribió dedicados a él, siendo este, el famoso Disonancias, el último. Su comienzo es extraordinario: lento, dramático, explorando disonancias entre los cuatro instrumentos y augurando lo peor. Para nuestros oídos modernos es un comienzo inusual, y no sorprende que sus contemporáneos pensaran que había errores de impresión en la partitura. Pero Mozart sabe perfectamente lo que se hace, y ese comienzo lleva magistralmente a un primer tema en un luminoso do mayor. Aunque no suenan ni remotamente parecidos, este tema allegro bebe directamente del lento del principio y, de hecho, todos los movimientos tienen relación con él. El cuarteto disfruta de un desarrollo contrapuntístico notable en el cuarto movimiento, que recuerda a la famosa frase «un cuarteto de cuerda es una conversación entre personas inteligentes». En la segunda parte, tras una deliciosa pieza como es la Pequeña romanza de Enrique Granados (1867-1916), que despliega en muy poco tiempo un gran potencial, llega la última obra del programa, el Cuarteto de cuerda en fa mayor de Maurice Ravel (1875-1937). Compuesto en 1903, cuando era todavía un estudiante en el Conservatorio de París, fue admirado por Debussy, de cuyo cuarteto tomaba la estructura pero no el espíritu. La intención de Ravel era, de hecho, alejarse del simbolismo (lo que hoy entendemos por impresionismo) de Debussy para llegar a un estilo más objetivo. No fue una obra que obtuviera admiración en su estreno, más bien al contrario. En el ambiente ultra conservador del conservatorio solo consiguió malas críticas, incluso de compositores famosos como Lalo o Fauré, a la sazón dedicatario de la obra. Sin embargo, no es un cuarteto especialmente rompedor, más bien al contrario. La forma es clara y la técnica, meticulosa. Ravel usa en esta pieza todas las posibilidades de los instrumentos, con largos episodios en pizzicato y el uso de todo el registro. En el segundo movimiento hay quien ve influencias de la música gamelan y otros que oyen las reminiscencias españolas del linaje de Ravel. Juzgue el espectador y decida lo que prefiera. Un programa tan variado sería motivo de pánico para muchas formaciones, que prefieren rodearse de monográficos antes que abrazar lo heterogéneo. No es este el caso del Cuarteto Casals, uno de los más versátiles del panorama internacional. Formado en 1997 por unos jovencísimos estudiantes, pasó de modestas ambiciones (tocar juntos La muerte y la doncella, de Schubert) a ganar prestigiosos concursos y tocar en las salas más cotizadas. Su repertorio abarca todos los clásicos del género además de muchos desconocidos para el gran público, que han sabido tratar con cariño en el directo y en el estudio de grabación. Sus discos abarcan autores como Arriaga, Zemlinsky o Kurtág, junto con obras no tan famosas de Mozart o Schubert. Su especial tratamiento del repertorio tiene como consecuencia el uso de arcos de época para el repertorio clásico y el cambio de sillas entre los violinistas, Vera Martínez y Abel Tomàs. Jonathan Brown, viola, y Arnau Tomàs, violonchelo, permanecen siempre en sus puestos. Disfruten de este viaje por tres perlas de un género que mantiene toda su vigencia en una interpretación excelsa. © Miguel Calleja Rodríguez CUARTETO CASALS «A quartet for the new millennium if I ever heard one». Palabras publicadas en el Strad Magazine poco después de la creación del Cuarteto, que tuvo lugar en el año 1997, en la Escuela Superior de Música Reina Sofía en Madrid. Tras ganar los primeros premios en los Concursos Internacionales de Londres y de Hamburgo (concurso Brahms), el Cuarteto Casals ha llegado a ser considerado como uno de los cuartetos de cuerda más importantes de su generación. Ha sido invitado regularmente en los festivales y ciclos de conciertos más prestigiosos del mundo. Ha actuado de forma asidua en las salas Wigmore Hall, Carnegie Hall, Musikverein de Viena, Kölner Philarmonie, Cité de la Musique de París, Schubertiade Schwarzenberg, Concertgebouw de Ámsterdam y Philarmonie de Berlín. Asimismo, el Cuarteto ha realizado una importante producción discográfica con Harmonia Mundi, hasta ahora 11 Cds, grabando música de compositores desde el periodo clásico hasta música del siglo XX. En otoño del 2015 graban su primer CD con cuartetos de Beethoven y a lo largo del 2016 saldrá a la venta una serie de 5 DVDs en formato Blu-Ray, bajo el sello Neu Records, con la integral de los cuartetos de F. Schubert, grabados en 5 conciertos, en directo, en el año 2013, en el Auditori de Barcelona, sala donde el cuarteto es grupo residente desde 2006. Críticas internacionales destacan, entre muchas otras cualidades, el gran registro de sonoridades del grupo. Tras ganar el prestigioso premio de la fundación «Borletti-Buitoni» de Londres, el Cuarteto empezó a utilizar arcos del periodo barroco-clásico para los compositores desde Purcell hasta Schubert, práctica que ha reportado al grupo una nueva dimensión acústica que favorece aún más sus exposiciones de los diferentes lenguajes estilísticos. El Cuarteto ha recibido una profunda influencia de compositores vivos de nuestra época como György Kurtág y ha realizado estrenos mundiales de notables compositores españoles de la actualidad. El cuarteto ha encomendado un concierto para cuarteto y orquesta para la temporada 16/17 con la ONE al compositor Francisco Coll. En conmemoración del próximo XX Aniversario de su fundación, el Cuarteto Casals ofrecerá la integral de los cuartetos de Beethoven, junto con 6 obras de encargo, una para cada concierto del ciclo, durante la temporada 2017/18. En reconocimiento a su posición de primer cuarteto español con una importante carrera internacional, el grupo ha recibido los galardones Premio Nacional de la Música y el Premio Ciutat de Barcelona. Y también ha sido invitado por la Casa Real para acompañar a los Reyes de España en visitas diplomáticas al extranjero y a tocar con los Stradivari de la colección del Palacio Real de Madrid. Las ejecuciones del Cuarteto Casals han sido frecuentemente retransmitidas por televisión y radio, tanto en Europa como en los Estados Unidos. Es cuarteto en Residencia en la Musikhochschule de Colonia e imparte clases en la Escola Superior de Música de Catalunya, en Barcelona, ciudad donde los cuatro miembros del Cuarteto residen actualmente.