REVISTA DEL. CENTRO DE LECTUIZA DrRcCToR : h1lKTí l. FOLGUERA -PUNTOS DE SUSCRICI~N PRI?CIO DE - -SUSCRICJÓN . . . de Vdiioquems, impieiaii y ii1,rerie de Toiroja i . . . Y Tarair, niceioriiide Narciso Roca, calle mayoi. Números iiieltor. . . . . . En Reus, Sociedad C ~ ~ r i DE i o LECTORA, calle Reri, irirnenie. . Fiiem de Reiis, Erprna. SUhlAXlO - Certamen del C c ~ i n oaa Lecruñ*.-De todo. poiJoscfa Pujo1 dc Collado.-Sobre una biblioteca de ciencia erprñola, por J o ~ i j u i nBorrii de bfhirich.-liiiimxr (poerial, poriridoro FriasFoninni1ies.-Rosales, porMartin Be1.-Notar C impierioner, por Nomen. CERTAMEN DEL CENTRO DE LECTURA D los conocidos artistas de esta ciudad Don J. M. Roig Boqué y Don Miguel Martioez, ha recibido esta Junta d e Gobierno la siguiente comunicación : E Los iiiírrrcriior tienen el honor <le poner en eonaciinienlo de V. haber determinado ofrecer un cuadro fofo-caligrdfico al Cerumen iniciado por esa Jtinta de Gobierzia de su digna prrridencir, coiisbtenie en una uirio de la eriacióii de los cerro-carriiei diieclor, tomada de forograris, y oir;ir viit%$ POI~CUI~ILI de lor exjardines de Fiiirrpe, onn degorln hcchr i pluma, 1.i fecha de In iniiigii,nci6n y el nombre del autor premiado, al poeta qite mejor dcraiiolle el iigiiiei>ceteiin : .Recuerdo y bieiirenida. dando u n afect<ioro adior de despedida i a<liiilloi jnrdinesqee iin dia fueron lar dclicirs de los reigrenier y rin ralt8do c a r i ñ ~ i oal primer tren de los rniedic>iar1~rio.c~rrilei diiectos que wnio Ixaii de coiitribuir rl engraiidecimiento de ".estia queiidz ciudad. Dios guridc ú V. muclioi a%$.-Reti, 15 de Octubre de ~883. hiiguci ~ ~ ~ t i n e r . J. M. R O ~ X~oq,i&. L o q u e la Junta del CENTRODE LECTLIXA hace píihlico para q u e Ilegrie á conocin~ientodelosintcresados y para q u e sirva de Suplemento al Cartel del Certamen publicado en 1." d e Julio d e 1883. Reus 10 d e Octubre d e 1883.-El Sen.etario, Antonio Artes. D E TODO c n ó ~ i c nM I D R I L E N A E L conocido escritor Don Armando Palacios Valdés acaba de d a r á la estampa su nueva ,/ - NOTA IAIPORTANTE Ptas. i Para cunito se reheir ieste peri6dico diiiaiiie *'so el Director del mismo cn le Saciednd Casrno DB a's$ Lscruxi, caile dc Y s l l i o ~ u e r a ~número , 16, Keus. 2.00 / novela M a r t a y iVfai-id, recibiendo con este motivo numerosas felicitaciones. La índole de esra obra no desdice e n nada de las otras debidas á la bien cortada pluma de su autor y en ella se trata con perfecto conocimiento de causa ile la religión eri sus relaciones con la vida social. María Elorza, joven dotada al par q u e d e singular belleza, de fogosa imaginación y muy dada á la lectiira de obras de fantasía, tiene al principio d e la novela relaciones con u n apuesto militar. E l Sr. Palacios Valdés con gran discreción y tino convierte de pronto, mediante previa esplicación, á la romántica niíia en mística mujer enaiilorada Iiasta el delirio del Corazón de Jesús, al cual sacrifica todas sus aspiraciones y a u n el m i s n ~ oaiuor q u e le inspirara el hijo d e Marte. La protagonista de la obra tiene tina hermana menor, Marta. sitave criatura nacida para vivir al calor del hogar y al abrigo de la familia, enamorada á s u vez del jóven militar q u e adora á sil hermana, sufre resignada, en silencio, hasta q u e a l fin convencido el amante de que no podrá deshancar á Jesús del corazóii de S; adorada. decide casarse con Marta, haciendo justicia á las cualidades q u e embellecen á la dulce niña. N o puede ser más sencillo el asiinto q u e sirve d e base á Mal-ta y M ~ I - i ay, el libro resultaría desde luego sobrado largo, si no le avaloraran las bellezas literarias en él diseminadas. A primera vista se comprende q u e Marta es el tipo con el cual se h a encari6ado el autor, adornándole con las mas ricas filigranas del sentimiento, convirtiéndole en el modelo de la mujer casada y m u y por encima de los demás personajes del libro, apesar de moverse en una esfera q u e por lo sencillo hemos convenido en llamar vtilgar. La mística María queda relegada en segundo término y e n ella no se v i m u y bien librado el ascetismo por mas que los tonos de que se sirve 1 REVISTA DEL CENTRO DE L E C I U R A 2 el riovelisia sean templadisinios. T i e n e Marta y Mnria sobra de arte y es el S r . Palacios Valdés harto discreto, para herir resueltaiiieiite los sentirnieotos huiiianos entrando de lleop y con rudeza eii el análisis d e las espinosas cuestiones religiosas. L a idea capital del libro consiste en cifrar cl ideal de la mujer en el tranqiiilo seno del liogar, ejercieniio el adorable sacerdocio d e madre d e familia, y iio eil ver á la lrermosa mitad del género humano, oscuranieiite relegada e n el rincón de u n ignorado claustro; entregada con místico ardor á ayunos y penitencias iiiútiles, para el bici1 y progreso d e la humanidad, ilesconociendo las poderosas leyes e ~ i a b l e c i ~ l tcie ~ s consuiio por la sociedad y la naturaleza. I-femos renido ocasió'n' d e examiiiar el primer toiiio d e La coinedin iilr;iza;zn, d z Honorato Balzac, correctamente traducida por Don Enriqiie Borreil. Cien novelas divididas en oclio secciones, co111ponen esta obra del afanisdu novelista francés constituvendo la historia comnlctn d e los usos v costiimbres d e la época y poniéndose en juego, en todo el transcurso d e ella; l a eterna lucho d e pasiones é intereses q u e comprometen y hacen imposible el reposo c o m ú n . Sabido es ya q u e la escuela llamada naturalista debe su origen á Balzac ; pues bien, bajo su aspecto filosófico é histórico, la primera serie d e la iniportante obra q u e nos ocripa, comprciide las Escenas de la vida y>-iiiada, Esceizcs de la vida pai-isieizse, Escenas ore la vida politicay n~ilitar, Esceizas de la vida de proiriizciasy Escenas de la i~i'ia riel campo. T o d a s estas secciones, con los Esilzdiosjlosóficos y a~zaiiticos,forman el conjunto d e la obra colosal d e Balzac, cuya traducción completa n o poseíaiiios, y debemos por l o tanto agradecer al inteligente traductor S r . Borrell, puesto q u e era casi una necesidad traducir fielineiice al espaiiol, una obra d e tanta irnportancia social y literaria. T a m b i é n el infatigable >scritor Don J u l i o Nombela, con el titulo d e Elpicar-o ~i?~zizdo, acaba d e publicar u n a novelita d e cortas dimensiones q u e evidencia una vez mas las especiales dotes q u e concurren e n tan conocido literato para derarrollar con aparente ligereza, u n sencillo argumento, q u e cautiva del todo la atención del lector, presentando á s u consideración cuadros sociales d e costumbres contemporáneas, q u e encierran al par d e los encantos d e u n estilo ameno, consideraciones filosóficas sobre la época actual. El pícaro ~izzrndoha alcanzado favorable acogida d e l a prensa madrileíia'y por ello felicitamos nuevamente á SU autor. e . Con verdadero sentimiento participan;us á los R~ habituales lectores d e la REVISTADEL C E V ~ el falleciiiiiento d e la distinguiiia esci-itora D.Qngela Grassi, acaecida recienteniente en esta corte. Concurrían en tan discreta liierata todasltis virtudes q u e deben adoriiar a una n ~ u j c r ,para constituir la felici~iailtiel hogar y el encanto del trato social : por eso su riiuerie ha sido generolmente sentida. Nadie poseía corno Angcla Grassi uii claro talento, iinido á una agradable sencillez, y reflejo de estos 'los c~ialidadesen ella ingéiiitas, son sus amenas narraciones, lleiias iie esquisita ternura y enc:iminn<?assiempre á un fin altaineiite ~iioral. S u excesiva inodestia n o le permitió alcanzar las altiiras á q u e poilía aspirar s u talento ; pero d e su breve paso por la tierra, quedarán como indeleble recuerdo s u s obras, donde la iiiujer eiicontrará sienipre algo bireno q u e aprender, algo q u e la goie y le inspire, desigoániiole la verdadera senda por donde debe dirigir su ilrcierto paso, al través d e las borrascas de 13 viila. E l teatro d e Apolo lia estreiiado 1.a cz-u; de ,juego letra del S r . Estremera y música del Seiíor Marqués, con niediaiio éxito. L a letra deja bastante q u e desear y ello ha iniposibilitado al distinguido Maestro Marqués hacer gala d e sus conocimientos musicales é irisyiracióii. E l argumento d e L a o-ug de,fuego se remonta á la época d e la restauración d e Carlos 11 e n Inglaterra, y algunos m a l intencionados le reconocen iiotables reminiccncias d e la conocida obra La berlina del einig v.zcfo. De todo lo q u e e n los pasillos del teatro se decía en la noche del estreno, solo podenios asegurar, que, falta d e situación d e verdadero interés, hubiera fracasado por completo la zarzuela, si la música d e irreprochable factura, agradabilísima en algunos trozos; sobre todo u n coro y u n concertaiitc, q u e fueron riudosoiiiente apladidos, n o hubiera heclio olvidar los defectos d e leira. L a empresa del teatro d e Apolo n o debe Iiaber quedado satisfeclia : mal empieza la temporada teatral este a ñ o en la corte espaiíola, y e l fracaso d e Lo ~ 1 . 2 1 ; d e f z ~ e g o ,n o será el último q u e esperiiiientaran los coliseos madrilehos. N i siquiera nos queda el consuelo d e poder del i,ieiles solo. cir; bielz vei7gas ~ n a si