Francia, Rusia y China abogan por continuar las inspecciones y EE.UU., Reino Unido y España se oponen Francia, Rusia y China abogan por continuar las inspecciones y EE.UU., Reino Unido y España se oponen Los inspectores afirman que el desarme de Iraq puede hacerse rápidamente si Bagdad coopera La Vanguardia Rusia, Francia y China, países con derecho a veto en el Consejo de Seguridad de la ONU, han abogado por la continuación de las inspecciones en Iraq para alcanzar el desarme definitivo de Saddam Hussein, tras escuchar el informe de los jefes de los expertos que constata que dicho desarme es posible de forma rápida "si se produce una cooperación incondicional de Iraq". Por contra, EE.UU., el Reino Unido y España han rechazado continuar con el trabajo de los inspectores, que han confirmado que no han hallado armas de destrucción masiva, pero sí algunos misiles que exceden los límites impuestos por la ONU en Iraq. También señalan que la cooperación de Bagdad ha aumentado en las últimas semanas. Iraq dice que quiere la paz y está dispuesto a cooperar más. El jefe de los inspectores de la ONU, el sueco Hans Blix, afirmó hoy en su alocución ante el Consejo de Seguridad que el desarme de Iraq puede hacerse de forma rápida "si se produce una cooperación incondicional de Iraq". Blix aseguró, además, que los inspectores no han encontrado armas de destrucción masiva, pero sí algunos misiles que exceden los límites impuestos por la ONU en Iraq. Igualmente, el director general del OIEA, Mohamed El Baradei, mostró su satisfacción por la decisión de Saddam de prohibir la producción y comercio de armas de destrucción masiva, asegurando además que los expertos no han encontrado de momento pruebas de que se estén realizando actividades nucleares prohibidas en Iraq. Tras las alocuciones de los jefes de los inspectores, el ministro francés de Exteriores, Dominique de Villepin, pidió una nueva reunión del Consejo de Seguridad el 14 de marzo, a nivel de ministros, tras considerar que las inspecciones "están dando resultados". En la misma línea, su homólogo chino, Tang Jiaxuan, dijo que "es necesario que continúe el trabajo de las inspecciones en Iraq". "China cree que el proceso de inspecciones está funcionando" y "se han hecho progresos". Sin embargo, dijo que "es necesario para que las inspecciones funcionen que Iraq coopere", y pidió que el gobierno de Bagdad cumpla sus compromisos adquiridos en el reciente viaje de los jefes de la misión de inspección de la ONU. En la misma línea, se expresó el ministro de Exteriores ruso, Igor Ivanov, quien pidió que continúen las inspecciones para no perder una oportunidad única de resolver el problema por la vía política. En su intervención, indicó que sólo se debe recurrir a la fuerza como último recurso y que no se ha llegado a ese extremo. Su homólogo alemán, Joschka Fischer, que ostenta la presidencia del Consejo aunque no tiene derecho a veto, manifestó que Bagdad tiene que rectificar su actitud y cooperar más, aunque también dijo que se debe evitar la guerra a toda costa. "La diplomacia no ha llegado todavía al final del camino", manifestó Fischer, quien indicó las graves consecuencias que podría tener una acción militar para la estabilidad de una región ya inestable. Powell no quiere más inspecciones Por contra, el secretario de Estado estadounidense, Colin Powell, indicó que lo que el mundo necesita en este momento "no son más inspecciones" sino que Iraq cumpla "inmediata, activa plena e incondicionalmente" con la resolución 1.441 de Naciones Unidas, y consideró que "la democracia no tiene que tener miedo de asumir sus responsabilidades" y aunque dijo alegrarse de que el acceso de los inspectores haya mejorado, indicó que eso no es suficiente. "Más inspecciones, perdón, pero no es la respuesta", afirmó. Powell reiteró que la resolución 1441, aprobada el pasado 8 de noviembre, "no es sobre las inspecciones, sino sobre el desarme de Iraq", y acusó al Gobierno de Bagdad de "estar jugando" y de "tender trampas" a la comunidad internacional 1/3 Francia, Rusia y China abogan por continuar las inspecciones y EE.UU., Reino Unido y España se oponen para evitar sus obligaciones. La Casa Blanca interpretó el informe de los inspectores como una demostración de que Iraq sigue sin cumplir con los compromisos exigidos. "El desarme de Saddam es un espejismo. El informe de Hans Blix es muy diplomático, pero en el fondo recalca que el mundo no tienen confianza en que Iraq se está desarmando", declaró hoy Ari Fleischer, portavoz de la Casa Blanca, quien repitió los argumentos de Powell. Asimismo, el jefe del Foreign Office británico, Jack Straw, pidió respaldar el proceso diplomático "con una creíble amenaza de la fuerza". "Igual que todos los miembros de este Consejo, y creo que de la comunidad internacional, espero y creo que una solución pacífica es posible, pero esto requerirá un cambio dramático e inmediato de Saddam", aseguró Straw. Palacio entiende que Bagdad no colabora A su vez, la ministra española de Exteriores, Ana Palacio, instó al Consejo a a tomar medidas "en aras de la seguridad y la paz mundial", al considerar que el régimen de Bagdad no colabora con los inspectores encargados de verificar el desarme. La ministra echó de menos un cambio de actitud de Iraq y rechazó la petición franco-germana de modificar el sistema de inspecciones, porque con ello, "estaríamos lanzando un mensaje de debilidad del Consejo, y perderíamos credibilidad". Finalmente, el representante iraquí, Mohamed Al-Duri, dijo que su país "ha elegido el camino de la paz" y quiere "encontrar soluciones que satisfagan a la comunidad internacional". Al-Duri, que fue el último orador en intervenir en el debate, agregó que su país está "dispuesto a proporcionar todos los medios para clarificar la situación real". De esta forma, espera "evitar los objetivos de aquellos que tienen intención de desencadenar una guerra en Iraq con consecuencias incalculables para lograr un objetivo claro colonial", según dijo. Los inspectores piden más tiempo Los jefes de los inspectores de la ONU para Iraq, Hans Blix y Mohamed El Baradei, anunciaron al Consejo de Seguridad que no han hallado armas de destrucción masiva en ese país y que necesitan más tiempo para seguir su tarea. En su informe, los jefes de las inspecciones de desarme desmontaron algunas de las sospechas planteadas la semana pasada ante el Consejo de Seguridad por el secretario de Estado de Estados Unidos, Colin Powell. Si en el informe anterior, presentado el 27 de enero, dieron una de cal y otra de arena, hoy Blix y El Baradei pusieron más énfasis en la continuación de las inspecciones, ya que reconocieron que "la situación ha mejorado". Como ejemplo, citaron la entrega de documentos relacionados con armas químicas y la luz verde dada por Iraq a los vuelos de aviones espías sobre su territorio. Blix comunicó que se han llevado a cabo 400 inspecciones en más de 300 lugares. "A través de las inspecciones llevadas hasta ahora, hemos tenido un buen conocimiento del panorama industrial y científico de Iraq, así como de sus capacidades de misiles, pero como antes no conocemos cada cueva y cada esquina", explicó. Añadió que "las inspecciones están ayudando de forma efectiva a superar la brecha de conocimiento que surgió durante la ausencia de los inspectores entre diciembre de 1998 y noviembre de 2002". Además, resaltó que en la cuestión de armas químicas, "los resultados hasta la fecha han sido consistentes con las declaraciones de Iraq". Blix, presidente de la Comisión de las Naciones Unidas para la Inspección, la Vigilancia y la Verificación (UNMOVIC), resaltó que en ninguna de las inspecciones no han sido halladas armas de destrucción masiva. El Baradei, director del Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA), declaró que no existen pruebas de que Iraq esté desarrollando armas atómicas. "Cuántas, si alguna, son las armas de destrucción masiva que posee Iraq y cuáles son los programas prohibidos?", se preguntó Blix, para contestar que "UNMOVIC no ha encontrado ni una de tales armas". "Otra cosa -aunque de gran importancia- es cuántas armas prohibidas no han sido contabilizadas aún. Por ejemplo, un documento que Iraq entregó, sugiere que unas mil toneladas de agentes químicos 'no están registradas'", comentó Blix. Por ello, subrayó, "uno no debe llegar a la conclusión de que existen", aunque también señaló que "sin embargo, la posibilidad tampoco puede ser excluida". Blix dijo que sí se ha descubierto que los misiles Al Samud y otros pueden rebasar el límite permitido por la ONU y que así se lo comentará a las autoridades iraquíes, que deberían proceder a su destrucción. Debido a esa mejora de la situación, y mientras el Consejo de Seguridad no diga lo contrario, Blix y El Baradei aseguraron que van a aumentar sus capacidades, lo que el primero relacionó además con las propuestas de Francia para 2/3 Francia, Rusia y China abogan por continuar las inspecciones y EE.UU., Reino Unido y España se oponen reforzar el sistema de inspecciones. En su informe, Blix incluyó también que durante los controles hechos por los inspectores en Iraq, no ha habido nunca pruebas de que los iraquíes supieran por adelantado que iban a producirse inspecciones. Rechazaba así las insinuaciones del secretario de Estado de EE.UU. el pasado día 5 ante el Consejo de Seguridad de que las autoridades iraquíes sabían por adelantado que iba a realizarse una inspección. En cuanto a las fotos mostradas por Powell sobre lugares donde puede haber armas de destrucción masiva, Blix dijo que fueron tomadas semanas antes de que empezaran las inspecciones y que podían mostrar "una actividad rutinaria". "Sin pruebas no se puede construir la confianza", le dijo Blix a Powell en relación a las supuestas fuentes que utilizó el secretario de Estado y que no ha querido revelar. © CCOO SERVICIOS 2015 Logos y marcas propiedad de sus respectivos autores Se permite la reproducción total o parcial de todos los contenidos siempre que se cite la fuente y se enlace con el original 3/3