Sociedad Myriam Hernández celebra 25 años de carrera [106] ESPECTACULOS La cubana Tania Bruguera y los artistas disidentes FOTO: AGENCIAUNO [100] CULTURA John Banville Pablo Marín Premio Príncipe de Asturias de las Letras: Doctor Banville y Míster Black. Sentado cerca de la piscina del hotel que lo acogió esta semana, con una copa de chardonnay al frente, John Banville (Wixford, Irlanda, 1945) presenta una amable y hasta juguetona disposición a ser interrogado. A que le pregunten por una producción novelística reconocida con el Man Booker Prize (por El mar, 2005) y el Premio Príncipe de Asturias. O a que lo interroguen por su hetéronimo, Benjamin Black –“mi hermano defectuoso”-, un autor de novela negra con el que irrumpió hace una década y que ha despertado aplausos en el público, la crítica y la industria del cine. Ha declarado Banville, considerado uno de los grandes estilistas de habla inglesa, que mientras los ingleses buscan la claridad, los irlandeses persiguen la ambigüedad. Y si ese fuera el caso, este irlandés lo ha sido por vías paralelas, que se dieron cita este “Un escritor no debería ser nunca una figura icónica” R El autor irlandés estuvo en Santiago, invitado por La Ciudad y las Palabras. En esta entrevista habla de su obra, de su alter ego Benjamin Black y de Roberto Bolaño. miércoles, cuando habló ante público diverso en el marco de una invitación del programa La Ciudad y Las Palabras, dependiente del Doctorado en Arquitectura y Estudios Urbanos de la U. Católica. Antes de eso, habló con La Tercera, conversación que arrancó con la “resurrección”, vía Benjamin Black, del mítico investigador Philip Marlowe en una novela de reciente aparición: La rubia de ojos negros. ¿Cómo llegó Philip Marlowe a Ud.? La sucesión de Raymond Chandler [creador del personaje] le preguntó a mi agente si yo estaría interesado en escribir una novela con Philip Marlowe. Yo dije que sí: venía leyendo a Chandler desde la adolescencia y me pareció maravilloso poder tomar una obra de pulp fiction y convertirla en algo más próximo a mi literatura… sin que deje de ser pulp fiction. ¿Cómo se logra eso? Bueno, Chandler era un estilista. El mismo dijo que el tema del libro no es lo importante, sino cómo está escrito. A mí me pasó algo semejante en uno de los libros de Benjamin Black, no recuerdo cuál: me faltaban unas diez páginas para el final y aún no sabía quién era el asesino… y tampoco me importaba. ¿Qué le atrae de Marlowe? Principalmente, que es un solitario. No tiene familia ni tampoco posesiones, aparte de una cafetera. Todas las mujeres de las que se enamora lo traicionan y, pese a todo, se las arregla para mantener una cierta decencia y nobleza. Pero también está la ironía, incluso el cinismo. Claro. Chandler es divertido y ciertamente agudo. Sus personajes secundarios son todos magníficos. Todas estas criaturas del zoológico de Chandler son algo que admiro mucho. ¿En qué sentido el Marlowe de Chandler es distinto del suyo? Pensaba que iba a modernizar a SIGUE EN PAG. 96 R