Carta de poder. El Consejo y vecinos de Aldeanueva dan todo su poder a fray Juan Pérez Fernández, del hábito de San Juan, residente en Madrid, para que en su nombre pueda recibir de Pedro Mejia de Tobar, caballero de la orden de Santiago, del Consejo de Hacienda, contador de la Contaduría Mayor y pagador de los descargos del rey 30.000 maravedís que al consejo están librados y son del resto de los 350 ducados últimos de los 700 que se les debían por la razón declarada en una libranza y cedula de su Majestad. Y para que conste va aquí puesta esta libranza en la forma y manera siguiente: Pedro Mejía de Tobar, contador de la Contaduría Mayor y pagador de los descargos del rey os mando que de los maravedís que han entrado en la arca de tres llaves donde se recoge el dinero para la paga de los dichos descargos deis a el consejo de Aldeanueva, 30.000 maravedís que se le deben en esta manera: Los 130.713 maravedís para los bastimentos que dio a la compañía de don Pedro de Sotomayor conforme a las averiguaciones que hizo Francisco Alderete de Cepeda, veedor de las guardas, en 1588. Los 21.199 por los bastimentos que dio a la compañía de Juan de Rueda conforme a las averiguaciones que hizo el veedor Gaspar de Guevara en 1594. Los 63.642 restantes por los que dio a la compañía de Beltrán de Castro conforme a las averiguaciones que hizo el veedor Pedro López de Rueda y Herrera en Logroño, a 1 de abril de 1595, como consto por certificación que dieron de ello sus contadores del sueldo a 24 de julio de 1607. Los dichos 30.000 maravedís sacará Pedro Mejía de Tobar de la dicha arca con sabiduría de Diego de Guzmán, su capellán y limosnero mayor, y de Francisco González de Heredia. Y atento consta por esta dicha cedula y libranza de su Majestad le dan su poder par que pueda cobrar los dichos 30.000 maravedís. (AHPLo., Legajo 6.267, 1614, Sin Foliar 25-4-1614, Sebastián del Moral) En el lugar de Aldeanueva a 28 de marzo de 1628 pareció presente Diego Marín, gentilhombre de la compañía del marqués de Tabara, el cual con mandato del señor veedor recibió de Cristóbal Ruiz, regidor que fue el año pasado de 1626 lo siguiente: 38 faldones con guarnición de oro de carmesí colorado 43 penacheras coloradas y otra de diferente color asida en otra penachera. Algunas penacheras están despuntadas y quebradas y otras sanas. 4 vaqueros guarnecidos con la misma guarnición, 2 con cuatro mangas y 2 con dos. 2 banderolas de damasco y 2 cordones carmesí El dicho Diego Marín gentilhombre lo recibió y lo metió en dos arcas y se dio por entregado de ello y lo firmó. Ansimismo se dio por entregado de 35 arcas, otra arca de las libreas, un fardel de armas y el estandarte Por mandado del ayuntamiento Martín Pérez, pregonero, pregonó públicamente que si algunos vecinos tuvieren en su casa algunas armas, arcas, bandas u otras cosas de los gentiles hombres de armas que lo manifiesten luego porque parten de este lugar todas las arcas, armas y libreas para la villa de Cerbera, con protestación que si no lo manifestaren y pareciere haberse quedado en su poder alguna cosa correrá por su cuenta y cargo (AHPLo., Legajo 6.258, 1628, Sin Foliar 28-3-1628, Sebastián del Moral) En Aldeanueva a 1 de mayo de 1628 se juntó el Concejo y vecinos de la parte del estado de buenos hombres del dicho lugar en la casa de consejo, especialmente Antonio Martínez, alcalde ordinario, Pedro Gil, regidor, y Pedro Moreno, diputado, del dicho estado, y estando los vecinos en el dicho concejo, Antonio Ruiz, alcalde, propuso que los vecinos del dicho estado padecen muchos gastos con los soldados que están de alojamiento en el dicho lugar, y ansimismo se causan excesivos gastos con el comisario y gentes que con él trae más el gasto de cebada de sus cabalgaduras de dos veces que ha venido a este lugar. Como se espera que vendrá luego, según tienen de ello nueva, para remedio de ello, porque serán muy grandes los gastos que se esperan tener con la dicha gente, el dicho comisario y alférez, para remedio de lo cual el dicho Consejo y vecinos vea donde se puede haber por ello dieron poder a Antonio Ruiz, alcalde, Pedro Jiménez, regidor, y Meterio Moreno y Pedro Moreno, diputados, a Francisco Moreno, mayor, Pedro Pérez, Sebastián Cordón, Juan Ruiz Pérez, Miguel Ruiz, Juan de Lera, Juan Pérez, Juan Marcilla de Gracia, Juan Roldan, Cristóbal Marín, Juan Ruiz, Cristóbal Ruiz, Juan Gutiérrez, Juan Pastor, mayor, y Juan Marín, todos vecinos de dicho estado, para que todos juntos traten sobre aquello que convenga a el bien y utilidad del dicho estado procurando aliviar de tantos soldados como hay en el dicho lugar de alojamiento, que son más de 80 personas y en especial a unos comisarios y alférez, y para remedio de todo ello busquen el dinero necesario y lo gasten como más convenga. (AHPLo., Legajo 6.258, 1628, Sin Foliar 1-5-1628, Sebastián del Moral) En Aldeanueva a 25 de septiembre de 1636 pareció presente Pedro Navarro, mozo, hijo de Pedro Navarro, natural de este lugar, y dijo que él está de partida para ir a servir a su Majestad de soldado y por si acaso muere en la dicha ocasión quiere, manda e ordena por esta escritura de donación que todos sus bienes, los haya, goce y posea Domingo Navarro, su hermano carnal, para ahora y para siempre jamás. (AHPLo., Legajo 6.264, 1636, Folio 64, Sebastián del Moral) En Aldeanueva a 25 de septiembre de 1636 pareció presente Juan Lozano, sastre, vecino de este lugar, y dijo que afianza a Pedro Martínez de la Losa, mozo, que está preso en la cárcel pública de este lugar por nombramiento de soldado que en él se a hecho por el Concejo de este lugar; para que le suelten para que pueda ir a casa de sus padres y aderece lo necesario para presentarse ante el señor alcalde mayor como tal soldado so pena que pagará todos los daños, pérdidas y menoscabos que por razón de no lo cumplir se le siguieren. (AHPLo., Legajo 6.264, 1636, Sin Foliar 25-9-1636, Sebastián del Moral) En Aldeanueva a 30 de septiembre de 1636 parecieron presentes Bartolomé de Arce y Juan de Arce, hermanos, vecinos de este dicho lugar y dijeron que atento les apremian a ir soldados, dijeron que por ellos y en su nombre presentan por soldado a Martín de Bresa, su cuñado, mozo, persona conveniente para el dicho viaje, y la justicia y regimiento lo admitieron y el susodicho lo aceptó y tuvo por bien de ir a la dicha jornada. Los dichos sus fiadores dijeron que se obligaban y obligaron a que el dicho Martín de Bresa irá a la dicha jornada y que no se ausentara de la dicha jornada. (AHPLo., Legajo 6.264, 1636, Folio 211, Sebastián del Moral) En Aldeanueva a 22 de octubre de 1636 parecieron presentes el licenciado Bernabé de Zugasti y Juan Marcilla, yerno de Domingo Moreno, vecinos del dicho lugar, y dijeron que atento la justicia y regimiento de Aldeanueva tiene preso en la cárcel pública a Bartolomé Moreno, mozo, hijo de Domingo Moreno, para que vaya a servir a su majestad a el castillo de Pamplona, y mientras no hiciere sus diligencias, que sea suelto de la dicha prisión so pena que si se ausentare e no pudiere ser avisado, que a costa suya puedan buscar otra persona para soldado. (AHPLo., Legajo 6.264, 1636, Folio 216, Sebastián del Moral) Carta de poder. El ayuntamiento de Aldeanueva, especialmente Bernabé Gutiérrez y Juan Pérez, alcaldes ordinarios, y Juan de Lera, Juan de la Cuesta, Rodrigo Fernández Montesinos, Diego Ortubia, Diego Navarro y Blas Pérez, regidores perpetuos de Aldeanueva, dan todo su poder a Diego de Ortubia, vecino y regidor perpetuo, y a Manuel Moreno, Felipe Martínez Garzón y Josepe de Reta, procuradores del número de Calahorra, para en cierto pleito que tratamos con Juan y Bartolomé de Arce, hermanos, vecinos de este lugar, sobre el nombramiento de soldado que ellos hicieron en Martín de Abusa y sobre las demás causas y razones contenidas en el dicho pleito, que pende y pasa ante el señor alcalde mayor de Calahorra por testimonio del Diego Ruiz de Aracil, escribano del número. (AHPLo., Legajo 6.264, 1636, Folios 131-132, Sebastián del Moral) En Aldeanueva a 15 de noviembre de 1636 pareció presente Andrés Ruiz, natural de Calahorra, cabo de escuadra de la compañía de los cien infantes de la dicha ciudad que están sirviendo en el castillo de Pamplona, que a venido con comisión del señor virrey y capitán de la dicha compañía en busca de tres soldados que se han venido del dicho presidio. Andrés Ruiz confiesa haber recibido de Ana Jiménez, mujer de Juan de Arce, por cuenta del deposito de bienes fecho en Juan Resano, 50 reales, los 25 paga por su marido y los otros 25 en nombre de su cuñado, Bartolomé de Arce, como fiadores que son de Martín de Abusa, mozo, soldado que hizo fuga de la dicha compañía; y para hacer la paga ha vendido 3 anegas de trigo del dicho deposito. Y mas, ha recibido 15 reales de Martín Gutiérrez por su hijo Pedro Gutiérrez, que también hizo fuga. Y otros 15 reales por Diego Calvo, también soldado, que todos hacen 80 reales que han montado los dichos sus salarios hasta hoy. E yo el presente escribano doy fe del recibo de ella que se hizo en mi presencia y a favor de las personas que las han fecho. (AHPLo., Legajo 6.264, 1636, Folio 251, Sebastián del Moral) En Aldeanueva a 25 de noviembre de 1636 se juntó el concejo, especialmente Bernabé Gutiérrez y Juan Pérez, alcaldes, Juan de Lera, Diego de Ortubia, Diego Navarro, Juan de la Cuesta, Celedón Ruiz de Vuelta y Blas Pérez, regidores perpetuos, y los vecinos del dicho lugar, y propuso Bernabé Gutiérrez, alcalde del estado de hidalgos, que los vecinos están muy empeñados con la gente de guerra y otros gastos, y para la paga de ello y ayuda a la que se ha de hacer, así de la jurisdicción como del nuevo donativo, para remedio de ello, los dichos vecinos vean de donde se podrá remediar la paga, y otros cien ducados para el gasto de los soldados. Los dichos vecinos y concejo dijeron que daban permiso para que puedan arrendar y arrienden el pasto e yerba de las Viñas Nuevas y Gambiales en la Casilla por todo el tiempo que les pareciere convenir. Y lo dicho acordaron los dichos vecinos salvo Juan de Lera, vecino y regidor perpetuo, que dijo lo contradice por lo que toca a el dicho pasto de la Casilla, que no consiente que se arriende y lo pide por testimonio, también lo contradice Francisco Pastor, menor, porque quiere que se arrienden todas las viñas, y lo contradicen Anton Ruiz, Miguel López, Julián Benito, Antón Benito, su hermano, que dicen que yendo a trabajar a sus heredades de viñas puedan llevar sus ganados libremente sin pena ninguna, y Juan Clavo dijo que, teniendo sus viñas cerradas, no se las pueda abrir ningún arrendador, y de lo contradicho lo piden por testimonio. (AHPLo., Legajo 6.264, 1636, Folios 266-267, Sebastián del Moral) En Aldeanueva a 6 de enero de 1639 se juntó el Concejo parecieron Pedro Jiménez, alcalde ordinario, Juan de la Cuesta, Diego Navarro, Juan Jiménez, Diego de Ocón, Blas Pérez y Diego Marcilla, regidores perpetuos del estado de los buenos hombres y los demás vecinos del dicho estado, y dijeron que daban todo su poder a Pedro Jiménez, Juan de la Cuesta, Diego Navarro, Juan Jiménez, Diego de Ocón, Blas Pérez y Diego Marcilla, y a Pedro de la Plaza, procurador en los Reales Consejos, residente en Madrid, para que nombre de este Concejo puedan hacer alojamiento de los soldados que están en este lugar y repartirles a los hijos dalgo los soldados que deben tener conforme a sus posibilidades haciendo pólizas en los dichos hijos dalgo y entregándolas para que los alojen en casa de los hijos dalgo, y no queriendo recibir los dichos soldados puedan salir, tratar y litigar contra ellos por la dicha razón (AHPLo., Legajo 6.347, 1639, Folios 162-163, Juan de Arrieta y Arandia) Carta de poder. Concejo y estado de caballeros hijos dalgo del lugar de Aldeanueva, especialmente Juan Marin, alcalde ordinario y familiar del Santo Oficio por el dicho estado, Rodrigo Fernández Montesinos, prior, Diego de Ortubia y Zeledón Ruiz de Bucesta, regidores, Martín González Montesinos, Juan Alonso de Azagra, Pedro de Gabirondo, Cristóbal Fernández, Juan Falcón, Felipe Falcón, Bernabé Gutiérrez, mayor en días, Andrés Gutiérrez, Bernabé Gutiérrez, su hermano, Pedro Álvarez, Miguel Falcón Pedro Gutiérrez, Bartolomé Falcón, Sebastián Ruiz, Pedro Fernández, Pedro Gutiérrez, Pedro de Ortuvia, Gregorio Alonso, Juan Ruiz de Bucesta, Juan de Zugasti, Juan Cillero y Bartolomé Cillero, vecinos de Aldeanueva, dan todo su poder a Felipe Martínez Gastón, prior, para el pleito que tratan con el concejo y vecinos de hombres buenos sobre el alojamiento de soldados que pretenden alojar en cada uno de ellos. (AHPLo., Legajo 6.347, 1639, Folio 164, Juan de Arrieta y Arandia) En Aldeanueva a 23 de marzo de 1639 se juntó en la casa del Concejo el estado de hombres buenos, especialmente Diego de la Cuesta, alcalde ordinario, Juan de la Cuesta, Diego Navarro, Blas Pérez, Diego de Ocón, Diego Marcilla y Juan de Ocón, regidores, y los vecinos del dicho estado, y dijeron que otorgaban todo su poder cumplido a Juan Jiménez, regidor, para que en nombre del dicho estado de hombres buenos parezca ante los señores del Real Concejo de Guerra de Cantabria, que reside en Vitoria, y ante el marques de Mortara y señor corregidor de Calahorra y Logroño, y ante cualesquier justicias y jueces que convengan, para pedir se de ensanche para alojar la gente de guerra en las casas de los hijos dalgo y personas privilegiadas en ejecución de la orden y mandato que para ello decreto el dicho señor corregidor y pedirse despacho de nuevo, atendiendo que el dicho estado de hombres buenos esta muy cargado con el dicho alojamiento y otras cargas concejiles, haciendo todas las diligencias y autos que convengan. (AHPLo., Legajo 6.347, 1639, Folios 171-172, Juan de Arrieta y Arandia) Carta de poder. Concejo y estado de caballeros hijos dalgo del lugar de Aldeanueva, especialmente Rodrigo Fernández Montesinos, prior, Juan Alonso, alcalde ordinario, Juan Ruiz de Bucesta, Pedro de Gabirondo, Juan Marín, Familiar del Santo Oficio, Zeledón Ruiz de Bucesta, Martín de Zugasti, Juan Falcón, Bernabé Gutiérrez, Pedro Gutiérrez, Sebastián Ruiz de Bucesta, Felipe Falcón y Pedro Álvarez, vecinos de Aldeanueva, en nombre de las demás personas del dicho estado, dan todo su poder a Felipe Falcón, para que vaya en nombre del dicho estado ante los señores del Real Consejo de Guerra de Vitoria, ante el Corregidor de Calahorra y Logroño, y ante cualesquier justicias, alcaldes y jueces para que pueda hacer cualesquier diligencias o autos judiciales que convengan en razón del alojamiento de gente de guerra que el estado de hombres buenos del dicho lugar pretende hacer en los hijos dalgo, haciendo las contradicciones necesarias, presentando cualesquier papeles escritos, alegar las razones que le pareciere y hacer reconvenciones contra el dicho estado de hombres buenos. (AHPLo., Legajo 6.347, 1639, Folio 173, Juan de Arrieta y Arandia) cualesquier