LAS RAÍCES VERBALES INCOATIVAS DEL LACANDÓN Naim Israel Martínez Corripio Universidad Nacional Autónoma de México Escuela Nacional de Antropología e Historia 1. Introducción En este trabajo presento el comportamiento de las raíces incoativas del lacandón tanto en estructuras intransitivas como en estructuras transitivas. Estas raíces derivan de adjetivos o nominales y cuando funcionan como el verbo de una estructura intransitiva requieren de sufijos que indican su carácter de raíces incoativas. Por ejemplo, en las estructuras intransitivas imperfectivas, podemos encontrar dos sufijos de incoativo como se observa en los siguientes ejemplos:1 (1) a. tan u-ts’iik-ta(h)-ar DUR A3S-molesto-INCOT-INCINT ‘se está enojando’ b. tan u-ts’iik-chä(j)-är DUR A3S-molesto-INCOP-INCINT ‘se está enojando’ Los ejemplos anteriores muestran que una raíz como ts’iik «molesto» puede concatenar los sufijos de incoativo –tah o –chäj, en un contexto intransitivo imperfectivo. De principio podríamos pensar que ambas construcciones tienen el mismo significado. Sin embargo, como veremos en este trabajo, existe diferencia de significado entre (1a) y (1b). Ahora bien, las estructuras transitivas de las raíces incoativas requieren del sufijo causativo –kint para aumentar su valencia (2a), sin embargo sería posible considerar que existe un sufijo – kin con función de causativo y que la oclusiva dental -t, funciona como aplicativo. Bajo esta perspectiva tendríamos dos sufijos distintos que conllevan al aumento de valencia de una raíz incoativa (2a) y la convierten en una raíz con valencia tres. Véanse los siguientes ejemplos: (2) a. tan u-chäkäw-kint-ik-ø DUR A3S-caliente-CAUS-INCTRA-B3S «está calentando agua» ja’ agua b. tan u-chäkäw-kin-t-ik-ø DUR A3S-caliente-CAUS-APL-INCTRA-B3S «le está calentando agua» ja’ agua El objetivo de este trabajo es, por un lado, mostrar el cambio de significado en las estructuras intransitivas de las raíces incoativas, a partir del sufijo incoativo que utilicen. Por otro lado, comprobaré si las formas transitivas de las raíces incoativas pueden analizarse como estructuras con significado causativo y aplicativo, o sólo como estructuras con significado causativo. 1 2. Datos generales del lacandón El lacandón es una lengua que pertenece a la familia lingüística maya, específicamente al tronco yucatecano en el cual también se encuentran el itzaj, el mopán y el yucateco (Hofling 2006). Actualmente esta lengua es hablada en el estado mexicano de Chiapas y cuenta con dos dialectos, por un lado el dialecto del sur que actualmente se habla en la comunidad de Lacanjá Chansayab y, por otro lado, el dialecto del norte que es hablado en las comunidades de Nahá y Metzaboc. Tomando en cuenta los dos dialectos, esta lengua es hablada por aproximadamente quinientas personas. Los datos que presento en este trabajo pertenecen al dialecto del sur y han sido recopilados de marzo 2008 a la fecha. 2.1. Rasgos gramaticales Para el análisis de las raíces incoativas del lacandón es pertinente mencionar dos características morfosintácticas básicas de esta lengua. Por un lado, que se trata de una lengua de marcación en el núcleo, lo cual implica que las relaciones gramaticales sean marcadas en la raíz verbal. Así pues los pronombres ergativos se prefijan a la raíz mientras que los absolutivos aparecen sufijados: (3). t-in-ka’an-s-ø-ech PERFTRA-A1S-cansar-CAUS-COMTRA-B2S «te cansé» La segunda característica morfosintáctica del lacandón que cobra relevancia para este trabajo es que puede tener un alineamiento nominativo-acusativo o bien un alineamiento ergativo-absolutivo. Es decir que tiene un sistema de ergatividad escindida, la cual está condicionada por el aspecto en el que se encuentren las distintas construcciones. Por lo tanto, en aspectos no perfectivos su alineamiento es nominativo-acusativo (4a) y (4b) y en aspectos perfectivos su alineamiento es ergativo-absolutivo (5a) y (5b). (4) a. b. (5) a. b. S k-uy-äj-är HAB-A3S-despertar-INCINT «se despierta» A k-uy-äj-s-ik-ø HAB-A3S-despertar-CAUS-INCTRA-B3S «despierta al niño» chichan niño S äj-ech despertar-B2S «despertaste» A je’ in-taar-ø ASEG A1S-venir-INCTRA «sí vengo y te despierto» O inw-äj-s-ø-ech A1S-despertar-CAUS-INCTRA-B2S 2 2.2. Raíces verbales Dentro de las lenguas yucatecanas usualmente se identifican cinco tipos de raíces verbales:2 transitivas, intransitivas activas, intransitivas, incoativas y posicionales; cada una de estas raíces tiene rasgos específicos para aumentar o disminuir su valencia, según sea el caso. Para el análisis de las raíces incoativas del lacandón conviene describir brevemente el comportamiento de las raíces intransitivas activas y las intransitivas, pues, como veremos más adelante, su comportamiento puede estar relacionado tanto en estructuras intransitivas como en transitivas. Las raíces intransitivas del lacandón se caracterizan por admitir construcciones causativas morfológicas mediante el sufijo -s y por no requerir de procesos de cambio de voz en construcciones de un sólo participante.3 De esta forma, en el complejo verbal intransitivo imperfectivo tenemos marca aspectual, pronombre ergativo y sufijo de estatus, mientras que en el complejo verbal intransitivo perfectivo el orden es marca aspectual, raíz verbal, estatus y pronombre absolutivo. El orden de las formas transitivas siempre será marca aspectual, pronombre ergativo, raíz verbal, causativo, estatus y pronombre absolutivo. Véanse los siguientes ejemplos: (6) a. b. (7) a. b. S tan u-riik’-ir DUR A3S-levantar-INCINT «se está levantando» A O tan in-riik’-s-ik- DUR A1S-levantar-CAUS-INCTRA-B3S «lo estoy levantando» S ka’an-ø-ech cansar-COMINT-B2S «te cansaste» A O t-in-ka’an-s-ø-ech PERFTRA-A1S-cansar-CAUS-B2S «te cansé» Cuando comparamos las estructuras intransitivas y transitivas podemos ver que la función del sufijo de causativo –s, tal y como ha sido descrito para otras lenguas (Comrie 1981, Dixon 2000), es promover la presencia de un nuevo participante (el causante) que tiene la función de A, mientras que el participante que cumplía con la función de S en la estructura intransitiva será movido a la función de O (el causado). Las raíces intransitivas activas se caracterizan porque pueden aparecer en estructuras de un solo participante sin recurrir a procesos de cambios de voz. Estas raíces únicamente pueden aparecer en estructuras de dos participantes si utilizan el sufijo de aplicativo –t. De esta forma, en las estructuras intransitivas imperfectivas el complejo verbal está compuesto de marca aspectual, pronombre ergativo, raíz verbal y el sufijo de estatus que generalmente es un morfema cero. Por otro lado, las construcciones intransitivas perfectivas de estas raíces tienen raíz verbal, sufijo de estatus y pronombre absolutivo. Finalmente, en las estructuras transitivas imperfectivas y perfectivas tenemos marca aspectual, pronombre ergativo, raíz verbal, aplicativo, sufijo de estatus y pronombre absolutivo. 3 (8) a. b. (9) a. b. S tan uy-ook’-ar DUR A3S-llanto-INCINT «está llorando» A O tan uy-aak’-t-ik-en DUR A3S-llanto-APL-INCTRA-B1S «me está llorando» S ook’-naj-en llanto-COMINT-B2S «lloré» A O t-inw-aak’-t-eech PERFTRA-A1S-llanto-APL-B2S «te lloré» Los ejemplos anteriores nos muestran que la función del aplicativo en las raíces intransitivas activas será introducir al objeto directo. En este punto, es pertinente señalar que las raíces intransitivas no podrían aceptar como sufijo derivativo el aplicativo –t. Del mismo modo, las raíces intransitivas no aceptarían como sufijo derivativo el causativo –s. Por lo tanto, tampoco sería posible que en una raíz permitiera la presencia de causativo y aplicativo, para obtener una valencia tres. 3. Raíces incoativas Las raíces incoativas del lacandón derivan de adjetivos o raíces nominales, tal y como ha sido descrito en otras lenguas yucatecanas (Hofling 2006). De esta forma, en principio las podemos ubicar sin morfología verbal y funcionando como adjetivos o nominales según sea el caso. En el ejemplo (10a) vemos que la raíz k’i’ix «espina» se comporta como un nominal, mientras que en el ejemplo (10b) la raíz ya’ax «verde» se comporta como adjetivo. (10) a. jo’ok-s-e(j) salir-CAUS-IMP «quítame la espina» ten 1SG k’i’ix espina b. bin-ø-(ij) ich ir-COMINT-B3S en «fue a la casa verde» ya’ax verde na’ casa En los siguientes ejemplos vemos que las raíces pueden aparecer en estructuras intransitivas, es decir que pueden admitir morfología verbal. Los ejemplos (11a) y (11b) muestran estructuras intransitivas en aspecto imperfectivo por lo tanto vemos marca aspectual, pronombre ergativo, raíz verbal, sufijo de incoativo y sufijo de estatus incompletivo. Por otro lado, los ejemplos de (12a) y (12b) muestran estructuras intransitivas de aspecto perfectivo y lo que vemos es marca aspectual, raíz verbal, sufijo de incoativo, sufijo de estatus completivo y pronombre absolutivo. (11)a. tan u-k’i’ix-ta(h)-ar DUR A3S-espina-INCOT-INCINT «se está poniendo espinoso» 4 b. tan u-ya’ax-ta(h)-ar DUR A3S-verde-INCOT-INCINT «se está poniendo verde» (12)a. k’i’ix-chäj-i(j)-ø espina-INCOP-COMINT-B3S «se puso espinoso» b. ya’ax-chäj-i(j)-ø verde-INCOP-COMINT-B3S «se puso verde» Finalmente las raíces incoativas pueden aparecer en estructuras transitivas y en este caso, tanto para las formas imperfectivas (13a) y (13b) como perfectivas (14a) y (14b), tenemos marca aspectual, pronombre ergativo, raíz verbal, causativo, estatus y pronombre absolutivo. (13) a. tan u-k’i’ix-kint-ik-ø DUR A3S-espina-CAUS-INCTRA-B3S «lo está poniendo espinoso» b. tan u-ya’ax-kint-ik-ø DUR A3S-verde-CAUS-INCTRA-B3S «lo está poniendo verde» (14) a. t-u-k’i’ix-kint-aj-ø PERFTRA-A3S-espina-CAUS-COMTRA-B3S ‘lo puso espinoso’ b. t-u-ya’ax-kint-aj-ø PERFTRA-A3S-verde-CAUS-COMTRA-B3S «lo puso verde» En el siguiente apartado veremos, por un lado, por qué en las formas intransitivas imperfectivas de las raíces incoativas tenemos la alternancia entre los sufijos –tah y –chäj. Por otro lado, veremos por qué no es posible considerar para estas raíces dos sufijos de aumento de valencia en las formas transitivas tanto perfectivas como imperfectivas. 4. Análisis de las raíces incoativas En las estructuras intransitivas del lacandón que utilizan raíces incoativas, podemos identificar dos posibles marcas de incoativo que pueden ser –tah o –chäj. De principio parece que cada uno de estos sufijos se concatena a raíces incoativas específicas, es decir que una raíz sólo puede concatenar uno de los dos sufijos, así parece que ocurre en los siguientes ejemplos: (15) a. tan u-chäk-ta(h)-ar DUR A3S-rojo-INCOT-INCINT «se está poniendo rojo» b.* tan u-chäk-chä(j)-ar DUR A3S-rojo-INCOP-INCINT Lectura buscada: «se está poniendo rojo» 5 (16) a. tan u-b’o’o(y)-chä(j)-är DUR A3S-sombra-INCOP-INCINT «se está haciendo sombra» b.* tan u-b’o’oy-ta(h)-ar DUR A3S-sombra-INCOT-INCINT Lectura buscada: «se está ensombreciendo» El ejemplo (15a) muestra que cuando una raíz como chäk «rojo» aparece dentro de una estructura intransitiva imperfectiva, puede concatenar el sufijo de incoativo –tah, sin embargo el ejemplo (15b) muestra que la misma raíz no admite el sufijo de incoativo –chäj. En contraste, en el ejemplo (16a) vemos que una raíz como b’o’oy «sombra» sí admite como sufijo incoativo la marca –chäj, mientras que en el ejemplo (16b) la raíz no acepta el sufijo incoativo –tah. La alternancia entre los sufijos de las raíces incoativas existía dentro del proto-yukateko (Hofling 2006), y posiblemente obedecía a una distinción entre los cambios de estado extrínsecos o temporales y los cambios de estado intrínsecos o permanentes. Por lo tanto, podríamos suponer que el sufijo –tah del lacandón se utilizaría con las raíces que implican un cambio de estado temporal. Esta propuesta es viable si consideramos que la estructura de (15a) se utilizaría para denotar, por ejemplo, el caso de una parte del cuerpo que se pone roja a consecuencia de la mordedura de una hormiga y por lo tanto, debido a que no será algo permanente, la presencia del sufijo –chäj resulta agramatical. Sin embargo, bajo esta perspectiva resulta difícil entender por qué el ejemplo (16a) es gramatical y el (16b) es agramatical, pues suponemos que «ensombrecerse» no es algo permanente y por lo tanto lo esperado sería que (16a) fuera agramatical y (16b) gramatical. Otro aspecto que cuestionaría la función de los sufijos –tah y –chäj como marcas para indicar los cambios de estado temporales o permanentes respectivamente, sería que muchas raíces incoativas del lacandón permiten la presencia de ambos sufijos. Véanse los siguientes ejemplos: (17) a. tan u-nuuk-ta(h)-ar DUR A3S-grande-INCOT-INCINT «se está poniendo grande» b. tan u-nuuk-chä(j)-är DUR A3S-grande-INCOP-INCINT «se está poniendo grande» Los ejemplos anteriores muestran que algunas raíces incoativas pueden aceptar tanto el sufijo –tah como el sufijo –chäj. En este caso, podemos pensar que el significado de algunas raíces incoativas puede implicar, ya sea, cambios de estado temporales o bien, permanentes y por lo tanto admiten los dos sufijos. Esta propuesta resulta adecuada para una raíz como nuuk «grande», pues suponemos que algo puede quedar grande de manera temporal o bien, quedar grande de manera permanente. Por ejemplo, una fruta puede quedar grande de manera permanente y sólo si algo o alguien le hacen algo, como cortarla, perderá esta cualidad. Sin embargo esta propuesta no resulta viable al considerar otras raíces incoativas que admiten los dos sufijos, como en los siguientes ejemplos: (18) a. tan u-kara’an-ta(h)-ar DUR A3S-borracho-INCOT-INCINT «se está poniendo borracho» b. tan u-kara’an-chä(j)-är DUR A3S-borracho-INCOP-INCINT «se está poniendo borracho» 6 Los ejemplos anteriores muestran que una raíz incoativa como kärän «borracho», también admite los dos sufijos de incoativo. De acuerdo a la propuesta respecto a que –tah conlleva a cambios temporales, mientras que –chaj conlleva a cambios permanentes, no es posible que la diferencia de significado entre (18a) y (18b) implique que la lectura de la segunda sea que «alguien se está poniendo borracho de manera permanente». En otras palabras, muchas de las raíces incoativas que admiten los dos sufijos de incoativo, denotan eventos que semánticamente no podrían implicar cambios permanentes. De esta forma resulta conveniente preguntarse si en efecto los sufijos de incoativo del lacandón sólo conllevan diferencias respecto a lo temporal y lo permanente. Es posible que cada uno de los sufijos proporcione otro tipo de información, lo cual permitiría explicar los ejemplos en donde parece haber igualdad de significado y el porqué una raíz como bo’oy «sombra» sólo admite el sufijo –chäj. Mi propuesta es que la alternancia entre –tah y –chäj además de estar relacionada con lo temporal y lo permanente, respectivamente, también se relaciona con el grado de avance que implique la raíz incoativa en cuestión. De esta forma, –tah puede indicar que un cambio de estado recién se ha iniciado, mientras que el sufijo –chäj conlleva significados en que el cambio de estado tiene un mayor grado de avance, pero no necesariamente es permanente. Véanse los siguientes ejemplos: (19) a. ts’o’ok uy-u’uk’-ik-ø (u)y=o’o PINM A3S-beber-INCTRA-B3S P3S=CLNOM seerbesa cerveza tan u-kärän-ta(h)-ar DUR A3S-borracho-INCOT-INCINT «ya bebió su cerveza, se está poniendo borracho» b.¿? ts’o’ok uy-u’uk’-ik-ø (u)y=o’o PINM A3S-beber-INCTRA-B3S P3S=CLNOM seerbesa cerveza tan u-kärän-chäj-är DUR A3S-borracho-INCOP-INCINT «ya bebió su cerveza se está poniendo borracho» (20) a. ya’ab’ t-uy-u’uk’-aj-ø mucha PERFTRA-A3S-beber-COMTRA-B3S (u)y=o’o seerbesa P3S=CLNOM cerveza tan u-kärän-chäj-är DUR A3S-borracho-INCOP-INCINT «bebió mucha cerveza, se está poniendo borracho» b.¿? ya’ab’ t-uy-u’uk’-aj-ø mucha PERFTRA-A3S-beber-COMTRA-B3S (u)y=o’o seerbesa P3S=CLNOM cerveza tan u-kärän-ta(h)-är DUR A3S-borracho-INCOT-INCINT «bebió mucha cerveza se está poniendo borracho» En (19a) vemos que la raíz kärän «borracho» concatena el sufijo –tah debido a que el contexto conlleva a una situación en donde una persona recientemente ha comenzado a tomar cerveza, por lo que el cambio de estado, es decir «emborracharse», recién ha comenzado a ocurrir. Bajo el mismo contexto el ejemplo de (19b) deja ver que la misma raíz no tiene una lectura afortunada si utiliza el sufijo –chäj, pues esto implicaría que el cambio de estado está muy avanzado, o mejor dicho «el estado de ebriedad» es muy elevado con tan sólo haber 7 tomado una cerveza. Por otro lado, en el ejemplo de (20a) es posible utilizar –chäj debido a que dentro del contexto se menciona que alguien ha tomado muchas cervezas y por lo tanto su cambio de estado está muy avanzado. Considerando este mismo contexto, el uso de –tah no tiene una lectura afortunada, pues esto implicaría que alguien después de haber bebido mucho, apenas se comienza a emborrachar. Los siguientes ejemplos sirven para corroborar esta propuesta. (21) a. tan DUR u-chäkäw-ta(h)-ar A3S-caliente-INCOT-INCINT ja’ agua ma’ tan uy-o’omak-ar NEG DUR A3S-burbuja-INCINT «se está calentando el agua, pero no está hirviendo» b. ?? tan DUR u-chäkäw-chäj-är A3S-caliente-INCOP-INCINT ma’ tan uy-o’omak-ar NEG DUR A3S-burbuja-INCINT «se está calentando el agua, pero no está hirviendo» (22) a. ma’ak tan u-yaaj-taj-ar quién DUR A3S-enfermedad-INCOT-INCINT «¿quién se está enfermando?» b. ?? ma’ak tan u-yaaj-chäj-är quién DUR A3S-enfermedad-INCOP-INCINT «quién se está enfermando más» La propuesta respecto a que el sufijo de incoativo –tah hace referencia a cambios de estado que recién han comenzado, mientras que –chäj se utiliza en contextos donde el cambio de estado tiene un mayor grado de desarrollo; también explica por qué una raíz como b’o’oy «sombra» sólo permite la presencia de –chäj. Bajo esta perspectiva sabemos que un evento como «ensombrecerse» no puede desarrollarse de manera intermedia y por esta razón b’o’oy «sombra» no permite como sufijo a –tah, por lo tanto el significado de la estructura con el sufijo –chäj no se refiere a que algo se está ensombreciendo de manera permanente, sino a que algo se está ensombreciendo totalmente y no parcialmente. En el apartado dos hemos visto que las raíces incoativas también pueden aparecer en estructuras transitivas, lo cual puede ocurrir si concatenan el sufijo de causativo –kint. En otras lenguas yucatecanas se ha propuesto que en realidad la forma transitiva de las raíces incoativas incluye dos sufijos derivativos,4 es decir –kin y aparte el sufijo –t. Esta propuesta podría resultar viable al considerar que –t es exactamente la misma marca de aplicativo que utilizan las raíces intransitivas activas para aumentar su valencia.5 Por otro lado, autores como Lehmann (1993) consideran que, al menos en el caso del yucateco, –kint es un sólo sufijo con función de causativo. Los siguientes ejemplos del lacandón ilustran cuáles serían las implicaciones de considerar una u otra propuesta. (23) a. tan u- chäkäw-kint-ik-ø DUR A3S-caliente-CAUS-INCINT-B3S «está calentando el agua» b. tan u- chäkäw-kin-t-ik-ø DUR A3S-caliente-CAUS-APL-INCINT-B3S «le está calentando agua» ja’ agua ja’ agua 8 En (23a) vemos que si consideramos que las estructuras transitivas sólo requieren de un sufijo derivativo con función de causativo, el significado de la construcción sólo involucra a dos participantes. En este caso la tercera persona de singular (marcado con el pronombre ergativo u) se comporta como agente, mientras que ja’ «agua» se comporta como paciente, el cual también se codificaría en el complejo verbal con el pronombre absolutivo de tercera persona de singular, que en este caso es un morfema cero. Por otro lado, el ejemplo (23b) muestra que si consideramos dos sufijos derivativos en la estructura, –kin tendrá la función de causativo mientras que la oclusiva dental –t cumpliría con la función de ser un aplicativo. Bajo esta perspectiva tendríamos entonces tres participantes, el agente que se codifica con el pronombre ergativo de tercera persona, el paciente ja’ «agua» que sería introducido por el causativo y el benefactivo que estaría marcado con el pronombre absolutivo de tercera de singular y que sería introducido por el aplicativo. Esta segunda propuesta de segmentación morfológica para la estructura transitiva permitiría que en el papel de benefactivo apareciera cualquier persona gramatical, sin embargo esto no es posible en lacandón. (24).* tan u- chäkäw-kin-t-ik-ech DUR A3S-caliente-CAUS-APL-INCTRA-B2S Lectura buscada: «te está calentando agua» ja’ agua En el ejemplo anterior se puede ver que el lacandón no permitiría una construcción en donde se codifiquen tres participantes. Esto quiere decir, por un lado, que en casos como los de (23a) el pronombre absolutivo de tercera de singular hace referencia al participante que cumple con la función de paciente, el cual podría ser una raíz nominal, una frase nominal o incluso podría no estar explícito. Por otro lado, el ejemplo de (24) corrobora que en lacandón sólo podemos considerar un sufijo derivativo para aumentar la valencia de una raíz incoativa. La función de este sufijo será la de causativo, es decir que introduce al agente en una estructura transitiva. En este sentido, las raíces incoativas del lacandón tienen un comportamiento similar al de las raíces intransivas que utilizan el causativo –s para aumentar su valencia. Véanse los siguientes ejemplos. (25) a. ts’íik-ij-ech enojado-COMINT-B2S «te enojaste» b. t-i(n)-ts’íik-kint-ø-ech PERFTRA-enojado-CAUS-COMTRA-B2S «te hice enojar» (26) a. ka’an-ø-ech cansar-COMINT-B2S «te cansaste» b. t-in-ka’an-s-ø-ech PERFTRA-A1S-cansar-CAUS-B2S «te cansé» 5. Conclusiones En este trabajo he presentado el comportamiento de las raíces incoativas del lacandón, tanto en estructuras intransitivas como en estructuras transitivas. Dentro del análisis de las formas intransitivas imperfectivas hemos visto que estas raíces pueden utilizar dos tipos de sufijos de 9 incoativo. El uso de cada uno de estos sufijos está relacionado con los cambios de estado temporales o permanentes, tal y como lo menciona Hofling (2006). Sin embargo, en el caso específico del lacandón, es importante señalar que la alternancia entre –chäj y –tah también puede implicar una distinción respecto al grado de avance en el cambio de estado que codifique la raíz incoativa en cuestión. Por esta razón, algunas raíces incoativas cuyo significado puede denotar distintos grados de avance respecto al cambio de estado en cuestión, permiten la alternancia entre los dos sufijos de incoativo tal y como ocurre con la raíz kärän «borracho». En cambio, las raíces cuyo significado sólo conlleva cambios de estado parciales no permiten la presencia de –chäj como por ejemplo la raíz chäk «rojo». Y finalmente, aquellas raíces cuyo significado implica cambios de estado que no pueden ser graduales no permiten la presencia del sufijo –tah como ocurre con la raíz b’o’oy «sombra». Dentro del análisis de las formas transitivas de las raíces incoativas vimos que no es posible segmentar al sufijo de causativo –kint de tal forma que se le otorgue la función de aplicativo a la oclusiva dental –t. Este análisis implicaría que en la estructura transitiva existieran tres participantes, uno de los cuales sería introducido por el causativo y el otro por el aplicativo. Sin embargo, no es posible codificar a un benefactivo por medio de los pronombres absolutivos. Por otro lado, las raíces incoativas tienen un comportamiento más cercano al de las raíces intransitivas, debido a que ambas raíces en su forma transitiva requieren de un sufijo causativo para introducir al agente y al mismo tiempo mover al sujeto de la intransitiva al papel de paciente. Es decir que en su forma transitiva estas raíces no tendrían que utilizar como sufijo derivativo una marca de aplicativo. Bibliografía BOHNEMEYER, J. 2001. «Argument and Event Structure in Yukatek Verb Classes», The Proceedings of SULA: The Semantics of Under-Represented Languages in the Americas. Occasional Papers in Linguistics, 25, 8-19. BRICKER, V. 1998. A Dictionary of the Maya Language As Spoken in Hocabá, Yucatá., Salt Lake City: The University of Utah Press. BRUCE, R. 1968. Gramática del Lacandón. México: Instituto Nacional de Antropología e Historia. COMRIE, B. 1989. Universales del lenguaje y tipología lingüística. Madrid: Gredos. DANZIGER, E. 1996. «Split intransitivity and active – inactive patterning in Mopan Maya», International Journal of American Linguistics, 62 (4), 379-414. DIXON, R. M. W. 2000. «A typology of causatives: form, syntax and meaning», en DIXON, R. M. W. et al., Changing valency Case studies in transitivity, 30-83. Cambridge: University Press. HOFLING, C. 1991. Itzá Maya Texts. With A Grammatical Overview. University Of Utah. HOFLING, C. 2006. «A Sketch of the History of the Verbal Complex in Yukatekan Mayan Languages», International Journal of American Linguitics, 72 (3), 367-96. LEHMANN, C. 1993. «Predicate classes in Yucatec Maya», Función, 13-14, 195-272. 10 1 Utilizo las siguientes abreviaturas en mis ejemplos: 1SG pronombre independiente de primera persona singular, A1S pronombre ergativo de primera persona, A3S pronombre ergativo de tercera persona, APL aplicativo, ASEG aspecto asegurativo, B1S pronombre absolutivo de primera persona, B2S pronombre absolutivo de segunda persona, B3S pronombre absolutivo de tercera persona, CAUS causativo, CLNOM clasificador nominal, COMINT estatus completivo intransitivo, COMTRA estatus completivo transitivo, DUR aspecto durativo, HAB aspecto habitual, IMP imperativo, INCINT estatus incompletivo intransitivo, INCOT sufijo incoativo temporal, INCTRA estatus incompletivo transitivo, INCOPs incoativo permanente, P3S posesivo de tercera persona, PERFTRA aspecto perfectivo transitivo, PINM pasado inmediato 2 Véase (Hofling 1991, Lehmann 1993, Danziger 1996, Bricker 1998 y Bohnemeyer 2001). 3 Esto es lo que ocurre en yucateco con las raíces transitivas activas, las cuales sólo pueden aparecer en estructuras de un participante por medio de un cambio de voz, ya sea pasiva, antipasiva o media (Bricker 1998, Lehmann 1993 y Bohnemeyer 2004). 4 Véase por ejemplo Hofling (1991) para el caso del itzaj o Bricker (1998) para el caso del yucateco. 5 Véase el apartado 1.2 11