Antes de empezar: “A la deriva” es un cuento escrito por el uruguayo Horacio Quiroga. Aquí narra la historia de un hombre que tiene un accidente con una serpiente en la selva del amazonas. Contesta las siguientes preguntas antes de leer el cuento 1. ¿Qué animales viven en el amazonas? Menciona algunos ejemplos. 2. ¿Cuáles son peligrosos para las personas? 3. ¿Qué peligros tiene que afrontar (to face) alguien que trabaja en la selva cortando árboles? El hombre pisó algo blanduzco 1 , y en seguida sintió la mordedura en el pie. Saltó adelante, y al volverse con un juramento 2 vio una yararacusú 3 que arrollada 4 sobre sí misma esperaba otro ataque. El hombre echó una veloz ojeada 5 a su pie, donde dos gotitas de sangre engrosaban 6 dificultosamente, y sacó el machete de la cintura. La víbora vio la amenaza 7 , y hundió 8 más la cabeza en el centro mismo de su espiral; pero el machete cayó de lomo, dislocándole las vértebras. El hombre se bajó hasta la mordedura 9 , quitó las gotitas de sangre, y durante un instante contempló. Un dolor agudo nacía de los dos puntitos violetas, y comenzaba a invadir todo el pie. Apresuradamente se ligó el tobillo con su pañuelo y siguió por la picada 10 hacia su rancho. El dolor en el pie aumentaba, con sensación de tirante abultamiento, y de pronto el hombre sintió dos o tres fulgurantes punzadas 11 que como relámpagos habían irradiado desde la herida 12 hasta la mitad de la pantorrilla. Movía la pierna con dificultad; una metálica sequedad 13 de garganta, seguida de sed quemante, le arrancó un nuevo juramento. Completa el siguiente párrafo con las palabras que aparecen abajo. Recuerda conjugar los verbos: Blanduzco pie Matar mordedura serpiente ligar sentir extenderse seca rancho pisar dolor El hombre estaba en la selva cuando ____________algo ____________. Era una __________ muy venenosa. La serpiente mordió al hombre en el____________ y el hombre la __________ con su machete. El hombre ______________dolor y vio que la _______________ estaba poniéndose morada y el dolor estaba _____________a toda su pierna. El hombre _______________su tobillo, pero sentía mucho______________ y su garganta estaba _______________ El hombre comenzó a caminar hacia su _________________. Llegó por fin al rancho, y se echó de brazos sobre la rueda de un trapiche 14 . Los dos puntitos violeta desaparecían ahora en la monstruosa hinchazón 15 del pie entero. La piel parecía adelgazada y a punto de ceder, de tensa. Quiso llamar a su mujer, y la voz se quebró 16 en un ronco 17 arrastre de garganta reseca. La sed lo devoraba. —¡Dorotea! —alcanzó a lanzar en un estertor 18 —. ¡Dame caña 19 ! Su mujer corrió con un vaso lleno, que el hombre sorbió en tres tragos 20 . Pero no había sentido gusto alguno. —¡Te pedí caña, no agua! —rugió de nuevo. ¡Dame caña! —¡Pero es caña, Paulino! —protestó la mujer espantada. —¡No, me diste agua! ¡Quiero caña, te digo! La mujer corrió otra vez, volviendo con la damajuana 21 . El hombre tragó 22 uno tras otro dos vasos, pero no sintió nada en la garganta. —Bueno; esto se pone feo —murmuró entonces, mirando su pie lívido y ya con lustre 23 gangrenoso. Sobre la honda ligadura del pañuelo, la carne desbordaba como una monstruosa morcilla 24 . Los dolores fulgurantes se sucedían en continuos relampagueos, y llegaban ahora a la ingle 25 . La atroz 26 sequedad de garganta que el aliento parecía caldea 27 r más, aumentaba a la par. Cuando pretendió incorporarse, un fulminante vómito lo mantuvo medio minuto con la frente 28 apoyada en la rueda 29 de palo [del trapiche] Contesta las siguientes preguntas: 1. ¿Cómo se siente el hombre? ¿Por qué? 2. ¿Por qué pensaba que la caña era agua? 3. El hombre está envenenado y necesita ayuda. Imagina qué es lo que va a hacer para conseguir ayuda y escríbelo abajo. Recuerda que el hombre está en medio de la selva. Pero el hombre no quería morir, y descendiendo hasta la costa subió a su canoa. Sentóse en la popa y comenzó a palear 30 hasta el centro del [río] Paraná. Allí la corriente del río, que en las inmediaciones del Iguazú corre seis millas, lo llevaría antes de cinco horas a Tacurú-Pucú. El hombre, con sombría energía, pudo efectivamente llegar hasta el medio del río; pero allí sus manos dormidas 31 dejaron caer la pala en la canoa, y tras un nuevo vómito —de sangre esta vez—dirigió una mirada al sol que ya trasponía 32 el monte. La pierna entera, hasta medio muslo, era ya un bloque deforme y durísimo que reventaba 33 la ropa. El hombre cortó la ligadura y abrió el pantalón con su cuchillo: el bajo vientre 34 desbordó 35 hinchado, con grandes manchas lívidas y terriblemente doloroso. El hombre pensó que no podría jamás llegar él solo a Tacurú-Pucú, y se decidió a pedir ayuda a su compadre Alves, aunque hacía mucho tiempo que estaban disgustados 36 . La corriente del río se precipitaba ahora hacia la costa brasileña, y el hombre pudo fácilmente atracar 37 . Se arrastró 38 por la picada en cuesta arriba, pero a los veinte metros, exhausto, quedó tendido de pecho. —¡Alves! —gritó con cuanta fuerza pudo; y prestó oído 39 en vano. —¡Compadre Alves! ¡No me niegue 40 este favor! —clamó de nuevo, alzando la cabeza del suelo. En el silencio de la selva no se oyó un solo rumor. El hombre tuvo aún valor para llegar hasta su canoa, y la corriente, cogiéndola de nuevo, la llevó velozmente a la deriva 41 . Contesta las siguientes preguntas: 1. El hombre necesita ayuda, pero el lugar más cercano es Tacurú-Pacú. Para llegar a ese lugar, el hombre tiene que remar cinco horas en el río. ¿Crees que llegue a tiempo o morirá en el camino? 2. ¿Por qué el hombre necesita la ayuda del compadre Alves? ¿Encontró a su compadre en su casa? 3. ¿Por qué el hombre está a la deriva? El [río] Paraná corre allí en el fondo de una inmensa hoya 42 , cuyas paredes, altas de cien metros, encajonan 43 fúnebremente el río. Desde las orillas bordeadas de negros bloques de basalto, asciende el bosque, negro también. Adelante, a los costados, detrás, la eterna muralla lúgubre 44 , en cuyo fondo el río arremolinado se precipita en incesantes borbollones 45 de agua fangosa. El paisaje es agresivo, y reina en él un silencio de muerte. Al atardecer, sin embargo, su belleza sombría y calma cobra una majestad única. El sol había caído ya cuando el hombre, semitendido en el fondo de la canoa, tuvo un violento escalofrío 46 . Y de pronto, con asombro 47 , enderezó pesadamente la cabeza: se sentía mejor. La pierna le dolía apenas, la sed disminuía, y su pecho, libre ya, se abría en lenta inspiración. Contesta las siguientes preguntas 1. El autor (Quiroga) describe el paisaje (landscape) del río y la selva mientras el hombre flota a la deriva. ¿Cómo es el paisaje? ¿Qué palabras usa para describirlo? 2. ¿Qué relación tiene la descripción del paisaje con los sentimientos y el estado físico del hombre? El veneno comenzaba a irse, no había duda. Se hallaba 48 casi bien, y aunque no tenía fuerzas para mover la mano, contaba con la caída del rocío 49 para reponerse del todo. Calculó que antes de tres horas estaría en Tacurú-Pucú. El bienestar avanzaba, y con él una somnolencia llena de recuerdos. No sentía ya nada ni en la pierna ni en el vientre. ¿Viviría aún su compadre Gaona en Tacurú-Pucú? Acaso viera también a su ex patrón mister Dougald, y al recibidor del obraje. ¿Llegaría pronto? El cielo, al poniente, se abría ahora en pantalla de oro, y el río se había coloreado también. Desde la costa paraguaya, ya entenebrecida 50 , el monte dejaba caer sobre el río su frescura crepuscular, en penetrantes efluvios 51 de azahar y miel 52 silvestre. Una pareja de guacamayos cruzó muy alto y en silencio hacia el Paraguay. Allá abajo, sobre el río de oro, la canoa derivaba velozmente, girando 53 a ratos sobre sí misma ante el borbollón de un remolino 54 . El hombre que iba en ella se sentía cada vez mejor, y pensaba entretanto en el tiempo justo que había pasado sin ver a su ex patrón 55 Dougald. ¿Tres años? Tal vez no, no tanto. ¿Dos años y nueve meses? Acaso. ¿Ocho meses y medio? Eso sí, seguramente. De pronto sintió que estaba helado hasta el pecho. ¿Qué sería? Y la respiración 56 también... Al recibidor de maderas de mister Dougald, Lorenzo Cubilla, lo había conocido en Puerto Esperanza un viernes santo... ¿Viernes? Sí, o jueves... El hombre estiró 57 lentamente los dedos de la mano. —Un jueves... Y cesó de respirar. 1. El hombre piensa que el veneno de la serpiente se ha ido. ¿Por qué? 2. El hombre está muriendo. ¿Lo sabe él? 3. ¿Por qué está pensando en su antiguo patrón y compañero de trabajo? 4. En la sección anterior, el paisaje la descripción del paisaje era lúgubre cuando el hombre se sentía muy mal. Ahora el hombre se siente mejor. ¿Cómo cambia la descripción del paisaje? 4. ¿Por qué el cuento se llama “A la deriva”? Vocabulario 1 blanduzco: soft Juramento: curse, swearing 3 Tipo de serpiente, muy venenosa 2 4 Arrollada: coiled 5 Ojeada: glance Engrosar: to thicken 6 7 Amenaza: threat Hudir: to sink 9 Mordedura: bite 10 Picada: Trail 11 Fulgurante punzada: shooting pains 12 Herida: wound 8 13 Sequedad: dryness Trapiche: Type of mill used to extract sugar from canes. 15 Hinchazón: swollen, inflamed 16 Quebrar: to break 17 Ronco: hoarse 18 Estertor: Noisy breathing 19 Type of alcoholic beverage 20 Trago: gulp 21 Damajuana: type of jug 22 Tragar: to gulp down, to swallow 23 Luster: gloss 24 Morcilla: type of sausage made with pork blood. 25 Ingle: groin 26 Atroz: atrocious, cruel 27 Caldear: to heat 28 Frente: forehead 29 Rueda: wheel (It refers to the wheel of the mill) 30 Palear: to paddle 31 Manos dormidas: numb hands 14 32 Trasponía: pasaba [la montaña] Reventar: to burst [at the seams] 34 Vientre: belly 35 Desbordar: to overflow 36 Disgustados: enojados 37 Atracar: to land 38 Arrastrar: to crawl 39 Prestar oído: to listen 40 Negar: to say no 41 Deriva: Drift 42 Hoya: hole 43 Encajonar: to box, to border 44 Lúgubre: gloomy 45 Borbollón: bubbles (like boiling water) 46 shiver 47 Asombro: astonishment 48 Se hallaba: Se encontraba 49 Rocío: morning dew (and your professor ha, ha) 50 Entenebrecida: darkened 51 Efluvio: wind; smell 52 Mile: honey 53 Girando: spinning 54 Remolino: whirlpool 55 Patron: boss 56 Respiración: breathing 57 Estirar: to stretch out 33