Los Sabios Consejos por la Gracia de Dios

Los Sabios Consejos
por la Gracia de Dios
Exodo 18
Rev. Eduardo Torres Martínez
Abril 27, 2014
Buenos Días Iglesia, por favor abran sus Biblia en Éxodo 18, si usted no tiene una Biblia,
nosotros podemos facilitar una que puede usted usar durante esta reunión, por favor
mantenga su mano en alto para que uno de nuestros ujieres se acerque a usted para
prestarle una Biblia, Muchas Gracias (si se están repartiendo Biblias esperar para
iniciar el sermón).
IGLESIA quiero introducir este mensaje con partes del devocional que D.A. CARSON
(el creador de este método de lectura diaria de la Biblia en dos años que estamos
usando):
Es cierto que Moisés pudo disfrutar muchos año en conversaciones con su suegro Jetro
en Madián, a donde Moisés se refugio en el segundo período de 40 años que vivió
antes de liberar a Israel de Egipto. Y por el ministerio sacerdotal de Jetro se imaginar
que aquellas charlas eran sobre Jehová, nuestro Dios. Pero ahora la situación es otra,
esta vez Moisés, con más de 80 años y la responsabilidad de un pueblo tan numeroso
como problemático sobre sus hombros, recibe la visita de Jetro:
• En primer lugar devolviéndole a su mujer Séfora y sus hijos Gersón y Eliezer, los
cuales Moisés los envió a la casa de su suegro en Madián por alguna razón
específica (Exo. 18:2).
• En segundo lugar, para expresarle su gran admiración por lo que Jehová había
hecho en el rescate de su pueblo de la esclavitud en Egipto. "Ahora sé que
JEHOVÁ es más grande que todos los demás dioses, porque Él le hizo esto a
los que habían tratado a Israel con arrogancia" (18: 11). Y ofreció sacrificios al
Dios vivo (18:12) en ese momento.
Todo este material se ofrece como telón de fondo de lo que ocurre en el resto del
capítulo. Jetro mira Moisés dentándose a escuchar todos los problemas de la gente,
llevarlos a Dios, y volver con respuestas. Largas colas o filas, largas jornadas . Un solo
hombre, un montón de gente, un montón de problemas. Es así cuando Jethro dice en el
versículo 17-18: " —No está bien lo que haces, pues te cansas tú y se cansa la gente
que está contigo. La tarea sobrepasa tus fuerzas, y tú solo no vas a poder realizarla.”
Lo que Dios nos está mostrando aquí es la actitud de un hombre integro espiritualmente,
que aunque no es del pueblo de Dios, disfruta de la Gracia Común que el Señor imparte
a todo hombre o mujer para darles la oportunidad de vivir bajo su voluntad.
La palabra “Gracia” por si sola hace referencia a los favores, regalos, bendiciones que
Dios da a quienes no lo merecen. “Común” hace referencia a que quienes reciben esta
gracia son todas las personas, sean creyentes o no. Así que, podríamos definir la gracia
común como la gracia de Dios, por medio de la cual Él da una gran cantidad de
bendiciones inmerecidas a todas Sus criaturas.
Wayne Grudem, (dicho sea de paso es el autor del libro que estudiamos en la siguiente
hora después de este culto) describiendo la gracia común, dice que millones de
personas “no mueren y van al infierno tan pronto como pecan, sino que continúan
viviendo por muchos años, disfrutando de innumerables bendiciones en este mundo”
(Teología Sistemática, p. 689). ¡Eso es gracia común de Dios!
Aunque la gracia común de Dios no significa otra gracia más de Dios, sino la misma
gracia de Dios manifestada en forma diferente; la gracia común de Dios se diferencia de
Su gracia salvadora en que no produce salvación en sus receptores, ni fluye
directamente de la obra de Jesucristo.
Hoy quiero compartir con ustedes dos actitudes en la vida de Jetro y la influencia que
tuvo en Moisés, el pueblo hebreo y nosotros la iglesia de Jesucristo y todo producido
por la Gracia Común.
La primera actitud de Jetro fue reconocer y adorar a Jehová como el libertador
Todopoderoso por la razón de la liberación de los judíos con Moisés al frente, y por eso
Jetro en primer lugar…:
•
Se presentó ante Dios para adorarle. (Exo. 18:9-12) lo primero que se destaca de
esta adoración es:
• La Alabanza: “Se alegró Jetro de todo... y dijo: ¡Bendito sea Jehovah, que os
libró de mano de los egipcios...” (vv. 9, 10).
o Bendecir significa más que una simple alabanza. El verbo indica arrodillarse
o postrarse ante el Señor (ver Gén. 24:48; Rut 4:14); indica reconocer con
gratitud el cuidado y la dirección divina (ver Deut. 8:10; Jue. 5:2).
o La alabanza en la adoración garantiza la presencia de Dios en nuestras
vidas.
•
•
En segundo lugar se destaca…
La Confesión: “Ahora reconozco que Jehovah es más grande que todos los
dioses...”(v. 11). Algunos comentaristas sostienen que Moisés llegó a conocer la
fe jehovista por medio de su contacto con Jetro y los madianitas (o queneos, ver
Jue. 1:16).
o Así que, para ellos, estas palabras de Jetro se interpretan como un
reconocimiento de que Jehovah era más grande aun de lo que había
pensado previamente.
o Otros consideran que la confesión significa su conversión a la fe jehovista.
Por lo menos, Jetro tuvo un entendimiento nuevo de Dios por el testimonio
de Moisés. Es posible que, como descendiente de Abram, este fuera el
momento en el que llegó a conocer a Dios como el Señor Jehovah. Su
reconocimiento de otros dioses refleja el concepto común entre la gente de
su época. No implica que los adoraba, ni quita el valor tremendo de la
entrega de su vida totalmente a Jehovah (ver Sal. 77:13; 86:8). El hecho de
ofrecer inmediatamente un sacrificio a Jehovah da fuerza a la interpretación
de la confesión como una de conversión a la fe jehovista.
o La confesión no es soplo declarar a Dios mis faltas; es también declarar su
omnipotencia, su gracia, su carácter, su salvación, es reconocer su señorío
sobre nosotros.
En tercer lugar Jetro lleva a cabo
El Sacrificio (v. 12): son dos partes del culto ofrecido: holocausto y sacrificios a
Dios. Jetro identificó su nueva fe jehovista con la revelación antigua de “elohim
(ver Gén.17:1–8 con Gén. 15:1–6)”; Por la fe, por creerle a Jehová, Él le tuvo por
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justo, así como lo hizo con Abraham, el secreto no es creer en Dios, es creerle a
Dios.
o El holocausto era una ofrenda totalmente quemada sobre el altar dedicado
a Dios.
o El sacrificio, (del cual hablo) en contraste, tenía dos partes;
§ una parte del animal se quemaba y
§ con la otra parte se hacía una comida sagrada o comunal que se
celebraba en la presencia de Dios, como un medio de establecer
comunión entre dos grupos (ver Gén. 31:54; Exo. 24:5, 11; Sal. 50:5).
o Aarón y los ancianos participaron (v. 12) en lo que evidentemente era una
comida de pacto, un pacto entre iguales. En la presencia de Dios, los dos
pueblos sellaron solemnemente sus relaciones amistosas (ver Jue. 1:16;
5:24–26; 1 Sam. 15:6; 30:29).
o El sacrificio hoy es permanente, no obedece a período de tiempo ni a un
espacio especial. El sacrificio en la adoración somos tu y yo; ya no un
sacrificio muerto sobre un altar donde se quema, sino un sacrificio vivo,
santo y agradable a Dios (Rom. 12:1-3).
•
Alabanza, Confesión y Sacrificio son aspectos importantes en la liturgia de
nuestros cultos.
Hoy quiero compartir con ustedes dos actitudes en la vida de Jetro y la influencia que
tuvo en Moisés, el pueblo hebreo y nosotros la iglesia de Jesucristo y todo producido
por la Gracia Común.
En la primera actitud de Jetro se presentaron tres reacciones con respecto a la
liberación de los judíos con Moisés al frente, alabanza, confesión y sacrificio
En la segunda actitud de Jetro aprendemos principios importantes
para la conducción de iglesia local
•
La Autoridad delegada (Cadena de Mando). La palabra delegar aquí se puede
traducir también como “confiada” (Leamos Éxodo 18:19-22).
o Centralizar la responsabilidad en una o pocas personas, aumentan las
dificultades porque la carga se concentra en esas pocas personas, y es lo que
por lo general acostumbramos.
o Moisés se estaba agotando. La carga de un gobierno centralizado era
demasiado pesada.
§ Necesitaba ayuda.
§ Estaba agotando al pueblo y enseñándoles una innecesaria dependencia
social.
o Jetro ofreció una solución: Descentralizar (explicar) el sistema e instruir a las
personas. Jetro le dice a su Yerno: “Oye bien el consejo que voy a darte, y que
Dios te ayude. Tú debes representar al pueblo ante Dios y presentarle los
problemas que ellos tienen. A ellos los debes instruir en las leyes y en las
enseñanzas de Dios, y darles a conocer la conducta que deben llevar y las
obligaciones que deben cumplir. Elige tú mismo entre el pueblo hombres
capaces y temerosos de Dios, que amen la verdad y aborrezcan las ganancias
mal habidas, y desígnalos jefes de mil, de cien, de cincuenta y de diez personas.
Serán ellos los que funjan como jueces de tiempo completo, atendiendo los
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casos sencillos, y los casos difíciles te los traerán a ti. Eso te aligerará la carga,
porque te ayudarán a llevarla.” (Exo. 1819-22)
El parásito de la burocracia (oficina, papeleo, trámites, normas) penetra todo tipo
de gobierno y aun en la iglesia de hoy. El dominio de los exclusivos (Élite) agota
a los líderes y laicos de la iglesia, a los políticos y a la ciudadanía, a los
ejecutivos y a los empleados por igual. Esto es especialmente cierto esta era del
“ministerio profesional” En el parking o estacionamiento de los edificios oficiales,
empresariales, de escuelas, universidades y de iglesias, hay sitios exclusivos
para los managers, gerentes, pastores, en fin para muchos o pocos del Staff.
La nómina de los equipos de trabajo en la mega-iglesia promedio puede ser
extenso.
Los seminarios ahora ofrecen títulos doctorales en “liderazgo organizacional” y
una nueva generación de ministros cristianos busca encontrar una posición
administrativa en la masiva empresa de la iglesia moderna.
Es en este instante, en que se pone mucho énfasis en el concepto de Jetro de la
autoridad delegada como el único remedio al modelo Mosaico.
Sin duda, la estructura de la línea de autoridad (explicar) de Jetro manejaba
mejor la inmensa población en movimiento del Israel transitorio. Sin embargo, la
mayoría de expertos del liderazgo pasan por alto el elemento fundamental del
principio de liderazgo de Jetro:
§ “Oye bien el consejo que voy a darte, y que Dios te ayude. Tú debes
representar al pueblo ante Dios y presentarle los problemas que ellos tienen.
20 A ellos los debes instruir en las leyes y en las enseñanzas de Dios, y
darles a conocer la conducta que deben llevar y las obligaciones que deben
cumplir…” (Éxodo 18:19-20).
Los versículos 18 y 19 están antes de la sugerencia de Jetro de designar una
multitud de líderes de división o distribución del liderazgo:
§ Primero, Moisés debía enseñarle al pueblo las ordenanzas y leyes de Dios
para que el pueblo pudiera entender el camino por debían andar y la obra
que debían de hacer. Esto era fundamental. La línea de autoridad de líderes
delegados no funcionaría sin un fundamento exhaustivo del pueblo en la ley
de Dios. Por lo tanto, Jetro no pone el énfasis en la estructura de los líderes;
más bien, primero se enfoca en el auto-gobierno del individuo bajo la ley de
Dios.
§ Segundo, una vez que el pueblo se fundamenta en la idea del auto-gobierno,
se puede establecer una cadena de mando sobre ellos. Sin embargo,
incluso éste era un papel limitado para el liderazgo. No se tenía como
propósito que los capitanes fuesen benefactores de un estado de
beneficencia en el desierto. Existían solamente para servir al pueblo en
asuntos de juicio: Ellos juzgarán al pueblo en todo tiempo; todo asunto grave
lo traerán a ti, y ellos juzgarán todo asunto pequeño. (Éxodo 18:22).
§ Esta red de líderes tenía el propósito de buscar y aplicar discernimiento en
los asuntos de la vida. Los líderes habían de juzgar todo asunto pequeño
mientras que Moisés debía juzgar todo asunto mayor. Sin embargo, lo que
puede ser más importante no se menciona pero se puede implicar con
seguridad: si Moisés y su línea de pastores iban a juzgar todo asunto grande
y pequeño, los asuntos “más pequeños” debían ser juzgados por los
individuos como tales.
Esta es la razón por la cual Moisés debía establecer al pueblo en la ley de Dios.
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Aprenderían por sí mismos el camino por el que Dios quería que
anduviesen y la obra que Dios esperaba que hicieran.
§ Entonces el pueblo haría juicios efectivos en los asuntos más pequeños de
la vida y sin visitar a sus supervisores por toda situación.
§ El efecto correspondiente se sentiría en la cadena de mando del mismo
Moisés.
Cuando la Palabra de Dios se aplica de manera apropiada, ello revela una
sabiduría espiritual, oculta, que no se encuentra en las mentes y corazones
del hombre pecador.
§ Esto es lo que hace la sabiduría de Dios tan atrayente. Llama la atención de
la gente mientras observan su operación al traer resolución y paz a los
conflictos sociales en la comunidad cristian. Desde muy temprano Dios le
dijo a Israel que al obedecer Su ley provocarían asombro a la vista de las
naciones: “Mirad, yo os he enseñado estatutos y decretos, como Jehová, mi
Dios, me mandó, para que hagáis así en medio de la tierra en la que vais a
entrar para tomar posesión de ella. Guardadlos, pues, y ponedlos por obra,
porque ellos son vuestra sabiduría y vuestra inteligencia ante los ojos de los
pueblos, los cuales oirán todos estos estatutos y dirán: “Ciertamente pueblo
sabio y entendido, nación grande es esta. Porque ¿qué nación grande hay
que tenga dioses tan cercanos a ellos como lo está Jehová, nuestro Dios, en
todo cuanto le pedimos? Y ¿qué nación grande hay que tenga estatutos y
juicios justos como es toda esta ley que yo pongo hoy delante de vosotros?
(Deut. 4:5-8)
§ Nosotros en la iglesia moderna hemos escogido la predicación del evangelio
como el único medio para el evangelismo del mundo. Ciertamente, el
evangelio es poder de Dios para salvación (Rom. 1:16). Sin embargo, las
naciones son escépticas, desconfiadas, indiferentes, apáticas a nuestro
mensaje debido a la manera contradictoria en que vivimos.
§ Predicamos un buen sermón pero vivimos vidas pobres.
§ Luchamos para manejar nuestras familias y nuestras finanzas. Pero
fracasamos por desconocer los principios de la mayordomía familiar.
§
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Conclusión: La verdadera responsabilidad
• La multiplicación de nuestros programas, cultos, servicios, actividades sociales y
religiosas, conciertos, etc. nos ha entretenido y no hemos aliviado el desarreglo que
todavía baña a la sociedad
• A pesar de todos los recursos gastados en las conferencias Cristianas sobre
liderazgo, el líder promedio todavía es incapaz de recitar de memoria los Diez
Mandamientos.
• Los pastores debemos crear una atmosfera de responsabilidad en nuestras
congregaciones que motiven a sus miembros a tener un gobierno descentralizado,
que amen la Palabra de Dios y hagan de ella su motivo de meditación todo el día
(Salmo 119:97).
• Con nuestro programa de “Explorando la Palabra de Dios” de lectura regular de la
Biblia cada día y la enseñanza de cada libro en la predicación del Domingo, Dios
nos ha provisto una tremenda fuente de sabiduría. Los pastores, los líderes y la
iglesia en general debiesen ser sabios en hacer uso de esta fuente de manera
regular.
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La educación de la iglesia comienza en el púlpito, y así como la sabiduría, de dada a
Jetro por medio de la “Gracia Común”, debía ser comunicada a través de los labios de
Moisés, la iglesia local debería enseñar a la gente con la misma sabiduría el concepto
de una vida adoración, con alabanza, confesión y sacrificio; el concepto de la autoridad
delegada y el concepto de la verdadera responsabilidad.
Se interesan por vosotros, pero no para vuestro bien, sino que quieren apartaros de
nosotros para que vosotros os intereséis por ellos.
(RV60 Gálatas 4:17)
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