Tribunal: Excma. Cámara 7ma. Nom. Civil y Comercial de la ciudad de Córdoba Autos: "ORDOÑEZ MALUF JUAN MANUEL C/ DIEGO MARTIN SOAJE Y OTRO -ACC. DE DESPOJO" SENTENCIA NUMERO: Ciento sesenta y tres. diciembre de dos mil tres, siendo las Córdoba a los nueve días del mes de 10:30 horas, se reúnen en acuerdo público los integrantes de la Excma. Cámara Séptima Civil y Comercial, Dres, Jorge Miguel Flores y Javier V. Daroqui, bajo la presidencia del primero de los nombrados y en presencia de la Secretaria autorizante, a los fines de dictar sentencia en los autos: "ORDOÑEZ MALUF JUAN MANUEL C/ DIEGO MARTIN SOAJE Y OTRO -ACC. DE DESPOJO", venidos en apelación del Juzgado de Primera Instancia y Segunda Nominación Civil y Comercial, en los que por Sentencia N° 154 con fecha uno de marzo de dos mil dos, se resolvió: "I) Rechazar el interdicto de despojo interpuesto por el Sr. Juan Manuel ORDOÑEZ MALUF en contra de Diego Martín SOAJE y Fernando Javier SOAJE, respecto del inmueble ubicado en la manzana N° 1 de la localidad de Villa Allende, el que consta de las siguientes medidas: 29,30 mts. de frente al Bvrd. Goycoechea; midiendo el contrafrente 41 mts.; el costado Oeste 62,30 mts; lindando con el lote N° 2 del Plano de la localidad de Villa Allende, y el costado Este 63,50 mts.- II) Costas a cargo del actor vencido.- III) Diferir la regulación de honorarios para cuando exista base económica cierta para ello. Protocolícese,...". Previa espera de ley el Tribunal se planteó las siguientes cuestiones a resolver: 1.- ¿Procede el recurso de apelación interpuesto?. 2.- En su caso, ¿Qué pronunciamiento corresponde dictar?. De acuerdo al sorteo de ley practicado el orden de emisión de los votos es el siguiente: Dres. Jorge Miguel Flores y Javier V. Daroqui.-----------------------------A LA PRIMERA CUESTION PLANTEADA:-------------------------------EL SR. VOCAL DR. JORGE MIGUEL FLORES DIJO:---------------------1.- Contra la sentencia de primera instancia que resolvió rechazar el interdicto de despojo deducido por el Sr. Juan Manuel Ordóñez Maluf en contra de Diego Martín Soaje y Fernando Javier Soaje, interpone recurso de apelación la parte actora.--A fs. 223/225 se agravia el apelante sosteniendo que el a quo encuadra la relación jurídico real que invoca el actor como posesoria, y no como mero tenedor o detentador material del inmueble que ha sido despojado de su relación jurídica real. Afirma que se ha omitido el tratamiento de la cuestión por él propuesta toda vez que se invocó un contacto material con el inmueble a título de tenedor, y el pronunciamiento se refirió a la posesión del mismo. Manifiesta que también se ha omitido la valoración de la prueba testimonial de los Sres. Julio y Silvia Caballero y de otros testigos de cuyos dichos surgiría -a su entender- el derecho que invoca. Asimismo solicita se modifique la imposición de costas.---------------------------------------- 2.- Es cierto que la acción de despojo protege el hecho actual de la posesión contra quien violentamente desposee al poseedor actual spoliatus ante omnia restituendus. Por eso se da al que tiene una posesión aun viciosa y al mero tenedor, sin necesidad de producir título alguno. Es más bien una disposición de orden público para prevenir el atentado de hacerse justicia por sí mismo con grave turbación de la paz pública. Por esa razón se ha dicho que los vocablos “poseedor” y “posesión de inmuebles” del texto del art. 2490 del C. Civ., en su antigua redacción, no deben ser interpretados en su sentido estricto, debiendo entenderse que la acción de despojo está destinada a proteger la integridad del corpus posesorio, con abstración del jus possesionis del despojado (Cfr. E.D. 31-4).----------------Ahora bien, quien intenta recobrar el corpus debe justificar haberlo tenido, dado que esa circunstancia referida al momento de la desposesión constituye el requisito indispensable para quien inicia la acción, careciendo de interés la prueba del origen de la posesión ya que la actividad probatoria en este proceso no puede traspasar esos límites. Es decir, no interesa la causa de la desposesión ni el derecho a la posesión o tenencia, ya que ello resulta ajeno a este proceso de carácter policial y sumario que no juzga ni esclarece las relaciones jurídicas que pudieran haber vinculado a las partes, las que deben ser materia de otro juicio.--------------------En ese lineamiento, observadas las constancias de autos, debemos acordar razón a la parte demandada cuando al contestar los agravios remite a diversos antecedentes que desmerecen o descalifican la prueba testimonial que el apelante intenta hacer valer para acreditar el hecho de la detentación material del inmueble. En ese sentido en los autos "SOAJE DIEGO MARTÍN C/ SILVIA N.A. CABALLERO - ORDINARIO" traídos ad effectum videndi, la Sra. Caballero con fecha 2 de octubre de 1.991 alude a su calidad de poseedora desde el año 1.981 respecto del inmueble en virtud del boleto de compraventa firmado con la madre de los hoy demandados Sres. Soaje; surgiendo también de esas actuaciones que éstos recuperaron la posesión a mérito del absoluto abandono que hiciera la Sra. Caballero del inmueble. Además resultan claras las afirmaciones de la demandada en dicha causa, respecto a la calidad de poseedora que revestía en relación al inmueble en forma pública y pacífica -como digo- desde el año 1981, posesión que, según afirma, le fue otorgada por la familia Soaje (v. fs. 103 vta.), habiendo nombrado administrador a su hermano Julio C. Caballero. Como bien reza la contestación de agravios, los hermanos Caballero en sus respectivas presentaciones no hacen alusión a la detentación de la cosa por el Sr. Ordóñez Maluf, lo cual resulta contradictorio con el testimonio rendido en el presente (fs. 80vta.). Puede observarse también que posteriormente la Sra. Caballero cedió a su hermano todos los derechos y acciones sobre el inmueble (v. copia de escritura de fs. 118), en virtud de la cual éste inició en contra de los Sres. Soaje una acción a los fines de recuperar la posesión, sin denunciar la tenencia del apelante respecto del inmueble. Por el contrario, las acciones de los hermanos Caballero tienden a lograr el recupero de la posesión para ellos, en virtud del derecho que emerge del boleto de compraventa suscripto con la Sra. de Soaje y que diera motivo a la acción de nulidad iniciada por los hijos de ésta en el Juzgado de 18° Civil y Comercial. Todas estas circunstancias constituyen elementos objetivos que resultan contradictorios con los testimonios brindados por los hermanos Caballero en el sublite, lo cual le quita todo valor convictivo a esas declaraciones, contradichas por los propios testigos en aquellos antecedentes. Por otro lado, lapidario para el demandante apelante, resulta la constatación notarial efectuada en los últimos días del mes de agosto del año mil novecientos noventa y uno a través de la cual se deja constancia del estado de abandono y suciedad del inmueble, la presencia de escombros abundantes en todos los ambientes, cables sueltos, revoques caídos, humedades en los techos, restos de sanitarios y escombros en el jardín (ver. fs. 95/96 de la acción de nulidad). Situación que, en otras palabras, demuestra la ausencia del hecho material de la tenencia, presupuesto indispensable para el ejercicio de la acción; lo cual, por otro lado, refuerza la debilidad de la prueba testimonial. Cabe añadir, que la declaración de los testigos debe ser valorada a la luz de la sana crítica, atendiendo a todas las demás circunstancias que el proceso brinda y que sirven para corroborar o disminuir la fuerza de las declaraciones. En esa tarea de verificación el juzgador puede inclinarse por la prueba que le merece mayor fe, en concordancia con los otros elementos de mérito que obren en el expediente, siendo ello en definitiva, una facultad privativa del magistrado. Y si bien es cierto que la prueba testifical muchas veces es importante cuando se trata de acreditar hechos materiales, también se ha exigido con justificada desconfianza, que los testigos sean completados y corroborados por elementos de juicio objetivos e independientes, circunstancias que en los presentes no solo no se aprecia, sino que ha sido desmentida por constancias objetivas indiscutibles.---------------------------Por esas razones voto en sentido negativo a la primera cuestión planteada.---------------A LA PRIMERA CUESTION PLANTEADA:-------------------------------EL SR. VOCAL DR. JAVIER V. DAROQUI DIJO:-----------------------Adhiero a los fundamentos y conclusiones arribados por el Sr. Vocal preopinante, votando en consecuencia en idéntico sentido.-------------------------------------------------------A LA SEGUNDA CUESTION PLANTEADA:-------------------------------EL SR. VOCAL DR. JORGE MIGUEL FLORES DIJO:---------------------Corresponde: 1.- Rechazar el recurso de apelación interpuesto por el actor, con costas.--------------------------2.- Fijar los honorarios de los Dres. Fernando de la Torre y Gustavo de Castro en el 38% y 32% de lo que se determine en forma definitiva para la instancia anterior (sin perjuicio del mínimo legal en su caso).--------------------------------------A LA SEGUNDA CUESTION PLANTEADA:-------------------------------EL SR. VOCAL DR. JAVIER V. DAROQUI DIJO:-----------------------Adhiero a los fundamentos y conclusiones arribados por el Sr. Vocal preopinante, votando en consecuencia en idéntico sentido.-------------------------------------------------------Por el resultado de la votación que antecede y por unanimidad del Tribunal; atento el voto coincidente de los Dres. Jorge Miguel Flores y Javier V. Daroqui (art. 382 del C.P.C., texto reformado por ley 9129) y constancias de fs. 232,......... SE RESUELVE:---------------------------------------------------1.- Rechazar el recurso de apelación interpuesto por el actor, con costas.--------------------------------------------2.- Fijar los honorarios de los Dres. Fernando de la Torre y Gustavo de Castro en el 38% y 32% de lo que se determine en forma definitiva para la instancia anterior (sin perjuicio del mínimo legal en su caso).--------------------------------------Protocolícese y Bajen. Con lo que terminó el acto que previa lectura y ratificación firman los Sres. Vocales.---------