NUEVA INSCRIPCIÓN ROMANA DE CÓRDOBA. 551 III. NUEVA INSCRIPCIÓN ROMANA DE CABRA, EN LA PROVINCIA DE CÓRDOBA. D. Rafael Rodríguez de Arellano, en carta del 8 del corriente, notifica que en Cabra, y en el paraje llamado Ollas Casas, propiedad de D. Joaquín García Valdecasas, distante tres kilómetros de la población, se ha descubierto una cipo sepulcral del siglo II, que mide 0,63 m. de alto por 0,43 de ancho y o, 18 de espesor, cuya impronta acompaña, y en la que leo lo siguiente: D • M * S Nl.PERPERNAS'M • F HVSC^'VS-l&ASR ANN'LXXII'PIVS IN-SVIS-H-S-E-S'T-T'L D(is) M(anibus) s(acrum). M(arcus) Perperuas M(arci) f(ilius) Ihuscianus Igabr(ensis) ann(orwn) LXXfl, pius in suis, h(ic) s(itus) e(st). S(il) i(ib¿) ¿(erra) l(evis). , Consagrado á los dioses Manes. Marco Perperna Thusciano, hijo de Marco, natural de Cabra, de edad de 72 años, piadoso para con los suyos, .aquí yace. Séate la tierra ligera. Hübner ha reseñado diez y nueve lápidas romanas (1610-1628) halladas en la villa de Cabra, capital de partido judicial en la provincia de Córdoba. Cuatro lápidas (1610, 1611, 1615, i ó l ó ) atestiguan que el nombre geográfico de la pobiación fué Igabrmn municipium Flavium; dictado éste, ó sobrenombre, que debió á la munificencia del emperador Vespasiano. Durante las épocas visigótica y musulmana fué ciudad episcopal (i), que ilustran una l e y de Sisebuto consignada en el Fuero-juzgo (2) varios trientes (1) Flórez: España Sagrada, t. xn, pags. 1-42, Madrid, 1754. (2) Libro XII, tit. 2, ley 13. IJ52 BOLETÍN DE LA REAL ACADEMIA DE LA HISTORIA. de oro (i) y cinco inscripciones del siglo vn (2). Sobre dos de ellas, por ser insignes, entablé discusión cronológica (3). Parecido por su forma al de Igabrum es el nombre de Ipagrum (Aguilar de la Frontera), que ha dado margen á notables equivocaciones. Tal es la de Flórez, que traslada á Cabra la silla episcopal [I]pegrense> mencionada en el concilio de Iliberis (4)y siendo así que la iglesia de Igabrum solo estuvo representada en este concilio por el presbítero Victorino. Las dos localidades se distinguen cuidadosamente, así en la referida ley del Fuero-JuzgO' como en un concilio de Córdoba del ano 839 (5). La forma del nombre en los geógrafos árabes es ¿" J . La antigüedad de la población y su nombre primitivo Licabrum, tal vez derivado d e Ilicabrum, se infiere de un texto de Tito Livio. El cual, sobre el año 192 antes de la era cristiana, expone (ó) cómo el pretor Cayo Flaminio se apoderó de esta opulenta ciudad y plaza fuerte y cogió vivo á su régulo Corcibilón: «Nam et C. Flaminius oppidum Licabrum, munitum opulentumque, vineis expugnavit et nobilem regulum Corcibilonem vivum cepit.» Al procónsul Marco Fulvio no fué menos favorable la suerte en la España Citerior, porque penetrando por Sierra Morena en la cuenca del alto Guadiana y Tajo, no paró hasta poner asedio á Toledo y enseñorearse de ella, después de haber derrotado un grueso ejército de los Vettones ó ribereños del Tajo y del Guadiana,, que habían acudido para obligarle á levantar el sitio. La nueva inscripción de Cabra, cuya impronta nos ha enviado el Sr. Ramírez de Arellano, merece singular estimación por varias razones. I , a Es geográfica, y confirma la lectura de Igabrum por otras cuatro lápidas ya conocidas. 2. a Aumenta el número escasísimo de lápidas españolas don- (1) (2) (3) (4) (5) (6) Campaner: Indicador manual de la Numismática española, pág. 198» Hübner: Inscript Hisp, christ., núms. 100-104. BOLETÍN, tomo xxi, págs. 18 y 19; xxvm, 413-416. España Sagrada, tomo XII, pág. 21. España Sagrada, tomo xv. Libro xxxv, 22. NUEVA INSCRIPCIÓN ROMANA DE CÓRDOBA. 553 de sale el nombre del célebre general romano, traidor á Sertorio y su asesino. Sale este nombre tres veces en Tarragona (4301, 4302, 6130) y una en Torre de Don Jimeno, partido judicial de Martos en la provincia de Jaén (1709). Mas en la inscripción presente, el nombre latino Perperna se reviste de la forma griega lít^í^ac,, que aparece en los textos de Estrabón y Plutarco, donde hablan éste del asesino de Sertorio y aquél de Marco Perperna que en el año 130 antes de Jesucristo se distinguió por sus hazañas en el Asia Menor, acabando con la r e b e lión de Arimino. 3. a Notable es finalmente el cognombre Thuscianus, que sale ahora por vez primera, y se deriva de otro geográfico, bien así como el de Gallicanus y que tomó otro Marco Perperna en la referida lápida de Torre de Don Jimeno. Conocíamos los cognombres Tuscinus en Lucena (1468) y Fuscianus en Mérida y en Elchecico cerca de Cehegín ( 5 6 1 , 3$68), Tuscillianus, Tuscillus y Tuscinus. Mas en esta lápida la primera consonante se aspira, convirtiéndose en tk7 no de otra manera que por igual concepto acontece en diferentes localidades, leyéndose por ejemplo Calethyce (1094), Euthycia, (4602) 1 Thyce (1740), Phyrrice (2138), y confirmándose la lectura definitiva de Thusca} que propuse y demostré para una lápida de Montánchez (i). No deben parecer inútiles, ni de poca monta, esas observaciones para el estudio histórico del romance castellano y de las demás lenguas ó idiomas neo-latinos. La obra que el diligente Mr. Carnoy acaba de sacar á luz, titulándola Le latin d'Espagne d'apres les inscriptions, manifiesta q u e , si bien es tenue semejante labor, no carece de gloria ni de provecho considerable para el adelanto de los estudios históricos. Madrid, 11 de Marzo de 1904. FIDEL FITA. (I) BOLETÍN, tomo .xxxvni, págs. 451> 497-