Control Por Javier Rubio javier.rubio@bticino.com F ue en 1920 que se inician en el mundo las transmisiones de radio de forma regular. Desde ese día el radio se convirtió en un miembro más de la familia. En el norte de México, por decir un ejemplo, el beisbol es sinónimo de radio, la gente va a los estadios a escuchar la narración del radio mientras ve el juego en vivo, en ese caso se puede decir que es el radio el padre que lleva a sus hijos al estadio: los aficionados. Primero fue muy fácil para el radio y después para la televisión colarse en nuestra casa, hacer las veces de niñera o de educadora: el radio y la televisión están en la cocina, tienen su propio cuarto y son un gasto totalmente asumido en todos los hogares modernos, estos dos miembros de facto del hogar moderno han probado su valor. Si hacemos un estudio del radio y la televisión respecto al tiempo, encontraremos que es muy fácil convivir con estos dos aparatos. Por ejemplo mi abuelo Don Jesús de77 años sintonizaba la Serie Mundial cada otoño y la Serie del Caribe siempre que había transmisión, lo mismo que mi sobrina de 3 años que sabía sintonizar Johnny Bravo en la televisión sin ayuda de nadie, esa es la más grande prueba de cómo estos dos aparatos son una parte de nuestra casa como otro miembro regular, son universales y cierran la brecha generacional. El nuevo miembro de la familia ¿La electrónica a la medida cumple con estos requisitos? Existen los dos lados de la moneda. Por un lado, tristemente me he encontrado con casas habitadas por adultos mayores donde tienen miedo de ir al baño de noche porque no saben que botón tocar en la pantalla táctil para encender la luz, personas que han tenido una vida llena de éxito personal y económico y se ven en sus últimos años rodeados de pantallas y dispositivos móviles que en lugar de hacer su vida más fácil, le agregan un componente con el que es casi imposible convivir; este es el lado más oscuro de la tecnología, cuando se integran todos los sistemas desde la iluminación, hasta el video, pasando por el riego, el control de accesos, alarma e incluso la bañera. Pero de ésta integración se deja fuera al ser humano, al usuario que se ve prisionero en su casa o que termina por sepultar los equipos porque nunca dieron el servicio que se esperaba de ellos, esta parte oscura de la industria es real y más común de lo que quisiéramos. 12 EL NUEVO MIEMBRO DE LA FAMILIA Por otro lado, he visto trabajos ejecutados de una forma totalmente pensada en el usuario final, integradas al cien por cien con los habitantes de la casa, t ra b aj o s d e di c a d o s a la comodidad d o n d e to d o s e n la casa entienden el Bticino funcionamiento y donde el sentido común es la ley; un sensor de ocupación en el baño y otro más en el pasillo, que se activan sólo cuando está oscuro y sólo trabajan sobre una luz indirecta, no solo son una ayuda para evitar accidentes si no que son un aliado en la convivencia. Equipos de audiofilia que pone en los oídos del dueño, lo mejor de Wagner o de U2 con una fidelidad como si se estuviera en una sala de conciertos o directamente en Wembley. Este trabajo ejecutado de una forma complicada para el integrador e intuitiva para el cliente final, ayuda a transformar en el nuevo miembro de la familia a la electrónica a la medida, entonces, cuando la hija se muda lo que primero echa de menos es la conveniencia de su antigua casa, más que la sazón de su mamá o el carro de su papá. Lo interesante es que en los dos lados de la moneda se usa el mismo presupuesto, la diferencia entre un sistema que te hace sentir como en casa y otro que se vuelve tu carcelero es la programación, el diseño, la experiencia del integrador, el cuidado por el detalle, y la facilidad de personalización del sistema entero, siendo el presupuesto el mismo; un sistema es una ayuda enorme y el otro, un lastre. Existe otro caso más, uno también muy interesante, donde se invierte una cantidad de dinero en un sistema y al cabo de un par de años el sistema nunca se integró con la familia llenando de parches el cuarto eléctrico y de apagadores para sobre escribir la programación a un lado de la touch screen para controlar la luz de ese habitación. ¿Por qué? Porque la familia cansada de batallar con los menús interminables y las opciones inútiles, decidió que era imposible adoptar ese miembro como uno más de la familia, esa gente se vacuna contra la tecnología, esas personas van a ir por el mundo pensando y hablando mal de una buena tecnología. www republicmortage com.tif En su próximo proyecto no van a querer ni un atenuador, un apagador si acaso y la seguridad de tener el control de todo, la electrónica a la medida se vuelve ese pariente incómodo que se debe esconder en el sótano, el hermano malito que mejor no se presenta en sociedad, se margina la tecnología porque la tecnología nos marginó a nosotros con sus menús y opciones que estaban pensadas en el sistema y no en el usuario. En este caso se puede decir que el sistema cosecho lo que sembró: marginación. Como dice el filósofo francés Jean-Paul Sartre, uno es un ser arrojado a la acción, y en este arrojo cada vez mas tenemos que convivir con la tecnología como la adoptamos, como la ponemos de nuestro lado, como la integramos a nuestra vida y como la tecnología misma nos integra a su lógica muchas veces fría, esa es la clave del éxito de la integración más complicada de todas: la integración del hombre y la máquina; siguiendo con Sartre: “La libertad es lo que haces con lo que te han hecho”. Podemos re-escribir -a modo de parafraseo- esta genial sentencia así: “La tecnología es lo que haces con lo que te instalan”. Javier Rubio Business & Knowledge Developer Latino América de Bticino; cuenta 10 años de experiencia en la industria de electrónica automotriz y de consumo, además de que ha laborado en 3 continentes y más de 15 países. EL NUEVO MIEMBRO DE LA FAMILIA 13