Herta Müller, premio Nobel de Literatura 2009 Quién conoce a Gao Xingian (2000) a V.S. Naipaul (2001) a Imre Kertész ( 2002) a John Maxwell Coetzee (2003) a Elfiriede Jelinek (2004) a Harald Pinter (2005)a Orlan Pamuk (2006) a Doris Lessing (2007) o a Jean – Marie Le Clézio (2008). Pues amigos estos fueron los Nobel de Literatura en los últimos 10 años a los que hay que añadir ahora Herta Müller. Desde que en 1958 recayera en Boris Paternak, en el último medio siglo, el Premio Nobel ha ido a parar en 15 ocasiones a escritores originarios de la Europa Central y Oriental, que en muchos casos comparten una historia de extrañamiento, exilio o disidencia. Los premios Nobel de Literatura acaso expresan la vindicación por parte de la Academia Sueca de una Europa Central y Oriental especialmente azotada por el nazismo y separada del resto del continente, tras la victoria del comunismo, por un nada metafórico ¨Telón de Acero¨ (frase de Churchill). En el caso de Herta Müller, es la combinación de ambos totalitarismos lo que explica su circunstancia vital, que no deja de ser un exponente de lo sucedido con las minorías alemanas del Este en el tránsito del nacionalsocialismo al comunismo. En su política expansionista Hitler utilizó a los alemanes de diversos Estados de la Europa Central. En Rumanía los germanohablantes de pronto se convirtieron en ¨Volksdeutsche¨. Aunque los suabos instalados en la región del Banato en el siglo XVIII y los sajones que habitaban Transilvania desde el XII tuvieran experiencias históricas y hábitos diferentes todos servía, primero para aclamar a Hitler y después para enrolarse en el Ejército alemán en la campaña contra la URSS, como fue el caso del padre de Herta Müller. Cuando las tornas de la Segunda Guerra Mundial cambiaron, los alemanes del Este pasaron de beneficiarios a víctimas. 1 La irrupción del Ejército Rojo en Europa central y oriental causó la huída de muchos alemanes, una huída que en el caso de Checoslovaquia y Polonia anticipaba un proceso de limpieza étnica. En el caso de Rumanía las cosas fueron sólo ligeramente distintas. A pesar de que los ocupantes soviéticos deportaron a miles de alemanes a campos de trabajo de la URSS (Precisamente de este tema trata el libro más actual de Müller ¨Atemschaukel¨ publicado en el 2009 , donde por primera vez no narra vivencias personales) y de que posteriormente las autoridades comunistas rumanas hicieron lo propio con otras deportaciones de alemanes a las estepas del sureste del país, no hubo un proceso de expulsión masiva como en Polonia o Checoslovaquia. Pero los comunistas minaron las bases socioeconómicas de la minoría alemana. Los alemanes que llegaron a Rumanía por las promesas de tierras, no encajaban en un mundo de granjas colectivas y de industrialización a marchas forzadas. Todo ello motivó un inexorable proceso de disolución de la minoría alemana, que tuvo entre sus penúltimo jalones la emigración a Alemania, concretamente Berlin de Herta Müller en 1987. ( Cita en parte recogida por el escrito por Albert Branchadell en El País del 27.11.2009) Per vayamos con Herta, ella nació el 17 de agosto de 1953 en Nitzkydorf, Banat un lugar germanohablante de la región de Timisoara, hija de unos granjeros suabos. Su padre sirvió, tal como comentado, durante la II Guerra Mundial en la SS y su madre al finalizar la guerra fue deportada a la Unión Soviética y pasó cinco años en un campo de trabajo en Ucrania. Herta estudió filología germánica y rumana en la Universidad de Timisoara entre 1973 y 1976. Durante el estudio formó parte del ¨Aktionsgruppe Banat¨ una tertulia de escritores idealistas rumano-alemanes. Trabajó como traductora técnica entre 1977 y 1979 en una fábrica de maquinaria, pero fue despedida en 1979 por no cooperar con la Securitate Statului. Siendo acosada y amenazada de muerte en varias ocasiones por esta institución. 2 Su primer libro ¨Niederungen¨ (En Tierras Bajas) fue publicado en 1982 en Rumanía, en versión censurada, pero más tarde fue publicado en Alemania. En 1984 publicó ¨Drückender Tango¨ un libro muy crítico con la corrupción, intolerancia y la opresión del régimen de Nicolae Ceausescu, a causa de este libro se le prohibió seguir publicando en su país, aunque sus libros eran traducidos y muy comentados en Alemania y Austria. En 1987 por fin consiguió el visado de salida para Alemania hacia donde se trasladó con el entonces su marido Richard Wagner, fijado su residencia en Berlin. En 27 años ha publicado 18 libros de todos los géneros traducidos a más de 20 lenguas pero alcanzando sólo en total unos 200.000 ejemplares. Herta destaca por sus relatos acerca de las duras condiciones de vida en Rumanía bajo el régimen comunista,, pero su tema principal es cómo una dictadura deteriora y rompe toda forma de relación humana. Casi todas sus obras hablan de su propia experiencia y como ejemplo valga ¨El Hombre es un Gran Faisán en el Mundo¨ Una de las pocas obras traducidas al castellano, donde relata la desintegración de una comunidad germánica en la Rumanía rural, dentro de una atmósfera opresiva de insólita crudeza y las dificultades para conseguir un visado hacia Alemania. Algo con lo cual ella soñaba hasta conseguirlo. En vez del ¨realismo mágico¨ marquesiano, podríamos hablar de un ¨realismo trágico¨ Su prosa es también extraña: ¨…El periódico cruje. El guardián nocturno dice: ¨Tengo el estómago vacío¨ Saca un poco de pan y tocino. El cuchillo refulge en su mano. Empieza a masticar. Con el filo se rasca la muñeca. El guardián nocturno dice en voz baja y mascando ¨El hombre es un gran faisán en el mundo…¨ En su última publicación ¨Atemschaukel¨ (Respiración y Columpio) por primera vez no escribe sobre sus propias vivencias, sino que nos cuenta las tristes experiencias experiencia de un joven. 3 Detrás de él está la figura del escritor Oskar Pastior, que a los 17 años fue deportado a un campo de trabajo forzados en Ucrania, que fue un verdadero infierno. Este libro que se publicó coincidiendo más o menos con la concesión del Nobel estuvo en la lista de Bestseller del ¨Der Spiegel¨ sólo una semana actualmente está en quinto lugar. (Cada semana pierde un puesto) En fin he leído de Herta Müller un libro y medio para esta charla y francamente, aunque no soy un crítico literario no recomiendo a nadie la lectura de los libros de la Sra Müller Son inteligibles, tristes, depresivos y sólo conducen al estado traumático de su autora. 4