30 LATERCERA Domingo 24 de julio de 2016 Mundo RR Un grupo de personas deposita ayer flores frente al centro comercial Olympia donde se produjo el viernes el tiroteo, en Munich. FOTO: REUTERS Policía no halla nexos terroristas y cree que ataque de Munich fue acto de locura R Los vecinos identificaron al joven atacante como Ali Sonboly. Aunque era de origen iraní, nació y vivió siempre en Alemania. R En su pieza se encontraron recortes de noticias de matanzas, como la ocurrida hace cinco años en Noruega que dejó 77 muertos. ocho eran menores de 21 años. El atacante se suicidó con su pistola frente a la policía. EN NUMEROS Pedro Schwarze Ningún rastro de vínculos con el grupo “Estado Islámico” ni con nada que suene a yihadismo. El atacante de Munich, que la tarde del viernes aterrorizó a esa ciudad alemana, mató a nueve personas e hirió a 27 antes de suicidarse, estaba más bien obsesionado con la violencia y las matanzas, según la investigación de la Policía y la fiscalía alemanas. El joven de 18 años nacido en Munich y que vivió toda su vida en esa ciudad, era de origen iraní. Aunque hasta ayer las autoridades no lo habían identificado, los vecinos aseguraron que se trataba del estudiante Ali Sonboly. Algunas fuentes lo nombraron como David Ali Sonboly o Ali David Sonboly. Tras levantarse la alerta antiterrorista impuesta tras el tiroteo del viernes en la capital de Baviera, la Policía seguía investigando qué llevó al joven a empuñar una pistola y disparar afuera de un restaurante de comida rápida y en un centro comercial. De las nueve víctimas mortales, ocho tenía menos de 21 años: tres tenían 14, dos 15, y los otros tenían 17, 19, 20 y 45 años. Además, tres eran mujeres y R De las nueve víctimas mortales, 14 años tenían tres de los muertos en el tiroteo. Dos tenían 15, y los otros 17, 19, 20 y 45 años. 27 personas resultaron heridas, 10 de las cuales, graves. 300 balas en cargadores sin usar tenía el atacante en su mochila. RR Naim Zabergja muestra la foto de su hijo Dijamant, asesinado el viernes. FOTO: EFE todos vivían en el área de Munich. Entre los fallecidos había tres turcos, tres kosovares y un griego. Según la fiscalía, el atacante se encontraba en tratamiento psiquiátrico -presuntamente había sufrido trastornos depresivos- y el ministro de Interior bávaro, Joachim Hermann, aseguró que hay indicios de que sufría “una perturbación psíquica nada leve”. Por su parte el jefe de la Policía de Munich, Hubertus Andrä, explicó que se registró la pieza del joven, en la casa donde vivía con sus padres, y no se halló ningún indicio que lo relacionara con el Estado Islámico ni tampoco algo que apunte a motivaciones políticas o religiosas. Lo que sí se encontró fueron recortes de noticias sobre grandes operaciones policiales y libros sobre actos de violencia y matanzas. El ministro de Interior, Thomas de Maizière, confirmó que encontraron documentos sobre Anders Behring Breivik, que asesinó a 77 personas en Noruega, una matanza de la que justo el viernes se cumplieron cinco años. También había información sobre Tim Kretschmer, un joven de 17 años que en 2009 mató a quince personas en su antiguo colegio de Winnenden (Alemania) y luego se suicidó. Por todo esto la policía consideraba, según la agencia EFE, que se trataba de un caso clásico de “amok”, una palabra de uso corriente en alemán y que el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española la define como: “Entre los malayos, ataque de locura homicida”. De esta forma se asegura que el joven, sin antecedentes penales, actuó solo. Incluso se estaba investigando si habría pi- rateado una cuenta de Facebook de otra persona para invitar a algunos conocidos al McDonalds donde inició su ataque. Según el relato policial, tras el tiroteo el joven se suicidó con su pistola, una nueve milímetros con la numeración borrada, y en su mochila tenía aún cargadores con unas 300 balas. Según la versión entregada ayer, el atacante se suicidó de un disparo en la cabeza ante la policía. Una patrulla logró dar con joven unas dos horas y media después de haber protagonizado el tiroteo, tras lo cual fue interpelado por los agentes. Pero él sacó su pistola, apuntó a su cabeza y disparó. Anteriormente agentes de civil habían disparado ya contra el agresor, en el estacionamiento del centro comercial, pero había resultado ileso y logrado huir. Tras presidir en Berlín el gabinete de seguridad, con los principales ministros del gobierno y la cúpula de las fuerzas de seguridad, la canciller Angela Merkel garantizó que el Estado seguirán haciendo todo lo posible para proteger “la seguridad y la libertad de todas las personas”.b