Gaceta B U SI N E S S 6 . 0 0 0 k i l ó m et r o s v i s i ta n d o ó pt ic as En un mercado… con mucha competencia D espués de visitar unas cuantos establecimientos de óptica en Francia viajé a Inglaterra. Como puedes imaginar, lo que iba buscando de dichos establecimientos no era el merchandising, sino la parte clínica de nuestra profesión. Como sabes, en Reino Unido existe un gran nivel profesional, pero en España también y no es necesario cruzar el Canal de la Mancha para tener contacto con la optometría de primera fila. Sin embargo, sí me parecía interesante ver cómo integran un alto desarrollo generalizado de la optometría clínica con la parte comercial. Allí visité varios centros de óptica, pero disfruté observando otros sectores de los que también podemos aprender. Este artículo me gustaría dedicarlo a un tema del que todos oímos hablar mucho y que no afecta sólo a nuestro sector sino a la mayoría: el alto nivel de competencia y la dificultad para atraer nuevos clientes. Si quieres leer más sobre los establecimientos de óptica que estuve visitando puedes descargar el diario del viaje de nuestra página web. Una de las zonas interesantes que visité fueron las calles del sur de Londres. Allí hay innumerables comercios compitiendo por captar nuevos clientes. Los locales comerciales pueden optar por varias vías para atraer clientes. Colocarlos cerca de casa de los clientes potenciales es una; a través del surtido es otra, ampliándolo u ofreciendo uno diferente al de la competencia. Por supuesto, los centros de óptica pueden también diferenciarse en los servicios. Una tercera estrategia es atraer a los clientes a través de la experiencia. Esto se consigue modi- nº 494 54 JULIO/AGOSTO 2014 Jesús Alonso Graduado en Óptica y Optometría, Máster en Ciencias y Máster en Dirección y Administración de Empresas. Ha desarrollado gran parte de su carrera profesional como director y consultor de Marketing & Business Tools, consultora especializada en el sector óptico. Actualmente también dirige el proyecto VENDER ES COOL cuya misión es formar comercialmente a profesionales de sectores sanitarios, pero muy especialmente a los ópticos-optometristas y auxiliares de óptica. E-mail: j.alonso@venderescool.com http://venderescool.com ficando el servicio. Aquí el abanico de opciones es muy amplio y da para todos los gustos. Por ejemplo, un bar puede crear una mejor experiencia a la hora de tomar la “cañita del mediodía” de varias formas: podría servirla en una copa helada, o junto a una tapita insuperable, o servida por un camarero que es un forofo de tu equipo de fútbol. Supongo que no te resulta difícil encontrar ejemplos en el sector óptico. El precio bajo es otra forma de diferenciarse. En quinto lugar, el atractivo de un comercio se puede conseguir a través de una historia. Ya te he contado algo sobre Story Telling en artículos anteriores. Por ejemplo, hay muchos restaurantes italianos que están muy bien, pero si uno de ellos contara a sus clientes que traen la pasta desde una fábrica artesanal de un pueblo cercano a Nápoles, le daría un atractivo especial. Sin duda el merchandising no es uno de los puntos fuertes de estos pequeños comercios del sur de Londres, pero estoy convencido de que, buscando un poco, podría encontrar buenos ejemplos de estrategias basadas en la experiencia y en las historias mezclados con tiendas a precios imbatibles. ¿Cuál es tu estrategia para captar clientes? Uno de los caprichos que tenía programado para realizar durante mi visita a Londres era visitar Denmark Street, una calle especializada en la venta de instrumentos musicales, especialmente guitarras eléctricas. Como imaginarás la música se encuentra entre mis aficiones. Este tipo de calles siempre me han resultado atractivas. Son como las zonas de tapeo. No hay que llamar a los clientes, van solos, pero los locales tienen que dar lo mejor de sí para atraerlos. En este tipo de calles sí que hay competencia. Tocar un instrumento musical puede dar muchas satisfacciones en la vida y en los momentos bajos puede resultar uno de los mejores refugios. Probablemente por eso, se les coge tanto cariño. Además, las guitarras eléctricas utilizan la madera como principal material y esto hace que, incluso tratándose del mismo fabricante y modelo, cada una sea diferente ya que cada trozo de madera es único. Cada guitarra tiene un sonido especial que la imaginación de cada guitarrista lo convierte en algo más especial aún. Te cuento esto para que comprendas mejor qué tipo de productos se venden en esta calle. No son productos que quieres utilizar hasta que estén viejos y después cambiarles por otros cuando te aburras. Son productos que quieres que se queden contigo para siempre y que un día hereden tus hijos. Tenía curiosidad por ver cuanto de merchandising cabe en este tipo de negocios y cómo eran capaces de atraer clientes alrededor de tanta competencia. Al entrar en la primera tienda encontré un desorden absoluto. Las guitarras estaban amontonadas por las paredes y en el suelo formando un laberinto incomprensible. Varios clientes estaban sentados en taburetes tocando guitarras que cogían de aquí y de allá. Era como probarse gafas, pero con guitarras. Estaba claro que su estrategia de atracción era el surtido. Me dirigí al vendedor y señalando a uno de los clientes que tenía una preciosa guitarra en la mano le dije que yo tenía una igual. Él me respondió con un sencillo: “nice sound”. Me quedé un rato escuchándole y el vendedor se dirigió a mi nuevamente. > Prueba la que quieras. >No, gracias. Si cojo una puede que me guste. > Eso es lo que pretendo. >Viajo en moto y no tengo sitio para llevarla. >Te la podemos enviar por correo a donde quieras. Bromeé diciendo que había gastado todo mi dinero en el viaje y se rió. A buen entendedor... Muchas veces los clientes necesitan “calentarse” para comprar los productos. En el caso de las guitarras se consigue tocando y mirando, en el caso de las monturas probándolas. Con mucha frecuencia me cuesta convencer a algunos vendedores de que deben dejar que los clientes jugueteen con el producto. Ir antes de tiempo, con el consabido ¿Le puedo ayudar?, muchas veces sólo consigue incomodar a los clientes enviándoles un mensaje como el siguiente: Aquí estamos para vender, si no vas a comprar, ¿para qué entras? ¿Olvidan que clientes probando productos atraen a otros clientes? ¿Te imaginas probar una guitarra en una tienda de guitarras en la que nadie toca ninguna? No es tan fácil como si ya hubiera gente tocándolas. ¿Te imaginas entrar a probarte gafas a un establecimiento de óptica en la que no hay ni un solo cliente nº 494 53 JULIO/Agosto 2014 Gaceta B U SI N E S S o por el contrario no favoreces su entrada? Si tu respuesta es la segunda, deberías replantearte este asunto. Otra tienda de la misma calle había optado por la estrategia de la experiencia y había decorado la sala como el típico salón inglés, con sofá al lado de la chimenea y las guitarras colgadas en la pared. Ofrecían la oportunidad de probar una guitarra como si estuvieras en el salón de tu casa, sentado cómodamente junto a una taza de té o una cerveza. Este tipo de negocios en los que se venden productos de los que te enamoras, generalmente los montan personas enamoradas de esos productos. Al igual que ellos, los vendedores que contratan suelen tener la misma afición: suelen estar “locos por el tipo de productos que venden” y llegan al mundo de la venta como resultado de su afición, pero no se sienten vendedores. De hecho, muchos de ellos serían incapaces de vender otro tipo de productos. dentro? Sin duda es más fácil que los clientes entren a establecimientos en los que ya haya otros clientes probándose gafas. Salí de esa tienda y entré en otra más pequeñita sin tanto espacio para mostrar el surtido. La anterior en cuanto a exposición les ganaba por goleada, así que habían renunciado a luchar en ese campo de batalla, e ingeniosamente, habían convertido una pared del local en un enorme tablón de anuncios. De él colgaban papelitos en los que se podía leer que se ofrecía comprar o vender material de segunda mano, clases de música o incluso los curriculum de músicos que se ofrecían para formar parte un grupo. La pared estaba abarrotada y esto hacía que el tiempo de estancia medio de los clientes en la tienda fuera muy elevado. Muchos Story Telling. De hecho cada anuncio en el tablón contaba una historia. Tiene la ventaja de atraer clientes incluso si no tenían intención de comprar nada y ya sabes… clientes llaman a clientes. Tal vez sólo entraran a ver si encontraban un nuevo batería para su grupo o si se había arrancado un numero de teléfono de un anuncio. ¿Es bueno atraer clientes que no tienen intención de comprar? Muy bueno. ¿Cuál es el tiempo medio de estancia de clientes en tu establecimiento de óptica? Me refiero a esos que entran a curiosear. ¿Se encuentran cómodos? ¿Y tú? ¿Eres capaz de atraer clientes que sólo quieren curiosear… nº 494 102 JULIO/AGOSTO 2014 Cuantos más años pasan vendiendo, más saben de los productos que venden. Se convierten en expertos. Esto en principio es bueno si no fuera porque también suele ser frecuente que no les quepa en la cabeza que algunos clientes tengan gustos diferentes a los suyos. No es poco frecuente que terminen vendiendo, casi siempre, lo que ellos se comprarían. Muchas veces el sondeo de las necesidades o deseos de los clientes es mínimo y terminan contándoles a todos los clientes lo mismo. Este producto es bueno porque bla, bla, bla... A mi me resulta muy divertido observarles; se creen en posesión de la verdad, pero en realidad no es que sepan más que nadie, sino menos que sus clientes, al menos sobre sus necesidades y expectativas. Es posible que crean que todos los clientes quieren una guitarra para tocar en un grupo y son incapaces de entender que algunos sólo quieren la guitarra eléctrica para decorar el salón y que los dos motivos son igual de respetables. A este tipo de vendedores se les conoce muy bien porque preguntan poco y hablan mucho. Eso sí, cuando hablan lo hacen con pasión. Sin duda tienen lo básico para hacer bien su trabajo, pero nadie suele preocuparse de formarles como vendedores. En el mundo de la Óptica, en lo concerniente a la comercialización de monturas, también existen unos vendedores similares. Sólo muestran aquellas monturas que ellos se comprarían. Durante un buen rato seguí disfrutando de los locales de esta calle.