Boletín informativo nº 16 – mayo 2007 Una reflexión El inconsciente altruista Por Carmen P. Nuévalos Ruiz. Pedagoga y Doctora en Psicología. Profesora Asociada del Departamento de Teoría de la Educación de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la Educación de la Universidad de Valencia. Se reconoce que el concepto de “lo inconsciente” ha sido la contribución más significativa de Freud. Como se sabe, este término se utiliza para designar los procesos y deseos psíquicos que permanecen ocultos para la consciencia. En el psicoanálisis se habla, en concreto, de un “inconsciente instintivo”. Recuérdese que, de acuerdo con la antropología de Freud, la persona es un compuesto de elementos y procesos biológicos y psíquicos, cuya motivación básica es la búsqueda del placer, o la evitación del dolor. Viktor Frankl no rechaza estos conceptos psicoanalíticos, pero propone una antropología tridimensional: Los humanos somos la unidad de tres dimensiones, biológica, psíquica y espiritual. Sin embargo, lo que define la naturaleza específicamente humana tiene su origen en lo espiritual. Desde lo espiritual arranca la motivación última y más radical del hombre, que no es el placer, ni el poder, tampoco evitar el sufrimiento, ni siquiera la autorrealización. La motivación básica y principal es la “voluntad de sentido”. Este impulso existencial a buscar un sentido a la vida se concreta en la realización de valores, y es la vía que conducirá a la plenitud existencial. La diferencia entre el planteamiento de Freud y el de Frankl no carece de importancia: lo que está en juego es la concepción de la naturaleza íntima de la persona. Para Freud el “inconsciente instintivo” y el afán por satisfacer los deseos instintivos sería la esencia de lo que somos. Frankl defiende, sin embargo, que el movimiento primario del alma es el impulso hacia el bien y la realización de los valores. La constitución más honda de nuestro ser no es el “inconsciente instintivo”, sino el “inconsciente ético-espiritual”, habitado por la voluntad de sentido que anhela vivir el bien. No es, por tanto, el egoísmo sino el altruismo nuestra naturaleza original. El concepto de “inconsciente espiritual” es una de las principales aportaciones de Frankl a la psicología e incluso, al pensamiento moderno. Pero ¿cómo se pone de manifiesto? Dirá Frankl al respecto, que las más grandes y esenciales decisiones de nuestra vida no suelen ser racionales sino que provienen de nuestro inconsciente espiritual. Son decisiones intuitivas, provocadas por valores que habitan en nuestro ser más íntimo. Así, por ejemplo, el altruismo orientado al cuidado y la defensa de la vida, podría ser el valor que inspira la decisión de ser médico. Para clarificar esta idea relataré una anécdota sencilla pero reveladora: una amiga mía, al tener noticia de su enfermedad, contactó con un doctor especialista de reconocido prestigio. Él trabaja en un hospital público, lo que implica, entre otros inconvenientes, tener muchos pacientes y poca disponibilidad para ellos. No obstante accedió a atenderla, pese a no ser el médico que le correspondía. Un día, en una consulta, el médico vio en el historial de la paciente un síntoma al que ni ella, ni otros médicos, habían dado importancia. El síntoma en sí no estaba relacionado con la enfermedad tratada por él. Sin embargo, al tener conocimiento de ello, se pronunció en los siguientes términos “Esto no es cosa nuestra, no tiene que ver con la enfermedad que tratamos, pero no podemos dejarlo pasar”. Acto seguido le extendió un informe en el que solicitaba una prueba médica. cosa nuestra, no tiene que ver con la enfermedad que tratamos, pero no podemos dejarlo pasar”. Acto seguido le extendió un informe en el que solicitaba una prueba médica. En definitiva, el médico asumió la responsabilidad de ocuparse de una paciente que no le correspondía y se hizo cargo de un problema que no era su responsabilidad. Sin duda el valor que inspira esta conducta es el altruismo. Una personalidad altruista no sólo lleva a cabo conductas que benefician a otros excepcionalmente, sino que las realiza de modo habitual en su vida cotidiana, como parece ser el caso de este hombre. Por otro lado, un rasgo propio de la autenticidad y la madurez moral es que la persona posee un sentido personal de exigencia íntima que “la obliga” a ejercer el valor. Pues bien, las palabras del doctor “no podemos dejarlo pasar”, son reveladoras de una dinámica inconsciente altruista, ya que nada externo le obligaba. Y, en efecto, cuando son consultadas personas que tuvieron comportamientos altruistas extraordinarios sobre “¿el porqué de su conducta?”, una respuesta habitual suele ser que “tenía que hacerlo”, o “no podía dejar de hacerlo”. Cuando una persona atiende a sus demandas morales interiores y las realiza, la aspiración “inconsciente” a encontrar un sentido se convierte o concreta en el valor. Cuando la conciencia, además de inspirar conductas de modo ocasional, obliga de manera habitual a buscar el bien de otros, es porque la persona ha consentido en que el valor que habita en su “inconsciente” emerja, y lo ha ejercitado a menudo en los diferentes ámbitos de su vida. Se diseña entonces un tipo de personalidad que refleja una armonía entre el anhelo inconsciente de procurar el bien y la conducta de beneficiar a otros: el valor se convierte en “don”. Finalmente, si defendemos que los fondos más íntimos de nuestra personalidad tienen su origen en un inconsciente espiritual habitado por valores (es decir, por la aspiración a procurar el bien propio y el de los demás) podemos decir que los códigos éticos, que exigen evitar el mal y promover el bien, proponen al ser humano hacer realidad los deseos más profundos de su corazón. Actividades SEMINARIO Sede Asociación. Lunes 28 de mayo. 19.00 horas. ENTRADA LIBRE. Conferencia: "Comunicación y relación en medicina: perspectivas reales para la actividad médica" Dirigido por: Dr. Jaime Cuquerella, médico especialista en Medicina Digestiva, y Dr. Fernando Rico, médico de empresa, especialista en Medicina Tropical. Dirigido a: profesionales sanitarios y a cualquier persona interesada en la materia. El objetivo fundamental del diálogo y la relación en la medicina no es otro que el conseguir un humanismo científico en la actividad médica que lleve constantemente a consolidar la dignidad e integridad del hombre, promoviendo un diálogo y una comunicación en todos los campos, en donde todos sean sujetos activos, tanto los profesionales sanitarios como los pacientes. Un diálogo que sepa escuchar, comprender, estimar, respetar las ideas, el pensamiento del otro, con la finalidad de llegar a una comunión y de esta manera tutelar el derecho del ser humano a gozar, en cualquier momento de su vida, de un nivel óptimo de salud física, psíquica y espiritual. AULA ABIERTA Sede Asociación. Martes 29 de mayo. 20.00 horas. ENTRADA LIBRE. Tertulia: “Aguantar (?) los malos momentos de la vida” Dirigida por: Sebastián Tabernero Capella. Abogado. Presidente de la Asociación Viktor E. Frankl. Viktor Frankl sostenía que no hay nada que ayude más a afrontar la adversidad que la convicción íntima de tener una tarea, una misión que realizar, que sólo uno puede llevar a cabo. En esta sesión, a través de ejemplos prácticos, dialogaremos sobre diversas actitudes que favorecen el afrontamiento de circunstancias difíciles de la vida. TALLER Sede Asociación. Miércoles 30 de mayo. De 18.00 a 20.30 horas. GRATUITO PREVIA INSCRIPCIÓN. “Taller para atender y entender al enfermo de cáncer” Dirigido por: Esperanza Dongil. Psicóloga clínica. Cristina Pelacho. Enfermera del Hospital “La Fe” de Valencia. Dr. Vicente García Fons. Médico. Coordinador de la Unidad de Patología Mamaria del Servicio de Cirugía General del Hospital Universitario “Doctor Peset” de Valencia. Dirigido a: familiares y amigos de pacientes. TALLER Sede Asociación. Viernes 8 y 15 de Junio. De 19.00 a 20.30 horas. Matrícula: 10 €. Gratuito, previa inscripción, para asociados y miembros correspondientes. “Afectividad y voluntad de sentido” Dirigido por: el equipo formativo de la asociación. Dirigido a: aquellas personas que ya conocen los conceptos básicos del Análisis existencial y la Logoterapia de Viktor Frankl y, especialmente, a quienes ya han realizado los “grupos para una vida con sentido” de la Asociación. Objetivos: Con este taller pretendemos propiciar la introspección espiritual para ayudar a los asistentes a: • • Tomar conciencia del dinamismo vital que Frankl denomina “voluntad de sentido”, y de verificar que dicho dinamismo habita la estructura íntima de nuestro ser y que ha estado presente en nuestra vida, sobre todo en los momentos más significativos. Intentar diferenciar entre la dimensión psico-emocional y la dimensión espiritual o noológica, con vistas a clarificar que las experiencias existenciales no son reductibles a experiencias psicoafectivas. Dinámica: Se trabajará a partir de cuestiones que intentarán dinamizar y poner de manifiesto la “voluntad de sentido” como dinamismo personal y singular, pero también universal. Para mostrar mejor la diferenciación entre lo psicológico y lo noológico propondremos ejemplos de casos reales y también ejemplos tomados de las experiencias manifestadas por los participantes. Número máximo de participantes: 10. Libros El hombre en busca del sentido último. El análisis existencial y la conciencia espiritual del ser humano. Viktor E. Frankl (Ed. Paidós) Este libro se centra en varios hallazgos cruciales de Viktor Frankl que ponen de manifiesto nuestro deseo inconsciente de descubrir un sentido definitivo a la vida, tanto si deriva de una fuente espiritual como si proviene de otro tipo de inspiración o influencia. Se trata de un tema de especial relevancia, sobre todo teniendo en cuenta que la sensación de que nuestra vida carece de un significado auténtico ha penetrado considerablemente en los cimientos de la sociedad contemporánea. A partir de ahí, Frankl demuestra de una forma brillante que el ser humano aún puede encontrar un cierto sentido a su vida cotidiana. Habla del «deseo de significado» como fuerza central motivadora y presenta evidencias específicas de que la vida puede hablarnos de su propio sentido en cualquier momento o situación. Incluso aquellas personas que deben soportar sobre sus hombros la carga de la culpabilidad, o tienen que hacer frente a un sufrimiento inevitable, disponen, en principio, de oportunidades para convertir sus súplicas en logros o, dicho de otro modo, su tragedia personal en un triunfo de la humanidad. Un hombre de palabra Inma Monsó (Ed. Alfaguara) Cuando un ser querido desaparece de nuestra vida, ¿cómo conciliar la necesidad de olvidar con el fuerte deseo de no hacerlo nunca? ¿Cómo conjugar el recuerdo y el olvido de la mejor manera posible? ¿Qué es lo que hace durar, a menudo incomprensiblemente, el amor de una pareja? Éstas son las preguntas que se plantea una mujer de 43 años a lo largo de estas páginas mientras, con humor y vitalidad, repasa la singular personalidad del hombre con el que convivió dieciséis años, las anécdotas que rodearon su relación, los viajes, la adopción de su hija, la complicidad intelectual que se creó entre ambos... Una brillante y galardonada novela que es un singular tratado del duelo y un intento de reconstruir la presencia del ser desaparecido por medio de las palabras y del humor. TODOS LOS LIBROS INCLUIDOS EN ESTA SECCIÓN PUEDEN ENCONTRARSE EN NUESTRA SEDE (de lunes a viernes y de 17:00 a 20:00 horas). CON SU ADQUISICIÓN COLABORA ECONÓMICAMENTE CON LA ASOCIACIÓN. 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