5. Estatuto de Bayona (8 de julio de 1808) En nombre de Dios Todopoderoso, Don Josef Napoleón, por la gracia de Dios, rey de las Españas y de las, Indias. Habiendo oído a la Junta Nacional congregada en Boyona de orden de nuestro muy caro y muy amado hermano Napoleón, Emperador de los franceses... Hemos decretado y decretamos la presente Constitución .... Artículo1. La religión Católica, Apostólica y Romana, en España y en todas las posesiones españolas, será la religión del Rey y de la Nación, y no se permitirá ninguna otra Artículo 2. La Corona, de España y de las Indias será hereditaria en nuestra descendencia natural directa y legítima de varón en varón por orden de primogenitura y con exclusión perpetua de las hembras. En defecto de la descendencia masculina natural y legítima la Corona de España y de las Indias volverá a nuestro muy caro y muy amado hermano Napoleón. Artículo 88. Será libre en dichos reinos y provincias (los reinos y provincias españolas de América y Asia) toda especie. de cultivo o industria. Artículo 97. El orden judicial será independiente en sus funciones. Artículo 116. Las Aduanas interiores de partido a partido y de provincia a provincia quedan suprimidas en España e Indias. Artículo 117. El sistema de contribuciones será igual en todo el reino. Artículo 126. La casa de todo habitante en el territorio de España y de Indias es inviolable. a) Clasificación del texto. Se trata de un texto jurídico, un Estatuto que sienta las bases de la organización del país. Es una fuente primaria, ya que se trata del documento que fue aprobado y no de una interpretación posterior. Está fechado en Bayona, el 8 de julio de 1808, en el contexto de la crisis de 1808, que pone de manifiesto la debilidad de la Monarquía y las ambiciones de Napoleón, y una vez que la Junta Suprema a declarado la guerra a Francia (Guerra de la Independencia 1808-1813). El autor es José Bonaparte, hermano de Napoleón, por cuya orden actúa, y que reinará como José I tras las abdicaciones de Bayona. Los destinatarios son los españoles, y la finalidad del texto es la de promover un conjunto de reformas moderadas en España. b) Resumen de las ideas principales. ‐ José I, tras las abdicaciones de Bayona, ha recibido de su hermano Napoleón la Corona de España, y siguiendo sus instrucciones, promueve un conjunto de reformas, tal y como anunció en su Proclama a los españoles de 3 de junio de 1808. La primera y más importante de ellas es este Estatuto de Bayona, promulgado tras escuchar a la Asamblea de Notables que ha sido convocada para ello. Los españoles que apoyen estas reformas y el reinado de José I serán llamados “afrancesados”. ‐ El Estatuto de Bayona no es propiamente una Constitución, sino una concesión del rey, una Carta otorgada. Las principales reformas que contiene, y que suponen un avance con respecto al absolutismo del Antiguo Régimen, son la libertad de industria (art. 88), la supresión de las aduanas interiores (art. 116), el pago por todos los españoles de los impuestos (art. 117) y la protección de derechos fundamentales como la inviolabilidad del domicilio (art. 126). 14. Exposición de Motivos del Decreto desamortizador de Mendizábal, dirigido a la Reina (19 de febrero de 1836). Vender la masa de bienes que han venido a ser propiedad del Estado, no es tan sólo cumplir una promesa solemne y dar una garantía positiva a la deuda nacional por medio de una amortización exactamente igual al producto de las rentas, es abrir una fuente abundantísima de felicidad pública; vivificar una riqueza muerta; desobstruir los canales de la industria y de la circulación; apegar al país por el amor natural y vehemente a todo lo propio; enganchar la patria, crear nuevos y fuertes vínculos que liguen a ella; es en fin identificar con el trono excelso de ISABEL II, símbolo de orden y de la libertad. No es, Señora, ni una fría especulación mercantil, ni una mera operación de crédito, por más que éste sea la palanca que mueve y equilibra en nuestros días las naciones de Europa: es un elemento de animación, de vida y de ventura para la España: Es, si puedo explicarme así, el complemento de su resurrección política. El decreto que voy a tener la honra de someter a la augusta aprobación de V.M. sobre la venta de esos bienes adquiridos ya para la nación, así como en su resultado material ha de producir el beneficio de minorar la fuerte suma de la deuda pública, es menester que en su tendencia, en su objeto y aún en los medios por donde se aspire a aquel resultado, se enlace, se encadene, se funda en la alta idea de crear una copiosa familia de propietarios, cuyos goces y cuya existencia se apoya principalmente en el triunfo completo de nuestras actuales instituciones. Gaceta de Madrid, 21 de febrero de 1836. a) Clasificación del texto. Se trata de un texto jurídico, que forma parte de un Decreto, y una fuente primaria, al tratarse del propio documento que fue aprobado y no de una interpretación posterior. Está fechado el 21 de febrero de 1836, es decir, en el contexto de la Regencia de Mª Cristina (1833‐1840) y mientras tenía lugar la I Guerra Carlista (1833‐1839), y fue publicado en la Gaceta de Madrid. Su autor fue Mendizábal, ministro liberal de la regente, perteneciente al sector progresista que accedió al gobierno tras el levantamiento de 1835 y la rebelión de los sargentos de La Granja de 1836. Su destinataria es la regente Mª Cristina, a quien se propone qué hacer con la masa de bienes que han sido expropiados. b) Resumen de ideas principales. ‐ La propia desamortización, es decir, la expropiación de las tierras de la Iglesia que se encontraban en “manos muertas”, es decir, a las que no se les sacaba suficiente rendimiento. A esta desamortización de Mendizábal se le conoce como la “desamortización eclesiástica”, ya que afectó a millones de hectáreas que eran propiedad de la Iglesia. Como se señala al comienzo del texto, esas tierras han pasado a ser propiedad del Estado ‐ Mendizábal propone que el producto de la subasta de las tierras expropiadas se destine a amortizar la deuda del Estado (préstamos solicitados para financiar guerra contra los carlistas), y justifica la subasta en el hecho de que los nuevos propietarios pasarán a constituir un importante apoyo a la causa de Isabel y para la consolidación del Estado liberal. En realidad, un reducido grupo de propietarios se hizo con la mayoría de las tierras. 15. Crítica a la desamortización eclesiástica. La cuestión que hay que resolver es la siguiente: ¿el gobierno debe pagar de una vez toda su deuda vendiendo las fincas, o convendrá que arriende en enfiteusis (1) todas esas fincas y reparta su renta entre los acreedores? Hacer ver que el segundo método es el único justo, el único compatible con la prosperidad de nuestra economía,... el único popular y, por consiguiente, ventajoso al sostén del trono de Isabel II, el único que no perjudica a la clase propietaria, el único, en fin, por cuyo medio se puede mejorar la suerte de la desgraciada clase proletaria en toda época y por todos los gobiernos, es lo que propongo hacer ver. Con el sistema enfitéutico, todas las familias de la clase proletaria serían dueñas del dominio útil de la tierra que cultivasen y, por consiguiente, interesadas en sostener las reformas y el trono de Isabel II, pues en ellas verían cifrado su bienestar. Por el contrario, el sistema de vender las fincas, hará la suerte de esta numerosa clase más desgraciada de lo que es aún en la actualidad y, por consiguiente, odiarán la reforma y el orden existente de cosas" Fragmentos de artículos periodísticos de Flórez de Estrada. 28 de febrero de 1836. a) Clasificación del texto. Se trata de un texto histórico-literario, ya que es un artículo periodístico, y de una fuente secundaria, mediante la que se comenta o interpreta el Decreto de Desamortización de Mendizábal. Está fechado el 28 de febrero de 1836, tan solo unos días después de la publicación del Decreto. El contexto es el re la Regencia de Mª Cristina (1833-1840) y, por tanto, de la I Guerra Carlista (1833-1839). Su autor, Flórez de la Estrada, fue un liberal crítico con la forma en la que se llevó a cabo la desamortización. Los destinatarios son los lectores del periódico, a buen seguro de ideología liberal. b) Resumen de ideas principales. ‐ Critica por la forma en la que se está llevando a cabo la desamortización, mediante la venta en pública subasta de las tierras expropiadas a la Iglesia, y destinando los ingresos a pagar los préstamos concedidos para financiar la Guerra Carlista. ‐ Se muestra partidario de otra forma de llevarla a cabo: apuesta por la enfiteusis, un contrato de arrendamiento vitalicio, mediante el que los campesinos sentirían como propias las tierras que cultivan y se convertirían en defensores de Isabel II y de la causa liberal. De hecho, como no se hizo así, muchos campesinos se sumaron al bando carlista.