FONDOS DE FUNDACIÓN PRODEL HAN HECHO POSIBLE EL FUNCIONAMIENTO DE LOS BANCOS COMUNALES. Los Fondos de Fundación PRODEL destinados a PRESTANIC (institución de microfinanzas), han hecho posible la creación de 63 bancos comunales en áreas rurales del departamento de Managua, atendiendo a 750 clientes de manera directa y unos 3750 beneficiarios indirectos. Esta inyección financiera ha permitido a los clientes diversificar sus negocios y realizar actividades como: destace y venta de carne de cerdo, elaboración de nacatamales, compra y venta de leche, elaboración de crema y queso, venta de ropa usada, repostería y venta de frutas, entre otras. El modelo de financiamiento hacia bancos comunales ha sido una respuesta a necesidades económicas de las familias y un mecanismo que garantiza la recuperación económica de la inversión. Además con la implementación de este programa se ha visto fortalecido el comercio informal lo que ha contribuido a dinamizar la actividad microeconómica de las comunidades. Fidelidad y Confianza como Elementos del Éxito. El impacto del programa reside en el mecanismo de ahorro obligatorio de las socias. “El ciclo del financiamiento tiene una duración de cuatro meses, el mismo establece un ahorro inicial y un ahorro programado periódico que es entregado a los beneficiaros 48 horas después de cancelado el crédito”. Otra fortaleza del programa es que las mismas socias elaboran el reglamento interno de los grupos solidarios, inclusive ellas mismas establecen los montos de las multas cuando una de ellas no cancela el préstamo a tiempo, dinero que pasa a formar parte del fondo común que se divide entre las mismas beneficiarias. Otros de los elementos de éxito es el grado de fidelidad, lealtad y confianza que tienen las clientas hacia la institución de microfinanzas que las atiende. MUJERES EMPRENDEDORAS Raquel Cáceres, social del banco comunal de Los Brasiles(ciudad perteneciente al municipio de Mateares, Managua), tiene una pequeña pulpería la cual no ha ido diversificando y ampliando gracias a este crédito. Además le ha permitido dedicarse a otras actividades como vender comida los fines de semana. “El dinero me sirvió mucho porque ahora puedo comprar más productos para mi venta como pollo, carne de cerdo y res. Ahora mantengo gaseosas, crema y huevos, productos que se venden a diario”, señala. Idalia Concepción Aguilar, madre de cuatro hijos, es otra de las socias del banco comunal de Los Brasiles. Su negocio consiste en la venta de leche y crema en el sector de la carretera sur y el Mercado Oriental. Idalia va por su tercer crédito y es un ejemplo de esfuerzo y superación. “Tenemos 15 años de estar en este negocio, y estos créditos nos han ayudado a salir adelante. Ahora vendemos el doble de leche que antes, también vendemos crema y café con leche en el Mercado Oriental y eso ha mejorado nuestros ingresos”, agrega. Los fondos de PRODEL canalizados a través de bancos comunales, han beneficiado 18 comunidades de Managua ubicadas en carretera Vieja a León, carretera Nueva a León y carretera a El Crucero. El fondo de este programa asciende a 2 millones 232 mil córdobas. “El crédito se promociona por medio de volantes pero lo principal es la promoción personal. Nosotros vamos a las comunidades, sacamos volantes y les decimos que se organicen para eso contactamos con los líderes de la comunidad y ellos informan a los vecinos sobre el programa”, expresa Wilmar Bolaños, asesor de crédito. Considera que el éxito de este programa es haber llegado a lugares donde los actuales clientes jamás accedieron a un crédito. “Hay lugares donde las personas se les dificulta conseguir un préstamo porque a criterio de otras instituciones sus negocios no son rentables pero para nosotros sí porque son personas honestas y creemos en ellos”. El modelo que se mantiene con los bancos comunales ha sido una respuesta a las necesidades económicas de las familias y un mecanismo que garantiza la recuperación de la inversión. Este modelo ha funcionado con las clientas de la ADIM (Asociación Alternativa para el Desarrollo Integral de la Mujer) bajo la figura de grupos solidarios implementado en las áreas urbanas de Managua. Los créditos oscilan entre tres y 18 mil córdobas por socia a un plazo máximo de ocho meses de plazo. Las mujeres beneficiadas se dedican principalmente a la venta de ropa, cosméticos, pulpería, venta de tortillas, venta de frutras, etc. Actualmente la institución cuenta con 300 grupos solidarios en Managua, integrados en su mayoría por mujeres que poseen pequeños negocios.