Las consecuencias no buscadas de la pena Martín Maduri CUSAM Este texto se impone un desafió proponemos reflexionar sobre la sociabilidad de un “pibe bueno”, “cachivache”, “peleador”, “atrevido”, “tumbero”, “turro”, lleno de berretines, chorro, a un contexto de la cárcel donde los principios ordenatorios que se rigen es la política del más fuerte, abriendo preguntas como: ¿Qué papel juega el código de ejecución de la provincia de buenos aires ley 12256? ¿Qué papel juega el SPB? ¿Cómo se va en libertad el pibe bueno? En síntesis me pregunto sobre el modo (tipo ideal) en que la cárcel y sus miembros construyen un tipo de racionalidad y contribuyen a su reproducción, que no es natural ni eterna, lo que deja a la vista las consecuencias no buscadas de la pena. En virtud de los primeros resultados que apelando al análisis cualitativo en la unidad Nº 48 del Complejo Conurbano Norte, es que pude desentrañar una serie de procedimientos atados a conceptos culturales propios de la cárcel, esto son los berretines, los cuales nos brindara una serie de rituales (protocolos) en cuanto a la obtención de un trabajo “tumbero” Tres son los trabajos tumberos que manejan la regulación de los espacios de socializacion interna dentro de los pabellones o el espacio donde se recibe la visita o se recrean. Si bien el SPB se muestra omnipresente en toda la estructura, en los pabellones, en la cancha y en la visita la regulación queda en manos de los más capacitados de llevar este trabajo. Como señala Goffman 1: (2004) “Hay un vasto sector de la actividad individual en las que las autoridades se abstienen de juzgar o de intervenir”, asi podremos ver las relaciones y comportamientos que se generan en la cárcel con ciertos individuos (sujetos) que están en lucha constante en el espacio por tomar el poder. A través de la presente investigación, se dará cuenta cómo se genera la obtención por parte del preso de la capitalización de valores simbólicos, que en su máxima expresión se los denomina berretines2: capital simbólico que predomina en la cárcel. 1 Goffman Irvin, Internados: ensayos sobre la situación social de los enfermos mentales.- 1ª ed. 8ª reimp.Buenos Aires: Amorrourtu, 2004 2 Berretines: confianza desmedida hacia si mismo. Cierto orgullo de pertenecer algún grupo determinado futbolista, artista, policía, ladrón etc. Forma cultural de ver la vida. Del lunfardo capricho, deseo vehemente idea fija. Filosofía de vida. Diccionario “perro me da un marroco” Maduri M. mimeo El origen del concepto lo podemos encontrar en el conjunto de vocablos que se encuentra enmarcada en el lunfardo3 que emergía en los años 20 en los barrios bajos de Buenos Aires, este lenguaje se fueron transformando en capital especifico en ciertos grupos marginales. El conjunto de palabras que encierra este dialecto se encuentran enmarcadas en los inicios de la letras de los tangos de los años 20 y la “cumbia villera 4” del 2000, que retratan actitudes y construcciones morales definidas y presentes en el mundo delictivo, la composición de un perfil moral anomico como el atorrante, el bardero, el cheto, el refugiado, el botón, el campeón, el pibe chorro, el pibe villa, el pibe cantina son términos clasificatorios para clasificar y juzgar las acciones propias y las ajenas. Términos como pebeta, catrera, rocho, berretines, etc. , fueron típicas en los prostíbulos de Buenos Aires a fines del siglo XIX, y genero musical de los barrios populares del conurbano, asi que no nos debemos sorprender que las palabras que encierra el lunfardo se refieran a sexo, percantas, crimen, vicios, diversión, estas palabras eran utilizadas por los ladrones para calificar y calificarse. Ser ladrón conlleva una serie de cualidades desarrolladas en una trayectoria, ser ladrón además implica robar de “caño5”, una serie de conductas, no escritas que se aprenden únicamente con la vida y en experiencias muy concretas y que figuran en la trayectoria como verdaderos ritos de pasaje, (Isla y M. C. Valdez Morales 6: 2001). Esta definición de estos autores llenan el concepto que presento, ser ladrón conlleva tener una serie de berretines que van ayudando al interno en la trayectoria dentro y fuera de los pasajes clásicos de cárcel calle, la adquisición de estos valores te van posicionando no solo en la cárcel, sino también como modelo heroico repetitivo, el tumbero, el turro7 aparece como verdadero conocedor de la subcultura. 3 Tenemos dos posturas en la etimología en cuanto al lunfardo, la primera se refiera a una palabra Francesa “LUMBARD” y se refiere a una región de Italia, otros sostienen que el lunfardo viene de “el e’ fardo”, esto es fardo de una tela grande donde los ladrones envolvían su mercadería, tanto una como la otra habla o se refiere a zonas marginales, grises. 4 Miguez, D. y Seman, P.:2006 “entre santos, cumbia y piquetes” la cultura popular en la Argentina, editorial biblio, 2006 5 Revolver, pistola o cualquier arma de puño, el lechucero, palabra que se refiero al 38 corto. 6 Isla y M. C. Valdez Morales, “heridas urbanas” cp. VI los malvados, p257 7 El que habido pasado por múltiples caídas (calle, cárcel) sigue con su filosofía de vida. El tipo a analizar es el chorro, ladrón, uno crece con la visión de poder se de la clase social distinta a ala que pertenece, bajo el lema de una remuneración rápida y estimulante, son jóvenes de clases populares que creen que robando van a pertenecer al jet set pasando décadas dentro de la cárcel por delitos violentos y robos frustrados, creando grupos de pertenencia y lazos sociales que perduran incluso con el traslado de ellos a otras cárceles. En este trabajo sociológico a los berretines lo asociaremos al capital simbólico que el sujeto pricionizado utiliza en su carrera amoral, y la movilidad social, el periplo de coerción por el cual esta inmerso el sujeto, esto es, calle cárcel, cárcel calle. Así la vida carcelaria se ve como un lugar importante en el estadio de la carrera, en donde se establecen relaciones impersonales donde se recrean nuevas tácticas, se planean hechos donde se templan definitivamente el futuro de su carrera, tener un buen “rancho8”, la cárcel con su monótono transcurrir de días meses y años es el universo en que se vive, reúne además de distintos delitos, distintas historias, distintas generaciones ya que la población esta en constante movimiento con ingresos de comisarias o de otras unidades y egresos diarios, que se dan por traslados a otras unidades. Los presos viejos (dinosaurios) sirven como reservorios de tradiciones y aca entra la moral del ladrón, ya que el “primario”(pibe de 18 a 23 años que entra en el circuito penal) tiene mucho para aprender para seguir con su carrera delictiva, “que no te quiebre la cárcel”, algunas de estas reglas implícitas son no trabajar en algunos sectores de la cárcel donde los trabajos están reservados para las clases mas bajas (violador) del mundo carcelario, como buzonero, o limpiando la oficinas de los jefes en control (centro del pan óptico) o hacer algún trabajo administrativo ya esas tareas las desempeñan las clases mas bajas, expolicias que necesitan el resguarde del SPB. A traves de este trabajo podremos ver una serie de mutación en las formas de valores simbólicos que en primer momento (desde una mirada estructural) se definen como ordenador del espacio dentro de la cárcel, el aval que el “carnet” le da al nativo como líder del lugar que le toca cumplir su condena, legitima el uso de la fuerza, del aguante, que en primer termino comienza con peleas verbales utilizando todos los argumentos positivos del mundo del crimen (yo soy chorro, yo peleo, yo no soy ortiva, a mi no me echaron de ningún lado, cuando el rival no puede competir con tantos argumentos se va a su celda trae su poncho y comienza la pelea. Las que terminas con pibes con la panza 8 Grupo de pertenencia dentro de la cárcel, que se fortalecen según vallan sobreviviendo. rota, la cabeza, hasta la muerte. Las muertes por estos rituales en la unidad 48 ascienden a cinco en cinco años de estar habitada. Todas fueron por peleas entre presos, todas en población.) Hoy esos principios son absorbidos por la cárcel (estructura) y codificados a tal punto que es utilizada para dominar el espacio, creando una lucha constante por el poder que da estas posiciones. Ser canchero, limpieza o pibe sum es tomado como categoría jerarquica nativa “pibe bueno”. A partir de una entrevista semi-estructurada realizada a un oficial del servicio penitenciario realice anotaciones al final de mi conversación que explican la tonalidad de cómo se ordena un pabellón de población. E. ¿Que se necesita para ser limpieza del pabellón 10 (Población)? O. que tenga actitud, que banque. Y entre ellos la política es que este por robo. E. ¿que trabajo realiza? O. repartir la comida (rancho), limpiar el pabellón, es el referente para hablar. E. ¿Cómo se contrata? O. contratar, como que se dice contratar no se hace. Ellos eligen su referente y nada, en esos pabellones los limpiezas van y vienen. E. ¿Cómo se deja de ser limpieza? O. y cuando hay una pelea grande, yo los tengo que sacar. E. ¿Cuál es la remuneración? O. y ustedes tienes el peculio. (“El escaso trabajo carcelario es retribuido mediante la humillante suma del Llamado “peculio9”. Ello obliga al interno a recibir ayuda del exterior. Este alivio económico incide negativamente a la hora de recuperar la libertad. Al ser mantenido durante varios años por el grupo familiar la persona privada de libertad aparentemente se acostumbra al ocio obligado” Lafleur: 2000: 61). Contexto conceptual del trabajo penitenciario en la Pcia. Bs. As. La ley 12.256 que rige en toda la provincia de Buenos Aires Con respecto a la relación al trabajo establece: 9 Lafleur, Alejandro. La institución total en “Relaciones informales en una organización profundamente restrictiva”. Editorial Economizarte 2000. Articulo 34 - El trabajo constituye un derecho para los procesados y un derecho deber para los condenados, el que se le proporcionara en la medida de las posibilidades de cada establecimiento. Articulo 35 - La organización del trabajo penitenciario en su aspecto técnico administrativo, modalidades, horarios, previsiones referidos a la higiene y seguridad industrial, accidentes e indemnizaciones se regirán por las normas legales establecidas para la materia en cuanto sean compatibles con las particularidades del sistema que esta ley implementa.. Articulo 36 - El consejo de administración del trabajo penitenciario fijará las remuneraciones del trabajo carcelario para cada una de las categorías profesionales que establezca la reglamentación guardando proporcionalidad con los salarios que correspondan para el trabajo libre. Articulo 37 - Las actividades productivas y rentables reproducirán en lo posible las características del trabajo en libertad con especial consideración de las aptitudes y capacidades de los procesados y condenados. Articulo 38 - El Servicio Penitenciario favorecerá la implementación de programas de capacitación laboral y el desarrollo de actividades artísticas e intelectuales conforme a los diferentes regímenes previstos en la presente ley. Articulo 39 - El producto del trabajo asignado a cada interno deducidos los aportes correspondientes a la Seguridad Social, tenderá a solventar sus necesidades personales, familiares, sociales y a indemnizar los daños causados por el delito conforme lo establezca la sentencia, en los porcentajes que fije la reglamentación. En contraposición a los términos de la norma, el Servicio Penitenciario, como autoridad máxima, reprime de diversas formas ante cualquier reclamo de un salario acorde a la vida libre, sin dar prioridad fundamental a los derechos y garantías que demandan para exigir el cumplimiento de la norma. “Todo un régimen de castigos y de recompensas que no es simplemente una manera de hacer respetar el reglamento de la prisión, sino de hacer efectiva la acción de la prisión sobre los reclusos.” (Foucault10 1991a: 284). 10 Foucault, Michel. Vigilar y castigar en “Nacimiento de la prisión “Editorial siglo XXI, México 1991. Las mismas preguntas se las realicé a la mayoría de los 94 encuestados, en diciembre del 2012 cuando se realizo las ya mencionadas entrevistas multipropósito a parte de la población que frecuentaba el CUSAM. E. ¿Qué se necesita para ser limpieza? Lucas: estar por robo. Pararse de mano (esto se refiere a pelear) y manejar bien la faca (cuchillo casero) y armar un buen equipo. E. ¿Qué trabajo realiza? Lucas: regula el pabellón, vos sabes que los carnet de visita y el de la cancha están en población, acá están los carnet, los que lo quieran saben lo que tienen que hacer. E. ¿Cómo se pide un carnet? Lucas: peleando, el mejor se queda con todo. E. ¿Cómo se deja de ser limpieza? Lucas: si yo peleo y me lastiman mal tienen que pelear con mi rancho, hasta que no quede ninguno. E. ¿Cuál es la paga (remuneración) los beneficios? de Lucas. Ninguna. El honor. Son los berretines, están en juego un montón de cosas. Asi podemos ver dos lógicas distintas en el mismo campo, uno trabaja conforme a una reglamentación ilusoria, la otra trabaja por la carga positiva que tienen el trabajo. Las dos a la luz de las reglamentaciones que ocurren en las unidades federales de la provincia impactan sobremanera. Diversos encuentros penitenciarios realizados en diferentes lugares del mundo acogieron esta nueva mirada sobre el trabajo penitenciario con entusiasmo. En este sentido, el XII Congreso Internacional Penal y Penitenciario celebrado en La Haya, en 1950, declaró: "el trabajo penitenciario no debe ser considerado como complemento de la pena sino como medio de tratamiento" de las personas. El Primer Congreso Penitenciario de las Naciones Unidas (1955) sostuvo por su parte que "no ha de considerarse el trabajo como una pena adicional sino como un medio de promover la readaptación". En este marco, se pone en común la idea de preparar a las personas para una profesión e inculcarle hábitos de trabajo. Por último, la Regla Mínima de Naciones Unidas Nº 60 para el Tratamiento de los Reclusos considera que el trabajo penitenciario puede considerarse como una parte del trabajo en general: "el régimen del establecimiento debe tratar de reducir las diferencias que puedan existir entre la vida en prisión y la vida libre en cuanto éstas contribuyan a debilitar el sentido de responsabilidad del recluso o el respeto a la dignidad de su persona". En la historia del régimen penitenciario argentino hubo cárceles emblemáticas en materia de trabajo correccional como fue la Penitenciaría Nacional de Buenos Aires (PN) inaugurada en 1877. En sus comienzos, el trabajo estaba enmarcado en conductas de obediencia y silencio, hasta que Antonio Ballvé eliminó el régimen de silencio y de la mano de José Ingenieros creó el Instituto de Criminología. Este cambio llevaba implícito una idea de trabajo carcelario sobre tres bases: preparar personas competentes en algún oficio o arte, no ser perjudicial para la salud de las personas privadas de la libertad y absoluto silencio en el taller. Así fue que antes de finalizado 1877, en la Penitenciaría Nacional se llegó a dar ocupación a todos los penados en los talleres de lavandería, herrería, carpintería, pinturería, galvanoplastia, hojalatería, escobería, zapatería, imprenta y encuadernación, a los que se le sumaban las tareas de mantenimiento, y labores en huertas y servicios domésticos. Creado en 1994, el Ente de Cooperación Técnica y Financiera del Servicio Penitenciario Federal (EnCoPe)es el organismo que administra, mejora y mantiene los talleres de capacitación para el trabajo y laborterapia de las personas privadas de la libertad, alojadas en unidades penitenciarias federales. Este organismo autónomo que cuenta en la actualidad con mas de 400 talleres productivos de los cuales 140 son talleres productivos convencionales y los restantes son talleres de gestión de servicios, abarcando los primeros una amplia gama de especialidades (agropecuaria, industrial, carpintería, y artes gráficas) y los segundos, cocinas, panaderías y servicios auxiliares, facilitando la ocupación de más del 20% de la población penitenciaria. En nuestro país, en el año 1994, se sanciona y promulga la Ley N° 24.372, merced a la cual se crea el Ente de Cooperación Técnica y Financiera del Servicio Penitenciario Federal, cuya finalidad será (Art. 1°) “propender al mejor funcionamiento y la modernización de los métodos operativos de los talleres de laborterapia para los internos alojados en jurisdicción de la D.N.S.P.F.”, siendo destinadas (Art. 5°) “las utilidades que produzca el trabajo o la producción penitenciaria exclusivamente al trabajo penitenciario”. El trabajo es parte fundamental del tratamiento, constituyendo un derecho y un deber del interno con positiva incidencia en su formación, y se rige por los siguientes principios: 1- No se impone como un castigo. 2- No es aflictivo, denigrante, infamante ni forzado. 3- Propende a la formación y al mejoramiento de los hábitos laborales. 4- Procura la capacitación del interno para desempeñarse en la vida libre. 5 - Se programa teniendo en cuenta las aptitudes y condiciones psicofísicas de los internos, las tecnologías utilizadas en el medio libre y las demandas del mercado laboral. 6 - Es remunerado. 7 - Se respeta la legislación laboral y de seguridad social vigente y los trabajadores cuentan con ART. La misión de este ente es brindar oportunidades, con capacitación y trabajo, desarrollando y promoviendo capacidades que permitan a los trabajadores proyectar una vida comprometida con la sociedad. Asimismo, el EnCoPe trabaja en la formación de personas éticamente responsables, capaces de generar y aplicar conocimientos en el mundo del trabajo al momento de obtener su libertad. Actualmente, todas las personas privadas de la libertad pueden acceder al trabajo en los talleres productivos que funcionan en las unidades penitenciarias federales con una remunerecion que alienta al interno y crea habito laboral. Las personas privadas de la libertad desempeñan tareas laborales según principios que tienen como base el respeto de los derechos humanos. De este modo, el trabajo no se impondrá como castigo; se dirigirá a la formación y mejoramiento de los hábitos laborales; procurará la capacitación de los internos para desempeñarse en la vida libre. Lo paradójico es que esto ocurre en las cárceles federales no solo de la provincia sino del pais salvo en servicio penitenciario bonaerense que sigue rigiéndose por lógicas llevar a cavo el trabajo dentro de las cárceles en forma cuasi esclava 11 disputándose los trabajos a la forma de la edad media o pagando sumas ilusorias como 32$ mensuales. 11 Ángel Luís Alberto Iñiguez, 2013” EXPLOTACIÓN EDISION MIMEO EN EL TRABAJ DE LAS PERSONASPRIVADAS DE LIBERTAD” “Aca viniste a estar preso no a trabajar”, “porque no trabajabas en la calle, anda a quejarte con el ministerio de trabajo”, “aceme una denuncia, no trabajes, presos hay un montón, si queres que te saque los informes bien trabaja” (y aca se introduce otra forma de coerción es necesario para irse a la calle o para ir a una unidad con un régimen abierto esto es sin muros ni rejas tener conducta y trabajar los jueces dictaminan cualquier beneficio a la luz de los informes emanados por el SPB) las constantes respuesta que suelen tener de los jefes de talleres, si queres trabajar tráete una cortadora de pasto y corta el pasto, o si queres ser limpieza teneme tranquilo el pabellón. El término de las negociaciones con el SPB se dan por la incapacidad del limpieza de implementar una política “estable” dentro del pabellón, en la visita o en la cancha; cuando las peleas se hacen frecuentes en estos espacios se realizan lo que se denomina “romper el rancho” y se hace visible trasladando a al limpieza y su rancho. Los internos mayormente son capeado12, (cuando las negociaciones o los términos en que se puede uno desenvolver dentro de la unidad llega a su fin se utiliza toda la fuerza del SPB, reduciendo al interno con la fuerza y llevados a otra unidad) trasladado. El “capeo” es una palabra típica del mundo carcelario, se entiende como el traslado brusco del interno. Ser trasladado constantemente por todas las cárceles por su difícil adaptación es propio del “pibe bueno”, este tiene un fuerte grupo de pertenencias. En la entrada donde funciona el centro de estudiantes de la universidad de San Martin dentro de la unidad penal 48 del complejo conurbano norte hay un cartel que tiene esta leyenda “sin berretines13amigo”. Este cartel sirve para que guardias y presos dejen su rol una vez ingresado al predio educativo y puedan dentro del CUSAM 14 sentirse como iguales. El paragua15 tiene treinta años, se define a si mismo como delincuente, como “pibe bueno16”, trabaja como limpieza del único pabellón de población que hay en la unidad, a 12 Capeo: traslado brusco de una unidad hacia otra ejerciendo toda la presión por parte del personal de traslado. En este traslado se pierde la totalidad de sus pertenencias. Diccionario perro me da un marroco. Maduri, M. edición mimeo 13 Confianza en si mismo, lógica cultural del mundo del crimen: robar esta bien, la policia es mala, yo soy mejor que vos., yo soy bueno el es gil. 14 Centro educativo dentro del penal 48. tiene autonomía universitaria. Funciona la carrera de sociología y distintos talleres extracurriculares y autogestivos. 15 Es un sobre nombre que utiliza este joven, mas allá que su nacionalidad sea argentino se siente identificado de esa manera. 16 El pibe bueno trabaja en visita, pelea con faca(cuchillo casero), donde le toque estar en alguna de las 52 cárceles que hay en la actualidad en la provincia el trabaja en visita o de limpieza, siempre vivió en principio de año habían tres pabellones, por las constantes peleas y traslados solo queda uno. Dice que esta lleno de berretines y a traves de esta entrevista trataremos de conocer algunos de ellos, esta identidad (“tumbera”) compartida implica la contrucción de simbologías y estéticas comunes de los grupos que heterogeinizan la cárcel, estas son capaces de diluir las diferencias internas y producir la cohesión interna suficiente que permite a los miembros reconocerse como parte de un grupo. El “”pibe bueno” para cultivar adhesiones y voluntades dentro del pabellón debe recurrir a la exhibición activa de su posición como limpieza y negociar permanentemente con los ranchos dentro del pabellón y los jefes de unidad. El complejo penitenciario norte se encuentra al costado del camino Buen Ayre, en un lateral de la autopista se enmaraña un sin fin de villa miserias que viven en sus mayoría del cirujeo, del trabajo informal, de reciclar comida, metales, plásticos lo que encuentren de la montaña que se levanta en el basural mas grande de bueno aires, Lanzóni, curita, el tambo, carcova, la 9 de julio, villa esperanza, la de los paraguayos, ciudad de dios y cada vez mas cerca de la autopista se asientan nuevas villas que circundan la autopista y el penal. Este complejo esta preparado para albergar 1800 presos pero el agua de las napas están contaminadas y prohibidas para el consumo humano, los desechos cloacales de la cárcel y de las villas que rodean el previo desembocan en un riachuelo que en los dias de sol contaminan el aire con olores irrespirables de orina y mierda. . De igual manera dentro de la unidad 48 habitan 343 presos, acá encontré Al paragua, uno de mis entrevistados Su celda es una habitación de 2 por tres de concreto puro, y tiene cinco metros de altura un nicho dice, por eso su relación con la tumba. Se presenta como conocedor de su entorno, son celdas donde habitan con normalidad dos internos. Una cama sobre la otra un retrete y una canilla, el olor que irradia el hueco donde esta el inodoro te hace llorar los ojos, picar la garganta, esta muy bien vestido me dice que anoche se tiño el pelo (ostenta el pelo teñido de un amarillo rubio), las cejas la tiene bien depiladas y usa población, siempre peleo, tener conducta dentro de la cárcel esta mal visto por el y por su rancho (grupo de pertenencia), el no estudia, no va a misa, ni ninguna actividad realizada por la jefatura, solo baja a cancha donde el carnet(aval del SPB que le da legitimidad a su trabajo) lo tiene el rancho por lo que se siente seguro. pañuelo en el cuello, cuando quise preguntarles por esas particularidades solo me dijo “son modas”. La vida del paragua la describo como rupturas y rupturas constantes, su papa un correntino que para evitar el enrolamiento en el servicio militar obligatorio en el año 82 lo llevaría a Malvinas deserto del llamado de un infame estado que se batía a duelo con un imperio, se vino a la villa Carlos Gardel, mas conocida como fuerte apache, en ese lugar conoció a Elsa, una joven paraguaya que venia a probar suerte a Buenos Aires, tuvieron 2 hijos, uno es el paragua, me aclara que el es argentino, que nació aca que asi le dicen porque cuando era chico y su mama lo iba a buscar a la esquina los gritos inconfundibles del acento guaraní era objeto de burla de sus amigos por lo que el tiempo forjo su nombre. P: La gorra me dice Lescano Burgos Andres para mi familia y amigos soy el paragua. Soy el paragua aca y en todos lado. El padre probo surte en la policía pero encontró otra forma de ganar dinero, robaba bancos, depuse de una condena de nueve años el papa del paragua salio en libertad, para ese entonces nuestro entrevistado ya había pasado por dos institutos de menores, su vinculación con el delito y las drogas lo fue marcando. Cuando cumplió trece años una banda mixta integrada por ladrones y policías se enfrentaban a balazos fuera del banco ROIS de San Justo, el atraco termino con la muerte de tres ladrones y dos efectivos de la policía, uno de los ladrones muertos era el padre del paragua, el cae detenido hasta la mayoría de edad, de ahí lo máximo que estuvo en la calle fueron cuatro meses. P: La primera vez a los catorce años caí por robo agravado y homicidio reiterado en un banco, robo automotor y encubrimiento. Recién aprendía a manejar, éramos nosotros… un trucho17, cuatro pistolas, dos años y siete meses re verdegueado en un instituto d maxima (sufrido, golpeado, maltratado) por los celadores un odio…, a los 16 me fugue del cementerio de Podesta, había ganado de chamuyo al juez de menores después de dos 17 Automóvil robado. Disece también de algo falso, no original. años y seis meses poder visitar la tumba de mi padre ya que en su velorio y su entierro la gorra no me dejo ir. Estuve un año y dos meses fugado. El art. 1º de la ley nacional 24660 de ejecución de la pena privativa de la libertad dice “ la ejecución de la pena privativa de la libertad en todas sus modalidades, tiene por finalidad lograr que el condenado adquiera la capacidad de comprender y respetar la ley, procurando su adecuada reinserción social”… el art. 4º de la ley de ejecución de la provincia ley 12.256 dice “el fin ultimo de la presente ley es la adecuada inserción social de los procesados y condenados a traves de la asistencia o tratamientos y control. La entrevista se da en su celda (pude entrar al pabellón ya que el encargado que esta de turno lo permitió por ser conocido de mis actividades en el área de educación) y otra parte en la dirección del centro educativo donde pude grabar parte de la entrevista. No a todos se les permite ingresar a pabellones. E: ¿De que unidad venís? P: de la 30 (unidad Nº 30 de General Alvear), de un pabellón peleador. E: ¿Hace cuanto estas preso? P: ahora desde el 2011 pero le vengo pegando derecho desde los 14, 15 en total. E: ¿Qué se necesita para ser limpieza? P: primero actitud, una buena política, esto es ser maldito con el maldito. La mía y la de mi rancho (grupo de pertenencia) si no se lo conoce al que ingresa se lo tira al piso y se lo roba, si es chorro le damos la oportunidad a que pelee, ojo legal faca a faca. Nunca la chanchada de atar18. En el año 2002 tras las múltiples muertes y gravísimas heridas irreparables como la perdida de ojos brazos amputación de piernas etc. En la unidad 30 de Alvear los jefes de sector llamaron a los limpiezas de población y les dijeron que no pelen mas, que si no era por algo grave que dejen de medirse todo el dia a las puñaladas, los que ingresaban a los pabellones de población eran robados por el rancho que dominaba el pabellón, los pibes que ingresaban no se dejaban robar lo que se desataban combates a muerte, el jefe les tiro una, “no los lastimen mas atenlos”, los primeros ingresos a los pabellones eran atacados y atados de pies y manos y eran llevados a la 18 Se ataca de a uno o mas personas a uno se los ata de pies y manos, cuando se esta reducido se lo lleva hasta la puerta de ingreso del pabellón. Es utilizada en los últimos tiempos en los robos en cantris o casa. Se empresintan (atan) manos y pies. rastra hasta la reja de entrada del pabellón, la humillación que tenia este era irreparable, “te cabio la atada mono”, a los pibes. Chanchito no eso es un invento d la policía que los chorros aprendieron rápido. E: ¿Que trabajo realiza? Hoy en dia se trabaja para la policía. El paragua rojo de euforia se golpearse el pecho vociferando “…yo soy chorro y me re paro de mano”. “… yo me re-paro de manos, yo peleo.” Con una frazada auspiciando de poncho19 y una faca en la otra se inicia una pelea, el ritual que el mundo del crimen utiliza en la carcel para medir su valor. (NOTA DE CAMPO) La selección que hace el individuo de cómo vivir lo lleva a recrear distintos lugares, distintos ambientes, ASI la cárcel se torna el camino selecto de ciertos sujetos en una carrera amoral, su carrera delictiva. Los que presentan ciertas características de adaptación al medio podrán sobrevivir Y continuar. Esta adaptación esta anudada a un sin fin de rituales que no hacen mas que a la regeneración y reproducción del mundo del crimen. La cárcel esta vista de dos formas como el lugar de resocializacion que el sistema judicial utiliza para cumplir la pena impuesta, sea efectivamente cumplida resguardando la integridad física y moral del detenido con múltiples formas de avanzar en la pregresividad a través del estudio y la educación; y por otro lado como un aislamiento perpetuo, repleto de significados propios, repleto de una guerra interna lejos de los ojos del común. “La cárcel es de los chorros” dicen los nativos, “la cárcel es mía ahora dice el nuevo jefe de penal”, tras un frustrado intento de motín en el año 2001 en la unidad 1 de Olmos los oficiales de control pusieron un cartel grande en la entrada donde decía “aguante la policía, oficiales 1 presos 0”. La disputa por los espacios la constante guerra entre presos y guardias sobrevive inmutable ya que su gestación es en el antagonismo. La adaptación por parte de quien ingresa al sistema penal en la provincia de Buenos Aires tiene las particularidades que se impregnan en el preso de tal forma que lo crean, 19 Poncho: si bien acá no hay diferencia entre el medio libre y la cárcel en este objeto el valor simbólico es inmenso, el poseedor de un poncho en poseedor de una inclinación hacia la pelea, el portador de este objeto ostenta valor y valentía y abre una puerta imaginaria a los demás nativos donde invita a probar su valentía a través de la pelea. Diccionario “perro me da un marroco”. Maduri publicación mimeo. lo motivan, lo forman, Congelando su sociabilidad CON EL AFUERA Y fortalece sus vínculos en el adentro20. Esta sociabilidad anomica crea en el preso nuevos valores lo que cambia sus representaciones a tal forma que se utiliza su fuerza par dominar los espacios donde el SPB se abstiene de intervenir dejando en el preso la gobernabilidad de los espacios creando grupos y subgrupos propios del mundo carcelario. Construyendo un yo artificial, son pibes de entre 24 y 40 años que creen que pertenecen a la “mafia”, que su buen desenvolvimiento dentro de los penales fue siempre en los rankin, se dice de la escala en los lugares de preferencia entre los nativos en cuanto al trabajo dentro de la institución. En la cárcel se sabe todo de lo que sucede en su universo, el tumbero tiene bien estratificada todos los penales de la provincia, sabe quien esta y que papel cumple en el penal, quienes son los limpiezas y quienes son los jefes de penal. Hay una lectura en que se ve al limpieza como el lugarteniente de los jefes de penales, si el jefe de penal es tumbero la línea de mando será así, y se podrá obtener un pabellón tranquilo los informes bien todo por sumas de dinero, el pabellón 9 de la unidad 48 en el año 2013 se vendía las camas a 1000$ mensuales. ¿Qué ventajas puede tener pagar por un pabellón? Vivir tranquilo fuera de las “tumbeadas”. Las sucesivas peleas y robos que se producen en la cárcel hacen que el que tiene pague por un pabellón tranquilo donde la política la maneje la policía y no el preso. Asi la personalidad entendida como el entramado intrínseco del aprendizaje social y de las experiencias que proporciona el ambiente en la cárcel son negativas ya que el sujeto esta anudado en este contexto. La cárcel no puede modificar la identidad del sujeto prisionizado sino tiene que brindar las herramientas para reducir la vulnerabilidad del sujeto que lo llevo a tal situación. La falla del tratamiento vulnera al externado21 dejándolo solo en la fragilidad del sistema que lo había puesto tras las rejas. Poder ver la cárcel como se presenta, como instrumento de segmentación, coerción y movilización social. Los nativos están cargados de valores estructurales que se llaman 20 Existe todo un mercado de intercambio dentro de la cárcel, a los ojos de la nueva sociología económica se pueden ver la triada del don, dar, recibir y devolver, estas cosas intercambiables pasan a ser cosas o personas. En el Chat tumbero se puede oír “alquilo cartuchera”, haciendo referencia del alquiler de una mujer para transportar cualquier cosa dentro de la cárcel. 21 Quien recupera su libertad tras haber pasado por una institución penal. berretines, lo que resulta de la sumatoria y configuración de los valores del ámbito delictivo y los propios del mundo carcelario, como la traición, el odio, el amor, el crimen, la venganza, los celos, la odisea, como grandes tragedias griegas este planteamiento cargado de valores ordena el campo. Identidad es la respuesta a las preguntas que soy, de donde vengo y hacia donde voy y apunta también a que quiero ser. Privar de identidad o forjarla conspira contra el autoconocimiento, la autoestima contra la libertad, y no la física sino la racional, los berretines influyen en la posición que ocupar en la cárcel, pero sobre todo como se piensa la vida explicar estos valores nos proporcionaran herramientas para interpretar los cambios que en el flujo de la cotidianeidad se van creando en este espacio. Bibliografía: 1. Goffman Irvin, Internados: ensayos sobre la situación social de los enfermos mentales.- 1ª ed. 8ª reimp.- Buenos Aires: Amorrourtu, 2004 2. Berretines: confianza desmedida hacia si mismo. Cierto orgullo de pertenecer algún grupo determinado futbolista, artista, policía, ladrón etc. Forma cultural de ver la vida. Del lunfardo capricho, deseo vehemente idea fija. Filosofía de vida. Diccionario “perro me da un marroco” Maduri M. mimeo 3. Tenemos dos posturas en la etimología en cuanto al lunfardo, la primera se refiera a una palabra Francesa “LUMBARD” y se refiere a una región de Italia, otros sostienen que el lunfardo viene de “el e’ fardo”, esto es fardo de una tela grande donde los ladrones envolvían su mercadería, tanto una como la otra habla o se refiere a zonas marginales, grises. 4. Miguez, D. y Seman, P.:2006 “entre santos, cumbia y piquetes” la cultura popular en la Argentina, editorial biblio, 2006 5. Revolver, pistola o cualquier arma de puño, el lechucero, palabra que se refiero al 38 corto. 6. Isla y M. C. Valdez Morales, “heridas urbanas” cp. VI los malvados, p257 7. El que habido pasado por múltiples caídas (calle, cárcel) sigue con su filosofía de vida. 8. Grupo de pertenencia dentro de la cárcel, que se fortalecen según vallan sobreviviendo. 9. Lafleur, Alejandro. La institución total en “Relaciones informales en una organización profundamente restrictiva”. Editorial Economizarte 2000. 10. Foucault, Michel. Vigilar y castigar en “Nacimiento de la prisión “Editorial siglo XXI, México 1991. 11. Capeo: traslado brusco de una unidad hacia otra ejerciendo toda la presión por parte del personal de traslado. En este traslado se pierde la totalidad de sus pertenencias. Diccionario perro me da un marroco. Maduri, M. edición mimeo 12. Confianza en si mismo, lógica cultural del mundo del crimen: robar esta bien, la policia es mala, yo soy mejor que vos., yo soy bueno el es gil. 13. Centro educativo dentro del penal 48. tiene autonomía universitaria. Funciona la carrera de sociología y distintos talleres extracurriculares y autogestivos. 14. Es un sobre nombre que utiliza este joven, mas allá que su nacionalidad sea argentino se siente identificado de esa manera. 15. El pibe bueno trabaja en visita, pelea con faca(cuchillo casero), donde le toque estar en alguna de las 52 cárceles que hay en la actualidad en la provincia el trabaja en visita o de limpieza, siempre vivió en población, siempre peleo, tener conducta dentro de la cárcel esta mal visto por el y por su rancho (grupo de pertenencia), el no estudia, no va a misa, ni ninguna actividad realizada por la jefatura, solo baja a cancha donde el carnet(aval del SPB que le da legitimidad a su trabajo) lo tiene el rancho por lo que se siente seguro. 16. Automóvil robado. Disece también de algo falso, no original. 17. Se ataca de a uno o mas personas a uno se los ata de pies y manos, cuando se esta reducido se lo lleva hasta la puerta de ingreso del pabellón. Es utilizada en los últimos tiempos en los robos en cantris o casa. Se empresintan (atan) manos y pies. 18. Poncho: si bien acá no hay diferencia entre el medio libre y la cárcel en este objeto el valor simbólico es inmenso, el poseedor de un poncho en poseedor de una inclinación hacia la pelea, el portador de este objeto ostenta valor y valentía y abre una puerta imaginaria a los demás nativos donde invita a probar su valentía a través de la pelea. Diccionario “perro me da un marroco”. Maduri publicación mimeo. 19. 1 Existe todo un mercado de intercambio dentro de la cárcel, a los ojos de la nueva sociología económica se pueden ver la triada del don, dar, recibir y devolver, estas cosas intercambiables pasan a ser cosas o personas. En el Chat tumbero se puede oír “alquilo cartuchera”, haciendo referencia del alquiler de una mujer para transportar cualquier cosa dentro de la cárcel. 20 Quien recupera su libertad tras haber pasado por una institución penal.