A CTUALIDAD COLEGIAL Landelino Lavilla, Balanza de Oro de la Justicia Las Fuerzas Armadas reciben el premio a la Convivencia y a la Tolerancia otorgado por los procuradores Las Fuerzas Armadas Españolas recibieron en manos del ministro de Defensa, José Bono, el premio a la Convivencia y a la Tolerancia otorgado por el Consejo General de Procuradores. Se ha querido destacar así la labor llevada a cabo por nuestros ejércitos en las misiones de paz y humanitarias desarrolladas en el exterior. 22 / PROCURADORES • Agosto 2005 Landelino Lavilla, por su parte, consejero permanente de Estado, recibió en el mismo acto celebrado el pasado 16 de junio la Balanza de Oro de la Justicia, concedida anualmente por el Colegio de Procuradores de Madrid, por su labor como “arquitecto de la construcción jurídica de la Transición”. a entrega de los premios, que sirve también como fiesta institucional del Consejo General de Procuradores, contó como siempre con una altísima representación del mundo de la Justicia. Desde el ministro, Juan Fernando López Aguilar, pasando por el fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido, o el presidente del Consejo de Estado, Francisco Rubio Llorente. También estuvo acompañando al ministro José Bono el Jefe del Alto Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), general Félix Sanz. Asimismo, no faltaron a la cita Enrique López, portavoz del Consejo General del Poder Judicial; el secretario de Estado de Justicia, Luis López Guerra; el magistrado del Tribunal Constitucional Eugeni Gay; numerosos magistrados del Tribunal Supremo, entre los que se encontraban tres presidentes de sala; Ignacio Astarloa, secretario ejecutivo de Seguridad y Justicia del Partido Popular, y Jean Pierre Garnerie, presidente del Comité de Postulantes de Justicia Europeos. También acudieron a la cita el presidente del Tribunal Superior de Justicia y el juez decano de Ma- L Eugenio Gay, magistrado del Tribunal Constitucional, conversa con Luis López Guerra, secretario de Estado de Justicia. drid, el decano de los abogados de la capital, varios altos cargos del gobierno anterior, miembros del Consejo del Estado, el portavoz de la Unión Progresista de Secretarios, así como numerosos fiscales, magistrados, empresarios, representantes de la universidad, de las distintas profesiones jurídicas, y de los medios de comunicación. Entre estos últimos, merece mención especial Bonifacio de la Cuadra, un histó- Los ministros José Bono y Juan Fernando López Aguilar junto al ex fiscal general del Estado, Leopoldo Torres. rico de la información de justicia y tribunales, miembro fundador del diario El País, recientemente jubilado y que acudía así a su última fiesta de los procuradores como periodista en activo. Y por supuesto, tampoco faltaron decanos de los Colegios de toda España y una nutrida representación de los procuradores de Madrid. Como reconoció el ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, la fiesta institucional de los procuradores se ha convertido año tras año en “una de las pocas buenas noticias” que siempre trae la primavera, y que permite reunir en un ambiente de confraternización a todos los representantes del mundo jurídico y judicial. Es la segunda ocasión en la que el Consejo General de Procuradores de España concede el premio a la Convivencia y a la Tolerancia. El año pasado lo recibieron el Instituto Balear de la Mujer, por su ejemplo en la lucha contra la violencia de género, y el Centro de Emergencias de Madrid 112, por su labor en los atentados del 11 de marzo de Madrid. Agosto 2005 • PROCURADORES / 23 Cándido Conde Pumpido, fiscal general del Estado. Respecto al galardón concedido este año, el presidente del Consejo General de Procuradores, Juan Carlos Estévez aseguró que, además de defender nuestras libertades y derechos, las Fuerzas Armadas se convierten en fuerzas de paz dispuestas a acudir a todos los lugares del mundo en conflicto donde sea necesaria su presencia para llevar un mensaje de colaboración y desarrollar su labor humanitaria. Aprovechando la presencia del ministro José Bono, el presidente de los procuradores recordó una anéc- Fernando Ledesma, consejero de Estado. dota. En febrero de 1981, siendo precisamente presidente del Congreso de los Diputados Landelino Lavilla, un “prometedor abogado” era entonces secretario de la Mesa del Congreso. Al día siguiente del golpe de Estado, el letrado tenía un señalamiento en un juzgado y no faltó a la cita acompañado de su procurador. Pues bien, ese abogado era José Bono, y su procurador el propio Juan Carlos Estévez, quien pudo conocer así de primera mano lo que había ocurrido el día anterior cuando los guardias civiles mandados por Félix Sanz, jefe del Alto Estado Mayor de la Defensa, con Enrique López, vocal del CGPJ. 24 / PROCURADORES • Agosto 2005 Antonio Tejero asaltaron metralleta en mano la Cámara Baja. José Bono agradeció efusivamente a los procuradores el premio concedido a las Fuerzas Armadas. “Sinceramente, creo que lo merecen; son embajadores de nuestro país y no suelen tener el reconocimiento que deberían tener por su trabajo”. El ministro recordó su viaje el mes de diciembre pasado a la antigua Yugoslavia, donde 1.300 soldados españoles cumplen con una misión: “que no se maten” los ciudadanos de un país que antes era uno “y ya van por siete, ya veremos en cuantos acaban”, defendiendo la paz y haciendo frente al fanatismo “insospechado y gravísimo que en aquellas tierras se produce”. Y más merecido un reconocimiento que no se refleja en las nóminas de los soldados, advirtió Bono. “Cuando un brigada del ejército, con 21 años de servicio, cobra menos que un guardia urbano recién ingresado en Madrid, o que un policía autonómico recién ingresado, algo no funciona bien. Merecen el reconocimiento y obedecen además entre quienes no tienen buena prensa, porque lamentablemente nuestro país vive también con servidumbres históri- cas. En el siglo pasado tuvimos dos dictadores, y los dictadores podían haber tenido otra profesión pero tuvimos la mala suerte de que los dos fueron militares”. Ejército y nación española Pero como también ratificara el ministro de Justicia, esa imagen pertenece al pasado. Hoy, a las Fuerzas Armadas, indicó Bono, “se vean desde el ámbito en que se vean, no las aventaja ninguna corporación en puntualidad y cumplimiento con el mandato constitucional. Es un verdadero lujo saber que los ejércitos de España y la Armada están puntualmente dispuestos a cumplir con el único imperio que en democracia existe: el de la ley. Y de esto puedo darles fe”. En este punto, el ministro de Defensa aprovechó para hacer un apunte de evidente contenido político. Los militares, dijo, han hecho del servicio a la nación su profesión. “Y cuando digo a la nación quiero referirme a la única nación que reconoce la Constitución o, si lo prefieren, a la única que tiene relevancia constitucional mientras no se modifique la Constitución. Y en este sen- De izda. a dcha.: Jean Pierre Garnerie, presidente del Comité de Postulantes de Justicia Europeos; Luis Martí Mingarro, decano del Colegio de Abogados de Madrid; Francisco Rubio Llorente, presidente del Consejo de Estado; y Javier Mª Casas, presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid. tido son garantías, porque la nación es garantía de igualdad. No están garantizando sentimientos que tuvieran los Reyes Católicos para la unidad, ni están defendiendo planteamientos de Felipe II en la historia de la unidad de España. No, están defendiendo lo que España evoca y significa constitucionalmente, que no hay ningún planteamiento rancio”. “Es lo más moderno que se me ocurre –añadió–, la igualdad entre Juan Carlos Estévez entrega la Balanza de Oro del Colegio de Madrid a Landelino Lavilla. todos los españoles. Esto es lo que garantiza la Constitución, y la nación, quizá por eso no esté dispuesto a pedir perdón ni permiso para representarlo, en este caso, al recibir el premio a las Fuerzas Armadas como ministro de Defensa. Y en cualquier caso, como español de a pie, no pienso pedir perdón ni permiso para decir que quiero a mi país al igual que un francés puede querer al suyo, o como puede querer cualquier otro nacional al suyo”. Y por si quedaban dudas, se permitió una broma ácida: “no quiero caer en el ridículo de quien es capaz de decir que ha hecho una gira artística cantando por Francia, Alemania y por Italia, y ahora se propone hacerla por el Estado español. Pensará cantar en los ministerios, pienso a veces”. El ministro Bono insistió en su agradecimiento al premio concedido a las Fuerzas Armadas de España porque “de algún modo, aunque no lo quisieran, este premio también viene a evocar lo que las Fuerzas Armadas garantizan, y es, a las órdenes del Gobierno, que pagar más impuestos definitiAgosto 2005 • PROCURADORES / 25 vamente no da más derechos. Ése es el principio de solidaridad y de igualdad que hemos firmado en la Constitución que uno de sus arquitectos, aquí presente, probablemente pueda también apoyar tantos años después de que la misma se aprobara”, dijo en alusión a Landelino Lavilla. “Vivimos el período continuado de libertad más largo en la historia de España, si se excluye el de la Restauración. Eso sí, entre un dictador y un rey se encargaron que de cada tres días de Constitución, famosa por la restauración, dos tenían sus- nistas de aquel ciclo histórico “irrepetible”, con especial mención a Adolfo Suárez, quien también recibió la misma Balanza de Oro en el año 2002. En sentido parecido, el ministro de Defensa, José Bono, resaltó la personalidad de Landelino Lavilla, “a quien siempre llamo presidente”. “Es evidente que pertenecemos y pertenecimos a partidos políticos diferentes y enfrentados, pero es verdad que hoy siento al precederle protocolariamente una cierta incomodidad. Donde esté Landelino, y yo me encuentre, siempre estará primero”, aseguró Bono en su discurso tras recoger el premio a las Fuerzas Armadas. “Y no es ésta una concesión litúrgica o meramente protocolaria”, añadió el ministro de Defensa. “Landelino Lavilla y yo estuvimos juntos en aquella Mesa del Congreso que sólo votó una vez en cuatro años y más valiera, por los otros, que no hubiera votado, porque votamos para no estar en la OTAN. Landelino supo trasladar una idea institucional de tal calibre que muchos años después goza de ese respeto y de ese reconocimiento que deben tener los buenos españoles. Y como creo que la política es importante, y le hemos dedicado muchos años Al acto acudieron numerosos fiscales, magistrados, empresarios, representantes de distintas profesiones jurídicas y de la universidad, así como decanos de los Colegios de Procuradores de toda España. y muchas horas, pero creo que la vida es más importante que la política, por eso me agrada expendidas las garantías constitucio- el titular de la cartera. Así, quiso que traordinariamente coincidir continales. Este período es el más largo, y sus palabras sonaran como un reco- go, aunque en mi caso sea por razón no está mal que nos reunamos con nocimiento especial a la “labor im- instrumental”. esta excusa también a celebrarlo”, presionante” y a la huella que dejó Años anteriores recibieron la Baconcluyó José Bono. tras de sí la generación de hombres lanza de Oro del Colegio de Madrid, y mujeres que protagonizaron la por citar algunos, el ex presidente Homenaje Transición, “arrastrando tras de sí del Gobierno, Adolfo Suárez, el ex a una generación muchas dificultades” y asumiendo ministro Francisco Fernández OrEn cuanto a Landelino Lavilla, riesgos. “Gracias, Landelino Lavilla, dóñez, el Defensor del Pueblo, EnBalanza de Oro de la Justicia, Juan por esa ejecutoria impecable, inta- rique Múgica y el alcalde de La CoCarlos Estévez destacó la persona- chable, de realizaciones”, añadió el ruña, Francisco Vázquez. lidad del homenajeado, al que defi- ministro, quien quiso hacer extensiRAÚL DE ANDRÉS nió como un jurista polifacético re- vo el homenaje al resto de protago26 / PROCURADORES • Agosto 2005 conocido por todos que merece una distinción especial por su trabajo como arquitecto jurídico de la Transición política española. Resaltó además que Landelino Lavilla es un hombre muy querido por los procuradores, de ahí que este premio debía ser entendido como un pequeño pago “salido del corazón”. El ministro de Justicia, Juan Fernando López Aguilar, aseguró por su parte que se sentía orgulloso de haber podido conocer en los últimos años a Landelino Lavilla en los almuerzos que periódicamente celebran los ex ministros de Justicia con Una vida consagrada a la política y al derecho ras recoger la Balanza de Oro, Landelino Lavilla expresó su más sincero agradecimiento a los procuradores por hacerle protagonista de un acto al que, por cierto, había asistido varias veces en años anteriores. Landelino Lavilla se definió como una persona que ha ejercido sus vocaciones y su profesión en torno al Derecho, y consideró bien evocado el recuerdo a la labor que tuvo que desarrollar en la Transición.Así,definió aquel momento histórico como una etapa en la que un conjunto de personas “tuvimos el privilegio de asumir responsabilidades y funciones que implicaban dirigir el proceso de transformación política de España, y hacerlo procurando despertar la ilusión, el entusiasmo y la adhesión de todos los españoles”. Tras realizar un entrañable y emocionado recuerdo de la figura de Adolfo Suárez, de cuya mano entró en el Gobierno como ministro de Justicia, recordó que tenían un plan muy claro,muy directo,respecto a lo que debía hacerse en aquel período crucial para la reciente historia de nuestro país. Período que además, era consciente, sería muy limitado en el tiempo. “Se cambiaron las cosas como no se pensaba que pudieran cambiarse, cuando entre temores y esperanzas la mayoría de los españoles estábamos un tanto perplejos acerca de cuál sería el rumbo por el cual discurriría nuestro país”, afirmó. “Yo creo que en un plazo relativamente breve aquellas perplejidades, aquellos temores, se trocaron en ilusiones y en entusiasmo”. Los españoles se movilizaron, rememoró Landelino Lavilla,“y no por obra nuestra, sino porque realmente el pueblo quería tener la conciencia de que había quien sabía cómo hacer aquello, estaba dispuesto a hacerlo, y el pueblo se lanzó con absoluta decisión”. El ex ministro de Justicia recordó cómo en el referéndum del 15 de diciembre de 1976 se respiraba un aire de “festividad democrática”, iniciándose un proceso que culminó con éxito porque “contamos con todas las ayudas que T fueron necesarias”, pese a la cantidad de problemas que se suscitaron en aquellos frenéticos meses. Sin embargo, el homenajeado quiso hacer una advertencia. Consideró que se trata de un error sentir “excesivamente” la nostalgia de la Transición. “No hay que sentir nostalgia –agregó–, cada período tiene sus circunstancias, sus exigencias, sus características, sus responsables”, y los períodos que a continuación se abren encuentran también, “porque ésa es la grandeza de los pueblos y de la democracia, su capacidad de alumbrar las personas necesarias”para asumir los nuevos retos.Por tanto,insistió,no hay que mostrar nostalgia, pero sí recordar que “hubo un momento en el que, por el esfuerzo colectivo de todos, España logró su transformación, se establecieron las bases de una convivencia en paz por parte de todos los españoles, y ése es un tesoro que nunca se debiera dilapidar”. Landelino Lavilla Alsina (Lérida,1934,abogado,casado, cuatro hijos),tiene un extenso bagaje jurídico y político a sus espaldas.Censor letrado del Tribunal de Cuentas,letrado del Consejo de Estado, fue senador por designación real en las Cortes constituyentes. Estrecho colaborador de Adolfo Suárez, fue ministro de Justicia entre 1976 y 1979 y presidente del Congreso de los Diputados en la primera legislatura constitucional. Desde allí le tocó vivir precisamente el asalto al Congreso protagonizado por el teniente coronel Tejero el 23 de febrero de 1981.En 1982 fue elegido presidente de UCD y cabeza de lista de la coalición centrista en las elecciones generales de ese año.Tras la victoria socialista y la debacle del hasta entonces principal partido de la Transición,Landelino Lavilla renunció a su escaño y pasó a formar parte del Consejo de Estado,del que es en la actualidad consejero permanente. En algún momento fue serio candidato a presidir el Consejo General del Poder Judicial.Es académico de número de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación y vocal de la Comisión General de Codificación. Agosto 2005 • PROCURADORES / 27