CENTENARIO DE LA COMPRA DE LAS CASAS EN LAS QUE VIVIÓ MIGUEL DE CERVANTES El 24 de Octubre de 1912, tras el proceso que llevó a la identificación de la casa del nº 14 del Rastro de los Carneros, como la vivienda del escritor Miguel de Cervantes durante su estancia en Valladolid, ésta fue adquirida por el Marqués de la Vega Inclán, comisario regio de turismo. Mr. Archer Huntington, presidente de la Hispanic Society of America de Nueva York, amigo del Marqués, adquiere las casas contiguas (las correspondientes a los números 12 y 16). Estas casas se compraron en nombre del rey Alfonso XIII, con la intención de preservar tan singular edificio y darle un uso cultural, convertirlas en Biblioteca y Museo. Al tiempo que esto sucede, Mr. Archer Huntington emprendió una gran empresa, fotografiar tipos y lugares por toda España. Una serie de fotógrafos viajan por nuestro país recopilando la “esencia” de España. ENTRADA GRATUITA Sala América Museo Casa de Cervantes Horario Martes a sábado: 09:30 a 15:00 h Domingos y festivos: 10:00 a 15:00 h Más información en: http://museocasacervantes.mcu.es Una de sus mejores fotógrafas es Ruth Matilda Anderson. Fue contratada en 1921 para iniciar el proyecto experimental de las expediciones fotográficas de Huntington. 24 OCT 24 ENE LA CASA DE CERVANTES La exposición muestra algunas de las imágenes tomadas por esta fotógrafa en uno de sus viajes a España en 1925. Con ellas, queremos conmemorar el centenario de un hecho que posibilitó la creación de la institución que hoy es el Museo Casa de Cervantes. a través del objetivo de Esta exposición ha sido realizada gracias a la colaboración de: RUTH MATILDA ANDERSON EXPO SICIÓN DON BENIGNO DE LA VEGA INCLÁN, MARQUÉS DE LA VEGA INCLÁN MR. ARCHER HUNTINGTON Y LA HISPANIC SOCIETY OF AMERICA RUTH MATILDA ANDERSON Vallisoletano de personalidad e ideales liberales, formaba parte de la intelectualidad vinculada a la Institución Libre de Enseñanza y estaba embarcado en la modernización del país desde postulados reformistas. Autodidacta y viajero, visitó monumentos y museos, cuya organización y colecciones le interesaron especialmente y le proporcionaron conocimientos que le fueron muy útiles para sus planes de creación de nuevos museos en España. Archer M. Huntington (1870-1955) hijo de un empresario multimillonario, sintió desde muy joven un gran interés por el coleccionismo, y siempre tuvo la intención y el firme deseo de crear un museo y una biblioteca alguna vez. Algunas de las imágenes que conserva la Hispanic Society, pertenecen a la Casa de Cervantes, y fueron captadas con la cámara de esta fotógrafa, en sus diversos desplazamientos a España bajo las directrices de Huntington. Lugar de especial interés no sólo por su visión de lo cotidiano en un día cualquiera de la Biblioteca Popular Cervantina. En 1911, a instancias del propio Marqués se crearía la Comisaría Regia de Turismo. A través de ella llevó a la práctica sus teorías sobre la conservación del patrimonio artístico, aplicadas a la recuperación de monumentos emblemáticos. Dedicó un apartado especial a la creación de museos y centros culturales, como la Casa-Museo del Greco, el Museo Casa de Cervantes o el Museo Romántico (hoy Museo Nacional del Romanticismo), todos ellos unidos posteriormente por el Patronato de las Fundaciones Vega Inclán, y en los que fijó los criterios metodológicos y el modelo de museo ambientalista. El nuevo exponente de museo creado por el Marqués, recreaba una época en sí misma o a una personalidad significativa. Con esta fórmula, insertaba a los protagonistas en su contexto vital, salvando y reconstruyendo los espacios a ellos asociados para recrear formas de vida ya extinguidas. Para ello, era esencial contextualizar en el edificio idóneo y con el refuerzo de otros elementos de menor trascendencia, aquellos objetos que se consideraban fundamentales para conseguir la atmósfera buscada. Consiguió contar con el respaldo institucional y económico del rey, que en el caso concreto del Museo Casa de Cervantes, aportó de su bolsillo el importe de la compra de la casa del nº 14 del Rastro de los Carneros, convirtiéndose él mismo en mecenas y facilitando así su inclusión en los Presupuestos Generales y la concesión de subvenciones, asignando la cantidad necesaria para su funcionamiento a partir de 1915, y nombrando al Marqués como su delegado-patrono, que se ocupó directamente de gestionar la institución. En otoño de ese mismo año, tras terminar el proceso de restauración de las mismas, con la colaboración del Ayuntamiento de la ciudad, (se instaló un área ajardinada con una fuente renacentista y un atrio delante de la casa, cerrada toda ella con una verja), el rey Alfonso XIII visitará e inaugurará las casas. Centró sus intereses en España, por lo que estudió español y desde 1892, viajó con frecuencia a nuestro país, y pasó tiempo recorriéndolo y conociéndolo. Cuando Huntington fundó The Hispanic Society of America en 1904, quiso que fuera una “biblioteca pública, museo e institución docente gratuitos” que impulsaran el conocimiento de la cultura española, según se recoge en la escritura de fundación de la institución. Pretendía dar a conocer lo hispano en Estados Unidos, por lo que fue recibida con orgullo y agradecimiento en nuestro país, tendiendo un puente en las relaciones diplomáticas. El comienzo de la relación y colaboración entre el Marqués y Huntington es posible que tuviera lugar en el entorno de artistas, aristócratas e intelectuales entre los que ambos se movían. Ambos tenían mucho en común y llegaron a sintonizar extraordinariamente. Colaboraron en diversos proyectos conjuntos. Además cuando se crearon las Fundaciones Vega Inclán, también fue nombrado en 1931 Presidente Honorario del Patronato. En 1912 Huntington visita a los reyes durante su estancia en Madrid, muy interesados por sus adquisiciones de arte español. Les aseguró que no tenía intención de privar a España de su patrimonio artístico, consciente del apetito insaciable de los norteamericanos por el arte y la cultura europeos. La confianza de los monarcas se hizo palpable cuando el Marqués de la Vega Inclán consiguió unirlos en una acción de mecenazgo conjunta con la adquisición de la Casa de Cervantes en Valladolid. Su interés por la vida y cultura españolas fue creciendo gradualmente a lo largo de su vida, y pronto decidió incluir un archivo fotográfico en el gran proyecto que fue la Hispanic. Para apreciar estas imágenes, hay que contemplarlas en el marco de la historia de la institución: cómo entendía Huntington el papel de esta herramienta en el museo que había creado; cómo se dispusieron a reunir estas obras él y sus conservadores, y por último, cómo patrocinó las expediciones fotográficas a España. En su formación académica aprendió el potencial pictórico, el encuadre y el empleo del enfoque suave, pero sobre todo a pensar en la fotografía como una forma de arte. Trabajó el resto de su vida en la Hispanic Society y bajo la supervisión de Huntington desarrolló su técnica como fotógrafa y su faceta investigadora. Las más de 14.000 fotografías de Ruth Matilda, ocupan un capítulo destacado en este proyecto, pero su carrera debe ser estudiada a la luz de la historia de la colección, ya que fue ésta la que determinó la forma y los detalles de su trabajo. Anderson tenía la intención de crear una colección integral, centrándose principalmente en la vida cotidiana. Realizó sus fotografías como documentos de lugares y de personas que creía típicos de una España auténtica, y no como meras expresiones estéticas. El contacto directo tomado con la gente que conocía y la simpatía que despertaba entre ellos, le permitieron conseguir unas tomas tan excepcionales. Dejando constancia de una España intemporal, con una factura naturalista y sin esfuerzo. Gracias al objetivo de R. M. A., a su disciplinada estrategia fotográfica y también a su meticulosa sensibilidad, Huntington logró modelar, dar contenido específico y posteridad, a sus ideales museísticos y recopilatorios de las tradiciones españolas. Sin su labor fotográfica, sin sus diversas misiones por tierras de España, las expectativas de Huntington por el entendimiento enciclopédico de la tradición castiza española desde la imagen, habrían quedado diluidas en un coleccionismo global y neutro. Las fotografías de Anderson reflejan la visión de Huntington sobre lo que constituía la verdadera España, concuerdan perfectamente con su planteamiento y contemplándolas, sólo cabe decir que el proyecto experimental de documentar fotográficamente nuestro país, salió mucho mejor de lo que ambos llegaran a imaginar.