Film-ficha - El Perpetuo Socorro
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Chandor, JC. Film-ficha 90 Margin Call TÍTULO ORIGINAL Margin Call AÑO 2011 DURACIÓN 109 minutos PAÍS , USA DIRECTOR JC Chandor GUIÓN JC Chandor MÚSICA Nathan Larson FOTOGRAFÍA Frank G. DeMarco MONTAJE Pete Beaudreau GÉNERO Drama | Crisis económica actual. Bolsa & negocios. Cine independiente PRODUCCIÓN Michael Benaroya, Neal Dodson, Zachary Quinto, Robert Ogdent Barnum, Corey Moosa y Joe Jenckes PRODUCTORA Lionsgate Films / Myriad Pictures / Benaroya Pictures REPARTO Kevin Spacey (Sam Rogers), Paul Bettany (Will Emerson), Jeremy Irons (John Tuld), Zachary Quinto (Peter Sullivan), Penn Badgley (Seth Bregman), Demi Moore (Sarah Robertson), Mary McDonnell (Mary Rogers), Stanley Tucci (Eric Dale), Simon Baker (Jared Cohen). PREMIOS 2011 - Oscar: Nominada a mejor guión original; Festival de Berlín: Sección oficial largometrajes; Círculo de críticos de New York: Mejor debut; National Board of Review: Mejor director novel; Premios Gotham: Nominada a Mejor reparto; Independent Spirit Awards: Mejor ópera prima. Nominada a Mejor guión novel. Uno de los diez mejores filmes independientes de 2011. WEB OFICIAL http://www.margincallmovie.com/ TEMÁTICA La crisis financiera actual: su origen y sus repercusiones SINOPSIS El film relata la crónica de la vida profesional de ocho directivos bancarios durante las 36 horas que preceden a la debacle financiera de un banco de inversiones. Justo en el instante en que está a punto de descubrir un peligroso agujero en el poderoso banco de inversiones en que trabaja, Eric Dale –jefe analista de la gerencia de riesgo– es despedido de modo fulminante. Obligado a abandonar apresuradamente su despacho, pone en manos de Peter Sullivan –uno de sus colaboradores inmediatos– un pendrive con los datos que estaba trabajando y le pide que termine su investigación. El joven analista advierte enseguida que tiene entre las manos una auténtica bomba de relojería financiera, que va a estallar de un momento a otro, hundiendo a la entidad bancaria. Y es que buena parte de los activos del banco son bonos basura derivados de las hipotecas subprime, sin ningún valor. Alerta a sus superiores. Esa misma noche se convoca una reunión urgente del consejo de administración de emergencia. En ella John Tuld –director gerente del banco– decide deshacerse de esos activos tóxicos, vendiéndolos en veinticuatro horas a quien sea; al mismo tiempo culpa del desastre a Sarah Robertson, la única mujer del equipo directivo del banco. Consciente de las gravísimas repercusiones que ello va generar, Sam Rogers –director adjunto– se resiste por motivos éticos a secundar la medida. Pero lleva treinta y cuatro años trabajando para el banco y no quiere que toda su carrera se venga abajo de la noche a la mañana… Se ve presionado a ejecutar las órdenes de su jefe, con lo que se desencadena un torbellino de decisiones y operaciones de trascendental alcance, tanto financiera como moral. EL REALIZADOR: JC CHANDOR Sabemos poco sobre la biografía del joven guionista, productor y realizador estadunidense Jeffrey C. (JC) Chandor. Nace en 1976. Crece, primero en las afueras de Nueva York, luego en Londres (Inglaterra). Cursa "Es- JC Chandor – Margin Call '11 Film-ficha 90 tudios Americanos y Cinematografía" en el College of Wooster de Ohio, en el que se gradúa en 1996. Amplia sus estudios sobre "Producción cinematográfica" en la Universidad de Nueva York. De su tiempo de estudios evoca él mismo: "Mis notas en la universidad fueron buenas, pero no excelentes; en aquel momento me interesaban más otros temas, como el arte, el teatro, el inglés, la historia. Aborrecía las matemáticas y las ciencias. Terminé metiéndome en el teatro y tomando clases de fotografía y pintura". Recuerda especialmente el apoyo que encuentra en los profesores Dick Figge y Susan Hansen, que le asesoran en la preparación del examen en la asignatura de cine cultural. Para la prueba de su examen final Chandor escribe, filma y edita un trabajo que luego calificará de "una total exageración, excesivamente amplia en todas sus proporciones… Pero –prosigue– he de reconocer que gracias a él obtuve la graduación y conseguí de inmediato mi primer puesto de trabajo". Está casado con la pintora Cameron Goodyear, con la que tiene una niña de siete años y un niño de casi dos. En la actualidad vive con su familia en Providence, Rhode Island. Inmediatamente después de su graduación comienza a trabajar para la Televisión. Durante 15 años presta su voz y su mirada a este medio como director, productor y guionista de anuncios publicitarios, documentales y distintos relatos, trabajos con los que ha cosechado varios premios. Su labor en el mundo de la publicidad es fecundo (incluye una larga lista de clientes como "Subaru Motors of America", "Red Ball Racing", "Major League Soccer", "BMW-Oracle Racing", "America Online", "DC Shoes", y "Carhartt Outdoor Clothing"). Entre su documentales destacan: la serie de tres capítulos de "Discovery Europe", titulada In Pills We Trust; la dirección y producción de una serie de 6 filmes de conciertos para "Warner Bros" (con Sting, Elton John, The Red Hot Chilli Peppers y Beck); la dirección de un episodio piloto de la serie "People of", titulado People of Power (2003). En el mundo la cinematografía propiamente dicha se estrena en 2003 con el cortometraje Despacito, del que es guionista y director. Después de estos 15 arduos años –que él considera de "maduración"– le llega la oportunidad de su vida con Margin Call. Es su ópera prima en el mundo de los largometrajes. Él mismo escribe el guión y la dirige. Entre sus proyectos actuales se encuentran: el guión de un largometraje que se llamará Every Fifth House y dos largometrajes contratados ya por escrito con Warner Brothers, de los que ya se conocen detalles de producción; de uno de ellos –un thriller de carácter internacional– se conoce incluso el título: Portofino. MARGIN CALL: LA PUESTA EN ESCENA No es normal que se encomiende a un principiante –que solo tiene a sus espaldas 15 años de anuncios publicitarios, documentales y cortometrajes en TV– llevar a cabo una película sobre un banco de inversión de Nueva York en momentos críticos, con un elenco alucinante de actores. Pero los responsables de las productoras Lionsgate Films / Myriad Pictures / Benaroya Pictures confiaron en el joven JC Chandor. Y él, sumando el talento acumulado de los actores y sus propias dotes, consigue un film notable. 1. Trasfondo autobiográfico y financiero-social Chandor sabe muy bien desde el principio qué película quiere hacer. Reiteradamente sostiene que se trata de un proyecto muy pensado, en el que ha invertido mucho tiempo de trabajo y al que, sobre todo, respalda un cúmulo de experiencias autobiográficas sobre el tema, así como de acontecimientos candentes en el campo de la actualidad financiera y social. De modo que – confiesa el realizador– entré en el film con esa confianza loca que te proporciona haber estado esperando 15 años para conseguir esta oportunidad. a) La experiencia de proyectos personales fallidos.- Esos 15 años corresponden al tiempo transcurrido entre 1996 (año en que se gradúa y comienza a trabajar profesionalmente) y 2011 (año del estreno de Margin Call); lo que quiere decir, que el tema constituía uno de sus sueños más añorados. Posteriormente (entrevista de octubre de 2011) el realizador ha precisado que el primrubiocar@iscm.edu http://www.redentoristas.org/filmoteca.html 2 JC Chandor – Margin Call '11 Film-ficha 90 mer proyecto real del film data de 2005. En esa fecha abandona durante seis meses su trabajo en el mundo comercial y se entrega de lleno a la terminación de un film, en el que venía trabajando desde hacía unos siete años. Por fin, todo está preparado para comenzar el rodaje. Seis días antes de su inicio, le retiran la financiación. El proyecto se viene abajo. Chandor se siente frustrado y piensa en retirarse de la industria del cine. Durante tres años deja prácticamente de escribir. Su primera hija tiene entonces cinco meses. La inversión hecha en el proyecto cinematográfico ha dejado a la familia al borde de la quiebra. Busca otro campo de trabajo. Cuenta Chandor en su entrevista: Fue entre finales de 2006 y principios de 2007 cuando comencé a percibir un montón de cosas extrañas. Acababa de meterme en un negocio de inmobiliaria. Había comprado, junto con algunos socios, un edificio en el barrio Tribeca del Manhattan neoyorkino, que reconvertimos en apartamentos. Ahora todo el mundo estaba tratando de hacerse rico con la inmobiliaria. Mis socios y yo nos metimos de lleno en este proyecto de alto vuelo, que prometía ser muy sustancioso. Entre mis socios se encontraba un amigo mío arquitecto, que trabajaba para un banquero de alto rango en un banco de inversión de renombre. Nos entrevistamos con él, mientras barajábamos distintas ofertas de compra de nuestro edificio. Nos expuso el plan de un proyecto que él financiaba y que iba a dejar millones de dólares de ganancia. Las cosas no estaban claras. Urgidos por problemas surgidos con uno de los socios y aconsejados por otro asesor acreditado y antiguo especialista en inversiones, que nos instaba a salir de inmediato del proyecto, nos deshicimos del edificio. Apenas pudimos recuperar el dinero invertido en la operación inicial. Un año y medio después, el mundo financiero hizo literalmente crac. Tuve que tomarme en serio volver al trabajo que había realizado con anterioridad. b) El hundimiento de Lehman Brothers (15 de septiembre de 2008) y sus consecuencias.- Chandor dispone de una perspectiva privilegiada para comprender qué ha sucedido –en la realidad– con "Lehman Brothers" y para afrontar con credibilidad –en la ficción– la temática que desea llevar a Margin Call. Como acabamos de ver, él mismo ha sido víctima del desajuste financiero imperante. Pero, además, conoce de cerca el ambiente financiero, sus mecanismos, sus personajes… "No desde el punto de vista técnico –nos aclara–, pero sí desde el punto de vista emocional. ¿Qué les conduce a adoptar las decisiones que toman? ¿Por qué hay gente que se dedica a ese trabajo?". En 2011, el crac financiero se ha posesionado de las sociedades occidentales. Mientras todo el mundo busca explicaciones, Chandor las encuentra en casa: su padre ha trabajado más de 35 años en la firma Merrill Lynch; conoce, pues, por dentro el mundo de las altas finanzas; es más, ha vivido en propia carne y en la de sus compañeros de profesión los avatares del mundo de las finanzas. A la hora de escribir el guión –y, posteriormente, de rodar el film– Chandor echa mano de su experiencia directa –la dimensión emocional– del mundo financiero, vivido en el ámbito familiar. Y cuenta, para moverse con acierto y soltura en la esfera real de las altas finanzas –la dimensión técnica– con el asesoramiento certero de su padre y de un amplio espectro de veteranos del sector financiero: expertos, corredores de bolsa, analistas... Todos ellos van a desempeñar un papel determinante para que la cinta reproduzca con autenticidad los escenarios y personajes del sector financiero. 2. Guión literario El film se apoya en dos pilares básicos: un guión sólido, respaldado en el trasfondo que acabo de señalar; el elenco de actores. Nos ocupamos primero del guión. a) Del borrador al guión: historia de un sueño cumplido.- Instalados ya de lleno en la crisis financiera internacional, Chandor vuelve de nuevo sobre su proyecto. Se pone ante el ordenador y en cuatro días redacta un primer borrador sobre un grupo de analistas y ejecutivos de un banco de inversión de Wall Street. Retrotrae la historia a 2008 (o incluso antes, como él mismo explica). El borrador se centra en los avatares de dicho grupo a lo largo de las 36 horas previas al estallido de una crisis financiera galopante, que amenaza con tragarse al grupo ejecutivo, a los clientes, a toda la empresa. Acabado el borrador, Chandor echa mano de antiguos contactos de su primer puesto de trabajo y lo envía al actor / productor Zachary Quinto y a sus socios de producción. Los productores le citan para una entrevista. Les convence y le firman un contrato en firme, que acepta el guión sobre la base del borrador mrubiocar@iscm.edu http://www.redentoristas.org/filmoteca.html 3 JC Chandor – Margin Call '11 Film-ficha 90 presentado: un original de 81 páginas "lleno de errores de ortografía" –comenta Chandor–, que una redacción posterior perfecciona, colocando cada pieza en su sitio y sin perder de vista el reparto excepcional, que los productores ponen a su disposición. Además, él será el director de su propio guión. A los pocos días nace su segundo hijo. Dos semanas después, el 10 de julio de 2010, Chandor comienza el rodaje de Margin Call. Se filma íntegramente en New York. La oportunidad que había estado esperando toda su vida llegaba en el momento justo. "Probablemente –reconoce Chandor–, si hubiera tenido esta oportunidad hace 10 años, no habría sido capaz de hacer esto. Aunque a los 26 años yo era un chico muy maduro, era ahora el momento en que sabía perfectamente la película que quería hacer. Y me regalaban estos actores que, además, no estaban allí para forrarse de dinero, sino por la razón correcta. Sí, ésta era la película que yo quería hacer". b) Un guión de fuerte consistencia.- Nada en el guión –o luego en el film– permite colegir, en base a deficiencias o carencias inmaduras, que se trata de una ópera prima. No se nota en el film "el lógico temblor, la inseguridad, el subrayado, los excesos o la falta de pulso de tanto autor primerizo. Chandor narra con estilo y tensión esta crónica sobre la desfachatez de los tiburones financieros, su capacidad para sobrevivir a la ruina colectiva que ellos han creado haciéndose aun más ricos, su implacable pragmatismo para engañar a sus competidores y adueñarse de las tablas de salvación cuando el barco se hunde" (C. Boyero). Estamos ante un guión compacto, delineado y desarrollado con milimétrica precisión. Chandor narra con pulso firme y estilo ágil en espacios reducidos; dota su relato de una tensión creciente, que convierte la crónica en un thriller dramático de notable densidad psicológica y moral. c) Planteamiento.- Sin pasar por alto la virulenta actualidad del tema, fueron la consistencia del guión y la frescura de su planteamiento los motivos que sin duda indujeron a los productores a hacerse con los servicios del joven Chandor y a los actores a entregarse tan incondicionalmente a su brillante ejecución. Entre los hitos que dominan el planteamiento del film, cabe apuntar, a mi modo de ver: Dos constantes temáticas, reiteradas, por otra parte, en las manifestaciones del mismo guionista: 1) La confluencia y combinación en la trama de las dimensiones emocional y técnica del tema. 2) La denuncia de la perversión que se ha instalado en las distintas esferas del mecanismo intrínseco del quehacer financiero. Dos móviles u objetivos buscados: 3) La búsqueda de claridad y comprensión sobre la problemática de la crisis financiera actual. Chandor nos adentra en ese farragoso y –para no iniciados– críptico mundo de la economía y las altas finanzas. Y lo hace comprensible. Se necesitan ficciones como Margin Call, desasosegante e incisiva, que reconstruye "con talento, datos, lucidez y verosimilitud una realidad aterradora, la historia de una canallada denominada eufemísticamente crisis" (C. Boyero). 4) La presentación objetiva y neutral de los hechos y, sobre todo, de las personas implicadas. El guión / film enfoca la crisis financiera desde la óptica de agentes que mueven los hilos de las finanzas. Chandor, que conoce bien el terreno financiero y sus personajes, intenta "des-demonizar" su actividad. Es curioso, al respecto, el posicionamiento de algunos actores de la cinta y del mismo realizador en declaraciones efectuadas durante la Berlinale. "Muchos banqueros –argumentaba Jeremy Irons– actúan de forma inmoral. No podemos crecer de forma permanente en un mundo de recursos limitados". A su lado, Kevin Spacey replicaba: "Hubo un momento en Estados Unidos en el que podías leer cada día en el periódico lo monstruosos y avaros que eran; pero la verdad es que se trata de personas normales, que tienen trabajos normales y que deben cumplir órdenes". Por su parte Chandor expresaba el punto de mira que le había guiado al enfocar la problemática: "Intenté acercarme a ella con una mirada más receptiva y desde ambos lados. No soy un banquero que defiende a otros banqueros, pero conozco a muchos de ellos y tampoco son la encarnación del mal". d) La estructura narrativa.- Tal vez la denominación de "thriller dramático" o "drama de suspense" es la que mejor especifica la doble modalidad de tratamiento que aflora en el film a partes iguales y estructura su trama. El mismo Chandor es ambiguo, tanto en sus manifestaciones –unas veces habla de "drama" / "tragedia" y otras de "thriller"– como en el tratamiento del guión, que articula de manera entrecruzada: mrubiocar@iscm.edu http://www.redentoristas.org/filmoteca.html 4 JC Chandor – Margin Call '11 Film-ficha 90 1) Un thriller como una "bomba de relojería" (Chandor).- Un thriller financiero, tratado estéticamente con distancia aséptica y psicológicamente con gélida neutralidad. Variety lo describía como "un thriller metódico, que absorbe con frialdad la sala de juntas". El relato avanza de principio a fin escalonando zonas de incógnita (despidos, intentos de reinserción; decisiones tajantes, luego cuestionadas y después radicalizadas…). Se mantiene, así, en crescendo el suspense hasta su resolución, hasta que la historia alcanza su clímax definitivo, que Chandor va tensando fotograma a fotograma de forma angustiosa a lo largo de una noche interminable. Todo acontece prácticamente en un solo escenario, en el espacio cerrado de las oficinas de ese banco neoyorkino de inversión. Y las escapadas hacia fuera (las visitas al analista despedido Eric Dale para intentar su reincorporación; las llamadas telefónicas) solo constituyen intentos a la desesperada en busca de una solución imposible. 2) Un drama sobre la situación financiera de nuestro tiempo.- Ya desde el principio, la andadura del thriller viene trenzada con girones de dolor humano y hechuras de drama. Narrativamente, la trama deja entrever sentimientos humanos que escapan a la impertérrita exactitud de los ordenadores y la frialdad de los números: dudas y miedo, inseguridad, interrogantes morales, atisbos de responsabilidad y camaradería… El drama existencial se empareja con el thriller financiero. Primero, el drama directo de las personas de carne y hueso ante el despido injustificado y ciego, que prescinde de afectos, vidas truncadas, familias minadas; o el de aquellas otras que, para no quedarse a la intemperie existencial, se ven forzados a doblegarse a decisiones gravemente injustas y lesivas. Después y en segundo plano, el drama se proyecta, como esbozo vivo, sobre millones de ciudadanos anónimos pero reales. Al final del relato, que camina tortuoso entre el vacío personal y el pánico colectivo ante la catástrofe inevitable, se consuma la ignominia: el reducido grupo de ejecutivos decide salvar su propio emporio y traspasar los activos dañinos, que sumirán en el caos al mundo entero. El thriller cede ante el drama y éste, fuera de las paredes de la elevada torre de hacer dinero en poder del reducido grupo de manipuladores, se proyecta como tragedia para millones y millones de personas, que pierden su dinero, su trabajo, sus casas, a veces hasta su salud y su familia. Como resume el mismo realizador: "En su esencia, si la película es algo, es una tragedia". Afecta a millones de personas en todo el mundo como una bomba a corto plazo, que no puede ser desactivada. Para el crítico del New York Times, el film penetra íntimamente y deslumbra por el alcance de sus implicaciones. "Lo que lo convierte en una interpretación apasionante y convincente de los hechos que nos son conocidos a partir de innumerables libros y artículos es la sutileza de la escritura de Chandor, su sobrio y meticuloso mapa de intersecciones entre la banal política del lugar de trabajo y los movimientos de capital internacional". 3) Los personajes y su proyección paradigmática.- Agazapada bajo las arborescencias del thriller, el drama y la tragedia, el film exhibe, además, toda una galería de personajes, que operan como retratos de comportamiento moral ante la crisis. No es posible especificar aquí las caracterizaciones de los distintos ejemplares, con su ingente potencial didáctico y su espetante denuncia de la explosiva situación, a la que han arrastrado a la comunidad internacional. 3. Guión técnico No voy a insistir mucho en este campo, porque el film no destaca precisamente por sus llamativos alardes en el manejo del lenguaje cinematográfico, ni en la espectacularidad de efectos especiales, ni en la inclusión de claves simbólicas… Existen. Y en algunos casos con alto grado de elocuencia. Por ejemplo: la contraposición entre "espacios cerrados" (claustrofóbicos, asfixiantes; en ellos tiene lugar la mayor parte de la historia) y "salidas al exterior" (escapadas en busca de soluciones, todas fallidas y amparadas en la oscuridad de la noche, mientras, paradójicamente, los espacios cerrados sobreabundan en luminosidad); o las constantes composiciones de "interiores" / "exterior (panoramas sobre New York, Wall Street, Zona Zero…); entre ellas, las reiteradas estampas de ejecutivos, recortados sobre el panorama de la ciudad; la de Sarah Robertson, ante el ventanal que cae sobre New York, con Wall Street a sus pies; o la última secuencia con Sam Rogers enterrando compungido a su perro en el jardín de su ex-mujer… Pero en este ámbito del guión técnico la fuerza le viene al film, ante todo, de la precisión, condensación, eficacia en sus aplicaciones de los recursos del lenguaje cinematográfico. Comprensible en alguien acostumbrado a filmar con celeridad y contundencia anuncios lustrosos o cortos impactantes… mrubiocar@iscm.edu http://www.redentoristas.org/filmoteca.html 5 JC Chandor – Margin Call '11 Film-ficha 90 a) Cámara / fotografía.- Visualmente, Margin Call sostiene un nivel técnico muy apreciable. Con una cámara vigilante a los movimientos de los personajes, marcando bien el devenir de los acontecimientos y el trasiego de los personajes por el edificio. Con una fotografía limpia y directa, en busca de la captación inmediata del momento en los rostros y gestos de los personajes. No hay rebuscamiento efectista en la elección de objetivos, pero resplandece la expresividad de esos rostros preocupados, tensos; la elección de la iluminación y el color en las distintas situaciones (colores apagados, visión nocturna de New York…); los continuos contrastes –ya aludidos– entre los "interiores" del banco y el "exterior" de la ciudad. Tampoco la planificación es compleja o rebuscada; pero tiene momentos deslumbrantes, cargados de significado, como los que abren y cierran el film: títulos: suena el teléfono; imagen inaugural con un plano panorámico sobre New York que "adelanta el concepto de deformidad, luego aplicado a sus protagonistas: deformidad de la ética profesional, del capitalismo de nuevo en el abismo, de las perniciosas rutinas internas que perpetúan el sistema tras el colapso"; o también, la secuencia final del enterramiento del perro. b) Banda sonora.- Carece de interés "recreativo" y se centra en su función de acompañamiento y subrayado del relato. La música casi queda reducida al nivel de los demás ruidos ambientales, que secundan y enmarcan la acción. En cambio, vale la pena destacar el atractivo de los diálogos, en un film cuya estructura potencia la constante comunicación entre los personajes y cuyo excepcional reparto es capaz de convertir una conversación tan aburrida e insípida como la que versa sobre finanzas en diálogos instructivos e interesantes. Éstos son intensos y bien perfilados; a veces mordaces, a veces cínicos, tensos…; siempre creíbles. 4. Reparto y personajes El reparto constituye el principal capital de Margin Call, junto con el interés inmediato del tema y la brillantez del guión. Estamos hablando de un elenco rutilante que reúne, a la vez, a los protagonistas Kevin Spacey (en el papel de Sam Rogers) y Zachary Quinto (como Peter Sullivan), a los que se suman Jeremy Irons (como John Tuld), Stanley Tucci (como Eric Dale), Paul Bettany (como Will Emerson), Penn Badgley (como Seth Bregman), Demi Moore (como Sarah Robertson), Si- mrubiocar@iscm.edu http://www.redentoristas.org/filmoteca.html 6 JC Chandor – Margin Call '11 Film-ficha 90 mon Baker (como Jared Cohen) y Mary McDonnell (como Mary Rogers). Con ellos a su mando se agranda el debut de Chandor. Todos, desde el primero al último, se acoplan admirablemente a sus fríos personajes, inyectándoles esa vitalidad contenida y amortiguada de líderes impasibles abocados al vacío. Todos sorprenden por su compromiso con sus roles mediante actuaciones logradas, perfectamente acopladas; sin que desentonen los diversos estilos interpretativos; sin histrionismos ni excesos declamatorios. La naturalidad y entrega incondicional a las exigencias de sus papeles, hacen la historia viva y creíble. En definitiva: Un drama de suspense –en formato casi teatral–, inteligentemente dirigido con milimétrica precisión por Chandor y sólidamente vivido por los actores. Entre todos componen ese retrato helado de un equipo altamente cualificado de expertos que, sin embargo, se desentienden de la hecatombe que se les viene encima; impasibles y desbordados, pero defendiendo sus posiciones contra todo y contra todos. Chandor, que conoce bien el terreno, no se ablanda como director de actores; ni humana ni éticamente hace concesiones; mucho menos mira hacia la galería. Con mano firme mueve a sus personajes más allá de la esperanza o la desesperación, a ese terreno gélido que parece ubicado por encima del bien y del mal. Este film independiente contó con un presupuesto relativamente pequeño: unos 3 millones y medio de dólares. Se estrenó en el Festival de Cine de Sundance el 25 de enero de 2011 y en el Festival Internacional de Cine de Berlín el 12 de febrero de 2011. EL MAR PROCELOSO DE LOS TIBURONES FINANCIEROS El film viene a sumarse a ese cine –ya generoso en número y calidad de muestras– que se viene gestando en los últimos tiempos, con la finalidad de tratar de entender el fenómeno de la crisis económicofinanciera actual. Hay que retener, a modo de ejemplo, notorios antecedentes como Wall Street (Oliver Stone, 1987); Éxito a cualquier precio (James Foley, 1992); etc. O todavía más recientes, ya en nuestros días, el film de ficción The company men (John Wells, 2010); o el documental Inside job (Charles Ferguson, 2010). O ahora Margin Call. En palabras del actor / productor de la cinta Zachary Quinto: "Creo que una de las virtudes de esta película consiste en que hace comprensible la crisis a un público muy amplio". 1. El referente paradigmático El film está inspirado en el desmoronamiento de la prestigiosa firma norteamericana de inversiones Lehman Brothers el 15 de septiembre de 2008 y en la posterior crisis económico-financiera a nivel mundial, todavía abierta en nuestros días. Con todo, hay que dejar claro desde el principio que la cinta no es ni un capítulo de historia ni un riguroso documental, sino ficción. Eso sí, con la libertad creativa que le otorga esta condición, Margin Call acierta a plasmar en forma de poderoso "drama de suspense" situaciones muy próximas a la realidad del mundo de Wall Street en esos momentos. Sin duda, la realidad responde a parámetros mucho más complejos y requeriría atender a la consideración de innumerables antecedentes, así como al análisis irrenunciable de los diversos sistemas confluyentes. Chandor lo sabe. Soslaya el embolado y opta por el formato de ficción. "Margin Call se constituye en el resbaladizo terreno entre la teoría y el sentimiento. Su fría configuración estética habla de sus intenciones neutras", para ofrecernos un producto que se distancia de los arrebatos personales y se muestra familiarizado con la objetividad de los números (J. Revert). A partir de este referente, el director se permite: a) Acotar el escenario: Narra lo que sucede en un banco de inversiones imaginario en Manhattan. En plena noche, envuelto en "nocturnidad" (la mayor parte del film transcurre de noche); pero a la vez en recintos espléndidamente iluminados, no solo por la profusión de paneles de neón, sino por la concentración de mentes clarivimrubiocar@iscm.edu http://www.redentoristas.org/filmoteca.html 7 JC Chandor – Margin Call '11 Film-ficha 90 dentes y selectas. El film, con todo, proyecta un tono sombrío sobre este nido de las altas finanzas, que por momentos adquiere rasgos de "organización mafiosa con sus pactos de silencio, obediencia ciega y castigos ejemplares". La acción se centra justo al borde de una situación límite: el gigantesco aparato de la organización tiene cimientos de barro y está a punto de derrumbarse estrepitosamente. b) Bucear en la verdad sin arriesgarse a denuncias concretas: Proporciona datos reales, pero los descuelga de su verdadera percha y los decora. Así, desde su estrado de ficción refleja el empacho de dinero desbocado y de bienestar suculento de la élite financiera; esa sensación subyugante de endiosamiento que sobreviene al asentamiento en el poder real o imaginario, político, económico…; como también el ensordecimiento moral y humano de muchos miembros de esa élite a la hora de tomar decisiones o de encarar el crac sobrevenido a causa de sus excesos. Si a esos embriagantes zumos mezclamos, además, impunidad legal, impasividad patológica y amoralidad campante, el coctel resultante deviene explosivo y demoledor. Claro, siempre desde la ficción, pero asomados de bruces sobre la realidad. c) Enseñar al que no sabe: Llama a las cosas por su nombre en un alarde didáctico de clarificación y de denuncia amable. Resulta paradigmática al respecto la escena en que John Tuld –el director gerente que acaba de llegar ostentosamente en helicóptero a la sede del banco– exige al analista, antes de que éste le exponga el problema: "Imagínense que tengo el nivel de comprensión de un niño, o sea, que eviten tecnicismos y planteamientos retorcidos y cuéntenme lo que está ocurriendo con lenguaje claro y contenido entendible. Háganlo rápido y háblenme en inglés" (texto algo alterado en el doblaje español). El film nos oferta un retrato elocuente de la situación actual. Ficticio o real, su tratamiento descarnado de la situación y sus personajes respira autenticidad. El director "mete el dedo en la llaga con talento y penetración. Es didáctico en el mejor sentido. Nos desvela muy bien las raíces y los mecanismos que han generado esa tragedia que deja sin trabajo, en la incertidumbre de perderlo o de no encontrar el primero a tanta gente madura y joven en cualquier parte del mundo (C. Boyero). 2. Fisonomía de los tiburones financieros "Potente retrato de los tiburones financieros" –titula C. Boyero su recensión del film–. Margin Call, efectivamente, enfoca el problema de la crisis financiera poniendo el punto de mira en "los malos", en esos sujetos implacables, fervientes adoradores del sistema que les encumbra, a la vez que les embrutece, les hace resistentes al dolor ajeno, al hundimiento de los más débiles, al desamparo y la desesperación. Desde esta óptica, el perfil humano que el film proyecta de ellos es descorazonador. Su conducta exenta de toda ética profesional infunde miedo. Según C. Boyero –comentando el film–, se trata de personamrubiocar@iscm.edu http://www.redentoristas.org/filmoteca.html 8 JC Chandor – Margin Call '11 Film-ficha 90 jes despiadados, que no se pueden permitir el lujo de ser humanos, "que se bonifican a sí mismos con sueldos escandalosos, mientras que están jugando con la seguridad de los demás, con la sumisión a directrices ilegales en nombre de sus privilegios de los que saben que el negocio al que sirven es una opulenta farsa, un castillo de naipes que se puede derrumbar en cualquier momento, una estafa legalizada". Según él, Chandor "nos explica con lucidez y profundidad cómo un supuesto imperio financiero se ha construido haciendo trampas, la falsedad de las estimaciones sobre las que reposa la estructura comercial de ese banco, el nulo valor de sus activos en el sector hipotecario. También las consecuencias desastrosas, la crisis económica mundial que van a provocar estos respetables piratas del dinero, su mezquina y maquiavélica facilidad para vender humo a precio de saldo en Wall Street, salvarse del naufragio que ellos han creado y hacérnoslo pagar al resto de la humanidad". Evidentemente, no todos los componentes del sistema son igual, ni en rango ni en deshumanización. Hay dirigentes del más alto rango que, más allá del bien y del mal, solo tienen en mente ganar a cualquier precio, sin reparar en nada ni en nadie, y mucho menos en miramientos morales. Hay dirigentes de escala algo inferior, a quienes un resquicio de responsabilidad ética les sugiere la duda y hasta cierto "escrúpulo" antes de doblegarse a la infamia. Hay jefes intermedios, de conciencia lisa, contentos de poder mantener el status sin rechistar. Y hay mandados, ejecutores files y ciegos, ajenos a cualquier interrogante que ponga en peligro su estabilidad. Y Chandor, que ha propalado insistentemente su voluntad de registrar con neutralidad este enmarañado avispero, parece haber advertido el riesgo de maniqueísmo –al menos hipotético– a que puede inducir su cinta. Así cabe interpretar su declaración durante la Berlinale: "Se nos ha querido convencer de que la crisis ha sido un caso de excesiva avaricia por parte de unos pocos individuos, pero en realidad lo que provocó el fracaso del sistema es la avaricia a pequeña escala de toda la sociedad, cada uno de nosotros". 3. Tres cuestiones para el debate: 1) ¿Qué sucedió el 15 de septiembre de 2008? - "Lehman Brothers" como paradigma 2) ¿Cómo y por qué? - Mecanismos del sistema financiero capitalista 3) Algunas inmoralidades de la crisis financiera actual Margin Call las escenifica en ese drama de nocturnidad y urdimbre claustrofóbica, que encierra a toda la directiva de ese banco de inversión durante las 36 horas que dura el estado de sitio de la eclosión de la crisis. Cuando alguien da la voz de alarma de que todas las hipotecas tóxicas en que se sustenta su descomunal margen de ganancias están a punto de reventar de forma letal, se enciende el pánico. Enclaustrados en las oficinas de un rascacielos, estos tiburones financieros buscan la tabla de salvación: ¡Hay que venderlo todo! O lo que es equivalente, ¡Hay que "infectarlo" todo, con tal de sobrevivir! Para que ellos no perezcan, hay que provocar que se hunda el mundo. El Evangelio del revés. Claro que en el trueque no solo se invierten magnitudes como bien común, dignidad de las personas, humanidad… por capitalismo inmisericorde y feroz, sino que se disuelven otras insignificancias como moral, responsabilidad, remordimientos…, apareciendo en su lugar otros atributos distintivos del momento, como avaricia, cinismo, pánico… "Así vemos que el tiburón Sam Rogers, inconmovible ante el desastre que se avecina (y que ni le incomoda ni entiende del todo), puede echar unas lágrimas porque se le muere el perro" (L. Martínez). A la hora de estructurar un discurso más articulado de esas inmoralidades, destacaría: a) La inmoralidad del capitalismo vertebrado. Nivel: El sistema y las estructuras. Paradigma: El banco financiero en sus distintos estamentos y miembros del equipo. Resultado: "La tragedia universal que han provocado los cínicos y legalizados delincuentes que habitan la Torre del dinero" (C. Boyero) b) El cinismo como caparazón amoral. Nivel: El mundo axiológico. Paradigma: John Tuld, un individuo atractivo e inmisericorde, que destila sensación de poder absoluto. Resultado: Desbarajuste y hasta eclipsación de la escala de valores. c) Desfondamiento psicológico-moral de las personas. Nivel: Conciencia. Paradigma: La galería de personajes y sus respectivas respuestas ante las órdenes recibidas. Resultado: Despersonalización. mrubiocar@iscm.edu http://www.redentoristas.org/filmoteca.html 9 JC Chandor – Margin Call '11 Film-ficha 90 Cualquier intento de anulación de los rasgos identitarios de la persona –y lo dimensión moral lo es–, deshumaniza, degrada a la persona. Ambientado en la esfera de las altas finanzas, Margin Call realiza un análisis punzante del entramado profesional-psicológico-financiero-ético en que se mueve ese complejo mundo. Pone al descubierto las oscuras sinuosidades de los tiburones financieros y sus prácticas, los métodos de los bancos de inversión, su carencia de límites morales, su implacable pragmatismo para engañar a sus competidores con tal de sobrevivir a la ruina colectiva que ellos han desatado e, incluso, para incrementar sus ganancias. Todo ello a despecho de la hecatombe del sistema financiero-económico internacional que nos sacude hasta el día de hoy y la consiguiente angustia existencial a que se encuentran abocados millones de ciudadanos. mrubiocar@iscm.edu http://www.redentoristas.org/filmoteca.html 10
