sumario Medicina General PONENCIA C arcinomas de células renales: Revisión bibliográfica C. GONZÁLEZ DURÁN, J. LEMOS ZUNZUNEGUI, F. LÓPEZ SOBRINO l carcinoma de células renales se manifiesta por cuadros clínicos muy diferentes, muchos de ellos por síndromes o síntomas que hacen pensar más en otros órganos o sistemas. Es preciso que el médico de cabecera tenga siempre presente el adenocarcinoma renal durante el diagnóstico diferencial ante los síntomas más dispares: bastaría esto para descubrir muchos de ellos en estadios precoces, cuando el pronóstico es más favorable" (Dr. Ángel Escudero). “E ■ EPIDEMIOLOGÍA Representa el 2% de las neoplasias malignas primarias del adulto y el 85-95% de las neoplasias malignas primarias del riñón. Es frecuente en mayores de 40 años, con un pico de incidencia entre 50 y 70 años. La relación hombre/mujer es 2/1. Presenta mayor incidencia en áreas urbanas. ■ FACTORES ETIOPATOGÉNICOS • Tabaco. • Hipertensión arterial y obesidad. • Exposición ambiental (asbesto, derivados del petróleo, disolventes...). • Enfermedad renal quística adquirida (diálisis). • Hereditarios: enfermedad de Von Hippel-Lindau, esclerosis tuberosa, carcinoma heredado no papilar, carcinoma de células renales papilar hereditario. 380 MEDICINA GENERAL 2002; 44: 380-381 ■ CLÍNICA E HISTORIA NATURAL Puede aparecer hematuria (60%), dolor lumbar (50%), masa palpable (40%), síndrome constitucional (30%), fiebre (20%), hipertensión arterial (14%), síndrome de Wünderlich (12%), varcicocele agudo (1%). Con el desarrollo tecnológico y la mayor accesibilidad a las pruebas de imagen (ecografía, TAC...), su forma de presentación ha cambiado sustancialmente. En un tercio de los casos es un hallazgo accidental durante el estudio de otras patologías. Puede permanecer asintomático durante mucho tiempo y sus manifestaciones ser muy variadas debido a: • Síndromes paraneoplásicos (forma de presentación de un tercio de los casos): se diagnostica antes por sus manifestaciones sistémicas que por las urológicas, lo que le ha valido la denominación de "tumor del internista". • Metástasis: presentes aproximadamente en el 20% de los casos en el momento del diagnóstico. La triada clásica de Guyon (hematuria, dolor costo-vertebral y masa palpable), que corresponde a un estadio avanzado de la enfermedad, se presenta en menos de 20% de los pacientes. Los síndromes paraneoplásicos frecuentemente aparecen mucho antes que las manifestaciones puramente urológicas: • Síndrome de Stauffer (disfución hepática no mestastásica). • Secreción inapropiada de sustancias como eritropoyetina, renina, gonadotropina, lactógeno plancentario, fostatasa alcalina, ACTH, entre otras, que sumario PONENCIA CARCINOMAS DE CÉLULAS RENALES ocasionan cuadros de hipercalcemia, policitemia, anemia normocítica normocrómica, ginecomastia, depósitos de sustancia amiloide... ■ DIAGNÓSTICO POR IMAGEN La urografía intravenosa es poco sensible en la detección de masas renales; su sospecha debe confirmarse por ecografía o TAC. Por sus características (inocua, económica, accesible y sensible), la ecografía se considera la primera exploración a realizar ante la sospecha de lesiones ocupantes de espacio en los riñones. Actualmente el TAC es el método de imagen más importante en el diagnóstico, estudio de extensión y seguimiento de masas renales. Sus inconvenientes son el mayor coste, la radiación y la menor disponibilidad. A pesar de su utilidad, el alto coste y la escasa disponibilidad de la resonancia magnética limitan su utilización. La gammagrafía es útil para diferenciar masas de pseudotumores diagnosticados por otras pruebas (sobre todo ecografía), como la hipertrofia de las columnas de Bertin. En la actualidad la mayoría de las masas renales se detectan por ecografía; TAC y resonancia magnética se utilizan de forma complementaria. ■ PRONÓSTICO El estadio del tumor es el factor pronóstico más importante (TNM, Robson...). Otros factores pronósticos son las características histológicas del tumor y los factores clínicos (sintomático o no, datos analíticos de enfermedad extrarrenal...). ■ TRATAMIENTO El quirúrgico es el único curativo en la actualidad. Persigue extirpar la totalidad de la neoplasia con bordes quirúrgicos libres. Es resistente a la quimioterpaia y responde sólo ocasionalmente (1-2%) al tratamiento hormonal. Existen algunos modificadores de respuesta biológica, como el interferón y la interleukina 2, con los que se consiguen respuestas reproducibles pero infrecuentes. La radioterapia sólo demuestra utilidad en el tratamiento paliativo de la sintomatología metastásica. ■ BIBLIOGRAFÍA – Medicine (8ª serie, nº 58). – Harrison (15ª edición). – Farreras (14ª edición). – Adenocarcinoma renal (Ángel Escudero). – Cambell (Tratado de Urología). – Rodés Teixidor (Medicina Interna). – Stein (Medicina Interna). – Actas urológicas – Neoplasias Renales diagnóstico y tratamiento (Requena). 381 MEDICINA GENERAL 2002; 44: 380-381