La Era Grande de Huétor Santillán La Era Grande de Huétor Santillán es un espacio comunal donde se desarrollaron hasta tiempos recientes los últimos procesos de recolección de cereales (trigo, cebada, garbanzos, etc.) por el procedimiento del trillado. El origen de su primera construcción quizás se remonte a la Edad Media, coincidiendo con el primer poblamiento musulmán; el empedrado actual, a base de cantos rodados, es original del siglo XIX, aunque continuamente remodelado. Parte del pavimento original ha sufrido deterioro en los últimos años a consecuencia de las obras. La Era tiene una superficie bastante considerable (próxima a mil metros cuadrados), de manera que permitía acoger la trilla de casi una decena de parvas al mismo tiempo. El trillado de los cereales suponía el proceso final de los trabajos relacionados con este cultivo. Huétor Santillán, por su orografía serrana, no ha sido un pueblo muy cerealista, pero con sus zonas de cultivo casi llegaba a autoabastecer a su población. El trigo y la cebada se sembraban en El Panderón, Corral de los Olivos, Los Propios y en pequeñas hazas y huertos como los que aún quedan. Igual ocurría con los garbanzos. Hacia primeros del mes de junio llegaba la siega de la cebada, trigo y garbanzos, por este orden. La mies era agrupada en haces, atados con una cuerda o “ataero”, que se transportaban hasta la era cargados en mulas y burros. En la era se colocaban en hacinas y se procedía a coger turno para extender la parva. La parva consistía en un círculo de mies sobre el que se depositaba la trilla o el trillo para comenzar su triturado a base de dar vueltas sobre ella con una pareja de bestias como fuerza de arrastre; los animales eran vestidos con un horcate de madera o rollo de lona rellena de paja y cogido a su cuello. El triturado de una parva solía durar algo más de un día. La mies en proceso de trillado era volteada varias veces con un horcón o una bierga. El trillo era el utensilio más habitual y antiguo utilizado para triturar la paja y extraer el cereal; su origen es egipcio. Consistía en una superficie de tablones, con cierta curvatura en su parte frontal, que era arrastrada por las bestias. En su base eran incrustadas cuchillas de acero y lajas de pedernal que cortaban las cañas del cereal. Los trillos aparecieron en el siglo XIX y consistían en las mismas tablas, pero bajo ellas se colocaban unas cuchillas circulares que hacían un efecto parecido. En ambos casos, el trillador iba subido sobre ellos para hacer presión y acelerar el proceso de trillado. La parva era recogida mediante un palo de arrastre o simplemente con palas. Toda la superficie se barría con escobones de ramas. Seguía entonces el proceso de aventado con pala, a fin de separar la paja del trigo. Ese aventado se hacía con viento de Poniente, que en el caso de la Era de Huétor Santillán siempre soplaba seguro a partir de la media noche del verano. Del proceso de aventado se obtenían varios productos: el grano, la granza, la paja y el tamo. El grano se separaba finalmente de la granza mediante una criba y se envasaba en costales de lona; los costales solían tener capacidad de una fanega y eran envasados con una medida de madera llamada fanega; también se utilizaba la media fanega y la cuartilla. En el caso de venta de trigo en tiendas, se utilizaban el celemín y el cuartillo. La paja se almacenaba en los pajares situados en las casas, habitualmente encima de las cuadras de los animales. Para esta actividad se utilizaban una especie de capachos llamados piles y también con sacas de lona. La granza y el tamo (la parte más molida de la paja) se utilizaban para cama de animales en invierno. El proceso de recolección del cereal, que había comenzado en junio, se daba por finalizado hacia mediados de agosto. La Era Grande de Huétor Santillán fue perdiendo su uso progresivamente como consecuencia de la mecanización de los trabajos cerealistas. No obstante, algunos agricultores la utilizaron a principios de los años ochenta del pasado siglo XX. Hoy incluso han desaparecido los cultivos de cereales en Huétor Santillán. Además de la Era Grande, existió a su lado la Era Chica y algunas más de propiedad particular en zonas próximas a la población. Hoy, en 2011, la Era Grande ha quedado convertida en un espacio lúdico-deportivo de carácter público.