Ética del profeta III Por: Apóstol José Félix Coronel www.redime.org Seguimos con la parte III... Nuestra regla, nuestra ética, una recomendación A continuación hago una lista de aspectos que podemos tomar como nuestra regla de ética. Entiendo que podríamos abundar en este ramo. Incluso el tema es bueno para un estudio de tesis de graduación. 5.1. La vida personal del ministro profético La vida personal del ministro se desarrolla en público lo que se conquista en privado. Debemos conquistar una autoestima correcta. El ministro profético debe poseer una autoestima adecuada y auto concepto positivo para poder ser un ministro efectivo y saludable. Siempre tomando en consideración de no tener un alto concepto de sí mismo que el que debe tener ya que esto afectaría su ministerio, (Romanos 12.3). El cuidado de la salud es indispensable. El ministro de Dios debe de cuidar su salud física en todo momento. El perder su salud significa perder un ministerio. Una manera de tener una salud adecuada se logra a través de la nutrición, el descanso, el ejercicio y la recreación. Tomar día de descanso a la semana y unas vacaciones al año, son elemento que contribuyen al bienestar de la vida de un ministro. Somos responsables de un crecimiento espiritual continuo y sistemático. El ministro profético debe de estar en un continuo crecimiento espiritual a través de la oración, ayuno, lectura bíblica y estudio de la misma para poder estar preparado para toda buena obra, (1Corintios 9.24-27). El comportamiento ante los demás, así como su vestimenta es muy importante. Somos ejemplos para los demás. Una vestimenta adecuada, un lenguaje propio, el comportamiento debe ser de acuerdo a la envestidura que Dios nos ha dado. El cuidado de la vida espiritual se hace en privado. Esta conquista de todos los días es indispensable. Oración, ayuno, lectura de la palabra, intimidad con el Espíritu Santo. 5.2. La vida del ministro profético en la familia La vida familiar del ministro profético debe ser prioridad sobre todas las cosas. Las cartas pastorales enseñan sobre este aspecto importante, (1Timoteo 3.1-11; Tito 1.6-9), y da énfasis al buen testimonio de la misma. El ministro profético debe dedicar tiempo a su esposa e hijos para evitar problemas en el futuro y de esta manera vencer los ataques del enemigo. Una relación fuerte y estable entre el esposo-esposa redundará en un ministerio efectivo y será un modelo para otros. El ministro deberá dedicar el tiempo adecuado para una vida hogareña saludable y estable. Debe de dedicarle un tiempo adecuado y debe de ser como si fuera una cita que no se puede alterar. En adición, debe de existir un compromiso para tener un éxito familiar. Esto fortificará y edificará la solidaridad familiar. Cumplir con los roles que nos corresponden es vital. Esto fortalece el ministerio y da credibilidad en lo que desarrollamos. Por respeto y honor a la pareja, no es adecuado hacer citas con personas del sexo opuesto, mucho menos a solas. La ministración de personas del sexo opuesto siempre deben ser hechas con otras personas a nuestro lado. 5.3. La administración de las finanzas El manejo del dinero es nuestra responsabilidad. Es de suma importancia que los ministros de Dios paguen sus cuentas a tiempo. Debido a este asunto, el ministro debe aprender a manejar un presupuesto y balancear los gastos para no caer en morosidad. En adición, debe escudriñar principios esenciales de la mayordomía cristiana. El diezmo esencial y es una norma bíblica que el ministro debe practicar, (Malaquías 3.10). Además, debe manejar sus deudas con prudencia como lo establece Romanos 13.8. Es sano establecer un plan de ahorros, no consumir lo que no tiene, y de esta manera tendrá una administración sana del dinero. Otra área que el ministro debe de cuidarse es con el crédito. Las tarjetas de crédito pueden ahogar las finanzas. Esto podría tener consecuencias negativas y momentos de gran necesidad. Es por esta razón, que el ministro debe manejar su dinero con sabiduría. La mayordomía es el principio que debe practicar todo ministro de Dios y por ende, enseñar con el ejemplo. El mensaje que predica debe ir de la mano con lo que practica. 5.4. La sexualidad Algunos estudios reflejan las siguientes estadísticas con relación a una mala conducta sexual de ministros de Dios. Coalición de Wisconsin USA sobre mala conducta sexual: • Once porciento (11%) de los violadores son ministros • Ochenta y nueve por ciento (89%) de las víctimas eran mujeres. ¿Cómo se deduce un abuso sexual? Acto sexual con personas fuera del pacto matrimonial. Esto incluye violación, “consentimiento adulto”, niños y personas incapacitadas. • Toque físico no deseado o inapropiado, fuera del pacto matrimonial. • Exhibición física sensual del cuerpo o excitación. • El uso de pornografía, individualmente o con otros, en formas que intenten estimular fantasías eróticas de conducta sexual inadecuada. • Contacto verbal y visual son otra persona que implique o demande respuesta sexual inapropiada. • Comentarios o piropos a personas fuera del matrimonio. • La sexualidad no es solo tener sexo fuera del matrimonio, sino todo aquello que produzca la falta de honor y respeto con la pareja. Adular a una persona, piropear, decirle palabras de alago, es una falta de respeto a la pareja. También el vestido es parte de la sexualidad. Es correcto seguir las reglas bíblicas al respecto. Agregamos el lenguaje. El lenguaje debe ser digno de una ministro aprobado que no tiene de que avergonzarse. Palabras obscenas y vulgares no deben entrar en el vocabulario del ministro profético. ¿Cómo podemos prevenir el pecado sexual? El evangelista Billy Graham señaló algunos puntos que le ayudaron a siempre mantener su testimonio limpio y así evitar algo que lo pudiera comprometer. Él presentó algunos consejos valiosos que le ayudaron a través de su ministerio. Estos son: • Nunca viajar solo en un automóvil con una mujer. • Nunca comió ni viajó solo con su secretaria. • La puerta de su oficina siempre estuvo abierta cuando él dictaba alguna carta importante. Podemos añadir las siguientes precauciones: • Nunca esté solo con una persona del sexo opuesto (especialmente en consejería). • Sea cuidadoso al estar en lugares dudosos (siempre esté con su esposa o alguna persona honorable). • Esté siempre alerta al riesgo del vínculo emocional. • • 5.5. Evite estar en un lugar o posición donde se podría comprometer moralmente. Recordando siempre que el apóstol Pablo citó: “Apartaos de toda apariencia de mal”, (1Tesalonisenses 5.22). Manejo del poder y autoridad Los dones son una atracción seductora para muchas personas. Así que el ministro profético no debe atender personas de alguna congregación sin el permiso de su pastor. Existen diferentes modelos para el ministerio. Es apropiado observarlos y aplicar el modelo correcto y bíblico para actuar responsablemente con la autoridad que nos ha sido delegada. El modelo de un jefe ejecutivo: En este modelo el pastor es visto como un gerente de empresa y como un jefe espiritual. El modelo autoritario. Este modelo presenta al pastor como un individuo autoritario. Son personas de autoridad que hablan y expresan sus ideas en términos de la voluntad de Dios o la revelación de Dios y ellos esperan que las personas lleven a cabo sus órdenes de una manera absoluta, de otra manera las personas se vuelven rebeldes a su voluntad. El modelo del asalariado. Este modelo presenta a un ministro pasivo y simplemente hace lo que se le dicta y va a donde se le indica. No presenta un ministerio de liderazgo y no hay dirección individual en lo que desarrolla. Servir y no ser servido. Este modelo fue el que nos dejó nuestro Señor Jesucristo. Vemos a un Jesús que dijo: “El Hijo de Hombre no vino para ser servido, sino para servir y para dar su vida en rescate por muchos”, (Mateo 20.28). Jesús presentó su servicio cuando toma la forma de un siervo y tomó la toalla y lavó los pies a sus discípulos, dando una cátedra de cómo servir a los demás (Juan 13.117). Pablo lo describe de la misma manera en Filipenses 2.7. Este debe ser nuestro modelo a seguir. Este es nuestro real desafío en el ministerio. El ministro profético debe utilizar el poder que le ha sido otorgado para llevar a un pueblo a la unidad, sanar heridas, ayudar a que la gente trabaje en unidad y no a una lucha de poderes internos, o para dividir al cuerpo de Cristo. De esta manera la iglesia trabajará para un fin común; alcanzar las vidas perdidas para el reino de cielos. ¡Recordemos que el ministro profético sirve al cuerpo pero no gobierna! Así que esta propenso a dar recomendaciones pero no para gobernar sin la autoridad apostólica o pastoral. 5.6. Revelación y predicación Unas de las funciones de un ministro profético la adecuada preparación del mensaje que ha enseñar. Debe de cuidarse en preparar la predicación o enseñanza con una interpretación fiel del texto. Debe de tomar en cuenta: • Determinar el significado exacto del texto • La forma literaria que usó el escritor • El contexto • El marco histórico y cultural • El significado a la luz de Cristo • Lo que el pasaje significa ahora • Revelación del pasaje para el momento • Otro aspecto que un ministro de Dios debe evitar a toda costa, es el plagio. Tomar un pensamiento o escrito de otro como nuestro es deshonesto y no se debe practicar. Podemos predicar mensaje de otras personas, dar revelación, que salen de otras personas siempre y cuando le demos el crédito que se merecen. ¿Cuándo consideramos una mala enseñanza? • • • • • • • Una pobre preparación y una exégesis defectuosa Enseñanzas generales no aplicables a algo concreto Lenguaje cargado de anécdotas, historias, fantasías Manipulación emocional Falsedades y verdades parciales Aparentes revelaciones Textos mal aplicados Aplicación incorrecta de pasajes considerados como “revelación” El ministro profético debe de dar prioridad a una parte esencial de su preparación como lo es la enseñanza correcta de la revelación de la palabra. La enseñanza profética debe llevar al pueblo de Dios a su presencia. La falta de preparación ridiculiza el verdadero evangelio y crea una imagen incorrecta de la verdad de Dios. ¡Cuidado con la revelación profética! Debemos de cruzar lo que Dios nos dice con lo que Dios le muestra a otros ministros proféticos. Esto fue lo que el apóstol Pablo hizo. Gálatas 1.2 Pero subí según una revelación, y para no correr o haber corrido en vano, expuse en privado a los que tenían cierta reputación el evangelio que predico entre los gentiles. ¡De esta manera verificamos que lo que Dios nos entrega es correcto! 5.7. Consejería y ministración personal La consejería profética es parte de la responsabilidad del ministro profético. Sin embargo es bueno hacerlo de la manera adecuada. Te recomiendo lo siguiente: Visitación. Parte de la responsabilidad de un ministro profético es la visitación de personas con necesidades especiales. El contacto personal es de suma importancia y visto como algo esencial en sus labores en la iglesia local. Se debe de ser cortés y agradable en la visita y no debe ser muy extensa. Cumplir con el propósito exacto al que Dios le envía, evitando hablar de temas que pueden afectar la relación de la persona con su liderazgo. El ministro profético deberá evitar rumores o señalamientos por hacer cosas indebidas. La visitación la debe hacer siempre acompañado de una persona de respeto. Nunca deberá visitar personas ajenas a su liderazgo sin la autorización del pastor o liderazgo de las personas que visitará. Esto se llama respeto a otros liderazgos. La consejería debe ser totalmente bíblica y el ministro profético deberá pasar un reporte por escrito a su líder inmediato. Cuando el ministro profético necesita hacer una ministración más profunda, incluyendo liberación, es necesario que el su líder este enterado del proceso que estará siguiendo. Toda palabra profética debe quedar registrada para futuras revisiones. Ministración personal. Tanto la visitación como consejería personal son parte del oficio que el ministro profético desarrolla. Es muy importante tener un registro de la ministración personal. Palabra profética, recomendaciones y consejos, deben ser registrados para futuras aclaraciones. Sometimiento al liderazgo. El ministro profético debe estar sujeto a la autoridad local. Cuando un ministro visita una congregación que no es donde comúnmente se reúne, debe quedar bajo la sujeción del pastor local en cuanto al desarrollo del oficio. De tal manera que evite malos comentarios al ministrar sin el permiso del pastor local. Deberes varios. La celebración de bodas y los funerales son responsabilidades pastorales no de un ministro profético, a menos que le haya sido asignada la tarea. Aunque podríamos abundar en más recomendaciones en cuanto a la ética. Dejamos abierta la posibilidad de la investigación del alumno al respecto. De hecho este es un buen tema de tesis. VI. Preguntas finales 1. Explica la necesidad de ética en el ministerio profético _________________ ____________________________________________________________ ____________________________________________________________ 2. ¿Puede mejorar los resultados del trabajo de un ministro profético usando ética? ____________ ¿Por qué? ___________________________________ _____________________________________________________________ _________________________________________________________________________ ____ 3. ¿Es la ética un proceso o el cumplimiento de reglas establecidas. Explica? ___________________________________________________________ ___________________________________________________________ 4. ¿Qué pasos tenemos que dar para trabajar bajo un código de ética? ______ ___________________________________________________________ ___________________________________________________________ VII. Aplicación La ética en el ministerio profético debe de ser practicada por todo ministro profético dentro y fuera de su congregación local. Estos consejos son para el beneficio y el crecimiento de la obra de Dios. Un ministerio estable y fuerte, llevará a una su ministerio de una manera exitosa y la huella que dejará será de mucha bendición. La ética en el ministerio profético probará el corazón humilde del ministro profético. La madures es alcanzada en un proceso de formación, pero la ética es alcanzada en el cumplimiento de reglas. Es necesaria la humildad y el sometimiento para poder trabajar bajo códigos de ética. VIII. Tarea Encuentra tres ejemplos claros de “la regla” de Pablo en como trabajaba bajo códigos de ética ministerial.