LA PSICOGENESIS DE LA LENGUA ESCRITA: Una revolución en la Alfabetización Inicial (Grunfeld Diana) • ¿Qué revelaciones hicieron respecto del sujeto que aprende, las investigaciones argentinas durante la década del ´70? ¿Y del objeto? 2. ¿Qué aportes hicieron a los docentes? ¿Y a la situación escolar? 3. ¿En qué se basa la perspectiva didáctica? Enumera y explica sus principios 4. ¿Cómo reaccionan los niños frente a la escritura y los textos? 5. ¿Qué papel cumple el docente con respecto de la lectura? A partir de las investigaciones psicolingüisticas basadas en el marco conceptual de la psicología genética, y llevadas a cabo por investigadores argentinos durante la década del ´70, se inició un movimiento fundamental en la enseñanza de la lectura y la escritura. Lo que las investigaciones permitieron conocer acerca del sujeto de aprendizaje: Permitió comprender que también a propósito de la escritura el niño se formula preguntas a cerca de ese objeto, busca regularidades, compara, construye teorías que le son útiles en ciertos momentos, y que abandona luego; pone a prueba sus anticipaciones, categoriza los datos, revisa sus teorías y reformula sus hipótesis cuando considera que éstas son insuficientes para explicar la realidad. Y que permitieron conocer acerca del objeto del conocimiento: Se pusieron de relevancia las leyes que explican la constitución del objeto de conocimiento. Se pasó de una visión puramente instrumental, donde la escritura era considerada como una técnica de trascripción y la lectura como una técnica de decodificación, a elevarlas al rango de objeto de pensamiento, con una doble visión acerca de las cuales se piensa y objetos que permiten pensar acerca de lo representado por ellos mismos. Deja atrás el objeto lengua estereotipado, descontextuado, sin sentido, de la enseñanza tradicional, para que saliera a la luz la lengua escrita como objeto social y cultural usado con fines de comunicación. Lo que estas investigaciones aportaron a los docentes: Posibilitaron resignificar las producciones de los niños, lo que antes eran puros garabatos se convirtieron en conductas inteligentes. La nueva información colocaba en un lugar diferente tanto al alumno como al docente. Los niños comenzaron a aparecer como protagonistas de su propio proceso de aprendizaje y los docentes comenzaban a transformar su rol, de ser meros transmisores de conocimientos, a plantear problemas y coordinar las interacciones que se produjeron entre los niños y el objeto a conocer. Lo que las investigaciones aportaron a la Institución escolar: Las investigaciones redimensionaron el problema de la calidad de la educación, precisando mejor lo que significa una alfabetización de buena calidad. Señalaron la importancia del proceso constructivo de los niños 1 como cuestión a considerar en el proceso de enseñanza. Replantearon el objetivo de la alfabetización, ya no como la adquisición de una técnica de trascripción de formas gráficas, sino como la comprensión del modo de representación del lenguaje que corresponde a un sistema alfabético de escritura y revitalización de las prácticas sociales de lectura y escritura en el contexto escolar. Los diferentes modelos de conceptualización presentes en un grupo− clase pusieron en evidencia otro concepto fundamental: el de diversidad. Para que la igualdad de oportunidades sea efectiva debía ofrecer proyectos educativos de calidad, sobre todo aquellos que menos oportunidades tenían, con un medio alfabetizado, respetando sus conocimientos previos, avanzando a partir de ellos, ofreciendo situaciones significativas e intervenciones ajustadas a sus características particulares. La perspectiva didáctica: El camino recorrido permitió arribar a un conjunto de certezas que fortalecen el avance conceptual y práctico en beneficio de los niños y el docente. Toma en cuenta tres ejes fundamentales: • El objeto de conocimiento, en tanto es necesario respetar a la lengua escrita como un objeto social y cultural, que se desarrolla a partir de la necesidad de la comunicación de las personas. • El sujeto de aprendizaje, en tanto es fundamental tener en cuenta las ideas de los niños y sus transformaciones sobre los objetos de conocimiento. • La enseñanza, como un aspecto fundamental del acto pedagógico, que opera como mediadora entre los sujetos en relación con el conocimiento Se basa en ciertos principios: • Creación de un clima de confianza en las posibilidades de aprendizajes de los alumnos, de respeto hacia sus producciones y de cooperación en los intercambios, genera una dinámica de tranquilidad y afecto. • Propuestas de actividades que planteen problemas, sólo así su resolución genera la necesidad de coordinar o resignificar conocimientos anteriores, construir nuevos conocimientos , y desarrollar nuevas estrategias • Propuestas de situaciones reales de comunicación, tratando de acortar la distancia entre su versión social y escolar. En este sentido las actividades de lectura y escritura no se limitan solamente a escribir el nombre o la fecha, cortar letras para diferenciarlas de los dibujos, jugar a la lotería de palabras, sino que aparecen para satisfacer necesidades específicas que tenemos que abordar: si queremos hacer un barrilete, tendremos que leer instrucciones correspondientes. • Trabajos con el lenguaje escrito y el sistema de escritura. El aprender a leer o a escribir no se reduce al sólo conocimiento del sistema alfabético, sino que es necesario tomar en cuenta todas las dimensiones que el lenguaje escrito involucra, por lo tanto, es necesario enfrentar a los niños a que lean textos completos, y no solamente palabras. • Diversidad. Molinari se refirió al mismo en tanto hay diversidad en cuanto a: *Las situaciones didácticas propuestas tanto para la lectura como para la escritura *Los tipos de textos abordados *Los propósitos que guían las situaciones de escritura y lectura y sus destinatarios 2 *Las acciones adoptadas por los niños como usuarios frente a los textos: escribir, leer, escuchar, dictar. *Las modalidades organizativas abordadas con respecto al tratamiento de los contenidos y en cuanto a la organización del grupo de niños para abordar el tema • Continuidad. Este principio tiene que ver con el hecho de entender el aprendizaje como un proceso que se da a través de aproximaciones sucesivas, y que por lo tanto, se debe garantizar la continuidad de los mismos en diversas situaciones didácticas para permitir la verdadera construcción de los saberes en juego Las acciones de los niños frente a los textos en relación a la escritura: Los niños escriben por sí mismos. Favorecer las escrituras espontáneas bajo una consigna dada por la maestra, es una de las actividades que afortunadamente tienen hoy mayor presencia en las generalidades de las salas. Ésta tarea enfrenta a los alumnos con: • Aspectos correspondientes con las características de los textos: contenido y forma • Aspectos constructivos correspondientes al sistema de escritura, tanto al nivel cuantitativo como al cualitativo • Aspectos figurales correspondientes al sistema de escritura La intervención docente en relación con la lectura: Tener una buena biblioteca en la escuela, disponer de un acervo en las salas y posibilitar el préstamo de los materiales de lectura, favorece dicha circulación. Tampoco parecería haber dificultades en aceptar la necesidad de que haya momentos de lectura por parte de la maestra, y otros por parte de los niños, tanto individualmente como colectivamente, en forma silenciosa y en voz alta. ADQUISICIÓN DE LA LECTOESCRITURA: Capítulo III: Métodos y enfoques de la lectoescritura. Recorrido Crítico. • Tradicionalmente ¿Cómo un sujeto adquiría los hábitos de lectoescritura? • ¿Qué diferencia existe entre los métodos sintéticos y analíticos? • ¿Qué procesos propone el método integral? Tradicionalmente, leer y escribir eran considerados esencialmente métodos que se clasifican en sintéticos o analíticos según las habilidades perceptivas puestas en juego. Para lograrlas, el niño debía pasar por un período de aprestamiento que, en lo didáctico deriva en propuestas de actividades en donde el énfasis se ponía en los componentes neuro−psicomotrices de los procesos de lectura y escritura. Métodos Sintéticos: Parten de los elementos menores de la palabra (letras y sonidos) y llegan a ellas a través de combinaciones y adicciones. Establecen la correspondencia entre lo oral y lo escrito a partir de los elementos mínimos fonema−grafema. Ellos incluyen: • El método alfabético: Enseña el nombre de las letras y no los sonidos, es así grafemático y literal • El fónico: Toma como punto de partida al sonido para enseñar, luego el signo y finalmente el nombre 3 de la letra • Método silábico: En él, las silabas son unidades clave, que combinadas se convierten en palabras y frases • El psicofonético: En él el aprendizaje se da a partir de la comparación de palabras, desarrollándose así el hábito de identificación al relacionar estructuras silábicas nuevas con otras ya aprendidas Métodos Analíticos: Se incluyen aquí el método de la palabra generadora y el global, como los más conocidos. Parten de la palabra (generadora) o unidades lingüísticas mayores (la oración en el global). La lectura es un acto global o ideovisual: postula que las visiones de conjuntos preceden al análisis. Método Integral: El método propone desenvolver los contextos extraverbales que dan fuerza al mensaje y formar progresivamente los esquemas mentales que subyacen en el mensaje escrito. NUEVO ENFOUE EN EL APRENDIZAJE DE LA LECTOESCRITURA: • ¿Por qué han fracasado los métodos de la enseñanza de la lectoescritura? • ¿Qué función cumple el error en la teoría de Piaget? • ¿Influye el medio físico en la adquisición de la lectoescritura? ¿Por qué? • ¿Cuáles son las hipótesis elaboradas por los niños y cómo surgen? • ¿Cuáles son las etapas por las que debe atravesar un niño para escribir correctamente? Investigaciones realizadas con los aportes de la psicolingüística contemporánea y de la escuela de psicología genética de Piaget demostraron que el énfasis puesto en las habilidades perceptivas, descuida dos aspectos fundamentales relacionados directamente con los procesos constructivos del sujeto de aprendizaje: • La competencia lingüística del sujeto • Sus capacidades cognitivas En síntesis, el desarrollo psicomotor, no es determinante para el aprendizaje de la lectoescritura que estas investigaciones centran en el área cognitiva. Los métodos mencionados hasta aquí: • Suponen que el alumno llega a primer grado sin saber nada de la lengua escrita y que el maestro debe enseñarlo todo, transmitiendo poco a poco, de una forma más o menos simplificada, ese objeto cultural. En este aprendizaje está en juego, fundamentalmente, los aspectos preceptúales y motrices. • Proponen las mismas actividades para todos los alumnos, desconociendo estimulaciones previas diferentes y distintas etapas del proceso de construcción. Considera al niño un ser pasivo receptivo, reproductor mecánico de modelos: los estímulos controlan las respuestas, el aprendizaje es la sustitución de una respuesta por otra, sin considerar que un mismo objeto de conocimiento es transformado e interpretado por los esquemas de asimilación, particulares y originales, de cada sujeto. • Ponen énfasis en el método y no en los procesos intelectuales del sujeto que aprende. La inteligencia es una adopción, una creación continua de formas cada vez más complejas, y un equilibrio entre esas formas y el medio. El sujeto es un activo constructor de los conocimientos, que va construyendo paulatinamente el saber preestablecido y para el cual un error corregido por el mismo, puede ser más fecundo que un éxito inmediato, porque la comparación de una hipótesis falsa y sus consecuencias, provee 4 nuevos conocimientos y la comparación entre los errores da nuevas ideas. El niño pone en funcionamiento su capacidad creadora, actúa sobre su objeto social para asimilarlo por medio de la acción no mecánica, sino interiorizada, es decir, una acción que posibilita que el objeto sea asimilado por los esquemas cognitivos del sujeto y adaptado a su estructura total del conocimiento. El momento en que los niños comprenden que los textos remiten a un significado, es de trascendental importancia. No pueden leerlos pero saben que dice algo y es entonces cuando comienzan a elaborar hipótesis originales acerca del contenido de los textos. Las distintas hipótesis: La primera hipótesis que formulan es la del nombre. Consideran que lo que está escrito o próximo al objeto lo representa. De este proceso surge la hipótesis de cantidad, que implica una exigencia mínima de tres letras o más. En sus avances elaboran argumentos referidos a la variedad de las grafías, y sostienen que con repetidas no se puede leer nada, rechazando por ejemplo AAAA, PPPP, y aún escrituras como OSO o MAMÁ. Han elaborado así, la hipótesis de variedad. Nivel Silábico−alfabético: Este es un nivel de transición, donde los niños se manejan con las hipótesis silábica y alfabética al mismo tiempo, trabajan con dos formas de correspondencia: • A cada grafía adjudican un valor simbólico • Para cada grafía un sonido En el nivel alfabético detallan tres categorías: • Escritura alfabética sin predominio de valores sonoros convencionales. Los niños conocen muy pocas letras y para resolver esta carencia producen una escritura centrándose exclusivamente en la correspondencia sonora: una grafía para cada fonema. • Escrituras alfabéticas con fallas en la utilización del valor sonoro convencional. Hay correspondencia grafías−fonemas y uso de valores convencionales, pero se producen algunos errores como por ejemplo: uso de T por P, pueden observarse algunas emisiones como así agregados. • Escrituras alfabéticas con valor sonoro convencional. Emilia Ferreyro: son aquellos que correspondan enteramente a nuestro sistema de escritura, aunque la ortografía no sea totalmente convencional. Es decir, puede tratarse de una escritura perfeccionable, pero no cabe duda que además de dominarse la escritura del sistema, se ha aprendido el valor sonoro convencional para la mayoría de las letras Dinámica de trabajo para el aula: Los miembros de los grupos interactúan para presentar inquietudes, estrategias, cambios de información hacia la solución del problema o confirmación de la hipótesis, construyendo y reconstruyendo el objeto de conocimiento. El aula será el escenario de trabajos en el que los niños jugando, compartiendo y creando su personalidad en contacto con toda clase de material escrito, en el que encontrarán un instrumental nutriente de sus fantasías, juegos y ansias de saber. ALFABETIZACIÓN INICIAL: Diferentes perspectivas (Delia Azzerboni) 5 La alfabetización, entendida como proceso democratizador, implica dar cabida en la escolarización a las minorías sociales, culturales y étnicas. En este proceso educativo y socializador de la escuela, se espera que el niño transite hacia un progresivo y paulatino logro de competencias operativas y simbólicas que le faciliten el acceso al mundo de la cultura. Se revaloriza la importancia de la función social de la lengua escrita y el lugar del docente como mediador para la apropiación de esa herramienta. Obviar las diferencias y abordar procesos educativos masivos, soslayando los problemas étnico−culturales y las desigualdades socioeducativas, promoverá analfabetismo. La alfabetización no sólo provee recursos para desarrollar capacidades cognoscitivas, procesos de comprensión de la realidad, sino que desarrolla la autoestima y la valoración de sí mismo. Las competencias de la alfabetización se constituyen en las herramientas adecuadas para acceder a la información, para crear y recrear conocimientos. Es decir, el acceso a la lectura y la escritura son el fundamento para el acceso a nuevas competencias relativas a diversos campos del saber cultural. La alfabetización implica dar cabida en la escolarización a las minorías sociales, culturales y étnicas. El desarrollo del niño está siempre mediatizado por importantes determinaciones del contexto social, y se encuentra inevitablemente vinculado a su incorporación más o menos creativa a la cultura de la comunidad, los docentes tendrán que realizar un importante esfuerzo para abordar la alfabetización desde un marco respetuoso de la diversidad. La intencionalidad comunicativa de la lectura y la escritura: La lengua oral y la escrita son totalmente capaces de lograr la comunicación y ambas son una invención social. Lo que las diferencia esencialmente es su uso. Una tiene que ver con la proximidad de los usuarios, con la relación cara a cara; y la otra con la distancia a través del tiempo y el espacio. Ambas tienen algo de productivo y algo de receptivo, e implican un proceso de intercambio de significados. Leer es un proceso complejo, mediante el cual el lector reconstruye un mensaje codificado por un escritor en lenguaje gráfico; es comprender significados. Escribir es un hecho lingüístico cuya esencia consiste en producir significados a través de signos gráficos estables, es un proceso creativo. Desde el enfoque psicogenético: Se considera que el niño dispone de una precoz capacidad para escribir y leer; también que el niño vive en un mundo alfabetizado, y elabora ideas propias al respecto y formula hipótesis acerca del sistema de escritura. Por lo tanto, cuando ingresa al jardín de infantes es portador de un sinnúmero de ideas sobre la palabra escrita. Alternativas didácticas para la iniciación en la alfabetización: La actual propuesta didáctica del Nivel Inicial hace necesario que el medio que nos rodea entre al jardín de infantes; a la vez es importante salir de la escuela para aprender lo que el ambiente nos ofrece, posibilitar el uso didáctico del ambiente. 6 Lo esencial es que el niño se apropie de la función de comunicación social de la lengua y sean competentes y autónomos en su uso. 7